Los rumores de los que se fueron enterando por el camino hacia su destino informaron a la guerrera que ante sí tenían a una casa, y por ende a sus integrantes, que no se paraba a mirar por dónde pasaba ni a quién pisaba en su ascenso. Deberían ser muy cuidadosos con las palabras que intercambiaban, no debían decir ni hacer nada que les hiciera pensar que su posición estaba en peligro.
La voz de la mediana irrumpió en las cábalas de la semielfa que se inclinó un poco para oirla mejor, se quedó un momento pensando en la propuesta -Si no la descubren puede enterarse de algo interesante- y al fin volvió a inclinarse ligeramente para contestarle también en un susurro.
- Con preguntas discretas y preocupación sincera por el bienestar de los nobles de esta ciudad. - contestó a la primera pregunta - No creo que todos estén distraídos con nuestra visita pues habrá mas gente que la que esté con nosotros, sobretodo criados, pero si crees que puedes entrar y salir sin que te vean, no deberían vernos llegar juntos.
En espera de lo que dijese su 'jefe', Xanaphia dejaba la decisión en sus manos y en el conocimiento de sus habilidades.
Khal y Red iniciaron la marcha y reuniendo todo tipo de información llegaron a a la propiedad del Lord Bruil.
Llamaron a la puerta solicitando hablar con el chambelán, para pedir audiencia con el Lord.
Al primer guardia o sirviente que aparece, le exclaman:
Señor pedimos audiencia al Lord Bruil, estamos investigando una serie de sucesos y desapariciones en la ciudad y quizás el Lord nos puede atender un breve momento.
Que piensas Khal, nos recibirán? Tras esperar la respuesta a la llamada.
- Os dejo seguir roleando -
Y como consejo de máster, que yo dejo libertad, pero también aclaro, os recomiendo ir por de frente, estais en una ciudad y como a Tisha la pillen, lo mismo se le acaba la partida. Esto no es un sandbox... así que si acabas en la cárcel o te matan, me temo que se acabará la partida para ella... yo ahí lo dejo XD
Una doncella abrió la puerta y pareció sentir curiosidad sobre el tema que tratabais, pero en vista de que preguntabais por el señor Bruil, no dudó ni un instante en ir a buscarlo.
Tras unos pocos minutos de espera, el Señor Bruil apareció frente a vosotros.
Buenos días, me ha dicho mi doncella que buscais información sobre las desapariciones. ¿En qué puedo ayudaros exactamente?
La guerrera continuó andando por un rato hasta que decidió sacar a colación el tema que tenía pendiente con la mediana, se colocó bien la armadura y los pertrechos, y comentó como si hablase del tiempo que hacía.
- Por cierto Tisha, esa animosidad que tienes con Red debería acabar por el bien de todos. Lo que ella quiso decir es que si hay un botín éste se ha de repartir entre todos y si alguien se queda con mas de lo que le toca, - se encogió de hombros ligeramente antes de continuar - para la próxima vez se quedará con menos y asunto resuelto. Creo que si habláis tranquilamente os daréis cuenta que todo tiene solución, que sólo hace falta confiar en los compañeros.
Esperaba que la mujer recapacitase y cambiase su actitud esquiva y desconfiada, la verdad es que durante el combate a la débil luz de la luna le pareció una buena compañera; pero para ser un buen grupo, una buena unidad, se tenían que fiar los unos de los otros.
Pues nada, me hallo a la espera de toma de decisiones por vuestra parte...
Tisha estaba esperando alguna indicación del elfo que ahora era su jefe, pero parecía muy callado y pensativo.
Alzó la vista de nuevo a Xanaphia cuando sacó a colación a la gran mujer pelirroja.
- Mira, yo no tengo nada en contra de nadie. Tan solo no me gusta que me impongan las normas de los demás porque les parezca a ellos las más correctas. Me parece bien que se reparta el botín equitativamente y estoy conforme. Lo que pasó en aquel bosque fue diferente. Cuando elegí las pertenencias del mediano caido, no habíamos acordado nada, ni eramos un grupo ni un equipo. No tenía que someterme a la ley de nadie por muy grande y enfadada que pareciese. Los acuerdos no son retroactivos, empiezan a contar desde que se hacen y no antes.
Ya hablaremos cuando estemos todos si quieres pero mi punto de vista está claro; lo del bosque no era botín común. Si me lo quereis descontar de los siguientes tesoros entonces no conteis conmigo para los repartos.
Pasando a un tema más urgente... Vais a llamar a la puerta o lo hago yo?
La mediana se estaba pensando lo de colarse dentro, pero primero tendría que averigüar las medidas de seguridad, no quería meterse a saco y terminar en la cárcel.
La guerrera escuhó las palabras de la mediana en silencio y no la interrumpió, a pesar de que le hubiese gustado hacerlo en un par de puntos.
- Ya lo hago yo. - contestó a su última pregunta y luego añadió unas pocas palabras antes de llamar a la puerta de la casa que era su destino - Si se mata a un grupo entre varios hay dos opciones, o cada uno se queda solo con lo que llevaba el individuo a quién mató o se reparte todo entre todos. Lo demás son excusas que no necesitabas pues lo que cogiste sólo te servía a tí.
Al acabar de hablar se encogió de hombros, ella lo veía muy claro: si hubiesen hablado tranquilamente, hubiesen llegado al mismo reparto. Sin dejar espacio para nada mas acercó su mano a la madera y picó, tres golpes fuertes y espaciados.
Me ha salido envío duplicado pero yo no lo veo, este es el que vale >_<
Pero de dónde demonios se sacaba la semielfa esas reglas? Estaba escrito en algún lugar a la entrada del bosque que ella no hubiese visto? Sea como fuera, las leyes no iban con ella y menos cuando se las imponían por las malas.
Aún asi, Tisha asintió a todo lo que dijo Xanaphia, no valía la pena seguir discutiendo ese tema, nunca llegarían a un acuerdo, sus modos de ver la vida parecían totalmente distintos.
Muy buenos días, dijo el joven Leiyraghón, ¿en qué puedo ayudarles? Preguntó al ver a las dos hermosas damas, y al elfo que las acompañaba.
Xanaphia hizo un repaso rápido del hombre que les abrió la puerta, después de esa mirada, y de elevar una ceja apreciativamente, le respondió con toda la corrección de la que era capaz.
- Buenos días tenga también. - contestó con una sonrisa afable - Nos han contratado para investigar la desaparición de un joven y, dado que ustedes son una de las grandes casas de la ciudad, queríamos saber su opinión al respecto. Nos gustaría hablar con el señor de la casa ¿es usted mismo o puede presentarnos?
El tono de su voz indicaba interés y respeto.
Tirada oculta
Motivo: Diplomacia
Tirada: 1d20
Resultado: 13(+5)=18