Si me necesitais estare abajo voy haber como se encuentran los demas
- Puto Rufus... No se podrá quedarse aquí en el hotel encerrado, no. Tiene que ir de salvavidas por el mundo...
Jack estaba cabreado.
Volvieron al hall del hotel donde se encontraban el resto.
- Bueno, parece ser que Rufus y Ruth se han ido a cazar gamusinos ahí fuera.. Yo voy a buscarlos. ¿Alguien más viene?.
En el salón hay un silencio tenso. Irina está hablando en un rincón con la mayoría de la gente que queda en el hotel. Todos escuchan sus palabras mientras Gregory mira desde detrás del grupo con los ojos entornados.
Cuando llega Jack e interrumpe la charla, Gregory le mira con los ojos cargados de rencor y empieza a crecer un murmullo entre los presentes. Irina es quien habla, con un tono condescendiente ¿No había que quedarse dentro pasara lo que pasara? De aquí nadie se va a mover porque tenemos que equilibrar los chakras y evitar que todo lo que está sucediendo nos afecte como grupo. En esta isla hay un poder que se siente en la planta de los pies... es más, creo que mañana al amanecer deberíamos salir todos a saludar el nacimiento del sol. Gregory aplaude haciendo que los demás se unan, con diferentes niveles de ganas, al aplauso colectivo.
Desde la puerta que da a la cocina veis a Anne bebiéndose de un trago el contenido de un pequeño vaso, no parece que sea agua.
De Mike y Hank no hay señal ninguna.
La voz de esa tal Irina resuena de fondo, pero mi atención se dispersa entre las caras conocidas y las desconocidas que me rodean.
Rompiendo la burbuja de mi contemplación. Con un ligero tono de preocupación, me vuelvo hacia el grupo y pregunto: "¿Dónde están Hank y Mike? ¿Alguien los ha visto?"
- Jack, yo iré contigo. Realmente es mejor que vayamos solo unos pocos - Tal y como había indicado antes Nami se pronunció de nuevo asegurándole al hombre que le acompañaría.
Se cercioró que llevaba su mechero, el destornillador "prestado" y su móvil. No para llamar, pero nunca se sabía cuando podía ser útil cualquiera de las otras aplicaciones del teléfono.
- ¿Vamos? - su cuerpo ya rotaba sobre la puntera de sus carisimas deportivas en dirección a la puerta. Neptuno, normalmente perezoso y dormilón parecía que hoy quería acompañar a su ama allá donde fuera la joven.
Esos dos se fueron hacia el embarcadero, seguían sin estar convencidos de lo que había pasado allí y las explicaciones razonables parece que no eran suficientes para ellos. Hace frío y acercarse al mar en días como hoy es mala idea... muy mala idea.
Salís hacia el exterior y una ráfaga de aire helador se os cuela antes de que podáis abrocharos los abrigos en condiciones. La humedad hace que la sensación de frío se dispare hacia abajo en el termómetro. Un camino de grava hecho a base de pisadas de cientos y miles de turistas marca el camino hacia el faro que se eleva hacia las nubes. Ya desde aquí está claro el mal estado de la estructura y es como si en la última visita no hubieran aprendido lo peligroso que podía llegar a ser porque volvían de nuevo hacia allí. Neptuno, maulló con un tono de enfado cuando el viento le revolvió el pelo y miró a Nami esperando que se pensara la idea de salir al exterior, en su mente de gato no le encontraba ningún sentido a esa decisión.
Yo no sé qué cojones hago volviendo aquí....Cuando coja a Rufus, si no lo ha matado la criatura lo muelo yo a palazos...
Jack estaba calado hasta los huesos aunque esa sensación era algo que se había tornado en cotidiano en las últimas horas en él. Ya no le prestaba ni atención a la forma en que la goma de los calzonzillos Calvin Klein se apretaba contra su cintura debido al agua... Joder, no sabía que encogieran estos calzones... no volveré a comprar esta marca...
Conforme llegaron al embarcadero lo primero que hizo Jack fue revisar el sitio donde se había aparecido la criatura multi colmillos en el agua.
Ya no estaba.
Eso no sabía si le tranquilizaba o no, realmente...
- Vayamos hacia el faro... Como me vuelva a encontrar con ratas me da algo...
La joven se acuclilló en frente de Neptuno para prodigarle unos breves arrumacos - No te juzgaré si decides quedarte aquí al resguardo - sonrió mientras posaba la punta de su índice en la humeda naricilla del felino y acto seguido se incorporó para seguir a Jack, ya que realmente debía ser el más interesado en encontrar a su familiar.
Llegaron al embarcadero ya que allí les había dicho Fred que se habían dirigido, pero no había rastro. Al menos no allí en la superficie. Miró de soslayo a sus compañeros temiendo decir en alto lo que pensaba.
"¿Y si se han caido al agua y se los ha llevado la corriente?"
- Si, podemos ir al faro. Tampoco hace falta entrar. Si están dentro, con que los llamemos y salgan, si es que están allí, valdría ¿no? -
Volvió a emprender la marcha una vez más. Casi prefería caminar que estar parada pues así el frío era menos doloroso. Enfundó las manos en los bolsillos buscando algo de calor..
Mientras me quedo mirando por el ventanal, Nami y Jack caminan juntos hacia el faro.
En el reflejo del cristal, puedo ver al señor Fred detrás de mí, su expresión seria pero comprensiva.
"Es importante que todos estén en un lugar seguro y controlado", le digo, sintiendo la urgencia en mi voz. "Esto nos ayudará a asegurarnos de que todos estén a salvo".
"Deberían estar aquí abajo, todos, señor Fred", insisto, mirando hacia el horizonte donde Nami y Jack se alejan.
El camino hasta el faro es tan cansado como la vez anterior pero con el frío haciendo que cada paso hiciera crujir los músculos mientras las botas rozaban el suelo haciendo, a ratos, el ruido de romper la pequeña capa de hielo que se formaba en aquellos lugares donde se había acumulado el agua.
El viento y llevar la cabeza protegida hacía que fuera complicado hablar, de todas maneras tampoco había muchas energías que gastar en conversaciones vacías. Su objetivo se alzaba hacia el cielo creciendo un poco a cada metro avanzado. Todavía no habían conseguido entrar en calor cuando llegaron a la puerta del faro.
Tirada de Intuición NO7
Fred asintió a las palabras de Kate y después hizo un encogimiento de hombros. En la sala estaban Fred y Anne, su mujer, rellenando el vaso con una botella de cristal transparente. Juntos alrededor de una mesa en la que presidía Irina, estaba Gregory, su ayudante, Richard el escritor que había salido de su habitación, Robert Brown, broker ansioso que intenta mirar el móvil continuamente a pesar de que no hay señal, y su mujer, Stella a la que está a punto de darle un ataque de histeria entre las palabras de Irina, el nerviosismo de su mujer y la aparente apatía que parece tener todo el mundo en el salón a pesar de que hay un cadáver de una mujer, Amanda, y un asesino suelto, al menos en su cabeza está claro lo que ha pasado por lo que le han contado, su marido Cecil. También está sentada Anna, con las piernas sobre una de las sillas dibujando en un cuaderno de bocetos. No toma parte en la conversación que guía Irina pero está claro que tampoco quiere estar sola.
Faltan Rufus y Ruth, trabajadores del lugar que han salido en algún momento. Mike y Hank que fueron hacia el embarcadero y no han vuelto, Jack y Nami que han salido a buscar a los que faltan.
Joder que puto frío...
Jack iba todo el rato mirando el suelo y las malezas de las voreras del camino buscando cualquier indicio de alguna rata. Si veía una sóla, aunque fuera sólo una, le iban a dar por culo a Rufus y al Papa de Roma si estuviera ahí...
- Joder Nami, ¿cómo estás?. Yo no puedo más con este frío.....Que asco de isla por Dios...!!!
Motivo: Intuición
Tirada: 2d6
Dificultad: 7+
Resultado: 5(+1)=6 (Fracaso) [1, 4]
Pues me quedo a puertas de saber si intuyo algo o no... Confío en ti Nami...!!!!...jajaja
Editado Director: Recuerda que puedes usar 1 PS (Puntos de Superviviente) para sumar 1 a la tirada.
Editado PJ: Ya, pero confiaba en Nami. Ahora con su marcha, estoy jodido... Aún tengo los 3 PS disponibles verdad?. En caso afirmativo gasto 1...