Hoy la caravana inicia el viaje al salir el sol. A las siete treinta vais en viaje con un sol hermoso y radiante. A las doce del medio dia se detienen para descansar por el intenso sol. Los suministros de agua son suficientes para todos y para los animales. Van a buscar agua en la carreta que dormia Michaelkis Bufon, que por su fiebre decidio dormir en carreta y no en carpa.
La monja, asustada, que se ofrecio a buscar agua, baja corriendo con el grito en el cielo. -¡Esta muerto!- en efecto.
Los musicos suben a inspeccionar. -Muerto, es poco.- Dice uno. Bajan a "Michaelkis", o lo que queda de él.
La escena es terrible. El cuerpo esta descuartizado. Desgarrado, como si lo hubiera atacado una bestia salvaje. La ropa destrozada. En algun lugar encuentran la cabeza. Y el interior de la carreta esta lleno de zarpasos y arañazos. -¿Como nadie escucho nada?- dice un musico. -Le volaron la cabeza.- dice otro.-Lobos- dice alguien.-Hombres Lobos.- Sentencia el Anfitrion. -La leyenda es real, por eso es tan peligroso el viaje a Castronegro. Y viaja con nosotros, uno o mas de uno. Por eso duermo temprano en las noches. Lo descubri en mi primer viaje a Castronegro. Alli murio mi padre y mi abuelo. Por poco escape y llegue. Y desde entonces los he estado cazando. ¿Fantasia, realidad? Ustedes decidan. Pero uno de vosotros es un lobo y cazara a todos hasta que no quede ninguno. Nuestra intuicion es nuestra unica arma. Descubrir al culpable y ejecutarle antes de que anochezca. O al anochecer volvera a cazar. Y mañana tendremos otra victima fatal. Ustedes deberan decidir quien es el culpable y ejecutarle votando al sospechoso para eliminarlo y salvarnos a todos.- alienta a la turba a una ejecucion inmediata.
-Uno de vosotros oficiara de Alcalde. Este definira en caso de empate.- Anfitrion saca un dado y tira al azar el Alcalde.- Prudencia sera el Alcalde y Sharit el suplente en caso de que Prudencia no pueda votar. Y Prudencia elegira su sucesor de ser necesario. Quedando Sharit como suplente siempre que el Alcalde este imposibilitado. Y Sharit elegira sucesor de ser necesario.-
Hace una breve pausa. -¿Dudas? ¿Estais obligados? ¡Por supuesto que no! Pero mañana cuando alla otra victima, me dareis la razon. En publico expondreis acusaciones y desconfianzas y asi os podreis de acuerdo para votar. Y que Dios nos perdone si ejecutamos un inocente por accidente, pero nuestra justicia es lamentablemente a ciegas.-
Finaliza y observa rostros horrorizados ante la idea un HL y una ejecucion a ciegas.
Motivo: Alcalde
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Motivo: Alcalde
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Motivo: Alcalde
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—¿¡Hombres lobo?! ¡PAPARRUCHAS!—el tono de Miriam, siempre tenue y controlado, ahora mostraba cólera e incredulidad—Un hombre ha muerto, y usted no hace más que decir tonterías. Si dicen que es un lobo, un oso, o un tejón, me lo creeré, pues poco conozco de la vida fuera de las poblaciones... pero ¿cómo va a ser una criatura del demonio? Eso roza la herejía.
Pidió a uno de los sirvientes que hiciera un agujero, y metiera los restos del pobre bufón "todo lo adecentados posible", cubierto por una lona. Luego rezaría unas oraciones con quien quisiera acompañarla.
Lamentable, verdaderamente lamentable. Es todo lo que Josef podía decír, ante el bufón muerto. Clavando su espada en la tierra, delante del punto donde estaban introduciendo al cuerpo, y de rodillas, pidió como deseo para la orden desde el más allá. Si Dios te Olvida, siempre serás bienvenido entre nuestra Orden en el más allá. Si los Arcángeles, Metatron y los Serafines se olvidan de tí, siempre tendrás a nuestra orden. *Suspirar*. Siempre y cuando no hayas cometido pecado en tu vida. Los Todo Poderosos, 41 Seres Supremos y Los 8 Reyes de la Codicia, te abrirán un puesto, donde los acompañaras, junto a todos nosotros, por toda la eternidad. Después de darle su pésame en silencio, se levanto y desclavo la espada de la tierra. *Enfundar*. Me encargaré personalmente de averiguar que ocurre, Willian, ¿Estas conmigo?. Le hace la pregunta para solicitar hacer un turno de guardia nocturna.
Cuando se desvela el cadáver, Sebastien se gira enfadado a Saul
¡Saul! ¡Que te he dicho de morder a la gente! Maldita sea... ¡Esta vez te has pasado!
No tarda en haber una explicación distinta y aquello aclara las cosas entre Sebastien y Saul. Aunque el cerdo le mira con lo que parece el hocico fruncido.
¡Gracias a Dios no fue cosa de Saul!
Dice como si no comprendiera la gravedad del asunto.
Pero no os pongáis así. Es una buena noticia. Precisamente solo necesitamos una ristra de ajos y morder una cabeza cada uno. Aquel que rechace el ajo es el hombre lobo. ¡Todo el mundo sabe que los hombres lobo no soportan el ajo!
La monja se se santiguó siete veces mientras escuchaba las ocurrencias del porquero.
—¿Pero se está escuchando? Ajos, hombres lobo... ¡Suena estúpido!
El alba despuntaba con un extra torno carmesí y aquello le hizo recordar algo que su padre solía decirle cuando niño " El amanecer rojo anuncia una tragedia Willy, debes tener mucho cuidado"; soltó un suave suspiro y centró su completa atención de nueva cuenta en su esposa. Cuando salieron de su lugar de reposo y se enteraron de la tragedia el cazador inmediatamente sintió un vuelco en el estómago.
El bufón había muerto a garras de una bestia salvaje que había escuchado sólo en historias nocturnas para asustar a los niños, William había visto muchos cadáveres de animales antes y ver el de una persona no era muy diferente sin embargo de inmediato se aproximó a Sharit cubriéndola con su capa y apartándola del lugar para evitar que la visión de aquella maraña de carne, huesos y sangre se quedase impregnada en su mente. - No mires Sharir - dijo casi en un gruñido
- Hombres Lobo....eso es una estupidez - escupió al suelo, una vieja costumbre para alejar las malas vibras. Sin apartarse de su amada miró a Harbin ladeando levemente la cabeza - Me encantaría ayudarle mi señor, sin embargo entenderá que mi prioridad en este vieja es y será siempre el bienestar de mi esposa. Ahora que sé que hay bestias así rondando la caravana no me agrada para nada la idea de dejarla sola. Sin embargo seguro que puedo ayudar de alguna otra forma.
Desperto perezosa esa mañana, casi olvidaba donde estaban y por que estaban ahi , tuvo que hacer un esfuerzo para levantarse luchando contra los brazos protectores de su esposo, quien la rodeaba con firmeza con ellos , por fin logro vestirse y y peinarse, para lo cual invirtio tiempo , ya que su larga cabellera escarlata debia trenzarse, mientras lo hacia rezaba en voz baja , agradeciendo a dios por un dia mas , sentia un poco de hambre , y luegoq eu su esposo se puso de pie le ayudo a vestirse.
Sus pensamientos oscilaban entre los deberes del dia y los planes llegando a Castronegro, pero un alboroto se hizo presente y alcanzo a ver el cadaver destazado, dio un grito ahogado y se puso palida al instante , no pudo evitar las lagrimas en sus ojos solo de pensar en el horror que habria vivido aquel pobre hombre , su esposo la alejo pero era demasiado tarde, la mujer temblaba de la impresion a tal grado que las arcadas se hicieron presentes, asi que se alejo aun mas para poder devolver el estomago, mientras gimoteaba asustada
-No quiero estar aqui, no quiero, regresemos a casa mi señor, por dios santo , esto es horrible - decia abrazandolo sintiendo que las fuerzas se le iban -si esas criaturas existen no estamos a salvo , Dios mio , en tu infinta misericordia , protegenos, danos fuerzas, mi señor, regresemos a casa
¿Como?. Era lo que Harbin pensaba dentro de su mente. No creo poder hacer esto sin apoyo, si encontrará a la criatura y no tuviera a nadie junto a mí, de seguro moriría. *Suspirar*. Bueno, tampoco creo que sea prudente dudar de mis propias habilidades. Harbin había retomado la confianza en si mismo. Lo recomendable sería que por hoy, se queden juntos, creo que estar en parejas sería lo justo. Yo estaré afuera y no dormiré hoy. Me acerco a Elyzabeth y le entrego en las manos las tres joyas que había comprado en el pueblo. Si no regreso para la madrugada, conservarlas por mi. Harbin se alejo del sitio donde estaba, y se puso a merodear desde una distancia prudente de la caravana.
Prudencia se había ido a dormir temprano por como estaba acostumbrada en casa y en la mañana siguiente la noticia peor imaginada salió a la luz mientras recogía en dónde había dormido - ¿pero que decís? No es una broma? - prudence comenzó a temblar - escuché historias de hombres que se transforman en lobos pero solo las considere historias para niños - De hecho era una de las historias que me contaba mi madre a mi y a mis hermanas para dormir temprano. Pensaba Prudencia - pues puede ser un animal común, después de todo estás tierras son peligrosas. -
¿Pero entonces buscamos ajos o qué?
Dice Sebastien sin entender por qué no le escuchan.
A ver, señora, todo el mundo sabe que los cantrópicos esos existen. Si no existieran, ¿quién se los iba a inventar? Si me dijeran de un hombre que se transforma en... yo que sé, algo más natural. Como un cerdo. Pues entonces sí, podía ser inventao. ¿Pero en lobo? Eso no hay a quien se le ocurra.
Total, que si no hay ajos, pues creo que votaré por usted, porque lo de negar que existan los cantrópicos no cuela, la verdad.
En todo el discurso, a quien interpela es a Miriam
—¿C... Có... Cómo? ¡Me va a acusar por no comer ajos! ¡Ay, Señor, aléjanos de este poseído!
Miriam contemplaba alucinada al porquero, con un evidente gesto de incredulidad.
—Dame un ajo, o una ristra. Si comiéndolo evito que ocurran más estupideces, encantada lo haré.
Buscó con la mirada a los demás viajeros y sirvientes, pidiendo ajos que comer. Uno de ellos se los trajo y, tras pelar un ajo entero, empezó a comerlo con resignación.
—Usted está loco. Loco de atar—dijo a Sebastien mientras comía el ajo.
A pesar de la distancia Josef escucho, todo lo que dijo Sebastien. ¿Ajos?, ¿comerlos?, bueno, en realidad son bastante ricos en una sopa con pan y verduras, pero... ¿como que votar a quien no coma ajos?. Josef pensaba y analizaba el tema como si los tuviera de frente. Esto será estúpido pero lo haré. Después de meditarlo no muy bien, se acerca pela un ajo en frente de los ojos de Sebastien y removiendo el casco por segundos, se mastica el ajo, en frente del algo insalubre compañero. Se que nadie me señalo, pero por si las moscas. Después de soltar esas palabras, con algo de vergüenza volvió a vigilar. ¿Cuando fue que perdí mi dignidad?, tal vez el viaje me cayo mal. *Suspirar*. Igualmente no sabría que decír, sobre a quien votar, somos pocos hombres. *Rascarse la cabeza sobre el casco*. Puede que Algunas de las nuevas pudiera ser,... ¿Bilberg?, espera, que estoy pensando, será que las locuras de Sebastien, me están ocasionando jaqueca, además la Anciana a estado desde que empece a viajar. ¿Porque desconfió de ella?. Josef limpia su mente enfrente de un pino, y se agita algunas ramas caídas en el rostro.
Despues de devolver buena parte de la cena , regresa al lado de su marido , solo para escuchar que estaban deliberando y lanzando acusaciones, , notaba como acusaban a la pobre anciana
-Por dios santo, ¿Como pueden pensar esas barbaridades? , y tener esa sangre fria para tratar este asunto como si nada, es un cristiano quien ha sufrido ya hora esta con Dios nuestro señor- se pergsinaba-¿que pasara ahora? ¿Me acusaran a mi?, ¿a mi esposo quien estuvo conmigo toda la noche ?, no creo que el ajo sirva para saber si alguien o no la criatura que mencionan, si vamos a hacerlo deberia acusarle a usted mi señor, mire que no compadecerse de este pobre hombre ni por lo que le paso ...y encima desquitarse con una pobre anciana que lo unico que hace es esparcir la palabra sagrada de nuestro señor , ¿no cree que si ella fuera esa criatura ya hubiese atacado antes?-se giraba a mirar a su esposo- Yo estaba cumpliendo mis labores de esposa anoche , y sera mejor que tenga pruebas de lo que dice
La pelirroja hablaba calmadamente , con palabras firmes pero dulces
Acariciaba la espalda de su esposa tratando de reconfortarla ante la escena tan cruda a la cual había sido expuesta, sujetaba su larga cabellera roja con una mano para evitar fuese manchada, pretendía quedarse ajeno a todo el alboroto que semejante descubrimiento estaba causando pero tampoco podía quedarse de brazos cruzados. Una vez que Sharit se tranquilizó un poco la abrazó cubriéndola con su capa.
Primero miró Herbin con decisión y Prudencia - No conozco animal salvaje alguno que sea capaz de hacer semejante daño y aunque hubiese sido un Hombre Lobo como aseguran, ¿cómo es que nadie escuchó nada?... - volvió a centrar su atención en su esposa tratando de tranquilizarla, enseguida la escena de Sebastien y la anciana llamó su atención y carraspeó un poco para llamar su atención. Le sorprendió que fuese su esposa quien tomase primero la palabra pero tenía que admitir que le complacía a sobremanera el valor que había crecido en ella para ello y una vez que terminó William se apresuró a agregar c su voz profunda.
- ¿Lobos que no comen ajos?, eso es una estupidez, los caninos pueden comer casi cualquier comida humana y algo que es mitad de ambos mundos no va despreciar algo tan común, mira que venir a juzgar a los demás por una creencia tan estúpida. Como bien dice mi esposa nosotros hemos estado juntos toda la noche, con Dios como nuestro testigo. - afirmó completamente convencido y tras guardar un breve silencio continuó.
- Ninguno de nosotros ha comenzado con las acusaciones pero parece que a usted se le da bastante bien... Ante esta situación quien se lo ha tomado con demasiada tranquilidad es usted Sebastien, parecía más sorprendido que su puerco no hubiese sido el culpable, que el hecho de saber que estamos siendo asediados por semejante bestia... -
Lamento tener que votar por Sebastián - digo a los presentes - pero es que anda acusando al primero que se le venga a la mente solo por no comer ¿Ajos? - no podía creer que esa era la solución
Algo más tranquila, por verse defendida, Miriam volvió a hablar:
—Escuchad. Este hombre quizás está perturbado. Quizás acusa porque es un pobre ignorante, y su camino está muy alejado del sendero del Señor. Su castigo, si llega, debe ser por la mano el Santísimo, no nuestra. ¿No sería, en todo caso, culpa de su cerdo? Él mismo ha dicho que podía ser. Yo... no voy a votar a nadie.
Josef observa como la Anciana se acerca a los demás, y dice que no votara por nadie. Si es lo que cree, pues tampoco votaré. Le dijo sorprendiéndola por detrás de ella. Me alegra que piense así, tomará algo de tiempo, espero no mucho. *Suspirar*.
Tomando una cabeza de ajos pelaba un par y metia en su boca , comenzaba a masticar y luego de tragar bocado enseñaba su boca abierta a todos
-¿Esta satisfecho? ¿ha probado su punto? , Lo unico que lograra sera fortalecer el cuerpo de quien lo coma-Pelaba un par mas y se los ofrecia a su esposo,- espero que no me pida que me alce la falda para querer comprobar que estuve con mi esposo,-regresaba su mirada a la anciana-se me hace una falta de respeto que haya si quiera sugerido que haya sido usted mi señora, una mujer devota de dios, perturbado o no ha lanzado esa blasfemia en su contra , ¿como podria una debil anciana ser ese mounstro?, solo miren la benevolencia que muestra , justificando a tan desdichado hombre
Pronto todos empezaron a reaccionar a las palabras de Sebastien.
Él afrontaba las opiniones de unos y otros de cara y sin molestarse por aquellos que la emprendían con él.
Risotada molesta.
Jajá, ya lo decía Padre: ¡coge un palo y sacude al avispero!
Bien. Ya son cuatro los que han comido ajos:
La señora, con la que me disculpo pues lo que me hizo dudar fue que pensase que no existía una criatura que es bien sabido en todos los pueblos de la región que existe pues son cientos las historias que se comparten ya desde niños.
La pareja, a la que también retiro mi voto.
Y el señor que vigila desde lejos y vino aquí a demostrar su inocencia con una de estas.
A su vez, Sebastien también cogió dos ajos y se comió él uno mientras le daba el otro a Saul, como si fuese necesario demostrar que el cerdo no era cerdo-lobo.
Y con esto también demuestro mi inocencia.
A pesar de que pudiera parecer increible, el aliento del hombre mejoró tras comer el ajo.
Me llaman ignorante, y puede que lo sea, poniendo a Dios de testigo. Pero en los pueblos sabemos ahuyentar los malos espíritus. Todos tenemos ristras de ajos en las puertas y ventanas y nunca he visto un cantrópico atacar una casa que tenga ristras de ajos en la puerta. ¿Qué tienen que decir a eso? ¿Eh? Está claro que funciona.
Y como seis personas hemos comido ajos - Acababa de llamar persona a Saul - Entonces el cantrópico debe ser uno de los que falta. La señorita prudencia que me acusa por poner un método sobre la mesa donde nadie decía nada, y la señorita Elyzabeth que aun no ha ni abierto la boca para decir este ganso es mío.
Son libres de hacer lo que quieran, pero mi voto va para una de ellas hasta que acepten comer ajos.
El Anfitrion toma un aparejo, lo arma con ayuda de los musicos que ya habian encadenado a Sebastien y al terminarlo de armas ya esta listo para la ejecucion.
Una reluciente gillotina. Lo pruevan con sandias y calavazas y su eficiencia es absoluta.
Los musicos, ahora verdugos, toman a Sebastien que ya esta inmovil atado de pies y manos. Y es colocado en el aparejo.
Un verdugo activa la gillotina. La cuchilla baja como rayo. Pero a la mitad del recorrido se atranca. No una ni dos sino que se atranca 3 veces.
-Creo que es una señal del cielo Sebastien. Hoy no debes morir. Valora la oportunidad recibida.- dice Anfitrion.
Sebastien es liberado y el aparejo es desarmado.
Anfitrion habla. -Esta claro. No habra ejecucion. Se ha salvado una vida. Esperemos que de un inocente.-
Anochece y los musicos preparan la rutina de cada noche.
HILO CERRADO