Abro esta escena para compartir con vosotros el botín que vais hallando en vuestras aventuras y para que tengáis un lugar donde repartirlo sin llenar la partida principal de comentarios al respecto.
De acuerdo con el sistema monetario de Ansalon, el oro no vale prácticamente nada. A todos los efectos, las piezas de acero equivalen a las monedas de oro en el resto de escenarios ambientados en D&D.
Tras el Cataclismo, la pieza de acero se convirtió en unidad monetaria estándar, reemplazando a la pieza de oro. El acero era escaso y necesario para la fabricación de armas y herramientas y para reforjar el devastado continente de Ansalon. El oro, debido a que era demasiado blando para ninguna de estas aplicaciones, perdió casi todo su valor excepto para la ornamentación.