Partida Rol por web

Te encuentras en el Area Administrativa. Una serie de edificios de oficinas en los que se rigen los destinos del Imperio de Alejo Cuervo y en los que se lleva todo el papeleo referente al gobierno papal. La mayoría de estos edificios está dedicado al archivo papal en el cual crían moho y acumulan polvo montañas de papelotes, facturas, dossiers, informes y documentos.

Me desperter de la siesta, una extraña siesta de hecho, no sabía ni como ni el porque me había dormido en este sitio, mucho menos porque había un funcionario firmando documentos como un descosido en mi espalda, quien sabe, quizás ahora soy una mesa, intelectualmente no me diferencio tanto. Me levanté y me alejé un poco, sin saber que hacer muy bien.-¿Nestor perdido, Nestor ser abducido por ovnis?

Comienzas a caminar, y al salir a la calle principal, te encuentras de bruces con las Torres Caffre.

Son un par de torres cuya seguridad es Ultrapij. Dominan la "skyline" barnacitense, destacando poderosamente por encima de los demás rascacielos y de los zeppelines de vigilancia. Dos gigantes de acero y cristal, simbolos de la nueva era instaurada por el demente malhechor manonazo e ignominioso. Dos rascacielos de 62 plantas, desde los cuales Alejo I contempla su vasto imperio. Son quizá los edificios más emblemáticos de la ciudad.

Las torres estan rodeadas por varias patrullas de a dos, armadas hasta los dientes. Soldados que van pidiendo identificacion a diestro y siniestro.

Toda el area del revaticano está rodeada por AGUA, y su única salida es un puente situado un poquito mas allá de las Torres Caffre, y tambien (obviamente) rodeado por AGUA

-¡¡Mi cagar en la madre que me parió!!- Me estremecí al verme rodeado de agua, me tumbe en el suelo y fui arrastrándome cual cucaracha hacia el puente para atravesarlo y evitar mirar el agua.-No haber cosa transparente y mojada, no haber, no haber ¡¡No más ducha abuelita, no mas duchas!!

Llegas al puente, y consigues evitar la caseta de control que hay al comienzo del mismo. Al otro lado hay otra. Empiezas a cruzar el puente a rastras, y cuando vas por la mitad, te encuentras unos gordos y grandes pies, y la punta de un fusil apuntandote.

-Levanta!