Partida Rol por web

Si Eddie y Bronan iban en una dirección para atacarle, yo opté por usar mi velocidad y atacar por el lado contrario. No podría defenderse si le atacábamos desde dos lados a la vez, era imposible... a no ser que tuviera ojos en la nuca, y entonces tal veeeez... ¡Pero no era el caso!

Además, esa sonrisa de superioridad que puso hizo que mis niveles de "mala-hostia" incrementasen enormemente. ¡Si pensaba que podía con nosotros, andaba muy equivocado!

Ahora verás...

Con su brazo recuperado, ya volvía a estar listo para el combate. El Doctor no perdió el tiempo y salió disparado, a todo lo que daba su robot, para alcanzar a sus compañeros y si aún era posible ayudarles a terminar con ese engreído de Ten'Binger. 

Mientras hacia a su robot correr, movía mandos como loco para cambiarse el pañal a tiempo. La caída había hecho mella en sus ya de por si sueltos esfínteres, un cambio era totalmente necesario si no quería matar de peste a sus compañeros.

Ten'Binger se fue defendiendo de los continuos ataques que le propinaron los cazarrecompensas como buenamente pudo. Consiguió bloquear con ambos brazos el ataque de Eddie, recibiendo el golpe pero con menor potencia. Y fue capaz de bloquear la patada de Yo-Yo con la rodilla, sorprendiendo a la maestra de Jet Techno Do. Pero eso fue todo lo que consiguió. Las descargas de Alumi eran difíciles de esquivar y ya estaba en su límite cuando Bronan le asestó un tremendo tajo en l torso.

Y sin embargo, tenaz como él sólo, el contramaestre de los piratas del Minotauro fue capaz incluso en ese estado de  saltar hacia atrás, volver a marcar distancias con los cazarrecompensas y, sin perder su sonrisa, disparar... al aire. Los disparos detonaron arriba, muy alto, por encima de la primera capa de nubes.

Después, sin dejar de perder la sonrisa (aunque con algún diente de menos), el pirata soltó las pistolas y extendió los brazos hacia adelante, en señal de que le pusieran unos grilletes. Teniendo en cuenta del estado deplorable en el que estaba Ten'Binger (casi no se tenía en pie) era llamativa su manera de afrontar la derrota.

Eddie acierta su ataque y le hace 9 puntos de daño a Ten'Binger. Reduce 5 y se queda en 4.
Alumi acierta su ataque y le hace 11 puntos de daño a Ten'Binger. Reduce 5 y se queda en 6.
Yo-Yo acierta su ataque y le hace 5 puntos de daño a Ten'Binger. Reduce 5 y se queda en 0.
Bronan acierta su ataque y le hace 13 puntos de daño a Ten'Binger. Reduce 5 y se queda en 8.

Ten'Binger usa su turno para disparar al aire y después se rinde. FIN DEL COMBATE. ¡Enhorabuena!

Estado del combate:
- Ten'Binger 33 puntos de daño. - MORIBUNDO.
- Eddie 10 puntos de daño.
- Yo-yo 7 puntos de daño.
- Alumi 6 puntos de daño. 
- Bronan 5 puntos de daño.
- Dr. Wickelkind 4 puntos de daño. - FUERA DEL COMBATE
- Pirata1-6 - FUERA DE COMBATE.

Al final, mi intuición había acertado. Ten´Binger fue capaz de aguantar a pie firme el asalto de Eddie  e incuso recibió la descarga de Alumi sin perder demasiado la compostura, pero se desequilibró al levantar la pierna para parar la patada de Yo-Yo, y el impulso lo mandó hacia mi lado, justo a tiempo para que me le echase encima con un tajo cruzado de arriba a a abajo. Todavía tuvo la presencia de mente de echarse atrás, de modo que aunqué senti la espada cortar hondo, supe también que no había dado nigún punto vital.

No pareció importar mucho, ya que no parecía tener más cartas. Hizo ese último disparo y se rindió. Miro hacia arriba, en la dirección en la que se ha perdido.

Supongo que si no lo saben ya, en breve todos los piratas de la isla sabrán que venimos a por ellos. Bueno. Dentro de las junglas hay muchos sitios desde donde esconderse, si uno sabe buscarlos.

Envaino la espada y empiezo a caminar hacia el contramaestre, sacando los grilletes que los de Intendencia nos han dado para casos como estos. No me preocupo en exceso de que pueda intentar resistirse. Apenas se tiene en pie, y aunque lo hiciese... supongo que habrá muchas cosas en las que el pirata podría ganarme por la mano. Pero el forcejeo desde luego no es una.

Has luchado bien, y reconozco que tienes agallas. Lo gracioso de eso es que, con tu determinación y la ayuda de tu grupo, quizás habrías tenido una oportunidad, de huir al menos. En el momento en que intentaste pelear solo contra todos nosotros, se te acabó la suerte. Ni siquiera un haifesk intenta luchar contra una jauría de lobos entera en campo abierto.

Sin mayores miramientos le cierro los grilletes  superiores en torno a las muñecas, tiro hacia abajo del tubo de metal extensible que los alarga hasta las piernas, presiono el botón que despliega a los lados los dos tubos más delgados que van hasta los pies, y cierro los otros dos alrededor de los tobillos. Podrá caminar comodamente a zancadas corta, pero correr va a ser un problema. Que es de lo que se trata.

¿Qué hacemos con este? Gracias a su barco, no tenemos vaina en donde meterle. Lo podemos devolver a lo que queda de su barco y tenerlo ahí, o traerlo con nosotros. Recuerdo que mencionaste cazar un zanvugl, ¿no Eddie? Sueles necesitar carnaza para hacerlos bajar a tierra. Y el cartel ponía "Vivo o muerto" y no especificaba si entero o no, así que...

¿Había parado mi patada? ¡Eso tenía mucho mértio! Pero... al final, todo acabó como tenía que acabar. Aunque ése último disparo al cielo no me gustó lo más mínimo...

—¡Serás cretino! —le increpé molesta... poco después bufé y me crucé de brazos indignada.

Estaba claro que Bronan tenía toda la razón del mundo: aquello sería una señal o advertencia para que el jefe de aquellos piratas estuviera preparado de la que le venía encima. Incluso podía imaginar que montones de piratas vendrían a este lugar en cuanto se percataran de la señal...

—Será mejor que nos movamos a otro lado cuanto antes —les dije a mis compañeros—. Y a éste nos lo llevamos, que pagan bien por su cabeza. Ya buscaremos dónde meterlo...

El dinero era dinero después de todo, y yo no pensaba perder ni una sóla moneda. De hecho, tan pronto como dije aquello, empecé a cachearle para ver si tenía algo de valor... o al menos algo que pudiera acabar usando en nuestra contra si no se lo quitábamos a tiempo.

- ¡JA! - Grité con una enorme sonrisa, lo habíamos conseguido y yo había formado parte de ello - lo que dices, Bronan, no suena mal, pero... quizás paguen por él más dinero si está vivo ¿no? Después de todo quizás tenga información útil que revelar, así que mientras no intente ninguna tontería, voto también por mantenerlo con vida. Pero no te hagas el listo con nosotros ¿eh? - le miré desafiante - o te mato.

Y dicho aquello observé a mi alrededor por si veía algún pirata más, o algo que me llamase la atención.

El bebé con su pañal recién cambiado siguió avanzando en busca de sus compañeros, que por los disparos al aire de hace un momento no debían estar muy lejos. No paró ni un segundo, pues esos disparos podían suponer que muchos más piratas se acercaran a la zona, por lo que alcanzarlos era prioritario.

Aquel malnacido se rindió y mientras Bronan lo esposaba no podía evitar darle capones en la cabeza, no podía acabar con él pusto que se había rendido pero me daba mucha rábia su actitud. Por suerte Bronan hizo que todos mis mals, emocionales y físicos, se me pasaran. Los ojos empearon a hacerme chirivitas cuando mencionó a los zanvugl.

-Uoooo, por eso eres mi favorito! - Dije ilusionado, quizá caar un jemplar adulto era demasiado, pero con carnaza podriamos...

-Si localizaramos sus nidos podríamos atraer a los padres hasta este...  pirata, y hacernos con uno de sus desprotegidos huevos; eso serí más seguro que enfrentarnos a uno solo no? Además, ahora el resto de piratas esperan un ataque inminente, si damos un pequeño rodeo... con, ya sabeis... una misión secundaria... podríamos pillarlos desprevenidos no creeis?

En medio de este monologo apareció el doctor, en el momento adecuado para dorarle la tostada.

-Sabía que volverías de una pieza, un genio como tu no sufriría ningún daño; tu robot es tan seguro que hassta puede transportar a un bebe... y hablando de transportar bebes... Como está el tema de la incubadora?

Mi mirada saltó del doctor a Alumi y de vuelta al doctor unas cuantas veces esperando una reacción positiva.

Ten'Binger fue a responder algo a la amenaza de Alumi, pero llegó a su limitó y se desplomó de espaldas contra el suelo. Había recibido demasiados golpes. Lo único que Yo-Yo encontró fueron pistolas (por algo le llamaban Diez Pistolas) pero nada que no se pudiera encontrar en una isla tan científicamente tan avanzada como Calredea. 

Entonces se escuchó una voz a espaldas de todos.

—¡No vas a meter ningún bicho en mi nave hasta que aceptes pagarme mi comisión! ¿Estamos?

En contra de lo que parecía, la vaina no se había hundido irremediablemente. Karestya estaba apoyada al lado de la compuerta cruzada de brazos. Tanto el vehículo como su piloto parecía que estaban bien.

—Bueno, lo habéis hecho muy bien chicos—dijo saltando a tierra firme—. He podido ver unos planos muy molones de vuestros ataques. Pero no nos vengamos arriba y vamos a centrarnos en la misión. Que éste tío era el aperitivo y os ha dado guerra. Y no sé vosotros, pero yo quiero el parné, así que tiene que salir todo bien.

La híbrido se giró y miró la vaina.

—Sólo tiene un impacto en el casco, pero nada que afecte a la integridad ni a ningún sistema. ¿Metemos a todos estos capullos en las celdas? Van a estar apretaditos pero a nadie le importa, ¿no?

Jijijijijijijiji. Se carcajeó el doctor con las palabras de Barako, sin duda sabía de lo que hablaba, aunque su traje también era impresionante.

Así que habéis conseguido apresar a este botarate. Muy bien, muy bien. Los felicitó Wickelkind frotándose las manos. Aquello le puso de buen humor y no tardó en cambiarse el chupete por el verde para dejar constancia de ello. Si queréis atadlo a una de las patas de mi robot. Prometo ir despacito para no arrastrarlo mucho. Jijiji. Se ofreció mordiendo el chupete con sus pequeños dientes de leche, quedándole una sonrisa de lo más macabra. ¿De verdad pensaba no arrastrarlo? Para su desgracia Karestya evidenció que tenían celdas en la vaina.

Había estado tan centrada en el combate que había olvidado que Karestia no estaba con nosotros.

- ¡Hola! ¡Yo te ayudo Karestia! No hay nada mejor que encarcelar a malos tipos - dije alegremente yendo hacia ella - cuanto antes acabemos, antes podremos continuar con la misión ¿no? Y una vez hayamos acabado, hablaremos de nuestra mascota Eddie, ¿vale? ¡Lo primero es lo primero chicos!

Pistolas, pistolas y más pistolas. ¿Ese hombre no tenía otra cosa? ¡Qué aburrido!

Malhumorada por mi fallido intento de adquirir algo más de valor, le di una patada con la punta del pie en todo el culo sólo para desquitarme un poquito. Luego, una vez realizado mi malvado acto del día, miré a mis compañeros aliviada de ver tanto al bebé como a la pato de cuatro brazos y dos piernas a salvo.

—¡Los metemos a todos bien apretujaditos en las celdas, por supuesto! —exclamé, con una sonrisa siniestra en mi rostro—. Esas celdas no tendrán por casualidad barrotes electrificados, ¿no? Juju, sería divertido...

Aunque atadlos a la pata del robot del bebé y arrastrarlos un poquitín no sonaba nada mal tampoco... ¡MUAJAJAJA!

—Por cierto, es probable que vengan más piratas a esta zona a investigar un poco —dije finalmente, mirando a la piloto—. ¿Hay algún modo de camuflar la nave para que pase desapercibida mientras nosotros estamos en tierra?

—Camuflaje no tiene, aunque no podrán ponerla en marcha—respondió a Yo-Yo, después de traer al resto de piratas del barco y meterlos junto a Ten'Binger en las celdas ubicadas en la parte trasera del vehículo—. La vaina tiene un sistema de arranque biométrico y está configurada para funcionar sólo con nosotros. Pero podemos buscar algún escondrijo entre las rocas, claro. De todas formas, no me preocuparía porque vengan piratas hacia aquí. Arktus nos habló de que Rushán tenía una única ruta para ascender o eso entendí yo. A no ser que tengan piratas expertos en trepar paredes de cientos de metros... cualquiera que venga aquí tendrá que encontrarse primero con nosotros.

Parecía que nadie estaba muy interesado en ir a buscar un huevo de dinosaurio, al menos no momentaneamente. Mi cara reflejaba la frustración de ser ignorado y no podia más que refunfuñar entre dientes de brazos cruzados.

-Parece que todos han perdido el espiritu aventurero, solo Bonan parece ser sensato... mucho cerebro pero cero diversión...

Al final cedí y casi me puse a gritar a los cuatro vientos.

-Esta bien！Completemos la misión y ya nos ocuparemos del huevo mas tarde！Al fin y al cabo sin la recompensa Karestya no nos dejará meterlo en la nave... Sabeis hacia donde tenemos que ir？Quizá no sea seguro quedarnos aquí pero por lo menos a mi, no me vendra mal un descanso.

Señalé mis heridas, algunas de ellas aún sangrantes.

Al doctor nunca le interesó otro bebé en el grupo, por lo que no mostró mayor interés en ir buscar el huevo de dinosaurio. 

Si queréis descansar mejor hacerlo aquí en la vaina que más adelante a la intemperie. Comentó Wickelkind en respuesta a Eddie. 

Según las indicaciones que les habían dado sólo había un único camino, por lo que no deberían tener ningún problema en encontrarlo.

¡Pues vaya! ¡Sin camuflaje! Al menos, la seguridad de Karestya de que la nave sólo arrancaría con nosotros y de que sería seguro dejar a los prisioneros allí era contagiosa.

—¡Entendido! —dije totalmente conforme, aunque en realidad eso de arranque binosequé no lo había pillado del todo—. Pues entonces dejamos a estos atontaos en la nave, la ocultamos un poquitín por si acaso y... ¡al lío!

En cuanto a lo del huevo de Eddie, no entendía por qué se había molestado tanto... pero yo seguía pensando en echarle una mano. ¡Tener una mascotita siempre era molón!

—Pss, no te preocupes —le susurré por lo bajo tratando de evitar que nos escuchara Karestya—. Pillamos un huevo pequeñito y lo metemos de extranjis...

Asentí fervientemente, tenía ganas de continuar con la misión y encerrar en la nave a todos aquellos maleantes, en cuanto al huevo, seguro que cuando hubiésemos acabado con todo aquello Karestya no ponía pegas, era solo un huevo ¿qué daño le iba a hacer a su nave?

- ¿Preferís descansar aquí que en la nave? - yo me encontraba bien, algo cansada pero aún me quedaban energía para continuar un rato.

Sin muchas ceremonias, tiro de los grilletes del pirata y lo voy arrastrando hacia donde la piloto nos está esperando, antes de pasáreselo a ella.

Tiralo a una de las celdas, no necesitamos la carga adicional ni el tener que estar mirando siempre sobre el hombro por si se libera. Y tira las pistolas al mar- digo, mirando a Yo-Yo. Me da que sin ellas, estará mucho menos combativo. He conocido a suficientes pistoleros para saber que toda lo que tienen de fanfarrón desde lejos, lo tienen de cobarde sin sus juguetes cerca.

No es que sea mucho decir. Una pistola es un arma de cobardes, al fin y al cabo. Con gusto cumpliría mi amenaza de usarlo de cebo de zanvugl, pero no deja de ser un tipo que tiene recompensa, y el dinero es el dinero.

No te preocupes por el cebo- me dirijo a Eddie esta vez, que sigue con la idea de domesticar a uno de esos bichos, los dioses saben para qué. Después de ese ultimo disparo, no va a pasar mucho hasta que tengamos en abundancia. Precisamente por eso, voy a empezar a explorar la zona. No estoy demasiado herido, y como ha dicho Karestya, en algun punto nos vamos a tener que enfrentar a los piratas- o no. Yo tal vez pudiese trepar a pelo por esas paredes de roca, pero dudo que por ejemplo Wickelkind pueda. Y aun así, estaríamos demasiado expuestos. Si voy a pelear en un sitio, prefiero conocerlo primero, sobre todo si sé que nuestro enemigo ya lo conoce. Si alguien quiere venir conmigo, no tengo problema. Si no, puedo apañarmelas bien. Este tipo de sitio... es mi elemento.

Ahora sí me siento confiado. En Calredea y sus máquinas extrañas o en un barco puede que esté fuera de lugar. Pero aquí, fuera, en la naturaleza, con solo yo mismo y las bestias... este sí es mi lugar.

Tras encerrar a los piratas, Bronan empezó a inspeccionar la base de la isla para ver posibles rutas de ascenso. Efectivamente como había indicado Karestya sólo quedaba una. Así que, tras esconder la vaina lo mejor posible, el Escuadrón Phi comenzó el ascenso a la isla.

El Grupo continúa aquí.