Partida Rol por web

Gary asiente, volviendo a llevarse la culata del rifle al hombro mientras mira nuevamente hacia la mansión.

- No hace falta ser muy listo para llegar a esa conclusión - confirma. - Igual que tampoco necesito ser un lince para saber que vosotros estáis por aquí por otro trabajo...

De repente se queda callado y ves cómo sus músculos se tensan mientras apoya el dedo en el gatillo de tu rifle. Se mueve lentamente, como si estuviese apuntando mientras acompaña a un blanco en movimiento y aguanta la respiración... Cuando crees que está a punto de disparar, espira el aire de sus pulmones y vuelve a relajarse.

Se gira hacia Butler y asiente con la cabeza antes de acercarse a ti.

- Entonces, ¿qué habéis venido a hacer aquí? No parece que tuviérais vuestra actuación muy bien planificada, por lo que me han contado mis hombres desde la fiesta - añade.

- No se de qué me hablas, como le decía a tu amigo, sólo trataba de observar a una noble que me tiene loco.

Llegó el momento de la acción, pienso momentos antes de arrancar el vehículo y embestir la furgoneta... 

Metes la primera y aceleras con el embrague aún pisado. En cuanto ves aparecer la furgoneta, sueltas el embrague con cuidado para no calar la limusina y te lanzas contra el vehículo.

El furgón maniobra en el último momento, echándose a un lado y acelerando. Con la mula del Cuervo habrías conseguido embestirle sin el más mínimo problema, pero la limusina es bastante más pesada y le cuesta un poco más salir de la cuneta para lanzarse contra la furgoneta de seguridad.

Das un rápido volantazo y aceleras para centrarte en la carretera. No tardas en reducir la distancia que te separa del furgón, pero el conductor ocupa el centro de la calzada, haciendo lo posible para evitar que le sobrepases.

La escena continúa en
Run us down

El capitán de la Nephilim se encoge de hombros.

- Como quieras. Entonces no te importará saber que uno de mis compañeros está escoltando a vuestro chico fuera de la mansión y que el resto tiene - mira el reloj - menos de un minuto antes de que se vuelva a activar la alarma. Con suerte, hacen caso a Randall y aprovechan para coger - comprueba los mensajes de tu comunicador - el cetro...

Butler se vuelve hacia Gary un momento, dándote la espalda, pero su capitán no le dice nada.

- Probablemente es el mismo tiempo que tardará mi mecánico en llegar hasta aquí, si ha calculado bien el tiempo. En cuanto llegue, te dejaremos libre, por si tienes que echar una mano a tus compañeros... o a las faldas de esa noble.

Bane se limitó a callarse y a mirar al tipo sorprendido.

No entiendo una mierda... ¿Esta gente que coño quiere?

Unos pasos se acercan por el bosque y un tipo vestido de negro con una bolsa de viaje cargada a la espalda se acerca a vosotros.

- ¿Quién es ese? - pregunta a McCoy. El capitán se encoge de hombros, sin darle importancia a tu presencia allí. - ¿Qué ha hecho tu hermano con el chico?

Gary está a punto de contestarle cuando escuchais la voz de Randall por el comunicador.

¿Por qué esta Todd atacando el furgón? Se supone que este tipo iba a soltarme a medio camino de la comisaria. ¿Qué pasa?

El capitán te mira frunciendo el ceño.

- ¡Joder! - exclama. - Parece que tu amigo es más impulsivo de lo que parecía... Después de estar aquí parado varias horas, no esperaba que se pusiese tonto en el peor momento.

Se vuelve hacia sus compañeros. - Butler, llevad la bolsa al coche y lárgate de aquí siguiendo el plan. Yo me quedaré un poco más con nuestro amigo hasta que el piloto del Cuervo deje de tocar las narices a mi hermano.

El conductor y el recién llegado asienten y se van hacia el parking de conductores, dejándote a solas con el capitán.

- ¿Y bien? ¿Qué pretende tu compañero? - te pregunta. - ¿No se ha enterado de que Peter estaba sacando a vuestro chico para ganar tiempo?

- No tengo ni puta idea de lo que estás hablando.- La cara de Bane era seria cuando lo dijo.- Fuera de coña, no sé que cojones está pasando en esta mierda de fiesta.

Tu comunicador sigue sonando, lo que permite que Gary esté al corriente de todo lo que están haciendo tus compañeros.

Pettit se está moviendo, voy a seguirle.

El hombre frunce el ceño y te lo enseña. - Deberíais haberos coordinado algo mejor, señor Adams - dice con voz seria.

Con tu rifle aún en la mano, saca su propio comunicador y marca una frecuencia. - Peter, esta gente está siguiendo a Pettit mientras sale al coche. No sueltes al chico hasta que toda nuestra gente esté segura.

Cuando recibe su respuesta, guarda de nuevo el aparato y coge tu arma con las dos manos.

- Muy bien, Bane, me estoy cansando de esto - dice apuntándote. - ¿Quién os ha contratado y qué habéis venido a hacer en la casa de los Courtland?

- Hemos venido a visitar a mamá, que está muy enferma...- Miró al suelo y luego volvió la vista hacia arriba.

Así que aquí puede terminar todo... De rodillas en un planeta de mierda, rodeado de gente de mierda.

Ves cómo la culata de tu propio rifle sale despedida hacia tu rostro. Atado como estás de pies y manos a penas puedes encogerte para recibir el golpe. Cuando llega, tu rostro parece explotar de dolor.

- Muy gracioso - dice el capitán. - No puedo pegarte un tiro aquí sin llamar la atención de los guardias, pero te recuerdo que tu joven amigo está con mi hermano encerrado en una furgoneta...

El tono de amenaza de Gary es evidente.

- Ahora dime para quién trabajas o ese tal Randall va a morir desangrado en una puta cuneta.

Desconoce qué relación tienes con el chico, eso es evidente. Es probable que de haber sabido que sólo hace unos días que lo has conocido, no te estaría amenazando con matarle. Pero, pese a todo, el chaval es uno de los pocos que te ha caido bien de la nueva tripulación del Cuervo. Al menos él no dijo nada de Jeannie, piensas recordando la pelea con Wilson en el bar.

-...

Bane miró al suelo y luego levantó la cabeza para observar al tío.

- ¿Y tú te consideras un hombre de honor?

Escupió sangre al suelo mientras notaba el ojo hinchado y una punzada en la sien.

- Hemos venido a llevarnos un artefacto de la mansión... Y vamos a cogerlo. Grábatelo bien en la mente, porque créeme, que yo si te clavaré a ti una bala entre los ojos en cuanto salga de aquí.

El hombre sonríe.

- "Todo vale en el amor y la guerra" - cita. - Y no creo que mis hombres permitiesen que mi honor pusiera en riesgo sus beneficios. De cualquier forma, si no lo fuera, es probable que ya te hubiera matado aquí mismo - añade retirando su chaqueta para mostrarte una pistola con un silenciador.

Escuchas una ligera vibración, que hubiera pasado desapercibida fácilmente si no estuviéseis los dos solos, y el capitán se separa unos metros. Puedes escuchar un sencillo sonido de afirmación que McCoy acompaña con un ligero movimiento de cabeza antes de que vuelva hacia ti.

- En fin, señor Adams, ha sido un placer volver a verle... - dice con evidente sarcasmo. - Supongo que entenderá que me lleve esto - añade mostrándote tu rifle. - Aunque tarde un rato en librarse de sus ataduras, prefiero no arriesgarme a dejarle un arma por aquí cerca. Sobre todo después de su última... "declaración de amor" - dice refiriéndose a tu amenaza.

Sin añadir nada más, se da la vuelta y se aleja de la mansión con paso rápido, llevándose tu rifle y tu comunicador, al que parece estar sacando un buen uso para mantener controlados a tus compañeros.

En cuanto el tipo empezó a alejarse Bane trató de quitarse las ataduras.

Voy a matar a ese tío. Me lo voy a cargar. Aunque toda la puta Alianza me persiga a través de todo el jodido espacio.

Y mientras movía las manos, entre una respiración y otra, una voz más bajita le susurraba.

Bueno, y tengo que avisar al resto, eso también.

Mientras McCoy se aleja, te revuelves un momento para quitarte la cuerda con la que ataste tus pies. A pesar de no haberla apretado a conciencia, tus manos esposadas dificultan tus movimientos. Finalmente, consigues soltar el nudo y ponerte de pie. Sigues con las esposas puestas y no tienes muchas formas de quitártelas.

Observas el camino por el que se ha alejado el capitán. Te lleva algo de ventaja y, si se ha echado a correr, tal vez no llegues a alcanzarle. Además, el va perfectamente armado y tú sigues esposado y sin armas.

El parking sería otra opción, pero te parece haber escuchado por el comunicador que Todd se había ido de allí. ¿Cómo se le ha ocurrido dejarte solo en esto?

Por último, también puedes acercarte a a mansión. Si tienes suerte, desde allí tal vez puedas ver a alguno de tus compañeros si está en el exterior. Sería bastante desesperado, pero tal vez la suerte te sonría.

Lo que necesitaba era una jodida pistola para meterle un tiro a las esposas y después a ese tío.

Se acercó a la mansión lentamente. Hacia el último punto en el que había visto a Todd, tal vez el tendría alguna idea de como quitarle ese artilugio del infierno.

Te acercas a la valla un momento, buscando algún signo de Todd. Sin embargo, no hay ninguna huella por el suelo que te pueda dar una pista sobre dónde está el piloto. Desesperado, te das la vuelta para volver al parking cuando escuchas un ruido detrás.

Desarmado como estás, te giras bruscamente dispuesto a enfrentarte a cualquier guardia u hombre de McCoy que pueda estar por aquí, pero a quien ves a penas a unos metros es a Hoban haciéndote un gesto con la mano. Agachados a su lado están Wilson y Gideon.

La escena continúa en
The Party