Partida Rol por web

El golpe cambia la expresión confiada de Axel, por otra de desprecio y frustración.
Si no tuvieran armas no tendría huevos de hacer esto...
La situación lejos de mejorar empeora. Con un tio apuntándole con una escopeta cualquier movimiento en falso se traducirá en medio kilo de plomo en en la cabeza, y si se deja llevar como un corderito a su base, como mínimo lo despedazarán.
Resignado, y sin poder hacer nada, de momento, Axel sube lentamente donde le señala Penitencia.
Con un poco de suerte podré saltar en marcha, o incluso tirar a dos y cargarme a la zorra esta...Joder, con Swan y Wallas esto estaría chupado...

Subes a la parte trasera del jeep, separado de la parte delantera mediante una verja metálica algo oxidada pero suficientemente resistente para que no se pueda atacar al conductor con facilidad.
Penitencia toma asiento al volante mientras el tipo del bate lo hace de copiloto, pro último el que lleva la escopeta se sienta a tu lado y se encarga de atarte las manos delante con firmeza, usando un trozo de una gruesa cuerda que aprieta lo suficiente para que falle la circulación.

-Vamos a dar un paseito...- te dice con una sonrisa burlona y amarillenta antes de cubrirte la cabeza con un viejo y maloliente saco para que no puedas ver hacia dónde os dirigís exactamente, aunque sin duda el vehículo empieza a moverse.

Con un gran esfuerzo, Axel se mantiene callado durante todo el proceso de "preparación". Las pocas esperanzas que tenía de poder librarse de sus captores durante el trayecto se desvanecen cuando le atan las manos y se desintegran por completo cuando le tapan la cabeza con el saco negro. La cosa empieza a estar realmente jodida...
Mierda, con la cantidad de imbéciles que hay rondando por la tierra y me tocan los únicos listos. Esto ya se pone muy feo. Atado y encapuchado...es como si fueran a ejecutarme. Ni siquiera se a dónde vamos ni como llegar...¡Je! Pensándolo mejor...¿que coño me importa? Si tuviera algún sitio al que volver...todavía, pero como no es el caso...debería preocuparme sólo en pensar como librarme de estos tios y de la zorra principal.
Axel pasa la mayor parte del tiempo pensando en planes descabellados a cada cual más estúpido y suicida. Para que engañarse; solo, con una insignificante navaja y rodeado de tios armados necesitaría un milagro para sobrevivir ante un intento de huída.
Tendrá que hacer lo único que puede: esperar a que bajen la guardia, y la situación sea propicia

Notas cómo el vehículo sigue moviéndose, pro desgracia no puedes precisar el tiempo exacto que transcurre pero dirías que cómo mínimo cuarenta minutos...
Pasado este tiempo las puertas se abren y más voces rodean a tu oscuridad maloliente provocada por el saco.
Te estiran, te zarandean y te empujan de mala manera, tropezándote de vez en cuando con piedras o escalones, siempre seguido de las burlas de los malditos Chacales.

Tras varios metros y giros al fin te quitan el saco de la cabeza.
Estáis en un largo pasillo bastante oscuro, apenas iluminado por toscas antorchas y la luz nocturna que se filtra por pequeñas ventanas y fisuras en las gruesas paredes de roca fría. Parece una especie de castillo antiguo, quizá han decidido adaptarlo cómo fortaleza...
Abren con llave una puerta metálica frente a vosotros y te obligan a bajar unos escalones custodiado por dos supuestos "guardias".

Abajo la oscuridad es más acuciante, parece que hay un total de cuatro celdas bastante amplias, en realidad podría definirse como una mazmorra de antaño.
En la primera aprecias el cuerpo de un hombre bastante corpulento tendido en el suelo, te llama la atención las rastas de su cabello y la profunda sangre que surge de su estómago. Probablemente haya muerto hace poco...