Partida Rol por web

La visita de Sylas no es la única que recibes antes de irte a dormir. Poco después de Sylas tu padre y tu abuelo llaman a la puerta. Sus rosotros traen consigo la inevitable petición de una charla seria. Sentados los unos frente a los otros, tu padre te mira directamente, con las manos apoyadas en las rodillas y la cabeza algo inclinada.

—Tu madre está disgustada. Mucho. Tardará en asumir todo lo que ha pasado. Y yo también. Porque no lo tengo claro. Y quiero saberlo.

—Creo que lo que tu padre quiere decir es que... —la voz del abuelo se cuela en la conversación—, la señorita Clara ha sido muy... críptica. Y nos preocupa a los dos lo que pueda pasarte.

—Sabe Arceus que ya eres un hombre, pero no dejas de ser mi hijo —establece con firmeza—. Delante de ti veo un gran atolladero. Y pareces querer saltar justo en el centro. Me preocupan las consecuencias. Me preocupa tu vida. ¿Es esto lo que quieres hacer?

Su mirada se vuelve más aguda que la un Noctowl y casi igual de inquietante.

     Snifff... ya...ya...- mientras me secaba las lagrimas que comenzaban a caer por mi mejilla incapaz de retenerlas por mas tiempo -  l-les juro que volveré... cuenta con ello...- pasando parte de mi chaleco para cubrir mi cara y quitar todas las lagrimas que estaban humedeciendo mi rostro - ¡¡Y-y y eso no viene el caso !!- le replicaba a mi hermano que parecía ya haber vuelto a niño molesto de siempre ... un minuto mas era soñar demasiado...

* pero no fue el único en esa noche en aparecer *

     Eran tal vez las pocas personas que sabían enseguida si intentaba ocultar algo o no, así que no serviría de nada mentir con ellos y viendo que nadie estuviera escuchando ... no quiero ni que Sia o Sylas tengan que preocuparse por estas cosas aun... - E... es la guerra... pronto... no se cuando ni donde, llegara a nuestra isla... en el diario ya se habla de ello aunque de forma superficial... pero por como lo hace sonar la señorita Clara... es solo cuestión de tiempo que alguna de las partes de un mal paso y todo estalle. - iba diciendo si pelos en la lengua - pero aun tenemos una carta que jugar de nuestro lado... por alguna razón un gran numero de seres de leyendas y cuentos se están presentando en diferentes parte de nuestra isla... ayer yo vi una... y por lo que me entere... el Viejo Cal también pudo haber visto a otra...- les comentaba mientras me quedaba viendo al abuelo - y no solo eso... si podemos lograr que los Marcados nos ayuden... puede que tengamos una oportunidad de evitar que el conflicto suceda... tal vez...

     Ante esas ultimas palabras de padre, le miro, aunque con todo el gimoteo que había dejado escapar con Sylas y que muchas emociones podían haber mermado mi apariencia, intentaba el mantener parte de mi determinación con la que me había metido en esta situación -  A'pa... a ti y al abuelo los e visto enfrentarse a tormentas y temporales aveces armados solo con el barco y nada mas que vuestro valor, y jamas los e visto dar un paso atrás por que sabían que podían con ello.... B-bueno... - tomando aire intentando demostrar mas confianzas en mis palabras - Se que la tormenta que tengo enfrente es tal vez las mas oscura que me toque atravesar... se que tal vez no tengo ni el mejor barco ni equipo para la ocación... pero se que tengo una familia que proteger por sobre toda las cosas... ustedes son mi ancla... y mientras ustedes estén bien... tengan seguro que yo lo estaré... no importa donde me encuentre ni como lo encuentre...  como el Longcast que soy juro que regresare.

Hay silencios que duran una eternidad y otros que lo parecen. Aunque la sensación que provocan es la misma, presentan una importante diferencia: los segundos siempre acaban en algo bueno. Y en esta ocasión, terminado tu discurso, sabes que es de los buenos cuando tu abuelo suelta una carcajada.

—¡Bueno, bueno! —da un par de aplausos— ¿Tú has visto eso, hijo? ¡Nos ha salido intelectual el muchachito! ¡Esa labia no la ha aprendido de ti, desde luego!

Tu padre sonríe de forma condescendiente y le da un codazo suave. Sin perder la calma ni la postura, puedes ver que está mucho más tranquilo.

—Eso parece, padre —responde antes de dirigirse a ti—. Te admiro. De verdad. Has tomado un camino peligroso, pero ahora estoy seguro de que es el adecuado para ti.

—Ya sabía yo que algo importante estaba a punto de suceder —murmura tu abuelo—. Muchos rumores en el puerto, en los bares, ya lo decían...

—Sí, sí. Mañana lo discutiremos. Ahora creo que es momento de que todos nos acostemos.

Se detiene un momento antes de que ambos salgan por la puerta.

—Hay más preguntas que quiero hacerte, pero eso puede esperar a mañana. Ahora ve con tu madre. Sigue abajo.

      Gracias... a ambos, por confiar en mi...- digo en cuanto veo que tanto padre como abuelo estaban satisfechos ante mi decisión, aunque de todas maneras pierdo parte de la compostura dejando escapar un suspiro debido a toda la presión que se me había estado acumulado en solo este fragmento de tiempo ... como me gustaría tener un buena jarra de leches en estos momentos... 

     Lo...lo se...- terminaba de decir mientras les correspondía ante la señal de despedida de ambos ... tal vez antes de siquiera poder pensar en la tormenta de allí afuera... tenga que enfrentar el tifón que me esperaba en la cocina...

    Mirando hacia mi cama donde estaba señor tenazas viendo como el mejor espectador en este desfiles de emociones - tengo que ir a charlar con madre Señor Tenazas... acuéstate de momento... luego te sigo... - decía mientras salia de mi habitación y volvía a la zona de impacto de todo este evento, a la vez que con cada paso, mas y mas nervios me daba saber como es que me iba a recibir Madre...  

Han apagado las luces del piso de abajo. Te toca descender en la penumbra, con la única luz de la luna atravesando las ventanas. Las ventanas están abiertas y notas una corriente fría que te hace estremecer. Raro, teniendo en cuenta que las noches en Olas Sombrías suelen ser bastante calurosas.

La cocina. Sabes que tu madre siempre estará allí. Pero esta vez no la encuentras cocinando o limpiando, como otras veces que está disgustada o preocupada. Sentada en su silla, acaricia las páginas de un libro de fotos. Hay de toda la familia, pero ella mira con cariño una tuya donde apareces llorando y abrazando un peluche de un Magikarp que ha perdido la cola.

—Tres años —su voz es calmada, suave, pero no te mira. Parece estar hablando para sí misma—. Tenías tan solo tres años cuando tu padre tomó esta foto. Lloraste durante un día entero hasta que volvía coser ese viejo peluche. Y un año después ya ni te acordabas de él.

   Con aquella inesperada brisa fría y fresca inundando nuestro hogar, me armo de valor por fin y doy los últimos pasos para ingresar hasta la cocina, para encontrarme con una imagen no me estaba esperando en los posibles resultados que tenia en mi cabeza ... no se si eso es bueno o malo...

  ¿ Don... Don escamas...? Wow... cuanto tiempo- miraba desde su hombro la foto con bastante curiosidad - C-cierto cierto... la cola, jajaj en ese tiempo aun pensaba que era de verdad e intente combatir con un Meowth callejero... si no fuera por ti, puede que hubiera estado todo ese mes llorando esperando que Don escamas se volviera a mover- mientras pasaba suavemente mi mano por su hombro, sin hablar por un buen rato mientras seguía contemplando la foto.

    A'ma... yo... - cuando por fin con valor para continuar -  G-Gracias por todo... gracias p-por criarme de esta manera... gracias por ser la mejor madre que alguien podría t-t-~*snifff*~ener... - mientras las lagrimas volvía a aparecerse ne mi cara ... ahora no... por favor... - s...se que no estoy a-actuando como el mejor hijo... que debería quedarme y ayudar en casa... snifff..snifff... pe-pero no los quiero perder... no quiero perderles ni a Sia ni a Sylas... al Abuelo o A'pa... ni quiero perderte a tí- mientras mantenía la mano en su hombro ocupo la otra para intentar secarme la cara a duras penas - t--tengo miedo de no s-ser ca...capaz... tengo m-miedo de que aun yendo a ayudar la guerra llegue a nuestra i-is...isla... snifff..snifff... pero tengo mas miedo de que les pase algo a algunos de ustedes por quedarme de brazos cruzados sabiendo que pude haber echo algo para evitarlo...

Ella tampoco puede contenerse y sus lágrimas hacen compañía a las tuyas. Sin embargo su llanto solo realza su fortaleza natural, cada gota alimentando esa gracia especial que la caracteriza. Su abrazo no tarda en llegar, inundándote de calor y serenidad, con sus manos revolviendo tu cabello y hacíendo que te sientas como un niño pequeño.

—No. Tenías razón desde el prinicipio. Nunca has actuado mal. He sido yo quien ha actuado de forma tonta y egoísta. Eres mi niño, siempre lo serás, pero ya eres un hombre y no debo retenerte aquí. Estoy orgullosa. Orgullosa de que estés dispuesto a sacrificarte para poder ayudar a nuestra hogar. Nunca me perderas por eso.

No hacen falta más plabras, no ahora. El tiempo que pasáis abrazados pierde toda lógica y medida y solo sabes que en algún punto ambos os sentís capaces de cortar esa conexión, con los ojos rojos y escocidos, pero con los corazones sanados en su totalidad.

   Al sentir su cuerpo rodeándome de su calor y amor, no puedo contenerme mas - Bwaaaa ...snifff...snifff- dejaba escapar, sin frases para la ocasión... sin comentarios oportunos o sarcásticos... solo lagrimas mezcladas entre mi amor por cada unos de mis familiares y el miedo que sobre nuestro incierto futuro.

*****

   P-prometo...snifff..snifff...prometo que v-volveré - decía cuando por fin sentía que era tiempo de seguir. sabia que aún me faltaba alguien en nuestra familia, pero ya era tarde, irle a molestar ahora solo la despertaría para que su fuera a llorar durante toda la noche y siendo honesto, hasta yo comenzaba a sentir que necesitaba reponer algo de energías o iba a llegar mañana totalmente deshidratado, así que sin otro destino, vuelvo a mi cuarto a pasar la noche mientras abrazaba al señor Tenazas.