Al abrir los ojos tras tocar la llave espada... ves que estas agarrando tus espadas, pero ¿para que? La respuesta no se encontraba muy lejor. Detrás de dicha espada había una piel morada y dura, la cual poco a poco fuiste recorriendo hasta darle una figura a dicha piel. Se trataba de un begimo, pero no de uno cualquiera, un Rey Begimo espectacular, el más gigante e imposible de existir que se hubiera visto antes, y tu espada estaba levemente hundida en su pata.
Un rugido atronador surgió de las fauces de este mounstruoso ser intimidandote por completo. Viste tu escenario en el que actuar y estabas en un abismo entre dos laderas. Delante el rey begimo, detras camino para correr y huir.
Me quedo paralizado unos instantes ante el monstruo que se haya ante mí, había oido hablar de los Reyes Begimos pero no recordaba haberme encontrado con ninguno antes, al menos no uno tan grande.
Pienso en pelear pero no creo que pudiese hacerle nada a una mole con esta, recojo mis espadas y salgo corriendo en dirección contraria todo lo rapido que puedo.
"Por lo que más quieras Sieg corre y no mires atrás" pienso mientras intento dejar atrás al Begimo.
Según echaste a correr, el Rey Begimo siguió detrás tuyo reventando cada obstaculo que aquellas laderas representaban cuando hacian una curva la cual tu tenías que seguirla. Por alguna razón el Rey Begimo no te alcanzaba, puede que fuera por que estuviera siendo frenado por cada destrozo o por... como veias poco a poco el camino se estaba estrechando.
Al sali de el por un pequeño estrechamiento que solo te permitía cruzarlo de lado, el Rey Begimo se chocó contra este y empezó a golpear y golpear provocando más destrozos. Se estaba abriendo camino, y ahora delante tuyo solo había un precipicio que caia en lo que parecia un espacio infinito, pues no existía un final apreciable. Cualquiera que se cayera por allí moriría al entrar en contacto con la superficie, si es que la hubiera, tanto un humano como tu, como el Rey Begimo que estaba abriendose paso hacia tí.
No había más escapatoria, el semicirculo que formaba esa pequeña explanada ante el precipicio, era el fin del camino y el Rey Begimo estaría a punto de entrar ¿habría otra forma de salvarse de esta?
Estudio unos segundos la situación hasta que se me ocurre una idea, la única manera de acabar con el Rey Begimo. Era arriesgado pero debía intentarlo.
Me coloco cerca del borde el precipicio pero sin ponerme en peligro real, y empiezo a llamar la atención del monstruo como mejor se me ocurre.
-¡¿Qué pasa grandullón?! ¡No cogerías a una tortuga!.-
Espero cabrearle lo suficiente como para que venga a por mí con todo, debo apartarme en el último momento y dejarle caer al abismo. Plan sencillo, dificil ejecución.
No estoy seguro de como debería hacer las tiradas :S
El plan parecía bueno, y la provocación suficiente pues tras un rugido golpeó varias veces más al estrechamiento con más fuerzas, pero... tras varios golpes ya no hubo más, cesó. ¿Acaso se rindió? Por desgracia no te dió tiempo a comprobarlo y contra todo pronostico, el rey begimo saltó aquel estrechamiento para acceder desde arriba y arremeter contra ti, el único calculo que no parecía haber hecho el begimo, era la plataforma en donde estabais.
Al entrar en contacto este con la plataforma esta se destruyó en varios pedazos y comenzó caer por el precipicio. ¿Este era el final? ¿O podrías hacer algo para salvarte? ¿O para salvar al Begimo? ¿O igual a los dos?
El suelo se iba acercando más, aunque desde donde estabais parecía más lejano que el mismo horizonte.
Vale, por un lado el plan había funcionado bien, el Begimo estaba cayendo al vacio. Por otro lado tal vez había funcionado demasiado bien, estaba cayendo con él. "Gran trabajo Sieg" pienso ironicamente, sé que debería estar aterrado por la caida, pero estaba mal acostumbrado a la compañía de Diablo.
Esa tranquilidad me deja pensar con claridad, antes de estar demasiado lejos agarro con fuerza uno de mis cuchillos y lo lanzo todo lo fuerte que puedo contra la pared del estrechamiento para usarlo como ancla.
Mientras detengo mi caida me fijo con el rabillo del ojo en el Begimo, ¿debía dejarlo caer? ¿de verdad me había atacado por malicia o era yo quien había entrado en su territorio? "Esta idiotez te va a condenar Sieg" me digo mientras lanzo le otro cuchillo en dirección al Begimo para atarlo a donde pueda de su cuerpo e intentar evitar que caiga al vacio.
Tras coger al begimo con tu espada y la otra clavarla la pared esta comienza a bajar poco a poco a causa del peso y va ganando y ganando velocidad, hasta que finalmente, la cadena se rompe y empezais a caer bastante más rápido. Los contratiempos estaban empeorando y para colmo de males, el Begimo se había vuelto para tratar de cogerte.
"Genial Sieg. Eres un genio. De verdad. Ahora solo falta que averigues otro modo de parar tu caida para volver a cagarla, venga que tu puedes" me sentía muy estupido, parecía que tenía la solución pero por intentar salvar a ese monstruo lo había estropeado todo y ya no podía utilizar mis cadenas.
Y ahí estaba el Begimo, casi parecía que iba a darme las gracias, o lo parecería si no estuviesemos hablando de una bestia como una catedral que seguramente quiera devorarme. El tiempo se acaba y mis ideas tambien, cada vez mantengo más la calma, ojala Diablo siguiese conmigo, un momento...
Se que no es mi mejor idea pero tampoco parece que pueda hacer mucho más. Cierro los ojos y me concentro, llamo con todas mis fuerzas a mi Guardian, se que sigue por ahí, solo tengo que encontrarlo. No necesito mucho de él, solo parar esta caida antes de que sea demasiado tarde.
Según caias más y más te concentrabas pero no ocurría nada y según más y más caiais, el Begimo estaba cada vez más cerca de comerte... hasta que ocurrió.
Como un milagro un orbe negro os rodeó a ambos dejandoos estaticos en el aire. El begimo no sabía que pasaba, y por mucho que lo trataba no alcanzaba a morderte. Por otro lado te quedaste en una posición un tanto expuesta si siguierais callendo y no podías desplazarte como el Begimo.
Fuera de esto una de tus espadas a mucha distancia de altura empezó a caer en dirección a vosotros oscilando poco a poco, no sabías como iba a acabar si llegaba a entrar aunque se frenara, pero iba en vuestra dirección. El Begimo que trataba de alcanzarte ahora parecía también más expuesto aunque alterado. Y justo en uno de sus ataques, conseguiste ver lo que le hacía estar tan rabioso. Un pequeño madero, clavado entre los dedos de su pata, solo lo has visto una vez y de refilon, pero era eso.
Tu arma cayendo poco a poco acelerando en su descenso y el Begimo que no dejaba de tratar alcanzarte. La espada comienza a atravesar la barrera y continua descendiendo aunque frenando ¿Que haras?
No me lo puedo creer, ¿Diablo? Sabía que seguía por aquí, no podia haber desaparecido un cabezota como él de buenas a primeras. Una vez en el orbe me siento más tranquilo, respiro profundamente y me relajo unos instantes, es como volver a estar en casa.
En ese momento veo la espada caer hacía mí y la madera clavada en el begimo, tal vez por eso me estaba atacando, debía hacer algo. La espada se frena al entrar en el orbe y pienso rapidamente un plan.
Espero hasta que el arma este a mi alcance para agarrarla, ahora viene la parte dificil. Intento moverme dentro del orbe para sacar la madera con mis propias manos pero si no fuese posible decido lanzar con mi mejor punteria la espada contra ella, solo tengo una oportunidad para romperla y más me vale no fallar.
Motivo: Punteria
Tirada: 1d10
Resultado: 8(+11)=19
No se por qué no me saltó la notificación o no la vi xD
Al coger tu espada y volverte para atacar la madera clavadaa en la pata del begimo, la espada empezó a brillar antes de ser lanzada y se transformó en la llave espada la cual te hizo entender una acción. Apuntaste a la pata y estiraste la misma llave de la cual salió un hilo de luz que impactó contra el madero y este desapareció poco a poco. El Begimo se tranquilizó entonces y comenzaste a notar como ambos descendiais lentamente,. El orbe estaba perdiendo fuerza y en poco tiempo comenzasteis a veros callendo más y más rápido...
Pero antes de caer, volviste a la realidad...
Postea ya en el otro lado