Boon sacó el naipe del cinturón, y lo arrojó al mismo montón que el resto. -Donde ha capitán, no manda marinero -dijo, dejando de apuntar a Dos Espadas, y notando la tensión en su espalda y sus hombros, aun sin hacerles mucho caso.
-No saldrá ni una palabra mia fuera de este círculo, capitán, no ha de preocuparse.
Bill acarició los naipes y poso su mano sobre ellos como si de unos objetos de enorme valor sentimental se trataran, como su tesoro.
Al fin... Cuántos años han tenido que pasar para volverlos a reunir... Murmuraba arrodillado frente a ellos.
Lentamente y con mucho cuidado cogió los naipes y los puso boca abajo en un orden determinado, formando un cuadrado. Rapidamente todos se fijaron en un detalle importante que no había visto antes. Las líneas del dibujo de la parte trasera de cada carta coincidían con las de los naipes contiguos allí donde se tocaban.
Bill sacó del bolsillo de su pecho una caja que tenía el mismo tamaño que el cuadrado que formaban los 4 naipes, y al abrirla resulto tener dentro un cristal también del mismo tamaño. Lo sujetó en una mano y preguntó al resto.
¿Alguien puede facilitarme un pañuelo blanco?
Boon introdujo los dedos índice y pulgar dentro de su casaca, por un lado del escote, y desenroscó de uno de los tirantes de su camiseta interior un pañuelo blanco, inmaculado y tibio. No lo dejó caer, sino que lo acercó hasta el cuadrado de naipes que Dos Espadas había preparado a sus pies: -Aquí tienes.
Bill lanzó una mirada picarona a Boon y recogió el pañuelo. Merci mademoiselle.
Después pusó el pañuelo y sobre este montó de nuevo el cuadro de naipes de manera que tapara el pañuelo por completo. Después colocó el cuadrado de cristal sobre las cartas y se levantó y le dió un pisotón con fuerza. Cuando retiró el pie, pudieron apreciar como los naipes comenzaban a consumirse gracias a algún liquido que habría en el interior del cristal. El dibujo de los naipes fue poco a poco borrandose, salvo algunos trazos que se quedaron marcados en el pañuelo.
Esos trazos fueron dibujando el mapa del tesoro. Bill lo recogió y se lo lanzó a Will. La ruta a Azaila. Dijo sonriente.
Will atrapó entre sus manos el pañuelo con la ruta grabada en él y lo observó con cautela, le había sorprendido el mecanismo utilizado para poner a buen recaudo el secreto, sin embargo estaba seguro que no era la única sorpresa que escondía la ruta ni su destino.
El capitán le tendió la tela al joven timonel, sin duda él tendría más posibilidades de saber hacia donde se dirigían y necesitaba saber las dificultades que podían encontrarse en el camino. - Échale un vistazo a fondo a la ruta, distancia y tiempo que podremos tardar y cuan peligrosa es la ruta. Necesitaremos aprovisionarnos en puerto y hacer algunas reparaciones y nuevas incorporaciones, de manera que dime que puertos seguros se encuentran cerca de nuestra posición o en ruta.
Luego volvió a girarse para observar a Bill, estaba claro que habían llegado a un acuerdo, pero también era claro que no se fiaban el uno del otro y quizás eso fuera lo necesario para mantener con vida a ambos. - Seguro que sabéis más de esa ruta que nosotros y que tendréis a bien compartir vuestro conocimiento con nosotros para conseguir llegar a buen puerto y salir todos con el botín que nos corresponde.
¿Conozco algo sobre esa ruta?, ¿reconozco alguno de los puntos marcados en ésta?
Sam observa ceñudo el proceso de reconstrucción del mapa, nunca se le habría ocurrido algo semejante al ver el cristal y como lo utiliza, sin duda era ingenioso. Recogio su naipe, ya sin utilidad , pero que seria un bonito recuerdo. Después miro al capitán que le tendió el mapa , echándole un vistazo por encima.
De acuerdo capitán.., iré a estudiarlo más detenidamente.
Tras eso se dirigió hacia una de las mesas del camarote y desplego las herramientas de cartografia que guardaba en su saco de tela para hacer su trabajo.
Bill metió su mano al bolsillo y sacó otro pergamino que desdobló y entregó a Will. Este es un viejo mapa que poseo desde hace muchos años.
Según lo que las cartas nos han mostrado la isla de Azaila se encuentra varias millas al sur de la Española y en diagonal a Jamaica. Quizá el mejor puerto para reponer esta nave sea uno de Jamaica. Port Royal.
En el mapa de Bill se ve esto:
William toma el mapa y lo observa unos instantes. Luego lo pasa al joven Sam. Una nueva aventura tomensaba. Tal vez la ultima, tal vez la que los hiciera ricos.
Capitán! Hacia Port Royal?
En una anterior partida de piratas, creé una señora del vudú que a todos (y a mi la primera) nos pareció fantástica. Te mando el link con la partida, el pj se llama Ekao.
Como la partida se terminó bruscamente por indisponibilidad del master, la historia se quedó estancada, y pienso que el ir a Port Royal sería una idea estupenda, pues ella solía acudir alli. Podríamos incluirla en la tripulación... esto supondría el que yo llevase dos pjs, y me agradaría mucho (aunque si no te mola la idea, pues ajo y agua). Pero si te pareciera una idea guay... en fin, nos ibamos a divertir mogollón.
Yo te paso el link, y tú decides :)
Ok, me parece fantastica la idea. Te voy a dejar que hagas la presentación del personaje cuando el grupo llegue a Port Royal, la pones en privado tal y como quieras que sea, donde sucede y todo eso. Y yo luego se la pongo a los demás cuando lleguen.
Ya tienes el pj y todo.
Gracias por la idea, un saludico!
Jefe, que no escribo na porque estoy de examenes. La semana que viene termino, y arranco con lo de Ekao, que tengo unas ganas ya...
Un saludico!