Partida Rol por web

Entre todos los señores de las Cinco Villas eligen a los cinco mejores soldados, van todos con placa frontal excepto un tal Nidorg que va con armadura completa. Partís dirección a Alhondra junto con un emisario de la dirigente de esta Villa para poner a vuestras ordenes a los cinco exploradores. Bordeáis el lago por la orilla oeste hasta llegar a vuestro destino, la nieve como siempre enlentece vuestros pasos lo que hace que pese a la relativa cercanía tardéis unas ocho horas en llegar. Os presentan al líder de los exploradores de Alhondra y justo en ese momento llega la noticia: el ejército enemigo se acerca, en unas siete horas estarán encima vuestra si finalmente se dirigen a Alhondra, por lo que la batalla será de noche... 

El mago estaba atento a las noticias. 

Llegarán de noche. Eso puede ser una ventaja o una desventaja. Pero no sé porqué, creo que esta vez nos perjudica. No me lo digáis, Maestre Za, nuestros enemigos ven en la noche tan bien como nosotros por el día, no es así? 

De noche. Lo cierto es que al elfo no le molestaba gracias a la visión de que disponía pero sabía que aquello podía ser un severo contratiempo para el resto.

Za, tal vez no te importe poner mi esfera en mi arco. Creo que así será más útil. Yo no consigo usarla.

Sidoc temía que sus enemigos pudiesen ver de noche.

Pues sería ilógico que pudiendo escoger el momento de la batalla elijan la noche si no es así. Esto es otra prueba de que quien les dirige es una mente inteligente.

-Es una buena pregunta... No estoy seguro de si la vista de los Gratar es especialmente buena en general, contestó Za Harvaya mientras se quitaba los guantes y se frotaba las manos y la cara para entrar en calor después del viaje por la nieve. -Me da que han elegido la noche más por nuestra debilidad que por su fortaleza. Es otra muestra de que son liderados por alguien con una inteligencia superior a la de los anfibios. Pero de cualquier modo, para nuestro objetivo de infiltrarnos nos beneficia que sea de noche.

El erudito recibió la esdera Thrae, la del Aire. La incrustó en el arco de Galand, y le devolvió el arma. -Te dobla el alcance. Eso unido a tu visión nocturna te da una ventaja.

Fuertes corrientes de aire empiezan a rodear a Galand en cuanto coge el arco imbuido por el poder de Thrae. Los semi-elfos que os acompañan lo miran con curiosidad.

Mientras tanto las Villas están siendo evacuadas y se dirigen hacia el Castillo Dineval.

El ejército sigue su camino al parecer hacia Alhondra.

Al poco de llegar vosotros a Alhondra anochece y véis a lo lejos como en el ejército enemigo empiezan a encender antorchas, en unas tres horas estarán encima vuestra.

El guerrero que va con vosotros, con armadura completa, se pronuncia: -Si están encendiendo antorchas no creo que vean muy bien en la noche, sin embargo nosotros los semi-elfos del Glaciar vemos bastante bien con la luz de la luna. Dice mientras mira al cielo.

Os fijáis en el firmamento y hay luna llena.

-Nidorg tiene razón. No tienen visión nocturna, lo de las antorchas lo confirma. El que debe preocuparnos es el dragón, dijo el erudito, debe preocuparnos y no sólo por su visión nocturna.

Za Harvaya pensó un momento en el mapa. El bosque, la villa. -Lo mejor sería adentrarnos en el bosque para intentar sorprender al enemigo cuando éste avance hacia Villa Alhondra, ¿no?

Alzó la vista al cielo para ver la luna llena. No creía en las señales divinas, pero la presencia de la luna le dio cierta confianza y calmó sus nervios. Meditó un segundo más, por si era relevante la información que iba a dar. No quería despistar a los guerreros dispuestos a la batalla, ni tampoco preocuparlos más de lo que ya estaban todos. -No esperemos que acampen, señores. No lo van a hacer. El orbe del mago les permite viajar sin comer ni descansar, sin limitaciones por necesidades físicas.

Cada vez tenía más claro que la única esperanza de vencer pasaba por acabar con el mago y arrebatarle el orbe carmesí.

Irinade coloco el orbe sobre su armadura, ejecutando las palabras de mando para fusionarse con la misma. No quería llamar la atención fusionándolo con la espada.

Escuchaba a sus compañeros, y veía según los movimientos del enemigo, que posiblemente el mago supiera de ellos y de sus intenciones. Si era una trampa, pronto lo sabrían. Lo que sí tenía claro era que vendería cara su vida.

Empezó a concentrarse en la batalla que se avecinaba, entrando en comunión con su dios, entono una plegaria pidiendo por ella y sus compañeros.

Si me escondo en el bosque puedo comenzar a dispararles y cuando vengan a ver qué pasa podemos hacer ataques desde los lados o algo así. Tampoco hay tiempo de grandes subterfugios. Pero debemos evitar que vengan enemigos en gran número, en ese caso habría que huir, tenemos que tener preparado un camino de huida para desaparecer rápidamente antes de que nos rodeen o bloqueen la posición y puedan cogernos.

Podré haceros invisibles, compañeros. Si descanso luego, podré recuperar parte de mi poder y así combatir con el orbe. Hay un poder que me permite crear sombras para ocultar mejor a los grupos de guerreros y exploradores. Vos, maestre Harvaya, podéis crear niebla, lo que puede complementar bien a las sombras, para permitir su huida. Podrán permanecer bien escondidos hasta el ataque sorpresa. Luego la movilidad será su mejor arma, por eso la niebla les ayudará a esconder la dirección de sus movimientos. Quizá podría preparar dos o más localizaciones con sombras para que se desplacen hasta ellas y así esconderse hasta un nuevo ataque. Irinade, Logen y Galand, invisibles, podrán acercarse al mago, eludiendo al dragón. Los exploradores y guerreros deberán dispersar las fuerzas enemigas, incluido el dragón. Yo, gracias a la invisibilidad, me concentraré mucho tiempo para poder lanzar un hechizo de rayo al mago en el momento que sea atacado. Sólo podré hacerlo una vez, así que será mejor que ataquemos todos a la vez. 

Logen se rascó su incipiente barba antes de hablar. - Estacas.- Comentó parco en palabras.- Una barricada vendría bien para tener una posición defensiva por si vienen demasiados de ellos. Además el obstáculo nos daría algo de tiempo para poder huir con seguridad. También podríamos sembrar la nieve con puntas afiladas de estacas. Retrasarán su avance considerablemente y evitará que nos persigan. - Logen eseraba que los exploradores que estaban con ellos le apoyasen e incluso con suerte encontrar algún experto en trampas entre ellos.

Siguiendo el ejemplo de Galand, Logen se dirigió al sabio con la misma petición. - Za, ¿crees que mi esfera nos sería más útil en mi hacha? ¿Podrías hacer lo mismo qu con el arco de Galand?

Mmmmm, estacas invisibles, eso podría ocasionar algunas bajas en el enemigo, para proteger a nuestros guerreros.
Los arqueros podrían darnos cobertura.
Galand, Logen y yo podríamos aproximarnos en estado de invisibilidad y acabar con el mago. Za, creo que necesitamos tu memoria prodigiosa para saber donde movernos una vez que hayan acampado.
Norig! Vosotros podrías actuar por un flanco y distraer al enemigo, utilizando las estacas invisibles en la huida, para atemorizar al enemigo. Aprovechando nosotros ese momento, siempre claro está que no nos esperen.

Za Harvaya insertó la esfera en el hacha de Logen. -Ahora tiene un poder considerable, de la Luz. Y te hará más rápido, comentó al entregarle el arma de vuelta.

-Lo de las estacas es una gran idea, nos ayudará también para la retirada...