Partida Rol por web

En un lugar muy lejano a todo aquello, un hombre enmascarado se encontraba viendo las noticias de lo que estaba pasando, una retransmisión continuada desde los pasados 4 días en la que se mostraba las penurias de unos adolescentes de la U.A. luchar, pelear y discutir entre ellos.

De hecho, el último especial de la noche fue cómo un villano había llegado al Vestuario de las Chicas y había incinerado a los que ahí se encontraban dentro, es decir, a los que habían votado para ser encerrados por sospechar de ellos de ser posibles villanos, aunque, al final de cuentas, esto se resumiera a "Matt" y a una "Iwa" que no tenía nada que comerlas ni beberlas. De hecho, la explosión de fuego fue tal, que hubo levantado a los alumnos de la superficie a causa del ruido... y el posterior olor a carne quemada.

A veces cambiaba de canal para ver cómo los héroes profesionales respondían ante la prensa, y se jactaba de su desesperación, al igual que los comentaristas deseaban buenos deseos, fuerza a las familias y demás chorradas que nadie siente de verdad. La sociedad estaba en decadencia, y la podredumbre ya se podía oler en la calle.

La confianza en los héroes, estaba cayendo, desplomándose. Y eso le hacía sonreír.

De vuelta en la pantalla, la figura de un hombre alto y fornido se hizo presente, la reportera lo había identificado como "Muscular" un villano afiliado a la Liga de Villanos, reconocido por ser un asesino de héroes y civiles a partes iguales, haciendo especial mención en la masacre del grupo de Héroes "Water Horse".

¡EY! ¡VOSOTROS, HÉROES DE PACOTILLA!

¡VENID A POR MI SI NO QUERÉIS QUE MANCHE LA HABITACIÓN CON LA SANGRE DE ESTE NIÑATO!

La mirada acongojada de Neito Monoma se puso en primer plano, mientras Muscular mantenía al joven atrapado bajo su pie recubierto de fibras musculadas, sin lugar a dudas, las cosas no se veían bien para el pobre Neito Monoma, y mucho menos, en una situación como esa. Menos aún cuando, en la otra mano, Muscular zarandeaba el cuerpo sin vida de Ches Blaze como si de una porra se tratara.

Mientras tanto, los alumnos supervivientes se podían ver en el segundo plano, detrás de aquella inmensidad, entre ellos se encontraba Notwo Yezyez, Satoshi Mike, Tsuki Juro, Akira Josune y Ushio Aotsuki. Los únicos que, cuando el día se hizo, habían bajado al salón principal y pudieron esconderse de aquel villano recién aparecido por el portal mientras Monoma daba el discurso acerca de lo genial que era la clase 1-B respecto a la clase 1-A.

Ushio estaba con el resto de lo que quedaban con él. -Esto esta mal... ¿Donde están Kian y Hadaka? -Pregunto al ver como el villano estaba con lo quedaba de Ches Blaze. -Espero que hayan podido esconderse en algún sitio. -Miro a los pocos que quedaban,si alguien tiene un plan genial igual es momento de hacer... un momento creo que igual puedo hacer algo.

-Voy a llamar a All Might seguro que el podrá ocuparse de ese loco gigante. -Dijo con un leve gesto de esperanza mientras buscaba el numero en su celular y marcaba el numero del profesor mas fuerte. -Ojala tuviera el de Midnight... -En ese momento se dio cuenta que la proporción chicas era mayor y eso le hubiera encantado si fuera otro momento.

-WTF??!!- Satoshi se quedó congelado al ver toda la masacre. Primero, Rizumu y esa cosa terrorífica. Ver como alguien se convierte en gas venenoso es… perturbador, aunque sea un villano. Pero aún se quedó más en shock cuando se llevó a la tumba a la pelirroja, que claramente era un mal bicho. Finalmente, ve, paralizado por el horror y la fascinación de aquel espectáculo dantesco, como Takeshi se suicida, en pos de su amada.

-Se nos ha ido la cabeza a todos…- susurra, asustado y sin poder moverse ni pensar. Y ya, el remate final cuando aparece en la sala un villano de verdad, sacudiendo el cuerpo sin vida de Ches e instándoles a enfrentarse a él.

“Es una broma, ¿no? No tengo nada que hacer contra él, ninguno tenemos nada que hacer contra ese tipo… Pero, los héroes se distinguen por eso, ¿no?”, piensa para sus adentros. Y aunque sabía que no tenía posibilidad alguna contra aquel mastodonte, agarró una silla del comedor, dispuesto a hacer algo, como se supone que los héroes deben hacer, actuar. Y se quedó temblando, sosteniendo la silla entre sus manos, sin moverse.

Notwo no estaba segura de si las cosas iban a mejor o a peor; por un lado, cuatro enemigos se habían eliminado entre sí, lo cual les daba un mínimo de esperanza. Por otro, tres compañeros habían muerto o desaparecido, y eso sin tener en cuenta a quienes estaban encerrados en el sótano, que también parecían haber dejado de respirar. La sensación de que aquello no había terminado significaba que entre ellos quedaban uno o dos villanos, ¿el problema? No tenían información, y aunque si quedaba un villano tenían un muy pequeño margen de error, en el caso de que quedasen dos villanos ese día era el punto de inflexión, y votar a la persona incorrecta sería pagado con sus vidas.

Había señalado a Hadaka y Tsuki la noche anterior. Hadaka no sólo la había protegido sino que también había desaparecido, y aunque nada indicaba que no fuese a volver, nada indicaba que lo fuese a hacer tampoco. Lo mismo sucedía con... Kian. Notwo alejó rápidamente emociones que comenzaban a colarse por las rendijas de su mente. Pensar en frío y objetivamente era la única arma del cual disponía, a priori.

En cuanto a Tsuki, Tami había muerto con lo cual no podría probar que era o no su aliada. A pesar de que en situaciones normales debiendo votar a alguien de forma obligatoria habría votado a quién más sospechoso le pareciese, aquella situación debía ser tomada con pinzas esterilizadas dignas del mejor neurocirujano del mundo, siendo que en el peor de los casos estaban tan cerca de vencer como lo estaban de ser vencidos.

Notwo respiró lentamente. Que Ushio pudiese llamar a All Might era bueno; dudaba que ningún otro héroe, exceptuando quizás a King o Eraser fuese capaz de reducir a aquella bestia que amenazaba con aplastar a Monoma. Se preguntaba si All Might podría... salvarlos a todos. Seguramente no; las cosas nunca eran tan simples.

—¿Alguien tiene información que nos pueda resultar útil para descubir al o a los villanos restantes? —preguntó. Era una pregunta algo estúpida, pues si alguien la tuviera ya la habría dado, pero aún así, hacer aquella pregunta era lo más sensato en lo que había podido pensar.

-¿Cuanto tardara? -Se mordió la lengua un tanto desesperado. -Esta bien, aguantaremos hasta entonces. -Dijo tras colgar el teléfono y mirar a sus compañeros.

-Dice que no podrá venir hasta bien entrado el día... Así que me temo que por el momento estamos solos... -Se llevo la mano a la frente asustado. Para luego tragar saliva y mirar de nuevo hacia Muscular.

-Bueno... tal vez sea hora de que ¡Entotsu SojiHito se pongo e marcha! -Dijo con seguridad mientras se levantaba de su sitio y sacaba de sus bolsillos multitud de utensilios que pocos sabrían para que servían realmente.

Pero la valentía le duro hasta que vio como aquel gigante agitaba el cadáver de su compañero de clase como si de un bate se tratara.

-Vale... plan B. -Dijo volviendo con el resto. -Supongo que aun seguimos con traidores entre nosotros. Y a estas alturas estará de mas pedirle que se revele ¿verdad? -Sonrió desesperanzado. -Y supongo también que quien tenia las notas no esta entre nosotros. Yo... no tengo nada, el ir de aquí allá entre las habitaciones de los desaparecidos no ha sido de utilidad, allí no había pruebas. Así que sugiero que si alguien tiene un AS bajo la manga seria buen momento para utilizarlo. -Clavo la mirada en Akira, la mas reservaba de todos ellos y tal vez quien tuviera algo que el resto no supiera.

Mire a mis compañeros totalmente silenciados, algunos a la cara otros de arriba-abajo y chasqueé la lengua.

-En serio, ¿Nada? -La desesperanza parecía anidar en sus corazones de Heroes... -Jobar, no quería dejar esto ultimo al azar... me han dicho que es un avatar muy voluble. -No era un exactamente un chico callado, pero la presión de grupo a veces hace estragos.

Nadie parecía tener idea de a dónde mirar o cómo proceder. La situación era crítica y tenían un imponente villano cerca que, de verlos, los haría puré de héroe antes de lo que tardaba una niña en ponerse a llorar una vez su bola de helado se separaba del cono que sostenía, cayendo al suelo en cámara lenta y con música dramática de fondo. Aunque All Might vendría, supuestamente, Notwo no estaba segura de si lo haría a tiempo, y conocía a 1-B lo suficiente como para imaginar qué sería capaz de hacer si ninguno de ellos era pronto enviado a ayudarlo.

—Yo... —estaba bien; aunque ya no estaba ahí, aún recordaba las palabras de Kian: «Es... ¿una villana?» recordaba haberlo escuchado preguntar cuando le había hecho saber de sus tenues y aún nada claras sospechas sobre Tsuki. «Ojalá que no... aunque sí que admito que es sospechoso» había comentado luego ante las razones por las cuales Notwo sospechaba. Estaba insegura de si decirlo o no, pero dejárselo al azar como proponía Ushio no era la mejor de las ideas. Teniendo en cuenta que habían uno o dos villanos, eso les daba un triste 20 a 40 por ciento de posibilidades de enviar a un villano, el cual... ¿sería siquiera atacado por Muscular? Después de todo debían de conocerse y dudaba mucho que aquel bárbaro atacase a un infiltrado por voluntad propia. Si debía votar a alguien, votaría al único sospechoso que tenía—. Mi voto irá a Tsuki Juro —dijo con decisión después de mucho dudarlo, poco convencida pero consciente de que era lo poco, único y mejor que podía hacer en aquel momento. Rezaba en silencio por no equivocarse pues de hacerlo era posible que, en el peor de los casos, ese voto significase su fin y el de sus compañeros. Lo único que podría llevarse a su tumba sería la inmortalizada certeza de que lo había intentado con todas sus fuerzas.

Desgraciadamente si haces eso te vas a equivocar. Puede que sea callada, pero eso no quiere decir que yo forme parte de ellos. Aunque te entiendo yo tampoco sé a quién votar.

En un lugar muy, muy, muy lejano a la playa en donde la residencia se encontraba, un hombre tomaba aire con sus poderosos revólveres. Y guardando su teléfono en el bolsillo, se dispuso a hacer lo que estaba a punto de hacer. Poniendo ambas manos en sus costales, este desenfundó y disparó:

Cierto tiempo después una ráfaga de balas entra en la Academia por una ventana abierta, cruza el cuarto, el pasillo, baja las escaleras y finalmente todas ellas impactan en las extremidades de Ushio Aotsuki, dejándolo inmóvil y dolorido en el suelo. Pese a que su salud no corre peligro, el hecho de ahora tener agujeros en su cuerpo en zonas que no deben de ser agujereadas le causa un gran malestar... o mejor dicho, dolor.