Partida Rol por web

Sueño la noche del día 13 de la sexta luna del año 332 dC.

Es de día y te encuentras flotando muy por encima de Poniente, aunque tratas de ver como es posible que vueles, das varias vueltas intentando ver tu cuerpo pero es imposible, como si sólo fueras una consciencia sin forma. Tu vista se fija en ese momento en las tierras de Poniente muy por debajo de donde estás. 

Ves dos criaturas enormes, dos dragones combatiendo, uno grande, agresivo y el otro un poco más pequeño y rápido. Ayudando al grande puedes ver un león intentando dar zarpazos a un lobo huargo que le lanza dentelladas, apoyando al lobo huargo se puede ver una trucha saltando en el aire extendiendo unas aletas intentando tapar el Sol que quiere cegar al dragón más pequeño, por detrás del dragón más grande se pueden ver unos tentáculos gigantes que se lanzan para atrapar al dragón pequeño, pero un águila se lanza hacia los tentáculos dando picotazos e impidiendo su avance, unas enredaderas cubiertas de rosas se lanzan en picado hacia el dragón más pequeño pero un venado carga contra ellas haciéndolas desviar su rumbo. Durante el combate se va dañando irremediablemente todo poniente, tu primer instinto es fijarte en las tierras de tu familia, pero como si algo tirara de ti, vas en dirección a Essos donde se ve humo proveniente de las tierras libres, te acercas con rapidez. En el momento en el que empiezas a distinguir alguna forma te despiertas sobresaltada con la respiración entrecortada, te encuentras bañada en sudor y con las pulsaciones aceleradas...

Sueño de la noche del día 16 de la sexta luna del año 332 dC.

Desde la distancia del hogar de tu familia, ves dos dragones del tamaño de un castillo avanzar hacia el norte, uno de ellos lo recuerdas de tu sueño anterior, es el dragón más pequeño de los dos que se enfrentaban. 

Los dragones avanzan por el norte hasta cruzar el muro, una vez pasado el muro, una capa negra los envuelve y los protege del frío que gobierna aquellas tierras, pero caen en una trampa en forma de telaraña, dejándolos inmovilizados, en ese momento 4 criaturas se abalanzan sobre ellos para devorarlos, un hombre-oso, un hombre-lobo, una mujer-araña y una mujer-pantera. Según van desgarrando la piel, la carne y los huesos del dragón de la otra visión, una oscuridad permanente va inundando Poniente causando que todo se vea envejecido como si la decadencia y la corrupción se hubieran adueñado del continente.

Intentas alcanzarlos para ayudarlos pero es tarde, estás inmóvil en las tierras de tu familia mientras un grito de mujer te despierta... 

El grito, era tuyo.