Tuvieron casi que empujar a Chief para que dejara de mirar aquella cabaña ardiendo y comenzara a andar hacia donde habían aparcado el coche.
No podía echar la vista atrás de vez en cuando hacia las llamas, viendo el humo oscuro como un presagio de lo que podía depararles el futuro.
No fue hasta que Reba trastabilló, que volvió su atención al grupo y se dio cuenta que sus compañeros le necesitaban aquí y ahora.
- No podemos ir a un hospital de esta guisa, sabiendo que encontrarán un cadaver en esa cabaña. - dijo poniéndose al volante, teniendo en cuenta que era el más entero de los cuatro.
Tony había sufrido el ataque de las espinas, Cliff el de la criatura y Reba el del humo, por lo que él tendría que sacar fuerzas para llevarles a algún sitio seguro.
- ¿Un motel de carretera? - preguntó mirando a Tony, que seguramente fuese el más indicado de todos para conseguir un par de habitaciones sin que hicieran demasiadas preguntas.
Cliff conducía el coche alejándose de aquel sitio. De vez en cuando veía la columna de humo por el retrovisor y apretaba los ojos recordando a aquella criatura.
—Podemos parar en un motel, sí, pero tenenos que pensar cual será nuestro siguente paso. No se vosotros, pero yo no pienso parar aquí. Pienso llegar al fondo de esto y asumo las consecuencias de mi búsqueda. No sé si nos queda algo que hacer en Greenwood. Si no es así, propongo ir a Jackson y ver in situ a esos amigos de Alphonse. ¿Qué decís? Lo malo es Reba... quizá no sería mala idea parar en un hospital para que le echen un vistazo. Ha tragado humo, no es tan raro.