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ARCADIA: FRAGATA "ACLAMADOR":

AÑO: 783 D.

MES 2: METAGITNIÓN.

MENÓS PHTHINONTOS: LA DÉCADA DEL MES QUE SE ACABA.

DÍAS 21 HENNATÉ A 29 ENÉ KAI NÉA.

EFEMÉRIDES: Fiesta de las Metagitnia, en honor a Zeus. Es una fiesta personal e introspectiva, cada creyente elige un día del mes para ayuno y meditación. Se realizan rituales de purificación y se bendicen niños, animales y nonatos.

- Los acontecimientos en Arcadia se desarrollaron con ordenada tranquilidad.

- El Portaestandarte Escatos, uno de los pocos pocos veteranos vivos anteriores a la época de Eteocles y antiguo Campeón planetario en su dia predecesor en el cargo de Eteocles, permanecería al mando de toda la defensa planetaria.

- La única nave que viajaria a La Marca sería la Fragata "Aclamador", el navío insignia de Arcadia, y llevaría una fuerza de combate significativa a bordo. Además del Campeón Eteocles y de los Suprahumanos Helicaón y Taurón con todo su equipo de combate, viajarían otros cuatro Supreahumanos con Sillas de Combate y diez con armadura pesada de infantería. El grueso de las fuerzas lo compondría un Pelotón de Drones de Guerra, compuesto por ciento cuarenta y nueve Drones más un Drone comandante.

- Además, en la nave iría todo el personal auxiliar de servicio, la tripulación y dos vehículos civiles para transporte terrestre.

- Cuando todo estuvo dispuesto, y tras el ceremonial y desfile que tanto gustaban a los Arcadios la comitiva al completo embarcó y zarpó del planeta, y la "Aclamador" se dirigió al Laberinto para comenzar su viaje.

AÑO: 783 D.

MES 2: METAGITNIÓN.

MENÓS PHTHINONTOS: LA DÉCADA DEL MES QUE SE ACABA.

DÍAS 21 HENNATÉ A 29 ENÉ KAI NÉA.

Confiaba en Escatos para guardar Arcadia. Había sido el campeón antes que Eteocles y era alguien juicioso y capaz para una tarea como esa. Él también podría haber desempeñado un trabajo así con total efectividad pero en aquella ocasión su lugar se encontraba al lado de su señor representando a Arcadia en la importante reunión que iba a tener lugar. Ni siquiera él sabía mucho de lo que iba a tratarse en la reunión pero su lugar era en ella.

Como era un viaje oficial y él iba como segundo representante de los suprahumanos de Arcadia, Helicaón portaba su armadura dorada de combate e iba armado aunque allí únicamente portaba su espada, dejando el resto de equipo militar para cuando llegaran los momentos realmente oficiales. Con el casco sujeto por su mano izquierda y apoyado en su cadera, Helicaón se movió por la fragata hasta dar con su señor y hermano. Tras conseguir su objetivo y realizar un saludo ceremonial y respetuoso habló.

—¿Deseáis hablar acerca de la reunión o consultarme algún tema de los que serán tratados?

AÑO: 783 D.

MES 2: METAGITNIÓN.

MENÓS PHTHINONTOS: LA DÉCADA DEL MES QUE SE ACABA.

DÍAS 21 HENNATÉ A 29 ENÉ KAI NÉA.

Mis ojos no se despegaron ni un momento de los preparativos para nuestro viaje. Cargar con el equipo necesario y los insumos requeridos para el viaje en comodidad y con la suficiente fuerza militar para enfrentarse a los peligros del espacio en "paz" es lo que me quita el sueño. Estuve horas supervisando el ingreso de los drones de guerra, así como de las sillas de combate. El resto de los Suprahumanos se ocuparon de todas las tareas en la perfecta armonía que caracteriza a los nuestros, donde cada uno sabe lo que debe hacer y lo realiza sin dudar.

Rápidamente, todo estuvo en orden y listo para el viaje a La Marca. Despegamos y ahora atravesamos el Laberinto mientras podemos tomarnos un descanso. Ocupo mi tiempo entrenando con mi espada en el salón de prácticas del "Aclamador". Helicaón ingresa en la sala y me saluda, para preguntarme algo cuya respuesta no poseo.

Le respondo con sinceridad:

 - "La verdad, hermano, es que no sé cuales serán los temas tratados. Se supone que ha de ser una cumbre donde cada mundo ratificará su pacto de alianza ante la amenaza Persa pero desconozco si habrán tópicos específicos que hemos de tratar."

Dejo mi espada en el atril y seco parte de mi sudor antes de continuar:

 - "Espero que haya algo importante que tratar pues los viajes solo de diplomacia me parecen un gasto innecesario de recursos. Ordené cargar el Aclamador con las tropas que llevamos pues no confío en los habitantes de La Marca y siempre cabe la posibilidad de una traición. Cuando todos los líderes de los mundos están reunidos es el momento perfecto para asesinarlos y desestabilizar a quienes se han de conquistar. No llevo demasiado para que no diga que vamos a la guerra pero sí lo suficiente para brindarnos seguridad."

Finalmente agrego:

 - "Ahí serás mi mano derecha y espero que estés siempre a mi lado, pero tendrás adicionalmente la labor de coordinar con nuestros hermanos en la fragata, que no descenderán a la estación, en caso de haber peligro. Si llego a caer, tú tomarás mi lugar pues en nadie confío más que en ti, hermano."

Pongo mi mano sobre su hombro como un espontáneo gesto de amistad y afecto pues Helicaón es el más amado de entre mis hermanos y nuestro mundo no podría quedar en mejores manos si algún día caigo en batalla. Espero que nunca suceda, pero no temo por Arcadia en ese funesto escenario pues no pueden ser mejores las manos en las que quedaría.

AÑO: 783 D.

MES 2: METAGITNIÓN.

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Seguía erguido y recto, con su habitual posición marcial que siempre adoptaba en los momentos oficiales. Estaba diseñado para actuar así. La eficiencia con la que todo se había desarrollado le enorgullecía. Disfrutaba con el buen hacer de sus compañeros. Cada reunión interplanetaria era siempre un momento óptimo para demostrar que Arcadia y los suprahumanos estaban por encima del resto. Helicaón no era especialmente belicoso pero conocía lo suficiente de política para saber que mostrar una posición fuerte ayudaba al bienestar de su mundo.

—Sería bueno que antes de una reunión de tanta importancia como la que va a suceder el recibir algún tipo de información concreta para poder plantear el encuentro de forma más efectiva. Quiero pensar que los temas a tratar serán tan delicados que temen que sean interceptados.

Asiente con firmeza a las palabras de Eteocles pues su opinión es similar en ese aspecto. Ambos tienen una misión parecida, quizás su condición de suprahumanos sea la que les haga razonar así.

—No hay nada que temer. Todos saben quién es Eteocles y cuales son sus hazañas, además estaré a tu lado para recordarle a cualquiera que es un error intentar atentar contra Arcadia. Es un buen momento para recordar al resto de planetas que somos buenos aliados pero mejores enemigos.

Se soprende por el gesto de Eteocles pero agarra con firmeza su muñeca en muestra de que él estará a su lado y también en Arcadia por si lo peor sucediera.

—No hará falta pero si lo hiciera allí estaré y así actuaré. Por encima de todo está Arcadia.

AÑO: 783 D.

MES 2: METAGITNIÓN.

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DÍA: 26 PEMPTÉ.

HORA LOCAL: 12:30 A.M.

AÑO: 783 D.

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DÍA: 26 PEMPTÉ.

HORA LOCAL: 17:03 A.M.

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DÍA: 26 PEMPTÉ.

HORA LOCAL: 18:01.

- "Según los cálculos llegaremos a la Marca en unas once horas. Aún nos queda un largo viaje por recorrer." -

AÑO: 783 D.

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MENÓS PHTHINONTOS: LA DÉCADA DEL MES QUE SE ACABA.

DÍA: 26 PEMPTÉ.

HORA LOCAL: 20:15.

AÑO: 783 D.

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MENÓS PHTHINONTOS: LA DÉCADA DEL MES QUE SE ACABA.

DÍA: 26 PEMPTÉ.

HORA LOCAL: 20:15.

El Dorado permaneció realizando las labores propias de su cargo durante el viaje, moviéndose por el interior del Aclamador resolviendo las dudas banales de sus compañeros y tratando de cerciorarse del correcto funcionamiento de todo cuanto le rodeaba. Durante ese período de tiempo no pudo evitar pensar en algo que creía que sería importante para Arcadia y para su señor, una idea que le llevaba rondando la mente el suficiente tiempo como para creer que sería bueno comentarla con Eteocles.

Tras terminar de dar unas directrices volvió sobre sus pasos para ir a la sala de mando de la fragata y encontrarse en ella con su hermano al que deseaba transmitirle su idea. No estaba seguro de cuales serían los temas a tratar en la gran reunión hacia la que iban pero sabía que todo lo que no fuera reforzar la posición de Arcadia sería un error de su parte. Por eso mismo él debía de actuar reforzando su papel como consejero. 

No tardó en llegar ante Eteocles al que se acercó y a una distancia escasa le dijo en tono bajo.

—Si es posible me gustaría comentar un asunto que podría ser interesante para Arcadia en la reunión.

AÑO: 783 D.

MES 2: METAGITNIÓN.

MENÓS PHTHINONTOS: LA DÉCADA DEL MES QUE SE ACABA.

DÍA: 26 PEMPTÉ.

HORA LOCAL: 20:15.

Los días de viaje a través del Laberinto pasan lentamente, mientras me preocupo en atender los preparativo de nuestra llegada a La Marca. Entre tanto, utilizo mi tiempo en entrenarme como corresponde para mantener los inalcanzables estándares de habilidad marcial que un Suprahumano debe tener.

Como en todas las jornadas, habiendo terminado mis entrenamientos y después de asearme como corresponde, me dirijo al puente de mando de la nave, donde me senté en mi silla del capitán y desde ahí comando al resto de los tripulantes que la operan.

Escasos segundos después llega Helicaón y se me acerca, hablándome de algo que parece importante:

 - "Por supuesto, hermano. ¿Qué es lo que has pensado?"

Por el tono en que ha hablado, parece ser algo que le preocupa en cierta medida. No puedo imaginar de que se trata pero confío en que si es algo en lo que él ha pensado, de seguro será de gran utilidad conocer.

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MES 2: METAGITNIÓN.

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DÍA: 26 PEMPTÉ.

HORA LOCAL: 20:15.

No hizo esperar a Eteocles y comenzó a hablar en cuanto éste se lo requirió.

—Pese a que desconocemos el motivo total de la reunión y los temas a tratar, creo que sería bueno plantear algunas estrategias con el bien de reforzar la posición de Arcadia. Estoy seguro de que habrás pensado ya en ello pero me gustaría sumar una proposición a las que tú hayas podido desarrollar.

En ese momento el suprahumano hizo una pausa antes de proseguir con sus palabras pues deseaba buscar las más óptimas y precisas para presentar su idea.

—Es bien sabido por casi todos que los reyes Leonidas y Laertes mantienen una buena relación y que en ocasiones van juntos a cazar al pequeño planeta de Tesalia para alejarse de los problemas de sus planetas y relajarse. Es bien sabido que a Leonidas le encanta la caza. He pensado que para Arcadia sería beneficioso estrechar todavía más los lazos con estos dos poderosos planetas y sería bueno que usted les acompañara o incluso propusiera una cacería en Tesalia para conocer más a ambos líderes.

Tras proponer su idea se mantuvo firme y en silencio, conteniendo de forma involuntaria la respiración pues deseaba saber cual era la opinión de Eteocles.

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DÍA: 26 PEMPTÉ.

HORA LOCAL: 20:15.

Los dos Glaucos de Helicaón se presentan ante él pasivamente, como aguardando sus órdenes.

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MES 2: METAGITNIÓN.

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DÍA: 26 PEMPTÉ.

HORA LOCAL: 20:15.

Las palabras de Helicaon no se dejan esperar y lo que dice es una muy buena estratagema para mejorar las relaciones de Arcadia con ambas naciones. Es sabido que ambos Neomarines son aficionados a la cacería y, a pesar de la supuesta inferioridad física que dicen que tenemos los Suprahumanos Arcadianos ante esos otrora guerreros de Terra, estoy seguro de que estar completamente a la altura de una actividad como ella.

"Al fin y al cabo, gané mi título cazando."

Asiento a mi lugarteniente y le respondo:

 - "Tus palabras son sabias, hermano. Haré aquella propuesta a ambos mandatarios, aunque me temo que no se realizará dicha cacería hasta después de la reunión, por lo que no veo como podría dar frutos durante nuestra estancia en La Marca, aunque no dudo de sus beneficios a largo plazo."

Miro a los glaucos que se han acercado a Helicaón, esperando alguna orden del Dorado. Pienso en alguna línea general sobre la que mantener nuestra diplomacia y solo se me ocurre el mantener nuestra opinión fiel a Arcadia pero cercana a nuestros aliados, donde reside la verdadera fuerza que brinda la unión.

Por otro lado, la sorpresa del tema a tratar y las últimas noticias que se tengan es algo que me tiene sumamente expectante pues temo que el asunto puede ser la amenaza Persa y todos sabemos que no es un tema que se deba tomar a la ligera.

AÑO: 783 D.

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HORA LOCAL: 20:15.

Asintió el Dorado con solemnidad a la buena recepción que su hermano Eteocles había hecho de sus palabras. Le alegraba haber sugerido algo útil para Arcadia y esperaba que el plan pudiera llevarse a buen término.

—Bueno el saber que quieres compartir tiempo con ellos quizás les aliente a pensar que el pueblo de Arcadia es más cercano a Esparta y Atenas. Creo que es importante que ambas potencias cuenten con nosotros. Tenemos que estar sentados en la mesa de los adultos para decidir si nos gusta lo que se come en ella. Además estará bien que el campeón de los suprahumanos rebaje el famoso orgullo de Leonidas de Esparta. Parece creer que es el único guerrero digno de todo el Racimo de Damocles, será bueno que sepa que no es así.

Aunque aliados, Esparta y Arcadia, remarcar el poder nunca era una mala táctica para conseguir el respeto y la cautela.Tras eso se giró al sentir la presencia de sus dos Glaucos y guardó un segundo de silencio por si alguno de ellos deseaba comunicarle algo. Al comprobar que únicamente aguardaban sus órdenes, se dispuso a darlas.

—La llegada es inminente id a comprobar y transportar mis efectos personales. Cercioraros anteriormente de que nadie en la fragata necesite de mi ayuda.

AÑO: 783 D.

MES 2: METAGITNIÓN.

MENÓS PHTHINONTOS: LA DÉCADA DEL MES QUE SE ACABA.

DÍA: 26 PEMPTÉ.

HORA LOCAL: 20:15.

Los dos Glaucos asienten en silencio y se marchan a obedecer las órdenes recibidas.