Partida Rol por web

El bólter es más poderoso que la espada. Una vez más fue Lorayne quien acabó con el gran enemigo que les enfrentaba. Una vez más una terrorífica creación de los Yu'vath caía ente la potencia de fuego de un rifle bólter. A medida que los proyectiles detonaban la nube de cadáveres del Guardián se fue desintegrando, al igual que su cuerpo marchito. Cuando el Guardián de Huesos cayó, convertido en una montaña de cristales y restos orgánicos, los exploradores tuvieron vía libre hasta la Torre de Cristal. Contaban con dos explosivos, nada que pudiera igualar la potencia de fuego de aquel misterioso torpedo que no habían logrado encontrar. Sarvus decidió esperar un tiempo, en caso de que otros equipo lograran llegar hasta ellos, pero se vio forzado a precipitar la situación cuando, desde la estrella negra, surgieron cinco recolectores, aproximándose hacia donde ellos estaban. Las oscuras inteligencias tenían miedo, sabían que su fin estaba próximo e hicieron cuanto pudieron por impedirlo. M4R14 determinó que dos explosivos serían suficientes para derribar aquella estructura. Las bombas fueron armadas; los cronos puestos en marcha y ellos abandonaron la zona para volver a su cúter, dejando atrás los cadáveres de los caídos y acompañados de Palas y algunos de sus seguidores.

A medida que su cúter artillado se elevaba sobre la nube de gases sintieron un temblor pasar a través de la cabina. Volviendo su mirada a la imagen de la menguante Torre de Cristal su visión quedó repentinamente cegada con un destello de luz anaranjada y deslumbrante. Durante un instante hubo silencio y, de repente, la onda expansiva golpeó al cúter, que fue violentamente sacudido en el aire. Cuando la luz se desvaneció pudieron ver la crepitante esfera azul de la detonación del vórtice colgando por encima de la isla, sacando con avidez lazos de energía a través del espacio, tratando de alcanzar la fortaleza negra. A lo lejos pudieron verse otras torres más pequeñas brillando y ardiendo cuando el vórtice les robó su energía.

En ese instante, más allá de la cortina de presión fueron testigos de cómo la monolítica estructura alienígena comenzaba a implosionar. Donde antes hubo una estrella negra ya no quedaba nada, una estrella acababa de desaparecer del firmamento. Una aberrante creación Yu'vath que ya no atraería más naves a aquel planeta corrupto con sus habitantes liberados del yugo de los Señores Oscuros.