-Pobre Caos, no te dejan jugar. -Dijo mirando a su alrededor. -Hoy parece que me toca quedarme aquí. Dime que es esto. Que haces aquí, ¿Es El Más Allá que menciona Frio?
Por su parte Caos se quedó en silencio, no porque no pudiera hablar e incordiar, sino por lo contrario, el hecho de incordiar era lo que buscaba, y ahora que Azar quería hablar con él, este no quería hablar con Azar. Muy probablemente a causa de que este no hubiera ayudado a la esencia del Caos a no ser votado nuevamente.
Parpadeó mientras se ubicaba, parte de su magia creando un cuerpo andrógino, pero elegante con el cual moverse, sintiendo al mismo tiempo como parte de su ser estaba en otros planos también. Miró alrededor buscando a alguien más, había estado muerto y también sabía que había revivido, así que estaba bastante extrañado por lo que había pasado aquel día y que hacía allí en el limbo, quien habría usado sus poderes para aquel nuevo acontecimiento, pues no habían sido los suyos los que habían entrado en acción.
¿Queréis traerme de vuelta de una vez?
Fue la voz de Caos que volaba por todo el lugar, como si hubiera estado buscando una salida de aquel limbo infinito por ya bastante tiempo. Sin lugar a dudas, Caos se había puesto la máscara de lo que en verdad era, un ente caótico, pero pese a ello, eso no implicaba que no quisiera seguir disfrutando del "más acá", no del "más allá" y mucho menos del "ni idea de dónde queda esto".
Escuchó una voz caótica invadir el lugar y de inmediato se encontró con Caos junto a la forma física que había tomado. —¿Caos? ¿Sabes que hacemos aquí? Me han revivido, pero también he aparecido aquí y han cambiado mi rol — dijo suspirando por ello, pero también bastante extrañado, ahora no entendía nada. —¿Tienes mucho tiempo aquí? ¿También has cambiado de rol? — Caos había comenzado pareciendo ser un ente del mal, pero una vez muerto parecía ser alguien de confianza y como siempre, le daba dolor de cabeza a Magia, pero si los dos estaban ahora en un predicamento, podían trabajar juntos si eso los beneficiaba a los dos.
El Caos se detuvo por un instante. En un abrir y cerrar de ojos -si alguien de aquí los tuviera- Caos se apareció ante Magia, sus flechas yendo y viniendo hacia cada uno de los lados, algunas más gruesas, otras más finas, unas de forma recta, otras de forma torcida, unas a una velocidad mayor y otras a una velocidad mayor, unas con aceleraciones variables y otras constante.
¡Sí! ¡Sé que hacemos por aquí!
¡Incluso sé que Azar estuvo por aquí aunque me negué a hablar con él!
Aunque es extraño, hubiera jurado que "esto" había sido cosa de Azar y se hacía el tonto...
¿Te estás haciendo el Tonto conmigo, Magia?
Caos había sido tan tranquilo en el más allá ¿Por qué tenía que comenzar a ser, pues caótico, ahora que estaban solos? Si pudiera darle realmente un dolor de cabeza, estaría a punto de iniciársele uno. —Así que es algo de Azar — suspiró negando, eso solo lo hacía sospechoso para su ser, si es que realmente era cierta aquella información, con Caos podía ponerlo en dudas. —¿Qué hacemos aquí? ¿Puedes responder a mis preguntas? Tenemos que ayudarnos ahora — intentó razonar con el desordenado avatar, esperando lograrlo por lo menos que se centrara un poco para sacarle respuestas reales —¡No me estoy haciendo el tonto! ¿Tú sí lo estás siendo? Tus actos desde que comenzó todo esto han sido demasiado ambiguos.
Las flechas de Caos continuaron moviéndose, formando palabras, mismas palabras que se perdían en el vacío del limbo, aunque ahora de una forma un tanto más visual para que Magia pudiera comprender no con sus ausentes orejas, sino con sus también ausentes ojos. ¡Quizás con esta ayuda extra sería suficiente!.
¡La Verdad no es más que una Mentira auto-Impuesta!
¡El Tipo de Mentira más Aburrida de Todas!
¡Alguien me atrapó en este lugar!
¿Quien fue? ¡Yo lo sé!
¿Me importa algo? ¡En Absoluto!
¡Dentro estaba Azar quejándose de mi!
¡Oh, que extraño! ¡Culpemos al Caos de sus propios errores!
Tonto Caos. Aquello no podía estarle pasando a su ser.
—Bien, está bien, no te interesa quien te metió aquí. ¿Pero no te interesa salir? — preguntó con curiosidad, para ver si decidía decirle algo más aparte de que Azar había hecho aquello con él. Eso no decía nada de que le había pasado a Magia. —¿Tienes alguna idea de quien pudo atraparme aquí? — si Caos estaba así, no había sido él, si es que estaba siendo sincero claro. —¿Me dirás tu rol? O bueno el que tenías cuando vivías. — prefirió preguntarle una segunda vez, tenía otra pregunta más, pero quería ver si lograba sacar eso primero.
Al sumar puntos por lo que acababa de decir Ciencia en el mundo de los vivos, se había apresurado al limbo, siendo que Caos simplemente la había ignorado y que la había hecho dudar primero, pensando que quienes los había llevado allí era Azar, ahora estaba seguro que por lo menos a el mismo, no lo había llevado ese avatar en particular a ese lugar.
—¡Ciencia aparece! ¡Sé que estás aquí! Fuiste quien me trajo para acá. Si no me dices como ayudarte, no puedo protegerte o darte información ¿No crees?
Caos se había ido, pero vio que aunque había muerto nuevamente, estaba allí atrapada. Suspiró para luego mirar alrededor al ver una perturbación y luego observar al avatar de Fauna aparecer. —Bienvenido al Limbo. Al parecer el nigromante hace de las suyas nuevamente y te ha revivido. — si tan solo supiera quien es. Necesitaba encontrar como salir de allí pronto.