Partida Rol por web

Unas voces vienen del fondo de la habitación, hacia la izquierda, y nada ocurre.

Ok, uso el conjuro ver lo invisible y miro a mi alrededor a ver donde anda en la dirección a la voz. Si no veo nada me arrastro en diagonal para ponerme en el borde de la barra.

Sigues sin descubrir ningún hechizo, pero no hace falta. En cuanto tu propio conjuro hace efecto, no tardas en encontrar a la culpable de esos ataques. Tu oponente se revela ante ti, volando casi a la altura del techo, una pequeña criatura alada que te apunta con una varita. Es un tipo de hada, sin duda alguna, la causante de tanto quebradero de cabeza.

Minah lanza un conjuro y, en seguida, descubre dónde está Sassenach. Una ligera sonrisa aparece en su rostro sin poder resistir, pues sabe que ya ha ganado. Simplemente por ver mejor lo que va a pasar, se levanta sin apartar la mirada. A una orden suya varias cuentas de su cinturón brillan hasta apagarse, insuflando nueva vida a la mujer que, sin perder tiempo, ya ha comenzado a conjurar de nuevo.

Todo parece indicar que el combate aún va a continuar, la pequeña pixie se prepara para descargar una nueva oleada de proyectiles sobre su enemiga, antes de dar tiempo a que acabe lo que sea que está haciendo, pero es demasiado lenta. Otra palabra y el tiempo parece acelerarse para su oponente, que extiende la mano y lanza un orbe de fuego directo contra la alada criatura.

El impacto es inevitable, el daño es aterrador. Cuando las llamas se consumen, apenas queda otra cosa que unos restos calcinados e irreconocibles.