Partida Rol por web

El Despertar del Mal - II - La Máscara del Dios Viviente

V - Ajuste de cuentas

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25/07/2016, 14:03
Hostawen

TURNO 2

En pocos segundos el heraldo había llegado a su posición dispuesto a presentar combate. La elfa tampoco era muy diestra en combate cerrado por lo que, con un saltito hacia atrás le hizo ganar unos preciosos segundos para agarrar nuevamente una flecha y clavarla en su cara. La fuerza con la que lanzó la flecha, la precisión y lo cerca que estaba el heraldo hicieron que éste cayese desplomado hacia atrás. -No te duermas Tanyl, deja que Rakna te proteja.- azuzaba a su compañero sin siquiera mirarlo mientras cogía otra flecha más y la lanzaba a otro de sus enemigos. -No dejes que nos rodeen...- decía buscando enemigos con su mirada. Otra flecha se clavaba en uno de sus enemigos. -Rakna, es tu momento...- imploraba a su amigo natural.

- Tiradas (5)

Notas de juego

Creo que es una trampilla lo que está arriba de Hostawen. Si lo es movimiento de 5' gratuito diagonal arriba a la derecha.
Ataque 1 - heraldo 3- Crítico/confirmado   ·Daño:19 Muerto
Ataque 2 - iba a heraldo 3, pero lo maté con el anterior ataque, si puedo cambiar a Heraldo 8 y si no hazlo a suerte (si no tiene sentido que fuese al más cercano, tu decides)- Golpea  daño: 6

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25/07/2016, 14:13
Rakna

El gran Rakna había visto como el bípedo de en frente suya había esquivado una dentellada, rápido como un conejo se había retirado a tiempo evitando una muerte segura. Su brazo iba a caer pesadamente contra él, cuando el banco estalló por el tremendo golpe del hierro contra la madera. El susto hizo saltar al Gran Rakna atrapando entre sus fauces al acólito (1). Un movimiento con el cuello hizo que el cuello de su presa se partiese regalando un crack sonoro y terrible. La bípeda escuálida le apremiaba pues uno de sus enemigos se había subido a la mesa intentando rodearlos. La fauces ensangrentadas de Rakna se exponían dejando como muestra una macabra sonrisa. Sus ojos estaban clavados en el acólito (2).

- Tiradas (3)

Notas de juego

Ataque: 18(Tirada) +3 (Base) - 1 (tamaño) + 6 (FUE) +1 (Soltura)=  27 (éxito)
Daño: 8 (Tirada) + 6 (FUE) = 14 (muerto)
Derribo= +6

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25/07/2016, 17:37
Rhylen Carsson

A pesar la numerosa cantidad de enemigos y la coordinación con la que habían iniciado el asalto a la taberna, Rhylen se veía confiado, poderoso… casi invencible. Ya no sólo era la gran mejoría que demostraba cada vez que blandía la sagrada espada de Assar, además, todos los golpes que recibía le parecían tan poco dolorosos como catalizadores para continuar atacando con más saña.

Desconocedor del anillo mágico con el que repartía el daño con la pitonisa, Rhylen imaginaba que aquella falta de dolor tendría algo más que ver con el fervor del momento. – Ya picará mañana… ahora…. ¡PIENSO ACABAR CON TODOS! , pensó, y decidido, se fue a por el primero de los acólitos que apareció delante suya protegiendo a su compañero.

El mandoble del guerrero se incrusto en el costado del acólito haciéndole hincar la rodilla y dejando a otro más fuera de combate. Sin pensarlo dos veces, recuperó su espadón y tras girarlo por encima de su cabeza tresciento sesenta grados, lanzó otro brutal impacto contra la cabeza del acompañante de su última víctima.

Como si se tratase de un melón, la parte de la cabeza por encima de la nariz salió despedida de su dueño cayendo a poco metros de los pies del acólito que, gracias a una poción curativa, parecía estar recuperado de la herida de su barbilla aunque con serías dudas de si volver a entrar al combate. - ¡COBARDE!.... ¡MAS VALE QUE NO VUELVAS A ENTRAR!, amenazó señalándole con el filo de su espada.

Mientras tanto, Reginar se aproximaba a la ahora despoblada posición del guerrero y el resto de sus compañeros mantenían viva la lucha – Cubre esta entrada…,  sugirió al montaraz al ver como Alétheia lidiaba con otro de los sirvientes de Razmir mientras a sus espaldas se acercaba otro más, aunque éste con un atuendo diferente… - EH, TÚ…. SI ESTÁS AL MANDO DE ESTAS SUCIAS RATAS… TE RECOMIENDO QUE SAQUES A TUS HOMBRES DE AQUÍ… O TE JURO QUE MORIREIS TODOS…, gritó amenazante hacía el sacerdote. 

- Tiradas (5)

Notas de juego

Ataque Poderoso Nº6: 10 (Tirada) + 8 (Ataque) +1(Dote) +1(Mágica) - 1 (Atq.Poderoso) = 19 (éxito)
Daño Nº6: 5 (Tirada) + 6 (FUE) +1(Mágica) + 2 (Atq.Poderoso 2manos) = 14 (Muerto)

Hendura Ataque Poderoso Nº7: 19 (Tirada) + 8 (Ataque) +1(Dote) +1(Mágica) - 1 (Atq.Poderoso) = 28(critico)
Confirmación Crítico:
 11 (Tirada) + 8 (Ataque) +1(Dote) +1(Mágica) - 1 (Atq.Poderoso) = 20 (confimado)
Daño Crítico Nº7:
19 (Tirada) + 18 (FUE,Mágico,AtqPoderoso x2) = 37(Muerto)

Movimiento: Paso de 5' a la derecha

* Activo esquiva sobre sacerdote

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25/07/2016, 20:09
Tanyl Argenthor

La elfa exploradora y su fiel lobo hacían una perfecta pareja a la hora de matar. Puede ser que el jóven hechicero aún no tuviese tanto poder con su magia como aquellos guerreros con sus armas, pero también podría hacer algo de daño.

Volvio a decir las palabras que activaban la varita que portaba en la mano, y dos proyecctiles salieron de esta para impactar en el único enemigo cercano que quedaba en pie.

- Tiradas (2)

Notas de juego

daño: 7 PG  (Acólito 2)

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25/07/2016, 20:53
Sacerdote de Razmir

La sangre de los cultistas de la orden del Dios Viviente empapaba las ennegrecidas maderas que formaban el suelo del Regalo del Bosque. La colección de cuerpos alrededor de los enviados de Kassen daba una muestra muy veraz de las habilidades, capacidad y eficacia de los mismos. Desde que llegaran a Tamran, hacía tan sólo siete días, importantes miembros de la orden habían pasado a mejor vida, entre ellos el temido Krant, quien hasta su muerte había tratado de hacer la vida imposible a los compañeros hasta el punto de estar casi a punto de matar a Rhylen en uno de los combates que tuvieron lugar en el patio del templo. La sed de vidas del Dios Viviente no parecía saciarse nunca, pues incluso con el templo siendo atacado por los rebeldes sus líderes se obcecaban en enviar a la muerte a más de sus miembros. Pero la fe era tan fuerte incluso entre los acólitos que a pesar de ver como sus camaradas caían destrozados por los cortes del espadón de Rhylen, ensartados por los flechazos de Hostawen o despedazados entre las fauces de Rakna, éstos seguían presionando.

¡Zorra apestosa! - El grito con el cual llamaban la atención a Hostawen fue el preludio de una estocada certera dirigida a la cabeza de la elfa. ¡RENDÍOS AL PODER DEL DIOS VIVIENTEEE! - Gracias a los reflejos propios de su raza y al duro entrenamiento al que había sido sometida por Arnama Lastrid la muchacha pudo dejar en un molesto rasguño lo que podría haber sido una herida fatal. El filo de la espada rasgó la sien de la elfa dejando un fino rastro de sangre a su paso.

El grito con que el acólito trataba de insuflar fuerzas a sus compañeros sobresalió por encima de los ruidos propios del combate. Aquello que podía parecer un acto de incondicional compañerismo ocultaba algo muy propio entre los miembros de la orden: el deseo por sobresalir ante la mirada de los sacerdotes. Los heraldos, que aunque parecían poseer un puesto privilegiado en el escalafón estaban muy lejos de estar libres de las presiones de sus superiores, aprovecharon la fervorosa muestra de valor del acólito para secundarla con otro grito aún mayor y emprender una serie de ataques coordinados sobre la figura de Alétheia. Las cuchilladas volaban a su alrededor tanto por parte de uno de los heraldos recién incorporados a la lucha, el cual ya mostraba ensartada en su cuerpo una flecha con las plumas con que Hostawen solía adornar sus proyectiles, y por parte de aquel que había resistido el intento de Alétheia de echarlo al suelo.

No...no tenéis nada que hacer perra pelirroja. Razmir está más cerca de nosotros que lo que estará cualquiera de vuestros estúpidos dioses. - Dejó escapar entre dientes una vez hubo recuperado el control sobre sí mismo tras el desmoralizante conjuro de Alétheia. ¡RAZMIR PREVALECERÁ!

Distante pero no ajeno a lo que sucedía a su alrededor, Elmorn observaba como se desarrollaba el combate. La situación se había complicado mucho más de lo que Egarthis esperaba en un principio pero aquello, como era lógico, era algo que debía guardarse para sí mismo ya que, de compartirlo con alguno de sus compañeros, sería como cavar su propia tumba. Las palabras de Rhylen sacaron al sacerdote de sus pensamientos de forma inmediata. ¿Recomiendas? - Una malvada sonrisa cruzó su boca. ¡No soy quien está al mando, aunque pronto lo conocerás! - El sacerdote no se detuvo para contestar al guerrero, en vez de ello caminó con paso tranquilo hasta el centro del salón y apuntó a aquel que daba muestras de poseer poderes arcanos que podrían desestabilizar más aún el combate. Sin embargo, de forma inexplicable, pues Elmorn siempre se había considerado un gran especialista en el tiro con ballesta, erró su disparo de forma estrepitosa llegando a pasar el virote por encima de la cabeza de Hostawen y de Tanyl clavándose al final en una viga del techo.

Otro grito proveniente de la zona de la puerta obligó a muchos a volver su atención a aquel lugar. Sus miradas se encontraron con la figura de Réginar, doblado sobre sí mismo y echando ambas manos alrededor del vientre. A su lado, uno de los hombres del templo que ya se encontraba recuperado de las heridas infligidas por Rhylen se mostraba exultante. Mostrando una amplia sonrisa ante su enemigo y todos sus aliados, Klimsen había hecho caso omiso a la amenaza de Rhylen tan pronto el veterano guerrero se alejó unos pasos para apoyar a Alétheia. Réginar acababa de sufrir en sus propias carnes la frustración y el odio del acólito destinado en un primer momento al anciano que le había hecho retroceder.

- Tiradas (8)

Notas de juego

Acólito 2: ataca a Hostawen - 4 pg

Heraldo 8: carga 35' y ataca a Alétheia - fallo.  (-2 CA)

Heraldo 4: Movimiento5' y ataca a Alétheia flanqueada - fallo.

Sacerdote 9: movimiento 30' y dispara a Tanyl - fallo.

Acólito 5: ataca a Réginar - crítico -11 pg


Acólitos:

CA 15 (Toque 10, desprevenido 15). Llevan escudos.

Heraldos:

CA 19 (Toque 13, desprevenido 16). Llevan escudos. El bonificador de esquiva, si no se indica otra cosa, va hacia el último que les ha atacado.

Sacerdotes:

CA 21 (Toque 14, desprevenido 17). Llevan escudos. El bonificador de esquiva, si no se indica otra cosa, va hacia el último que les ha atacado.


Estados

Ini. NOMBRE PG Efectos no permanentes
- Rhylen Carsson 37/42 Escudo (+4 CA) (20 asaltos)
Escudado con Alétheia
- Hostawen 27/31  
-  Tanyl Argenthor 26/26 Escudo (+4 CA)
- Rakna 31/34  
13 Acólito (2) 6/13  
13 Acólito (5) 10/13  
13 Heraldos  (4) 25/25  
13 Heraldos  (8) 19/25 -2 CA por carga
10 Alétheia 39/44

Arma mágica

Escudada con Rhylen

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25/07/2016, 23:00
Togo "El Niño" Overhill
Sólo para el director

Las sospechas de Togo se confirmaron nada más girar la esquina. A través de las ventanas y la puerta el pequeño pudo observar cómo los aventureros de Kassen resistían en El regalo del Bosque el sincronizado ataque que casi una docena de Razmitas entre acólitos, sacerdotes y Heraldos.

Togo, aprovechando la invisibilidad recién adquirida gracias al aceite mágico, se dirigió directo hacia la puerta con la intención de llegar lo antes posible hasta Hostawen y dejarle el tan preciado arco que acaba de sustraer de la armería del templo y que a duras penas podía cargar a su espalda.

Notas de juego

Muevo todo hasta colarme por la puerta todo lo que pueda.... Dime hasta dónde llego  por si digo algo.

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26/07/2016, 06:39
Sacerdote de Razmir

La sangre de los cultistas de la orden del Dios Viviente empapaba las ennegrecidas maderas que formaban el suelo del Regalo del Bosque. La colección de cuerpos alrededor de los enviados de Kassen daba una muestra muy veraz de las habilidades, capacidad y eficacia de los mismos. Desde que llegaran a Tamran, hacía tan sólo siete días, importantes miembros de la orden habían pasado a mejor vida, entre ellos el temido Krant, quien hasta su muerte había tratado de hacer la vida imposible a los compañeros hasta el punto de estar casi a punto de matar a Rhylen en uno de los combates que tuvieron lugar en el patio del templo. La sed de vidas del Dios Viviente no parecía saciarse nunca, pues incluso con el templo siendo atacado por los rebeldes sus líderes se obcecaban en enviar a la muerte a más de sus miembros. Pero la fe era tan fuerte incluso entre los acólitos que a pesar de ver como sus camaradas caían destrozados por los cortes del espadón de Rhylen, ensartados por los flechazos de Hostawen o despedazados entre las fauces de Rakna, éstos seguían presionando.

¡Zorra apestosa! - El grito con el cual llamaban la atención a Hostawen fue el preludio de una estocada certera dirigida a la cabeza de la elfa. ¡RENDÍOS AL PODER DEL DIOS VIVIENTEEE! - Gracias a los reflejos propios de su raza y al duro entrenamiento al que había sido sometida por Arnama Lastrid la muchacha pudo dejar en un molesto rasguño lo que podría haber sido una herida fatal. El filo de la espada rasgó la sien de la elfa dejando un fino rastro de sangre a su paso.

El grito con que el acólito trataba de insuflar fuerzas a sus compañeros sobresalió por encima de los ruidos propios del combate. Aquello que podía parecer un acto de incondicional compañerismo ocultaba algo muy propio entre los miembros de la orden: el deseo por sobresalir ante la mirada de los sacerdotes. Los heraldos, que aunque parecían poseer un puesto privilegiado en el escalafón estaban muy lejos de estar libres de las presiones de sus superiores, aprovecharon la fervorosa muestra de valor del acólito para secundarla con otro grito aún mayor y emprender una serie de ataques coordinados sobre la figura de Alétheia. Las cuchilladas volaban a su alrededor tanto por parte de uno de los heraldos recién incorporados a la lucha, el cual ya mostraba ensartada en su cuerpo una flecha con las plumas con que Hostawen solía adornar sus proyectiles, y por parte de aquel que había resistido el intento de Alétheia de echarlo al suelo.

No...no tenéis nada que hacer perra pelirroja. Razmir está más cerca de nosotros que lo que estará cualquiera de vuestros estúpidos dioses. - Dejó escapar entre dientes una vez hubo recuperado el control sobre sí mismo tras el desmoralizante conjuro de Alétheia. ¡RAZMIR PREVALECERÁ!

Distante pero no ajeno a lo que sucedía a su alrededor, Elmorn observaba como se desarrollaba el combate. La situación se había complicado mucho más de lo que Egarthis esperaba en un principio pero aquello, como era lógico, era algo que debía guardarse para sí mismo ya que, de compartirlo con alguno de sus compañeros, sería como cavar su propia tumba. Las palabras de Rhylen sacaron al sacerdote de sus pensamientos de forma inmediata. ¿Recomiendas? - Una malvada sonrisa cruzó su boca. ¡No soy quien está al mando, aunque pronto lo conocerás! - El sacerdote no se detuvo para contestar al guerrero, en vez de ello caminó con paso tranquilo hasta el centro del salón y apuntó a aquel que daba muestras de poseer poderes arcanos que podrían desestabilizar más aún el combate. Sin embargo, de forma inexplicable, pues Elmorn siempre se había considerado un gran especialista en el tiro con ballesta, erró su disparo de forma estrepitosa llegando a pasar el virote por encima de la cabeza de Hostawen y de Tanyl clavándose al final en una viga del techo.

Otro grito proveniente de la zona de la puerta obligó a muchos a volver su atención a aquel lugar. Sus miradas se encontraron con la figura de Réginar, doblado sobre sí mismo y echando ambas manos alrededor del vientre. A su lado, uno de los hombres del templo que ya se encontraba recuperado de las heridas infligidas por Rhylen se mostraba exultante. Mostrando una amplia sonrisa ante su enemigo y todos sus aliados, Klimsen había hecho caso omiso a la amenaza de Rhylen tan pronto el veterano guerrero se alejó unos pasos para apoyar a Alétheia. Réginar acababa de sufrir en sus propias carnes la frustración y el odio del acólito destinado en un primer momento al anciano que le había hecho retroceder.

Togo veía como estocadas, gritos y amenazas se sucedían a su alrededor. Una vez cruzada la puerta de la taberna el mediano se vio obligado a pegarse a la pared más cercana para evitar se atropellado por alguno de los contendientes que, ajenos a su presencia, se movían a su alrededor sin un patrón fijo. Por segunda vez en aquella inquieta noche el pequeño Togo se encontraba metido en lo más candente de una situación desesperada permaneciendo ajeno a la vista de todos los presentes, algo que hasta ahora había resultado muy ventajoso para él.

Notas de juego

Te he colocado en el sitio en que sería más lógico que Togo se situase dado lo congestionado que está la entrada.

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26/07/2016, 07:03
Togo "El Niño" Overhill

TURNO 3

Togo observó horrorizado la situación. sangre y más sangre manaba aquí y allá sin distinguir amigo o enemigo. El mediano se armó de valor y provechó la seguridad que le daba ser invisible para colar su ágil y diminuto cuerpo por detrás de los sacerdotes que luchaban contra Alé y Rhylen. Rápidamente avanzó por el centro del salón hasta llegar a la posición de Hostawen y allí, junto a la elfa dejó caer su preciado arco.  

Notas de juego

casilla oblicua a la derecha y seis al frente. Le dejo caer el arco como acción gratuita.

¿Quienes son los barbudos de la izquierda? ¿ Por dónde están intentando entrar los que la parte de atrás?

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26/07/2016, 07:41
Togo "El Niño" Overhill

De repente y como por arte de magia, el preciado arco de Hostawen apareció al lado de la Elfa. Eso sólo podía significar una cosa...Togo no podía andar muy lejos.

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26/07/2016, 08:31
Alétheia

Las falacias que escupían por la boca los seguidores del falso dios Razmir no tenían parangón. Alé comenzaba a sentir la ira creciendo en su interior. Un odio que la afable Pitonisa pocas veces sentía.

- Quizá Razmir prevalezca pero...¡tú no!- A pesar de amenazar a aquel al que había tratado de hechizar con sus conjuros, Alétheia veía con preocupación la cantidad de monjes que se arremolinaban en torno a ella. Aunque no era muy ducha en combate consiguió zafarse de los ataques sobre todo gracias a la excelente armadura obtenida en la cripta de Kassen.

Gracias, oh Venerable Débil, por otorgarme tus sagrados regalos.

Uno de los heraldos, con una flecha clavada de su amiga Hostawen en el costado, se había lanzado impetuoso contra ella, no dando más que sobre su escudo. Ayudándose de nuevo de su corpulencia lo apartó de un empujón para, inmediatamente, estamparle la maza de Sigmund justo donde estaba la flecha, haciéndola saltar en astillas. Pudo sentir también como algo más se fracturaba, posiblemente las costillas flotantes. Se apartó un paso para defenderse de las posibles represalias y clavó su ceñuda mirada en el Sr. Carsson. Ahora necesitaba más que nunca, al igual que ella le protegía a él, la intervención del Paladín Del Débil.

- Tiradas (2)

Notas de juego

- Acción estándar: Ataque con maza vs heraldo 8. +3(AB)+3(FUE)+1(arma mágica)=+7. Éxito. Daño=+3(FUE)+1(mágica)+5(1d8)=9

- Acción gratuita: Paso de 5´ arriba.

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26/07/2016, 17:03
Rakna

TURNO 3

Rakna saltó como un resorte intentando interponerse entre la bípeda raquítica y el acólito que se erigía sobre la mesa. Las tablas dificultaban morder con precisión y el sitio angosto impedía el movimiento del enorme lobo que luchaba por girar y comerse al bastardo que había hecho sangrar a Hostawen. 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Ataque: 4 (Tirada) +3 (Base) - 1 (tamaño) + 6 (FUE) +1 (Soltura)= 13 (fallo)
Daño: (Tirada) + 6 (FUE) =
Derribo= 

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26/07/2016, 17:07
Hostawen

La elfa vio su arco, justo en el momento en el que el combate se ponía tenso. A lo lejos podía ver a Alétheia acosada por dos hombres y Rhylen ya comenzaba a sudar, quien sabía cuanto tiempo podría aguantar ese ritmo. La elfa fue a coger su arco cuando un acólito fue hacia él, sólo sus rápidos reflejos evitaron perder el ojo y que todo acabase en un corte en el pómulo. -¡Tanyl, encárgate de él!- imploró la elfa a su compañero. Rakna por su lado intentaba abatir al rival, pero el terreno le dificultaba llegar hasta él. Los ojos de la exploradora ya escrutaban el combate y veía como Reginar caía con un feo corte en el estómago. -Tanyyyyyl...- se desesperaba de impotencia la elfa. podía ver al sacerdote en medio de la estancia mientras una saeta sobrevolaba su cabeza y la del semielfo. -Te enseñaré yo a usar eso...-

Notas de juego

Retraso acción a después de Tanyl. Mata al acólito (2).

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26/07/2016, 17:21
Hostawen
Sólo para el director

Notas de juego

Donde está exactamente el arco? Puedo moverme y cogerlo sin estar amenazado por acólito (2)?

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26/07/2016, 17:45
Rhylen Carsson

La respuesta del sacerdote no fue la que Rhylen esperaba, y ni mucho menos su acción posterior. Fuese por temor a enfrentarse al guerrero o por ver a Hostawen como un rival más fácil de batir, el caso es que el sacerdote hizo caso omiso de las advertencias de Rhylen y se centró en la joven elfa. – Maldito bastardo…

Por suerte para Alétheia aquella opción permitió que el veterano guerrero contemplase la delicada situación que tenía entre manos. La pitonisa se enfrentaba con coraje a dos de aquellos acólitos por la integridad y la grandeza del Débil.

Rhylen y Alétheia ya habían compartido muchos combates juntos, fue tan sólo una mirada de ésta la que le hizo saber al instante que pedía su ayuda. - ¡Voyyy!, gritó sin dudarlo.

Utilizando su espadón como escudo improvisado, Rhylen consiguió avanzar hasta la posición de su fiel amiga. De nuevo se encontraban luchando codo con codo contra las corrompidas fuerzas de Razmir… la victoria estaba más cerca.

- ¡¡¡DEJALA EN PAZ, ESCORIA!!, exclamó a la vez que atravesaba la garganta del acólito más cercano a Alétheia. -¡¡MUERE!!, añadió mientras extraía nuevamente su espadón. Sin dar tiempo siquiera a que el cadáver cayese al suelo, Rhylen lanzó otro rápido espadazo a otro de los sirvientes de Razmir que alcanzó el muslo de su pierna de apoyo. – Y tú… reza lo que sepas… ¡Y PREPARATE A MORIR!

- Tiradas (5)

Notas de juego

Movimiento: Paso de 10' hacia arriba

Ataque Nº8: 20 (Tirada) + 8 (Ataque) +1(Dote) +1(Mágica) = 30 (crítico no confirmado)
Daño Nº8: 7(Tirada) + 6 (FUE) +1(Mágica) = 14 (Muerto)

Hendedura Ataque Nº4: 16 (Tirada) + 8 (Ataque) +1(Dote) +1(Mágica) = 26 (exito)
Daño Hendedura Nº4: 10(Tirada) + 6 (FUE) +1(Mágica) = -17PG

* Activo esquiva sobre Acolito nº 4

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26/07/2016, 18:42
Tanyl Argenthor

Mira que era mandona la elfa!

El hechicero fue consciente del ataque que su escudo mágico había conseguido rechazar. Él era el blanco del que le parecía a simple vista más poderoso de aquel grupo de papanatas. Aunque sabía que tendría que lidiar con él, también era consciente de que no podría aniquilarle de un solo golpe.

Sin embargo, con un poco de suerte, el que tenía delante caería. Para ende parecería como si hubiese seguido las órdenes de la belleza de ojos almendrados. Dos por uno.

- Tiradas (2)

Notas de juego

PMs varita a Acólito 2 : daño 5 PG

No ha habido suerte :/

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26/07/2016, 19:54
Hostawen

Los proyectiles de la varita de Tanyl salieron disparado golpeando el pecho del acólito. Inesperadamente resistía, parecían no surtir el efecto deseado. -Hmmmpf...- protestó la elfa al ver como el acólito se recomponía para ir a por la exploradora. De un giro se desplazó hacia la izquierda, cogiendo una flecha y disparando rápidamente. -Las prisas son malas consejeras...- y la flecha fue directa a la piedra de la chimenea, rompiéndose en mil pedazos. La segunda flecha no se la tomaría tan a la ligera -Zorra, puede... ¿apestosa?- dijo soltando la flecha -Eso sí que no. Acostumbro a un aseo riguroso.- terminó diciendo, para cuando terminó la frase, la flecha sobresalía de la cabeza del acólito que caía al suelo sin vida. Sus ojos fueron a parar al sacerdote. -Rakna, atento...susurraba a su fiel amigo que se encontraba a su lado*. Sus ojos volvieron a su preciado arco. El arco que nunca debió haber dejado en el templo. -Alabados sean los dioses...- suspiró con una sonrisa. -Sacerdote, aún estáis a tiempo de rendíos.- decía altiva. -No queremos que la muerte os pille por sorpresa.- proseguía en su discurso con una sonrisa. -Ya no os queda nada por lo que luchar... Ni nadie que os pueda salvar.- terminó diciendo.

- Tiradas (5)

Notas de juego

Paso de 5' a izquierda

Ataque Acolito Nº2: 3 (Tirada) + 7 (Ataque) +1 (Dote)= 11(Fallo)
Ataque Acolito Nº2: 12 (Tirada) + 7 (Ataque) = 20(acierto), muerto automáticamente
Daño Nº2: 1(Tirada) + 1 (FUE) +1 (Dote)= 3(Muerto)

*Si puede ser pon a Rakna en la casilla derecha pegado a Hostawen.
-6 flechas

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26/07/2016, 21:22
Director

Notas de juego

Nota sobre los barbudos:

Los barbudos que hay a la izquierda de la sala visten con delantales que les llegan hasta las rodillas en los cuales se observan numerosas manchas de sangre. El hecho de que ninguno de tus compañeros repare en ellos te hace suponer que son aliados de Réginar. Aunque no los conoces, sería lógico pensar que se trata de hombres que han estado haciéndose cargo de los heridos que han sido trasladados hasta allí procedentes de los disturbios que rodean al templo.

Nota sobre la puerta trasera:

La puerta trasera está siendo bloqueada por un hombre vestido con ropajes oscuros, muy al uso de los que llevaban los rebeldes que estaban atacando al templo. Debe ser algún compañero de Réginar.

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26/07/2016, 21:25
Director

Notas de juego

Nota sobre el arco:

El arco está situado a tus pies. Sí, haberte agachado a recogerlo estando amenazada por un contrincante te hubiese ocasionado un AdO.

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26/07/2016, 21:27
Egarthis

Cada acometida de los sirvientes de Razmir era contestada por otra de sentido contrario y mayor potencia. A los pocos segundos de haberse iniciado el asalto del Regalo del Bosque los cuerpos que adornaban el suelo sobrepasaban en gran número a los muertos que la orden había sufrido durante los años que llevaba instalada en Tamran, y no es que hubiesen fallecido pocos debido principalmente a los severos castigos infligidos por los miembros de mayor rango. Pero los vientos habían cambiado de dirección y ahora, heraldos y sacerdotes, se enfrentaban a un enemigo que no hacía distinciones. Dos hombres más se habían sumado al cómputo de bajas del bando Razmirita tras los ataques combinados de las parejas formadas por Alétheia y Rhylen y por Hostawen y Tanyl. Pocos quedaban en pie: un acólito que se batía en combate singular con Réginar;  un heraldo que se resistía a dejarse vencer e incluso sorprendía a Rhylen con algún que otro golpe bien dirigido; y un sacerdote cuya reacción ante la inminente derrota parecía ser desaparecer ante la vista de todos haciendo uso de una poción que guardaba en su cinto.

Sin embargo, aquel episodio estaba lejos de acabar aún. Una figura de amplios hombros, mirada altiva y andar arrogante se acercó hasta la puerta como si nada estuviese pasando. Se tomó un segundo para observar el triste espectáculo que se daba en el salón antes de hablar.

¡Así que resulta que los que tantos dolores de cabeza nos han dado no son más que parte de tu triste cuadrilla de desgraciados! - Exclamó con falsa sorpresa Egarthis al distinguir a Rhylen y Alétheia, los dos miembros de los enviados de Kassen más cercanos a él. - Me esperaba algo más. Vuestras tristes muertes no compensarán ni el paseo hasta aquí. - Su mano se aferró a un medallón que pendía de una cadena asida a la solapa de su armadura. ¡Aquí acaba vuestro triste intento de acabar con lo que no tiene fin!

Dio un paso adelante. - ¡RAZMIR, MUESTRA A ESTOS INFIELES EL VERDADERO CAMINO HACIA TU GLORIA! - Un intenso brillo rojizo se filtró entre los dedos que rodeaban el medallón haciéndose cada vez más intenso. De pronto, surgido de una llamarada que se elevó desde el suelo a pocos pies por delante de él, un enorme sabueso de mirada demoníaca y ondulantes crines llameantes hizo su aparición en la taberna. Su reacción no se hizo esperar. De sus terroríficas fauces brotó una gran llama que ocultó por completo al Paladín del Débil y a su Pitonisa.

 

- Tiradas (10)

Notas de juego

 

Heraldo 4: AdO a Rhylen por movimiento 10'. -9pg (4 pg Rhylen y 5pg Alétheia)

Heraldo 4: ataca a Rhylen - fallo.

Sacerdote 9: bebe poción de invisibilidad y desaparece.

Acólito 5: ataca a Réginar -8 pg

Réginar: ataca a acólito 5 - fallo

Egarthis: Movimiento hasta la puerta. Utilizar collar de Infierno (1d3 mastines ) = 1

Mastín infernal: Aliento de fuego. 9pg - Rhylen y Alétheia: CD13 de reflejos para mitad de daño.


Acólitos:

CA 15 (Toque 10, desprevenido 15). Llevan escudos.

Heraldos:

CA 19 (Toque 13, desprevenido 16). Llevan escudos. El bonificador de esquiva, si no se indica otra cosa, va hacia el último que les ha atacado.

Sacerdotes:

CA 21 (Toque 14, desprevenido 17). Llevan escudos. El bonificador de esquiva, si no se indica otra cosa, va hacia el último que les ha atacado.

Egarthis:

CA 17 (Toque 13, desprevenido 16). 

Mastín infernal:

CA 16 (Toque 11, desprevenido 15). 


Estados

Ini. NOMBRE PG Efectos no permanentes
- Rhylen Carsson 33/42 Escudo (+4 CA) (20 asaltos)
Escudado con Alétheia
- Hostawen 27/31  
-  Tanyl Argenthor 26/26 Escudo (+4 CA)
- Rakna 31/34  
13 Acólito (5) 10/13  
13 Heraldos  (4) 8/25  
13 40/40 Invisible
13 -/-  
- 22/22  
10 Alétheia 34/44

Arma mágica

Escudada con Rhylen

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27/07/2016, 07:10
Alétheia

Las falacias que escupían por la boca los seguidores del falso dios Razmir no tenían parangón. Alé comenzaba a sentir la ira creciendo en su interior. Un odio que la afable Pitonisa pocas veces sentía.

- Quizá Razmir prevalezca pero...¡tú no!- A pesar de amenazar a aquel al que había tratado de hechizar con sus conjuros, Alétheia veía con preocupación la cantidad de monjes que se arremolinaban en torno a ella. Aunque no era muy ducha en combate consiguió zafarse de los ataques sobre todo gracias a la excelente armadura obtenida en la cripta de Kassen.

Gracias, oh Venerable Débil, por otorgarme tus sagrados regalos.

Uno de los heraldos, con una flecha clavada de su amiga Hostawen en el costado, se había lanzado impetuoso contra ella, no dando más que sobre su escudo. Ayudándose de nuevo de su corpulencia lo apartó de un empujón para, inmediatamente, estamparle la maza de Sigmund justo donde estaba la flecha, haciéndola saltar en astillas. Pudo sentir también como algo más se fracturaba, posiblemente las costillas flotantes. Se apartó un paso para defenderse de las posibles represalias y clavó su ceñuda mirada en el Sr. Carsson. Ahora necesitaba más que nunca, al igual que ella le protegía a él, la intervención del Paladín Del Débil.