Partida Rol por web

La muerte de Herodes os ofrece un alivio de esperanza pensando en que tal vez por fin hayan acabado las muertes nocturnas pero el miedo descansa en vuestros ojos temorosos ante el peligro de que cualquiera de los pocos que quedan en pie pueda atacaros esta noche.

Afuera el peligro persiste pero parece que los bárbaros han desistido de intentar entrar aquí y se limitan más bien a impediros salir. Basta asomarse a una ventana para recibir una flecha así que no os arriesgáis a buscar una vía de escape confiando en la posibilidad de sobrevivir aquí dentro aunque haya que vivir atemorizado pero vivo al menos.

Ya solo quedáis cinco personas de todas las que entraron aquí pero vuestras cabezas no paran de rumiar en los eventos acontecidos en el interior del templo en un intento desesperazado de cazar el mal interior que convive con vosotros.

Cuando vio como el dedo acusador de Merula, decidía el fatídico destino de Herodes, Erastes giró la cabeza, no quería presenciar la muerte del que creía hasta ahora, el último aliado que le quedaba. Sus manos ahora le temblaban y su corazón palpitaba con tanta fuerza que parecía que le fuera a salir por la boca.

- Espero que lo último que dijo Herodes no se cumpla, pues parece que estamos rodeados de cristianos. No me creo que él lo fuera, cosa que quedará demostrada cuando vuelvan a asesinar esta noche. Seguramente los tres que votasteis a Herodes, ahora nos votaréis a mi o a Timon, pues parece que confiáis en Bruto... - dijo con voz temblorosa.

- Moriremos todos dentro de este maldito templo.

-Te equivocas Erastes, no tengo intención de votarte ya que no tengo razones para desconfiar de ti, ni tampoco de Timón.-

Herodes ha muerto, y con él hay tranquilidad.. digo sin arrepentirme de nada, claramente Erastes has puesto la situación en bandeja de plata, si la valiente vidente quien murio tiene razon, de estas personas,  hay dos que son sospechosas, y esas son Erastes y tu Bruto, miro a los demás, piensen bien por quien votan, y piensen bien cada movimiento, puede ser el último.

No sabemos sí esta noche alguién muera, pero yo dormire tranquila, estoy segura que  esto pronto terminará.

-Y sin embargo los dioses parecen querer que esta noche dure más de lo debido. Lo cual, a mi por lo menos me hace dormir intranquilo. Veremos lo que pasa pues aunque voté a Herodes para salvarme a mi mismo nunca antes había sospechado de él y no estoy seguro de que finalmente fuera un cristiano.-

Bruto observó a los otros cuatro detenidamente tratando de adivinar si alguno estaría pensando en matarlo esa noche.

- Mis mas altas sospechas están en Bruto ahora mismo, pero en caso de que el planteamiento sea incorrecto, dejaría a Merula como mi siguiente sospechosa. De todas maneras ya ha anochecido - dijo mirando hacia el cielo.

- Poco se puede planear ahora sobre las votaciones, pues quedamos muy pocos y si alguien muere esta noche, seguramente cambiaría todas las suposiciones y las cuentas de cada uno.

Un escalofrío recorrió la espalda de Erastes, sabía y a la vez esperaba que le quedaba una larga noche por delante. Pero no sabía describir el porqué, de que había algo que lo perturbaba.

Erastes en ningún momento he dicho que confiara en Bruto, solo que desconfiaba más de Herodes que de él. Por el momento pienso que Niobe decía la verdad, eso dejaba hasta el día de hoy dos sospechosos, Herodes y Bruto, uno de ellos ha muerto a nuestras manos, solo espero que fuera el acertado.

Merula te escoje como objetivo al morir ella y revelarse como el asesino.

Mueres victima del ataque de los cristianos.