Partida Rol por web

 ¡Basta ya, joder! ¡Me estoy meando!

Los héroes han demostrado su valía y su afán de protagonismo con creces: ni zombis payasos ni secundarios van a quitarles su cuota de pantalla. Están aquí para quedarse, para enfrentarse al Che Zombi y salvar el Mundo. Con dos cojones. Es un momento tenso, unos segundos de silencio y miradas desafiantes, casi se puede oir el vuelo de una mosca, de lo silencioso que está todo.

Lo que si se oye es como un tal Anton Chigurh, que dice venir de parte de unos críticos, le pregunta a los cámaras:

- Señor ¿Dónde está el Fary?

- Es el enano con cara de estreñido de ahí delante. El de la pistola. ESE. No me haga la mierda esa de la moneda, por favor. Con lo que cobro, intentaría robársela, y no quiero delinquir.

 Entonces, Anton aparece en el plano, ante la mirada un tanto incrédula de todo el reparto. No tanto por la interrupción en si, sino por el oscuro pasado que tiene que tener el personaje interruptor para aparecer por estos lugares.

Se acerca tranquilamente al Faly con una bombona de oxígeno en la mano, y le interpela:

- Señor, quédese quieto.

Coloca el extremo del tubito en la sien del tonadillero zombi, y abre la válvula, provocando un cómico efecto de sangre manando a chorro por la sien contraria. 

Acto seguido, el Fandy cae al suelo, impactado por el suceso. Como es zombi, lo de que le atraviesen el cerebro lo debería matar, pero como es un protagonista, se entiende que no tiene necesidad de cerebro, sino sólo del tallo cerebral (o cerebro reptil para los fans de Freud). Siendo Anton un profesional, decide terminar el trabajo introduciendo repetidamente la bombona de oxígeno por el recto del Fary, dándo giros para acomodarla bien. Después quita la gomita, abre la llave, y con un mechero prende el oxígeno, de forma que la bombona se convierte en retrocohete y el Fary en la Fase 3 del Saturno 5. Vuela alto, Mary, vuela alto. Ya caerás y te harás mierda del todo.

Finiquitado este asunto menor, queda ver que ocurre con el Che Zombi. Éste se ha quedado observando al piecitos, intrigado por su estúpida manera de hacer arte. O intrigado porque piense que realmente se merece un programa por hacer algo tan natural como el cagar o el devorar cerebros.

Tras ver la obra culmen de falangetas, el CheZombi niega con la cabeza. Él tiene ventaja, claro, porque lleva años saliendo en camisetas y posters. Incluso estando muerto, que no no-muerto. De una mesita auxiliar que hay por ahí, saca un book de esos de arte, se acerca a deditos y le empieza a enseñar arte comunista del bueno. De la forma más didáctica que existe, es decir, con un ostión bien dado tras cada obra de arte observada. 

Con el cuello dislocado y la nariz sangrante, manazas entiende que es un mierda. No, más aun, es un Mierda. Un cero a la izquierda. Un puto enterado que ni hace arte ni hace ná. Un Andy Warhol de la vida. Un ser despreciable que se merece más la muerte que nadie. Pero quiere cambiar, y quiere que el CheZombi le enseñe.

CheZombi es magnánimo, y le enseña con lo que tiene más a mano: el propio mongoloide del uñitas. Lo va desmembrando poco a poco, para que pueda quedarse con el proceso creativo, y conformando una obra de arte del bueno, del que nunca antes había visto el impresentable este.

Por razones que no vienen al caso y son tan obvias como que ya el monguitas está muerto, no llega a escuchar el nombre de la obra: "Golondrina en el expreso de las 15:00 tomando la merienda-cena en previsión del retraso inherente a los tiempos modernos".

Congratulémonos de que el tipo de Art Attack ahora es arte en si mismo. Es decir, sigue siendo una puta mierda, pero ahora pagarán por verle.

Total, que sólo quedan tres héroes vivos para enfrentarse al CheZombi, y a un nuevo esbirro que, como es costumbre, aparece por una puerta secundaria como quien no quiere la cosa: 

Aunque con un poco de suerte, y los consejos que puedan obtener de un libro que dejó caer uno de los comandos antizombi, la victoria estará garantizada.

Vamos, que digo yo.

"En el principio creó Dios los cielos y la tierra."(Genesis 1:1)

"26Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. 27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.
28 Y los bendijo Dios,y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.
29 Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que da semilla, que está sobre toda la tierra, y todo árbol en que hay fruto y que da semilla; os serán para comer. 30 Y a toda bestia de la tierra, y a todas las aves de los cielos, y a todo lo que se arrastra sobre la tierra, en que hay vida, toda planta verde les será para comer. Y fue así. 31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto 32 Pero Dios, que tiene tanto sentido del humor como cualquier otro, o incluso más, dijo vamos a putear un poco al hombre. 33 Entonces Dios dio al hombre el libre albedrio y creo al AfroZombi a su imagen molona, a la imagen molona de Dios los sábados por la noche lo creó; con pelazo Afro lo creó. 34 Y Dios le dijo:Sodomiza y porculiza, que, aunque sea lo mismo,jode más; Penetra analmente en todos los actoruchos y desgárrales el ojete.  35 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la noche molona del día sexto "(Genesis 1:del 26 al 35)

"el Verbo  La Muerte se hizo carne y puso su tienda entre nosotros" (Juan  Espinete  1,14ª).

Y así como estaba escrito en la nueva biblia camuflada con la portada de los "zombies comunistas radiactivos" de Evan Townsend Espinete fue la encarnación de La Muerte.

El erizo muchomacho rosa, sostenía en su poderosa y viril manos un machete. Pero no eran un machete cualquiera, era EL Machete.

Y a su vez tal era la dimensión del cuchillo que sostenía Machete en su sobrehumana mano, que más que un machete parecía una Claymore.

-Si crees que me vas a inspirar compasión hoy no es tu día de suerte. Me dejé el corazón en el otro uniforme.

Dice Espinete sin alterar su cara de "Si no me jodes yo no te jodere, pero como me has jodido preparate a comer tus intestinos para desayunar". Blande a Machete como si fuera un espadón a dos manos, haciendo molinetes y cortando cabezas de extras que surjen de la nada, gratuitamente, simplemente por el hecho de salir por cámara y saludar a sus madres. Los saludos son muy breves. Y sangrientos.

Sobretodo sangrientos.

FidelZombi mira a Espinete y empieza uno de sus tostones interminables de 45 minutos.

Pero Espinete no tiene paciencia. Espinete improvisa.

Espinete sujeta a Danny Trejo con una mano, apunta, fija la mira y lo lanza.

Espinete sólo tiene dos cosas en esta vida. Sus cojones y su cara. Y nadie en el mundo los tiene tan duros y grandes como él. Machete se aproximó bastante, pero no lo suficiente.

Machete termina su vuelo empalándose en el FidelZombi. Las tripas del zombi se desparraman y sus fluidos vitales manan como rios carmesies y de múltiples colores convinándose en el suelo conformando un charco viscoso y sanguinolento. Machete, sin embargo sigue vivo, y se ensaña desde el interior del FidelChandalZombi con lo que queda del zombi como una cría de Alien ansiando salir, rompiendo el esternón de la víctima que parasita.

La marabunta de niños que acompaña a espinete, que aún no se han quitado sus disfraces de mexicanos, rodean a FidelViejunoZombi  y le tiran piedras y alguno hasta se mea en sus heridas regodeándose en su sufrimiento. 

Espinete mira la escena con una pose molona y la casa blanca de fondo. En cuanto encuentre una bandera lo vuela todo, decide.

-Tu tiempo pasó Chezombi, resignate y no me hagas tener que matarte.

Me he convertido en un guiñapo;  sin órganos vitales, rapado al cero... algo falla en mi organismo. Y no es un proceso de zombieficación... no, señor. Mi piel se endurece, mi cabeza cambia, patas peludas y oscuras surgen de mi abdomen... Un ansia crece en mí, un impulso irrefrenable de consumir... sangre. Y saltar dando volteretas sobre aritos. Al más puro estilo Jeff Goldblum, me estoy convirtiendo en...

¡El hombre bicho!

El zombie de Kafka aparece, reclamando derechos de autor, pero es rápidamente facogitado. Mi cabeza no da para mucho, solo un inconexo farfullo...

- ¡Nnno sssy Micchll Blltnn!

Las cuerdas vocales de un bicho no permiten alardes como la vocalización o la correcta pronunciación. De lejos, veo a la versión gore mexicana del puercoespín rosa lanzarse a la masacre, y decido, desde el más puro instinto, no ser menos. Cazar, alimentarse, reproducirse, conquistar el mundo.

En el bolsillo de mi americana, una sospechosa caja de Juanolas se agita. Mis pequeñuelas vitorean. Por fin he salido de mi etapa de crisálida Boltoniana y me he transformado en lo que realmente soy:  un repugnante insecto trajeado.

Con una de mis múltiples patas pegajosas, saco la cajita del bolsillo y la lanzo con fuerza contra el FidelZombie. La caja se clava en su barba. Se abre. Las pulgas se dispersan y comienzan a picar a Fidel en todo su cuerpo de forma harto dolorosa.

Abro mis alas quitinosas y planeo hacia el libro. No entiendo de literatura, pero las páginas son de papel, y el papel está hecho de plantas... mi habitat natural. Me hospedo en el libro durante un par de generaciones, sólo para resurgir más fuerte y repugnoso. Las palabras de Townsend, aunque incomprensibles, me dan la fuerza para lanzarme sobre FidelZombie y arrancarle medio cuerpo con mis pinzas.

Hecho esto, me camuflo con el entorno, poniendo cara de lámpara

.

Y por fin llegamos al puñetero despacho oval. Pero lo que nos estaba esperando no era una becaria dispuesta a mancharse el vestido limpiándonos a nosotros, sino el maldito che-zombie que había convertido los USA en un paraíso para rojos y masones. Y además no estaba solo, sino que le acompañaba el FidelZombie (ya decía yo que los últimos años se le veía muy pálido por la tele. Este se murió hace la tira y ha seguido gobernando Cuba en forma zombie y estaba esperando a que volviera si amigo el Che para devolvernos lo de Bahía Cochinos).

Pero había llegado el momento de recuperar lo que era nuestro, era el momento de devolver América a los americanos y de mandar a esos comunistas de mierda a su puñetera isla de una patada en las pelotas. Ha llegado el momento de poder volver a consumir como y cuando nos de la gana, de que la televisión, la radio y la prensa nos vuelvan a bombardear con publicidad de cosas que no necesitamos para nada pero que tenemos que comprar para ser alguien en la sociedad, de volver a luchar por ser el number one porque el resto son unos putos fracasados… God Bless America!

Pero, ¿cómo? Pues de la misma manera que hemos llegado hasta aquí, con ayuda. ¿Qué de que ayuda estoy hablando? ¿Pero bueno, realmente os creéis que una panda de fracasados semejante sería capaz de llegar hasta aquí sin ayuda? Lo que pasa es que se ha mantenido hasta ahora en las sombras, pero con la aparición de sus archienemigos no le ha quedado otra que salir a la luz. ¿Qué de quien estoy hablando? Pues de la única persona capaz de devolver la sensatez a América: ¡El mismísimo Tio Sam!

Así que imbuidos por el patriotismo americano y por una mala ostia que ni te cuento, nos acercamos al FidelZombie y le demostramos que nosotros cuando queremos también podemos ser como los comunistas y podemos dar más que recibir. Y eso es lo que hacemos, darle, darle una somanta de ostias que no lo va a reconocer ni su hermano cuando se lo devolvamos en una puñetera balsa.