Partida Rol por web

Cuando estais examinando los artefactos ois el ruido de golpes y cristales rotos en el piso superior, justo en la habitación de Martina que Alvaro estaba guardando.

Mientras hablamos con la nuestra "jefa" me entran las dudas, viendo lo que hemos conseguido, lo que nos han costado y las muertes que han provocado me planteo el fin de estos objetos, sobretodo por que pienso que esos seres son el resultado de tenerlos todos juntos en ese castillo o por que el dueño de todos ellos los uso para algo que provocó un resultado nada favorecedor para sus cuerpos y sus almas.

Cuando Mallory da su opinión sobre nuestra incursión en las ruinas, yo no puedo hacer otra cosa que asentir y dar mi apoyo a tal palabras.

Señora estos objetos o su uso sin ningún tipo de control o moral, ha provocado que esos pobres desgraciados dejaran este mundo y trajeran a este algo que no debería ni existir

Por que somos hombres de honor y cumplimos con nuestros encargos, pero por dieu que este libro acaba en una hoguera por todo lo que ha provocado

Luego nos pago y fue entonces cuando la conversación se relajó y empezamos a cenar y una cosa llevo a otra y empezamos a ver como funcionaban los artilugios... en ese momento oímos ruidos de cristales en la habitación que está vigilando Alvaro.
Automáticamente salto de la mesa, saco mis pistolas y me dirijo hacia la puerta corriendo...

Creo que vamos a tener una nochecita movidita señores, la opera no termina hasta que cante la gorda

Subió corriendo Pierre por los escalones hasta el segundo piso de la hostería para llegar hasta la puerta de la habitación de Martina, al otro lado se oían los ruidos de armas saliendo de sus vainas pasos y saltos. Tras toquetear el pomo la puerta se abrió y vió a Alvaro, en camisa y con los aceros en la mano, y a la criada de Martina van Acker saltando agilmente por la ventana.

Al oir los ruidos de la habitación que gardaba Alvaro y ver como Pierra sale corriendo sin pensarselo, hago lo propio, desenvainando mi espada durante el camino, para encontrarnos con un Alvaro con las espadas en mano y la criada de Martina saltando por la ventana, lo cual me deja completamente confusa por la situación.

¿Que haber pasado aquí?

Álvaro señala la ventana.

- Rápido, ¡seguidla! Ha robado algo de Martina. – se gira buscando sus pantalones y botas, que comienza a colocarse mientras sus compañeros reaccionan – Mas tened cuidado. No es criada alguna. Por mi vida que no vi jamás adversario moverse con tal velocidad y manejar la espada con tal habilidad. – dice a modo de advertencia, pero con un tono que denota cierta admiración.

“Sin duda, una mujer de verdad…”

Al llegar arriba nos encontramos con una imagen que no me hubiese imaginado, una muejr saliendo por la ventana y Alvaro seni desnudo, pero reacciono rapido, media vuelta y corriendo escaleras abajo hacia la planta baja de la posada, no sin antes mirar a Alvaro con mirada curiosa e interrogativa curiosa manera de hacer guardia cuando llego abajo comienzo a mirar y buscar a la ayudante de Martina, no quisiera que me cogiese ¨con los pantalones bajados¨ y se escapara

Saliis en persecución de la falsa criada por las calles de Porto Spatia pero por más que buscais no encontrais ni rastro de ella. Tras hacer inventario descubriis que no se ha llevado ninguno de los artefactos ni tampoco de los saquetes de monedas que Martina guardaba en su habitación. El único objeto que no lograis encontrar es el diario de Carlo III y sus impíos contenidos serán de momento un secreto.

Desanimados os retirais de nuevo a la hosteria y ahogais vuestras penas en vino mientras por la noche cae el primer chaparrón del otoño que ya se acerca.

Al dia siguiente Martina os comunica que zarpará al dia siguiente para, via Montaigne, regresar a su hogar en el lejano Kirk. Os deja sus señas para que le escribais por si por un casual descubrieseis algo sobre el diario o algun otro misterio de tipo arqueológico.

Por vuestra parte os volveis a la hosteria a decidir cuales han de ser vuestros próximos pasos.

Signori! Signori! Os saluda el joven pillastre cuando entrais en la taberna Ha llegado questa misiva per voi dice tendiendoos una carta primorosamente doblada y sellada, aún cuando el sello no tiene monograma alguno. La misma aparece dirigida a "La Compañía" sin indicación de remite.

A mes amis de la Compañía del Toisón,

Espero que nuestra despedida, por súbita que fuera, no os deje un mal sabor de boca. Os estoy ampliamente agradecida por haberos enfrentado a los horrores del Castelo Falisci en mi lugar. No quiero ni imaginar los horrores que enfrentariais en sus oscuras mazmorras para recuperar el diario que ahora tengo en mi poder. No os tomeis el robo como algo personal, ese diario estará mejor ahí donde va ahora que no en Kirk.  Lamento lo apresurado de la despedida pero despues de hacerme pasar por la criada de Martina durante tres meses meses comprendereis que necesitaba un descanso.

Para demostraros además mi afecto sincero por vuestras personas permitidme que comparta con vosotros algo de información que ha llegado a mis oidos. Sabed que el infame von Lüdlow ha abandonado Bernoulli y que junto a sus hombres ha puesto rumbo a tierras de Eisen, se rumorea que la guerra va a recrudecerse y que los Hunde von Krieg han sido contratados por la Liga Objeccionista. Si alguien tuviese motivos para tratar de acabar con esa banda de mercenarios debería dirigirse seguramente hacia Stützung en el principado de Sieger y unirse a las fuerzas de la Santa Alianza Vaticana. Pero que sabré yo a fin de cuentas solo soy una criada ¿verdad?

Un petit baiser per tous, et deux per Alvaro.

Volveremos a vernos.

A.

Después del robo y de ver la cara de Alvaro consternada por sentirse engañado, llegamos a puerto y acabamos en una taberna para apagar nuestras penas.
Empezó a correr el vino, la cerveza y después de las lagrimas llegaron las risas... cuando llegó un joven con un mensaje de la traidora, dandonos la razón de su acto y dandonos la pista de nuestro proximo objetivo.
Terminamos la lectura y se hace el silencio...

Buenos señores cojemos los petates y seguimos nuestro obejtivo? comento mientras levanto la jarra de cerveza

Leo la carta que nos ha llegado a mi y a mis compañeros y mi semblante queda en parte triste y en parte ansioso por partir de nuevo hacia mi tierra y poder luchar por mi objetivo real.

​Yo partiré hacia Eisen. Debo combatir por mi país y defenderlo de todos los males que lo asolan.

La situación fue bastante interesante. Por decirlo suavemente. Rodrigo podía haber perseguido a la mujer por los tejados, pero lo cierto es que después de todo lo que había pasado no estaba con ánimos. Así que miró a Alvaro el cual les explicó lo sucedido.
Como no había mucho que hacer, y habiendo cobrado, tan sólo quedaba regarse el gaznate con un buen vino y planear su próximo movimiento.
El destino, o Theus, les envío una señal.

No sé compañeros. Pero aunque lo cierto es que parece un buen plan. Creo que deberíamos hacer una parada en Bernoulli antes de dirigirnos a Eisen. La madrina de Michelangelo está encarcelada, injustamente. Y creo que deberíamos intentar rescatarla antes de nada. Así también nos podría explicar algo más del rapaz, pues su padre es alguien importante y lo mismo nos viene bien hacer algún que otro contacto.

Dicho esto se levantó y alzó su copa de vino.

Por los amigos ausentes. Porque su valentía y su recuerdo no mueran y logren descansar en paz después de una vida honorable.

Y así es como llega al final este capítulo de las aventuras de los Compañeros. Un capítulo cargado de traiciones, amigos encontrados y amigos perdidos, perfidias, horrores, aceros y mujeres hermosas.

Acaba como debía, pues no podía acabar de otra forma, con cuatro camaradas sentados a la mesa, espadas al cinto, una copa en la mano, un juramento en los labios y el destino, siempre caprichoso, tendiendo ante ellos nuevas aventuras.

FIN