Partida Rol por web

Donang se hecho hacia un lado con la mano en el cuello mientras la sangre chorreaba entre sus dedos. El ataque había superado su caparazón y clavado profundamente en el cuello. Un dedo a la izquierda y estaría muerto. Apretó la mandíbula y trato de concentrarse, a pesar de la perdida de sangre. Se decidió a lanzar un ataque metódico y devastador. Pero la pierna le fallo al avanzar hacia delante, y no pudo ejecutar de forma correcta el agarre.

El palpitante cosquilleo de esos golpes era de todo menos agradable. Ogra sacudió la cabeza y retrocedió un paso, posicionándose junto a Chang, lanzó su furia sobre otra de las sombras.

El ataque de  Donang fue fácilmente repelido por su oscuro enemigo. No así el de Ogra, que una vez más tuvo la contundencia suficiente como para hacer que su enemigo se desvaneciera.

Mientras tanto la Baohu-Gonying también demostraba que era algo más que su posición de asistente del Shangu-Baohu. Chang volvió a lanzar dos ataques contra el enemigo que se encontraba entre ella y Qiang Huo, acertando en una ocasión a la oscura criatura.

Donang falla su ataque.
Ogra acierta sus dos golpes a la Sombra2. La Sombra2 desaparece.
Chang flanquea y ataca a Somgra5. Scierta uno de los golpes y le provoca 6 puntos de daño.

Una vez más las sombras continuaron con su juego de teleportaciones, buscando las posiciones más ventajosas. Esta vez los objetivos fueron Ogra (algo lógico que estaba siendo la que más daño estaba causando), Bai Hu y Bomei. La Shangu-Shohu enmascara no tuvo problemas en esquivar el misterioso ataque. Pero el félido y la orca no tuvieron la misma suerte.

El orondo hombre-gato recibio una fuerte punzada en el vientre que hizo que literalmente todo el vello se le pusiera de punta y en su rostro se dibujara una expresión de gran dolor. En el caso de la pielverde, el golpe en el costado no fue tan dolorosa, pero fue consciente de la realidad. Estaba en las últimas, otro golpes más y el combate se habría acabado para ella.

Sombra4 ataca a Bai Hu y realiza un crítico, provocándole 14 puntos de daño.
Sombra5 desparece y aparece en D6. Ataca a flanquea a Ogra y acierta provocándole 4 puntos de daño. A Ogra le queda 1 pg.
Sombra9 desaparece y aparece en B4. Ataca a Bomei y falla.

Mapa del combate

Iniciativa: Bomei -> Rikitsiki -> Sombras3&6&7&8 -> Qiang-Huo -> Sombras2 ->  Ogra -> Donang -> Chang -> Sombras 4&5&9

¡Es el turno de Bomei y Rikitsiki!

Chasqueó la lengua contra el paladar en señal de desaprobación. Quizás toda la serie de sucesos que habían acaecido, pasaban por su mente haciendo que no hubiese entrado lo suficientemente concentrada en la contienda.

Pero iba a intentar remediarlo, tras esquivar a la sombra que había aparecido a su lado intentando golpearla, Bomei se preparó para devolverle el golpe con unos movimientos rápidos y gráciles.

No iba a ser un combate sencillo, y Rikititski sospechaba que esas velas eran las que creaban las sombras, pues toda llama genera una sombra. Pero aún nada se había decidido. Con ágiles movimientos trató de golpear con su arma a la sombra que les amenaza a ella y Quiang Huo.

Bomei acertó uno de sus golpes haciendo que la ya herida por Rikitsiki figura oscura acabara por desvanecerse en humo. Mientras tanto la nezumi volvía a alcanzar a su oponente, provocándole un severo corte a su figura pero sin saber cuán dañada estaba.

Bai Hu mientras tanto miró con rabia al oponente que le había alcanzado. Ya no había en su rostro nada de su tranquilidad y despreocupación. Ni siquiera cuando había golpeado al muro de piedra con su mano. El félido volvió a repetir su doble golpe con los cantos de sus manos. Pero el primero de ellos fue tan potente que cuando fue a golpear por segunda vez, su enemigo ya se había convertido en humo y volvió a golpear el muro de piedra, quebrando una de las rocas.

El tigre se había desatado.

Rikitsiki acierta el primero de sus ataques contra Sombra7 y falla el segundo. Provoca 4 puntos de daño.
Bomei acierta el segundo de sus ataques contra Sombra9. La Sombra9 desaparece.
Bai Huacierta el primero de sus ataques contra Sombra4. La Sombra4 desaperece.

Las sombras esta vez no tuvieron que usar su ventajoso desplazamiento para atacar a los monjes, parecía que los tenían justo dónde querían. Donang, Rikitsiki y Chang no tuvieron problemas en evitar sus golpes, pero no así Ogra. La Shangu-Shouhu de Bao-Sheng había llegado acabado por llegar a su límite. Demasiados de esos extraños golpes recibidos. Primero sintió como todo su cuerpo se petrificaba atravesado por millares de agujas. Después sintió entumecerse. Y finalmente la oscuridad.

Sombra3 ataca a Ogra y acierta. Le hace 6 puntos de daño. Ogra está a -5PGs.
Sombra6 ataca a Chang y falla.
Sombra7 ataca a Rikitsiki y falla.
Sombra8 ataca a Donang y fall.

Mapa del combate

Iniciativa: Qiang-Huo -> Ogra -> Donang -> Chang -> Sombras5 ->Bomei -> Rikitsiki -> Sombras3&6&7&8

¡Es el turno de Qiang Huo y Donang!

Algunas explicaciones:

¿Ha muerto Ogra? No. ¿Entonces qué pasa cuando un PJ llega a 0 PGs?
- Incapacitado: Cuando un PJ tiene 0 PGs está casi inconsciente. Sólo puede hacer una acción parcial (es decir o una estándar o una de movimiento).
- Moribundo: Cuando un PJ está entre -1PG y -9PGs está moribundo. Está inconsciente y no puede realizar acción alguna. Cada turno pierde 1PG.
- Muerto: Cuando un PJ llega a -10PGs muere.
- Estabilización, cada asalto que un PJ está moribundo pierde un punto de golpe. Sin embargo tiene un 10% de posibilidades de poder estabilizarse y dejar de perder puntos de golpe.
- Recuperar la consciencia: Sólo cuando los PGs de un PJ llegue a los 0PGs, el personaje podrá recuperar la consciencia.

¡No! ¿¡Está bien!?.... - Dijo mientras daba una vuelta, justo estaba moviéndose a una nueva posición más ventajosa cuando vio a la Ogra caer alli misma, herida por manos de una de las sombras, mientras intentaba no perder del todo la concentración.  

¡Chang Wuang! Intenta sacarla de aquí.... - Ellos eran los elegidos de las aldeas, no podían dejar la batalla, pero era más seguro que las dos mujeres se pusieran a salvo y alejadas del peligro mientras ellos se encargaban. Tras aquello sus manos volvieron a bailar intentando herir y hacer que desaparecieran mas sombras preocupado claramente.

Donang seguía enzarzado con aquel ser, su herida era grave, y por el inconfundible grito agonico de Ogra, a los demás no les iba bien. Apretando los dientes en un gesto de furia contenida, Donang esquivó un ultimo ataque saltando con una voltereta mortal hacia delante. Lanzó las piernas hacia su enemigo, y trato de agarrarle del cuello. Si conseguía cogerle, le partiría el cuello por la mitad, con un rápido gesto de torsión.

Los ataques de Qiang y Donang hicieron que sus enemigos se esfumaran como ya lo habían hecho los otros. Aunque con dificultad y gran dolor, le habían dado la vuelta al combate y ahora tenían la superioridad numérica de su lado. Fue justo cuando el tortúguido le "partía" el cuello a su enemigo, una luz dorada y radiante bañó la estancia haciendo que los enemigos restantes se volatilizaran.

Sorprendidos, los monjes miraron hacia el lugar del que provenía la luz, el hueco central de la estancia, allí la luz fue tomando una forma humanoide al mismo tiempo que las heridas de todos los presentes se curaban. Ogra abrió los ojos y con dificultad se incorporó para encontrarse la misma estampa que sus compañeros. Finalmente un hombre de edad indeterminada hizo acto de presencia posándose en el murete que hacia las veces de baranda del hueco central con agilidad. Y al ver con claridad la figura, todos lo sintieron.

Perfección.

El pilar de las enseñanzas de Shou-Kung, aquello que todos los maestros de Tiangulong instaban a sus discípulos a conseguir, la meta que todo gulong vivo a lo largo de la historia había buscado. La perfección. Eso era lo que los Shangu-Shouhu y la Baohu-Gonying tenían frente a ellos. No era un mito, ni un imposible, sino de algo real. Algo tangible. Y ese sentimiento los sobrecogió tanto, que ni siquiera pudieron articular palabra o movimiento alguno.

La figura bajó del murete como si flotara y avanzó entre los monjes para dirigirse hacia la estancia de dormir, el lugar en el que La-Zong se había refugiado al aparecer las figuras oscuras. Al llegar ante ella, se agachó para ponerse a su misma altura.

—La sombra se extiende por el valle, la corrupción avanza sin freno—le dijo al tiempo que tocaba con el dedo una de las oscuras llamas de las velas que conformaban la fortuna—. A ti te encomiendo la tarea de guiar a los protectores del valle. En ellos descansa el futuro del mismo.

La llama que el hombre había girado cambió de color y a continuación comenzaron a encenderse el resto. Y no sólo eso, sino que conforme las llamas se encendían la criatura también cambiaba a los vivos colores que caracterizaban a las fortunas.

Entonces, el hombre se giró miró a los monjes, sonrió y se deshizo en un sinfín de partículas luminosas. Y una vez se hubo marchado, los monjes sintieron desaparecer ese sobrecogimiento y volvieron a la normalidad.

Tambaleándose ensangrentada y dolorida Ogra dio varios pasos temblorosos en dirección a donde las centelleantes lucecitas se desvanecían en el aire.

—¡Hey...! —señaló con el dedo—. ¡Oye...! Tu... Estúpido... Vuelve... Vuelve aquí...

El puñetazo sin fuerza que dio al aire provocó que se desplomara de cara y sin gracilidad alguna justo en frente de la fortuna, unos segundos después tanto el gato de velas como el resto de monjes escucharon sus ronquidos.

Se había quedado dormida.

Al desaparecer las sombras Donang habría corrido hacia Ogra, tratando de ayudarla mientras miraba a aquel monje. Pero se quedo quieto como una estatua de jade. Sus embelesados ojos brillaban observando a... como describirlo, la personificación del único deseo y objetivo de Donang Tenglong, la superación física y espiritual, la perfección. Aunque tras unos breves instantes desapareció, su recuerdo había quedado grabado a fuego en la mente de Donang.

Estando el tortuguido despistado, Ogra se movió para insultar y tratar de golpear a aquel monje. Paradójicamente, esto no provoco ninguna emoción salvo regocijo en Donang. Regocijo por saber que las actitud de Ogra ya no le afectaban. Es mas, incluso encontró cierta diversión es su rudeza, lo que entendió como un paso hacia la serenidad y bondad necesaria para la perfección.

Con el semblante tranquilo, se agachó a recoger a la orca mientras le murmuraba.

— Ogra, ya no estas herida, levantate. Has debido de sufrir un lapsus, tu mente aun cree que estas en peligro de muerte

No se sentía capaz de poner en palabras lo que había acontecido en escasos segundos.  Al desaparecer las sombras, había sentido un alivio inmediato al no saber que estaban en peligro o más bien al percibir que el mismo se había desvanecido durante unos segundos. 

Pero eso no fue nada comparado al ver como como la figura se acercaba tranquilamente, aunque algo no parecía correcto, sintió como el cuerpo no le respondía, que no podía moverse, no hasta que vio como aquellas partículas se desvanecieron en el aire y solo un sentimiento se alojó en su corazón. 

El pesar inundo su corazón sin saber como encajarlo, no habia esperado aquella luz esperanzadora que lo inundo solo para dejarlo con aquel terrible desasosiego. Miro a sus compañeros en silencio, no sabia que decir de todo aquello. 

- Ya la habéis oído. No hay tiempo que perder.

Bomei había intentado sonar segura, pero en su interior, estaba sintiendo muchas dudas provocadas por todo lo que estaba aconteciendo. ¿Primero la Fortuna y ahora la Perfección?, sin duda había sido todo un honor contemplarlas, pero todo lo que significaba su visión era incertidumbre hacia un encuentro devastador.  Tendrían que frenar el avance de un enemigo del que no tenían constancia durante siglos, y para colmo el que había sido elegido como el mejor de todos ellos estaba totalmente desaparecido.

Miró al suelo y se quedó pensativa mientras los demás reaccionaban a lo que acababa de ocurrir. Empezaba a notar que la recorría una sensación de vértigo mientras se preguntaba si realmente serían suficientes para detener a la sombra.

Bai Hu se quedó mirando a la misteriosa figura luminosa con la inocencia de un niño. Incluso sonrió como tal. Cuando esta hubo desaparecido asintió a las palabras de Bomei y se acercó a Ogra a la que dio una leve patada como quien no quiere la cosa.

—Despierta—le dijo con expresión despreocupada.

Chang derramó dos gruesas lágrimas al ver marcharse a la figura luminosa. Una vez recuperada la Baohu-Gonying se paso froto los ojos con el brazo y se dirigió hacia la fortuna.

—¡La Zong!—la llamó—¿Estás bien?

—¡Chang Wuang!—exclamó la fortuna también al ser consciente de la presencia de la mujer para preguntarle a su vez—¿Dónde está Randkai?

Aunque seguía hablando con una voz sobrenatural, era diferente, ahora no infundía terror sino tranquilidad.

—No lo sé, hemos venido aquí buscándole, ¡pero no está!

—¡Maldición!—maldijo La Zong.