Espero a Anne y posteo... ^^
Un sentimiento de calidez inundó mi pecho cuando comprendí que Tim solo quería asustar al gigante con aquel fuego, y no dañarlo. Aquel tipo de conductas eran lo que hacían de él un chico tan especial. El número de pájaros que llegaron fue asombroso, pero me quedé anonadada con la visión de aquel halcón enorme. Por unos segundos hasta me olvidé de la enorme criatura que nos amenazaba ahora, y de los mortífagos campando a sus anchas por nuestro antes seguro colegio. Cuando el ave demostró ser amigable, llevé una mano hacia su cuello para acariciar su plumaje. Increíble... Miré a mi compañero con los ojos como platos.
-Ho-hola -dije. No tenía muy claro cómo había que hablar con un halcón gigante. ¿Responderá a mis órdenes? Carraspeé. Había que intentarlo. -De momento no queremos atacar, trata de asustarle. Eres enorme y está aturdido, quizá podamos aprovecharnos.
¡Muchas gracias! Creo que lo llamaré Hank :)
El gran Águila miró a Anne, que le hablaba directa, el ave escuchaba atenta... pero tras las palabras de la Hufflepuff, el ave elevó sus alas en signo magestuoso y luego vociferó un gran chirrido. Marc se acercó raudo a la posición de Anne y se puso entre el majestuoso ave y ella, y dijo en grato cumplido.- Nunca había visto a nadie con ese poder de congregación... no sólo una manada de aves múltiples ha llegado, sino que también un Águila Rey... o debería decir Reina...
La mano de Marc se posaba sobre los plumajes del gigante águila y decía maravillado.- Eres preciosa... - Dándose cuenta de que estaba siendo escuchado, carraspeó y miro a Anne y dijo.- Creo que debes de dominarla para que te haga caso... o ser su amazona... es un ave, pero sigue siendo libre de sentimiento.
Mientas vosotros hablabais el gigante se apoyaba en el suelo y se levantaba mientras os miraba y vociferaba con fuerza huracanados sonidos que os hacían llegar legajos de su saliva.
Motivo: Grandullón
Tirada: 1d20
Resultado: 9
El joven Downsend había esperado que el enano se retirara y les dejara en paz sin embargo este insistía vociferando. Les estaba llevando demasiado tiempo y tenían cosas más importantes entre manos.
- Herbivicus - convocó Tim señalando el suelo bajo los pies del gigante. Esperaba hacer crecer alguna calabaza o enredadera que lo sujetase e inmovilizase hasta que vinieran a la entrada y le expulsaran del terreno.
Motivo: Herbivicus
Tirada: 1d20
Resultado: 16
Tim tiene muy buenas ideas, pensé para mí misma. Estaba claro que nosotros no íbamos a poder tumbarlo, era demasiado grande. Quizá inmovilizarlo para que no causara más problemas y luego ir a buscar ayuda era la mejor opción. -Bien hecho -le susurré.
Me giré a la invocación, enorme y orgullosa. -Así que una reina, ¿eh? -había escuchado las palabras de Marc con atención, pero había un problema. No tengo ni idea de cómo domar un águila. Imitándole, llevé la mano al plumaje del ave con cautela. -¿Cómo se supone que tengo que hacer eso, Marc? -pregunté, asustada.
Marc se sonrojó por un momento y dijo.- ¿Es un mal momento para decir que me dan miedo las alturas?... Lo que son mamiferos terrestres son cosa mía... pero lo otro.... no soy de esos chicos que no les importa ponerse sobre una escoba a miles de pies de altura.
Y antes de que la verguenza le impidiera hacer algo más dijo con fuerza esta vez del tirón.- Colloshoo... - Un raudo rayo impactaba sobre el gigante y lo dejaba quieto por unos instantes, mientras del suelo gracias al hechizo de Tom comenzaban a crecer grandes enrredaderas que trepaban y se retorcían entorno a los pies lapiformes de aquel gigante.
Motivo: Colloshoo
Tirada: 1d20
Resultado: 16
Tu que haces Anne???
Lo siento por la tardanza chicos. Llevaba una semana dificililla y me costaba centrarme en el rol.
Dire, ¿tengo que tirar para tratar de amaestrar al bichito?
Marc te acaba de confesar que el no tiene mucha idea, pero Anne puede intentar lo que ella quiera y del modo que ella quiera... piensa que no es mejor momento para rendirse... ^^
Suspiré, tratando de alejar el miedo de mi interior. Firmemente, llevé la mano de nuevo hacia el pecho del animal, empujando con ella suavemente para que bajara el cuerpo.
-Te necesito con nosotros. Déjanos montar en ti -empecé a decirlo con una voz suave, que iba aumentando cada vez más. Necesito ser firme. Como en clase de transformaciones.- ¡Derrotemos juntos a ese gigante! -ordenó al ave, con una seguridad que no sabía si sentía realmente.
El joven Downsend esperaba que el gigante se quedará en el sitio y no se levantara. Las enredaderas parecían bastante robustas para ello y Anne estaba lista para combatir con él si lo intentaba.
El águila parecía imponente.