Llegó el momento de las votaciones. Ahri y Vi se acusaron mutuamente, y parecía que en cualquier momento iba a estallar una pelea de gatas… para deleite de la mayoría de los presentes. Por su lado, en los fríos cálculos de Viktor, surgió el resultado de que Veigar debía ser culpable. Y prácticamente el resto de los presentes, al unísono, señalaron a Nasus como culpable. Y Fiddlesticks apareció rápidamente para nuevamente reclamar la muerte de Nasus. Pero esta vez, el Guardián de las Arenas estaba prevenido. - ¡Por el Barón Nashor! – ruge mientras Nasus invoca su Furia de las Arenas y crece a un tamaño jamás visto, y con su Golpe Absorbente noqueó con brutalidad a Fiddlesticks, que se estampó contra la puerta y quedó totalmente laxo. Entonces Nasus se giró ante los que lo acusaban, y desató su resto de poderes para acabar con ellos…
… claro está, que los campeones no se quedaron quietos esperando el mismo funesto destino que al Mensajero de la Muerte. Blitzcrank activó su Campo estático, mientras Ezreal iba atacándolo con su Flujo de esencia mientras se auto-teletransportaba con su Alteración arcana. Graves también se movía como una peonza alrededor de Nasus mientras lo disparaba con su Disparo veloz, mientras Janna hacía lo mismo en sentido inverso con su Céfiro, y Rammus lo dañaba físicamente con su Bola de poder. El Guardián de las Arenas no podía moverse ni contraatacar por culpa del Enlace de luz de Lux y el Crescendo de Sona. El primer gran golpe mortal para Nasus vino de Veigar, al desatar su Estallido Primordial. Tras ello lo siguió la Justicia Demaciana, que hizo que la Furia de las Arenas desapareciera y quedase un maltrecho y malherido Nasus de rodillas. Este miró a Garen esperando que lo rematase, pero señaló a Fiddlesticks, quien se había recuperado, y hundiéndole la guadaña reclamó de una vez por todas su vida.
Con su trabajo hecho, el Mensajero de la Muerte se preparaba para regresar a su habitación, cuando entonces alguien lo frenó. Fizz, quien se había ausentado de toda la votación y acción, cogía a Fiddlesticks por el pantalón y lo miraba con ojos llorosos - ¿Con ellos muertos, sniff, que será de mí? – preguntó el Gamberro de las Mareas. Fiddlesticks se agachó y le puso la mano en el hombro, y señaló en el techo… donde estaba Vel’Koz. Fiddlesticks se retiró mientras el Ojo del Vacio caía encima de un aterrado Fizz. – Analizar, comprender, asimilar… - dice el horrible ser mientras activa su Rayo Desintegrador de Seres Vivos y elimina al ser acuático. Tras ello, centra su mirada en Blitzcrank, pero el Gran Gólem de Vapor no se asusta ante lo que le pueda pasar. Por el contrario, Ahri si luce asustada y se lanza encima de Blitzcrank y le lanza su Hechizar, mientras activa su Impulso Espiritual para abrir un agujero en la pared de la Academia, y obliga a Blitzcrank a usar su Agarre Misil para escapar del lugar. Decepcionado, Vel’Koz desaparece regresando al Vacio. El resto, al ver que dos campeones han escapado para no regresar jamás, os miráis entre vosotros.
A Ezreal se le perdonó el haber quemado a Morgana y Annie, al ser ambas malas y al haberlo hecho tras poner previamente a salvo a Sona. Y a Veigar no se le culpó de matar a Talon, puesto que había sido responsable de haber resucitado a dos de los malos. Por último, no había nada en contra de Viktor, pero los presentes se preguntaban si seguiría en la Liga o los abandonaría para seguir su propio camino. Y con todo esto, la puerta de la Alta Consejera se abrió. Y visteis que no sólo ella logró sobrevivir, sino que la acompañaba Alistar, el cual tenía un brazo amputado y un cuerno roto. – Benditos seáis campeones, gracias a vosotros la Liga de Leyendas ha sobrevivido. Ahora quedará mucho trabajo por hacer, pero al menos tendremos un mañana… - Y con las palabras de Vessaria Kolminye, se cerraba una de las etapas más oscuras y sangrientas de Runaterra.