Sebastien no lo puede creer. Sigue vivo.
Indiferentes. Los musicos ejecutan su rutina diaria. Cazar, cocinar, armar carpas, escoltar la carpa de Anfitrion que se va a dormir.
Y un gran fuego queda encendido en medio del campamento para darles calor. La noche esta mas fria que nunca. El cielo esta deapejado y el aire esta helado.
Mientras tanto, Sebastien no puede creer lo ocurrido. Se salvo de... Mejor ni decirlo.
Se miran las caras estupefactos.
Incluso para alguien como Sebastien, aquella experiencia había sido aterradora.
Cuando la providencia quiso que la guillotina no bajase, no pudo ni creérselo. Así que, al liberarle el Anfitrión, no guardó silencio por más tiempo.
¡Salvajes! ¿Qué pensaban hacerme? ¿Matarme? ¿Por dar un método de encontrallos? Es más de lo que hecho ningún otro aquí. Pero no... vamos a por el pobre incuto y luego nos comemos a su cerdo. ¿Eso queríais, verdad?
¡Pues al menos alguien allá arriba guarda por los suyos!
¿Ahora me escucharán? ¡Solo dos no han probado el ajo!
Miriam no hizo más que rezar durante la ejecución, pidiendo por el alma del pobre ignorante de Sebastien. Gracias a Dios, la cuchilla no logró cercenar su cabeza, y entonces cayó de rodillas, alabando al Señor por su misericordia.
—Ven, criatura. Debes estar aterrado—dijo al porquero, mientras se acercaba y le ponía una manta sobre los hombros— Yo no sé qué está pasando pero, allá arriba, Él ha intercedido por ti. Es una señal—se santiguó, para luego dedicarle una enorme sonrisa.
La hora de le ejecución finalmente había llegado, William no se hallaba muy contento con aquella situación pero si de esa forma podía mantener a salvo a su amada esposa no tenía más opción. El Anfitrión había hecho a bien solicitar que todos observaran el momento en que el porquero era castigado por la guillotina y en cada fallido intento el experimentado cazador cubrió a su amada con su capa para evitar que lo grotesco de aquella escena hiciese mella en ella como la noche anterior.
Sin embargo y por asares del destino el castigo no pudo completarse y aquello le hizo soltar un leve suspiro de tranquilidad, acomodó su capa de vuelta a sus hombros y sonrió levemente - Aun no... - murmuró mirado a Sharit - Es un sujeto con mucha suerte, sus antepasados han intercedido por él y por lo visto aún tiene cosas que hacer antes de reencontrarse con ellos... Esperemos que aquello que atacó al bufón no vuelva - se inclinó y le dio un suave beso.
Suficiente tenia de muertes , y en cierta forma se sentia aliviada que aquel pobre infeliz se salvase, Dios en su santisima gloria y misericordia habia evitado aquello, su esposo le habia cubierto con su cuerpo y con su capa, al ver a la ancana acercarse pronuncio en voz baja un padre nuestro y cuatro aves marias, pergsinandose, asintio ante las palabras de su esposo
-Dios le oiga mi señor, rogare que nos de sabiduria y nos proteja con su bendito manto de misericordia
Dicho eso se separo de su marido y se acerco al fuego y le sirvio vino y comida a su esposo , atendiendolo como a el le gusta
Prudencia estaba perpleja ante tal situación pero al ver que un poder divino había mantenido vivo a Sebastien no quedo más que considerar que el señor tenía posiblemente la razón - Comeré un ajo, no me gustaría que el señor divino que a salvado a Sebastien - dice la joven tomando un ajo y mordiendolo - guac! - hace Pru un gesto de repulsión y no porque le afectará de alguna manera sobrenatural, solo era porque morder un ajo no le sentaba bien a nadie - Sigamos el viaje, puede que dejemos al animal salvaje lejos de nosotros si llegamos a CastoNegro
Me alegra que no haya ocurrido nada nuevo. Josef estaba tan perplejo como el resto, ante la suerte que tenía Sebastien. Lo que sea que haya arriba en el cielo, te quiere vivo. Fueron las palabras del caballero en frente del Campesino y su Cerdo. ¿Será que la criatura se fue?, o estará esperando. Josef, había hecho su guardia, y cree, que por eso no hicieron nada. En la guardia que hice por todos, no observé nada extraño, ni como un intentó. Dirigiéndose a todos los presentes.
Al final se acerco a William, para pasar reporte. ¿Viste algo extraño?. Intentó ser precavido cerca de la esposa de su compañero, para intentar no ser grosero.