Partida Rol por web

Con el rostro sombrio al escuchar la historia de Martinuk, Thorgrim correspondió con su historia, una historia que hasta ahora solo muestra a un enano debil en manos de los dioses:
Mi historia, no esta llena de heroicidades, no habla de honor ni ningún tipo de honra, sino todo lo contrario. Gasto tan solo 41 años y ya estaban preparando mi jubilación la noche de mi última batalla contra los gigantes de hielo; mi mujer ya embarazada de nuestro primer hijo propició el que se me quisiera relegar a las funciones de padre, y yo estaba contento con ello. un atisbo de felicidad asomó en sus labios en forma de sonrisa, en un rostro que estaba surcado por la tristeza. Tras una noche de cerveza y buena carne volví a mi casa con las mejillas mas sonrosadas que habia tenido en vida, en esos casos siempre cae uno redondo en la cama con un sueño mas profundo que el de un oso en ivernación, sin embargo no fue eso lo que ocurrio. Durante la noche una especie de pesadilla me atormentó, en ella veía a una figura gargantuesta robando la esencia vital a un ser amortajado sobre un altar, cuando desperté me encontraba en una de las grandes cuevas de hielo sosteniendo entre mis manos un hacha de puro hielo, que mas tardé descubrí que habia sido forjada por la mismisima diosa Auryl, quien iba a decirle a alaguien de los nuestros que los dioses verdaderamente existen. Ahora me encuentro con una deudad de gratitud con una tribu de feminas humanas, brujas, que han conseguido romper el lazo que me unia a esa diosa del frio. Por culpa de esto, de donde vengo no soy mas que un paria por haber abandonado a mi mujer en gesta engañado de pertenecer a algo superior que requeria mi atención mas que mi mujer y mi hijo. La mirada de Thorgrim comenzó a surcarse de lagrima, pero la gran fortaleza y rectitud de Thorgrim, adquirida en este arduo viaje, consiguió que no rompiera a llorar. Como puedes ver, ahí donde tu historia esta llena de honor y orgullo, la mia esta llena de vergüenza y deshonra, y no puedo vovler a mi casa hasta no haber zanjado mi deuda con el pueblo de Rashmen

Thorgal quedó consternado ant la noticia. Sintió el dolor de Zulema por la pérdida de su madre y preocupación por el desaparecido Ifer. Las cosas empeaban a complicarse.

Entiendo tu preocupación Zulema, pues nada hay más valioso en este mundo que una madre, la que te ha dado la vida.

Tanto Mara como yo te ayudaremos en tu busqueda y tienes mi palabra que la arrebataremos de las garras de esa peste de thayinos. Creo que,en este caso, lo mas prudente sería ir en busca de Khelben, pues durante el tiempo que he permanecido en la ciudad llegue a enterarme de que es el archimago de la ciudad y uno de los mas poderosos de faerun, segun dicen. Asi que es posible que alguien como el pudiera ayudarnos en nuestra peligrosa busqueda asi como ayudarnos a encontrar a Ifer, pues si no mal recuerdo nuestro desaparecido amigo tenia contacto con el.

Si os parece creo que lo mejor seria que marcharamos a su torre y hablar con el todo este asunto en cuanto antes. En ultima instancia, si Ifer viene hacia aqui podemos dejarle el recado a Martinuk.

"mmm..... uno de los magos más poderosos de faerun, interesante" - los labios de la elfa perfilaron un amago de sonrisa.

Por el momento continuaría con ellos, quizás pudiera sacar conocimientos mágicos o algún objeto a cambio.

Asi es, el mismo me dijo eso en un mensaje, me parece una buena idea, me dijo que el y su esposa Laeral, me esperaban en la torre negra de aguas profundas, si sabeis alguno el camino, adelante, esta visto que ultimamente no descansareos mucho, por cierto torghal,gracias por entenderme, es cierto que es un momento dificil,...pero que hara en nuestra ausencia vuestro compañero, creeis que es prudente qe nos acompañe en su estado?

Mientras Zulema habla comprueba,tener bién amarradas sus pertenencias y espera a los demas para partir, se la ve incluso algo más animada que antes

No pretendía llevarmelo, pues ahora necesita reposo y descanso. Pensaba dejarlo aqui en la posada, a salvo de ojos curiosos. Hablaremos con Martinuk para que le facilite todo lo necesario en nuestra ausencia. Bien, si alguien tiene algo que decir, alguna sugerencia o idea, que la haga ahora. Si no pongamonos en marcha con nuestro equipo, pues nunca se sabe lo que necesitaremos en el camino que nos aguarda.

como nadie parecia poner objeción, throgal se dirigió a su confrater y le dijo:

escuchame bien, aqui estaras a salvo todo el tiempo que sea necesario, no salgas bajo ninguna circunstancia, pues si te llegan a ver los Thayinos o alguno de sus agentes voveras a correr peligro.

El posadero se encargará de darte la comida y atención que necesites hasta que regresemos. Vamos a liberar a los esclavos que han capturado esos cerdos y ya no harán más daño a nadie.Tienes mi palabra.

Una vez el hombre se hubo recostado para descansar y seguro de que le había entendido, Thorgal procuró fijarse en algun rasgo distintivo, alguna marca en especial de la tortura, como un ritual que pudiera darles alguna pista sobre que estaban experimentando exactamente los magos.

Procuró recordar en ese instante su propio cautiverio, algo que intentran hacerle a el y que le hubieran hecho a este pobre hombre.

una vez visto lo que necesitaba, Thorgal apremió a sus compañeros a bajar y buscar a Thorgrimm, pues tenian que hablar con el de la situación y pedirle el favor a Martinuk.

Thorgal denota marcas de punción, de distinta magnitud, en distintos lugares del cuerpo, aunque principalmente en flexuras y articulaciones. En un análisis casi que más exhaustivo, el rashemí presenta también unas incisiones tras de las orejas y bajo la nuca

Thorgal no entiendía desgraciadamente para que podría servir, quizás el mago, Khelben, pudiera darles alguna pista al respecto del por qué esas incisiones en lugares tan concretos.

Sin mas dilación, cargó de nuevo su petate y bajó en busca de los dos enanos, junto con el resto de sus compañeros.

Una vez Thorgal y el resto bajaron por la escalera, Thorgal se dirigió en solitario hacia donde estaban Thorgrimm y Martinuk, embozado en su capa.

Thorgrimm, perdona la interrupción, pero vamos a marchar hacia la torre de Khelben, pues parece que puede darnos información importante acerca de los magos rojos, la madre de Zulema y quizás sepa del paradero de Ifer. ¿Nos acompañas?.

Dirigiendose ahora hacia el posadero, le dijo de nuevo, en susurros:

Maese martinuk, en la habitación descansa un compatriota nuestro que ha sufrido un infierno y deseariamos que tuviera toda la atención posible, tanto en alimento, descanso y a ser posible de algunos auxilios. Pagaremos lo que sea necesario, aqui teneis 50 piezas de oro, como adelanto. Os agradecería la maxima discreción posible, pues es un esclavo liberado y corre peligro si saliera de aqui o fuera visto por los indeseables que le capturaron. Confío en vuestro honor de enano señor.

Zulema estaba con ellos, esperando para partir, pero en un momento se acerco a Martinuk y le hizo etrega de un sobre cerrado, tras lo cual le comento en susurros;
_ este es un correo especial aun asi, y puesto que me pareceis de fiar me gustaria que se lo hiceseis llegar a mi señor( agradeceria informacion geografica sobre bosques y moradores, gracias)estoy seguro que os lo recompesaran, toma ( tras decir esto envolvio la nota con un pañuelo verde, co0n esto sera suficinte para que lo reconozcan.

Mara seguia al grupo en silencio, sopesando cada cosa que estaba sucediendo y preocupada por Ifer