¿Descansar Lance? un buen soldado no sabe lo que es eso... en la tierra arenosa de Urshalim, el calor te funde al suelo, y aún así, debes seguir caminando si algún día quieres una montura... los que se quedan atrás o caen son dejados a su merced. da una palmada a su espalda, andaremos hasta llegar, y tras el trabajo tendremos unas horas de descanso encima del carro de ese judio.
Tras escuchar a su compañero de viaje, Lance se encogió de hombros y se puso en camino. - Será mejor descansar antes de que lleguemos a las posesiones de tu "amigo" - comentó, haciendo de la palabra amigo, un singno claro de ironia - Deberiamos estar recuperados del viaje si es que despues tenemos que hacer algo de ejercicio - Añadió haciendo un pequeño guiño a Waldruc.
Waldruc dando a entender por su actitud que sigue siendo quien manda y paga no deja que estos descansen. Paran simplemente a comer a mediodía cerca de un arroyo y ahí reposan de la marcha. Luego siguen caminando atravesando ya el bosque que finalmente, cuando el sol está cayendo, desaparece para dar paso a un largo terreno de siembra. En medio del terreno, vastante lejos de donde están, se levanta una granja que por lo grande que se ve desde ahí, debe ser inmensa. Waldruc saca un papel que lleva escondido dentro de sus ropajes y examina unos garabatos que parecen un mapa. Es ahí. Si quieres podemos descansar aquí hasta la noche y aventurarnos cuando la luna esté alta. También podemos ir hacia allí, terminar el trabajo, comer y dormir un poco sobre buena paja.
- Es tu conocido - comentó estirandose - así pues tu decides cuando entrar. - Se puso las manos tras la cabeza y esperó su respuesta.
Waldruc desenvainó su espada y clavó su punta al suelo para justo después arrodillarse. Non nobis, Domine, non nobis, sed nomine tuo da gloriam susurra para luego levantarse de nuevo y enfundar su espada. iremos ahora y empezó a caminar hacia aquella hacienda.
El cielo sobre ellos era ya del color del que debería ser el infierno. Sus pasos quedaban marcados sobre la tierra conreada. No tardarían mucho en llegar.
Despues de todo lo que habia vivido Lance habia perdido un poco la fe en su Diós, aun asi, se santificó y rezó para sí un par de oraciones mientras que se iba estirando de camino a la casa. Tenía ganas de probar su habilidad que, sin duda, sería necesaría para la batalla que se esperaba en el frente.
Pasaron andando no mucho tiempo hasta llegar a la cerca que delimitaba la propiedad. No había nadie fuera.
Bien Lance, ahora deberás demostrar buenas aptitudes engañando. Intentarás hablar para que te dejen entrar, y deja la puerta aierta para que pueda entrar. Yo te seguiré de cerca para saber cual es el momento. En ese instante deberán estar los dos, cuando yo entre deberás hacerte con la mujer para dejarme al hombre a mi. ¿entendido?
Encogiendose de hombros Lance avanzó hacia la casa. Habia sido una persona hábil para embaucar en alguna ocasion, pero sobre todo gente de baja clase y sin capacidad de entendimiento. Mientras llegaba a la puerta iba urdiendo el plan que ejecutaría pero cada intento resultaba poco aceptable así pues prefirió improvisar. No sabía que le depararia detras de esa puerta.
Lo siento por la tardanza, entre el concurso, examenes y algunas cosas mas, no he podido conectarme todo lo que he querido.
Lance se acercó a la puerta con sigilo, girando la cabeza de vez en cuando por no perder de vista a aquel que esperaba a sus espaldas. Waldruc, avanzó tras de él encorvado, casi de cuclillas, hasta llegar a la pared tras la que se ocultó.
Ahora Lance tenía la puerta delante. Estaba cerrada, igual que las ventanas. Tenía todo el aspecto de haber sido abandonada no hacía mucho. Empujó la puerta... abierta... a primera vista nadie dentro, todo silencio.
Habían muebles, podría llegarse a deducir que alguno que otro faltaba pero en efecto, estaba abandonada.