Partida Rol por web

La voz que retumbaba en el ambiente por fin estaba mostrando rostro y cuerpo, aunque no estaba tan seguro si lo que estaba viendo resultaba ser real. Aquel que tenía enfrente mio y que se postraba a la par que comentaba el como compartiamos la existencia y como el había sido mi salvador de la oscuridad de la arena que me arrastro aquella vez que fui a parar a tierra de partida.

Se notaba extraño, era una copia exacta en lo que refería silueta y rasgos, aunque sus ropas y algunos detalles de su pelaje, pom pom y alas eran distintos a los mios, casí era como si me estuviese enterando que tenía un hermano gemelo. Pero en el fondo sabía que esa posibilidad no cabía en la existencia, al menos no a nivel genetico; el haber estado aprendiendo de los distintos maestros de Tierra de Partida me había dado suficiente información para entender lo que estaba ocurriendo en este momento, o al menos me daba una vaga idea para entender que me encontraba frente a mi oscuridad, mi propia oscuridad.

Quizas por entender eso es que podía mantener una sonrisa aun amigable, pues yo creó no tener conflictos con esa parte de mi ser -Cierto, disculpa el fallo kupo...Gracias por salvarme de esa tormenta kupopo- Extendería mi mano hacía el de forma amistosa. Mantuve silencio cuando el se proclamo como el valor real que debía adoptar en lugar de mis ocurrencias.

-Eres mi valor?, entonces yo soy cobardía kupo?- Realmente era curioso esto de tener una conversación con una materialización del valor oculto, me hacía sentirme como si fuera su antitesis, aunque siempre encontraba útil mi miedo, me preveía de cometer errores muy grandes que pudiesen poner en peligro mi vida. -Solo estoy peleando con unas sombras, y no estoy solo kupo...como es eso de que eres lo que necesito para ser de provechopo?- ciertamente me sentía seguro peleando a la par de mis compañeros como Zanya, y mas aun teniendo cerca a Perceval que realmente parecía ser muy fuerte, sin mencionar a Stich que aun no había comprobado su fuerza máxima.

-Tendría que estar asustado frente a las sombras kupo, de otro modo, por que te presentarias o no kupo?-

¿Sigues sin entenderlo verdad? Ese temor que sientes es miedo a lo desconocido. Y yo el valor al que me refiero es al coraje y las agallas que nunca tendras, que intentes ser valientes por tus amigos, no te convierte en valiente, simplemente temes perderlos, al igual que en la Legion, tenias miedo de perder a tu mentor. - Dice mientras te va rodeando varias veces

-Miedo a lo desconocido kupo?- Su forma de hablar me estaba llamando mucho la atención, aunque aun seguía sin entender por que su voz sonaba tan agresiva, tan molesta con una forma de ser que llevaba años viviendo; realmente estaba hablando con el valor puro que no dependía de nadie mas? o al menos el que habitaba en mi corazón.

"Pero si me gusta lo desconocido, me gusta explorar kupopo" Eso meditaba en mi mente pues a fin de cuentas fueron palabras incapaces de salir ante su última declaración. Definitivamente tenía que ser una parte de mi mismo para conocer lo que llegue a sentir cuando la arena oscura me rodeo.

Agite uno de mis brazos a un lado mientras el otro golpeo mi pecho con el canto del puño cerrado, una forma de demostrar mi molestia al que me tratase de cobarde por algo tan lógico. -Que tiene de malo tener miedo kupo?, acaso eres valiente por no temer perder a un ser querido kupo?- realmente si esa fuese la forma de ser valiente a los ojos de mi contra parte pues ya me estaba molestando bastante su actitud.

-Que es el valor para ti kupo?, no temerle a nadapo?- Mis ojos trataban de seguir su moviemiento circular, perdiendolo de vista cuando pasase por mis puntos ciegos pero siempre atento a mi oido, algo me decía que no debía mantenerme tan calmado ante esto que estaba pasando.

Tu alter ego se frena frente a ti - ¿Si tienes miedo puedes salvar a tus amigos? ¿O acaso puedes hacer cosas impensables que el miedo te frena? Si alguien esta en peligro y tu tienes temor, de donde sacas el coraje, de ningun lado, pues no eres yo. - De pronto una tormenta de arena comienza a elevarse

-Si puedo salvarlos kupo- Dije con determinación pues no pensaba retractarme de mis palabras frente a mi valor, como el se llamaba. -El miedo a perderlos es también una fuerza, es un tipo de valor distinto kupopo-

Me sobresalte al sentir como los vientos se arremolinaban cerca nuestro, levantando una tormenta de arena que amenazaba con tumbarme pero que aun así no lograba asustarme al punto de obligarme a correr, ahora mas que nunca deseaba mantenerme firme en mi convicción ante ese ser de mi interior.

-Si eres yo entonces entenderas a que me refiero kupo-

¿Ah, si? - Dijo mirandote con una cara picara mientras chasquaba los dedos. El pequeño haz de luz que os envolvia se fue haciendo mas grande y grande hasta ver un desierto como escenario, y un gran esqueleto tras tu alter ego. Fijandote bien en el ves que Zayna, Noctis, Redtide y Jackal, estan atrapado entre sus huesos e inconscientes. - ¿Y como llamas tu a ese valor? El suicidio no se justifica como valor. ¿Como apoyas ese blandengue valor tuyo a la hora de enfrentarte a tus miedos mas profundos. - Uno a uno, todos tus miedos van apareciendo alrededor del escenario. - Dimelo, Kosmog

El temor me inundaba por completo, realmente no me había esperado que recurriese a trucos como esos para poner a prueba mi valia. No solo me mostraba a mis amigos atrapados dentro de un esqueleto mil veces mas grande del que me había causado ese trauma en el pasado, no, si no que otros de mis miedos me hacía mirar en todas direcciones y alejarme cuando trataban de alcanzarme, sin saber a donde escapar.

En ese instante entendí parte de las palabras de aquel ser sombrío, el valor no era algo para ser tomado tan a la ligera como venía hablando hasta ahora, simplemente lanzarse al vació no era suficiente, si había de hacerlo, si iba a sacrificarme por algo, al menos tenía que estar seguro de que iba a lograr mi objetivo.

Busca Caminos aparecio en mi mano y mis pies no tardaron mucho, luego de ese pensamiento, de entender lo que debía hacer. Correr como siempre lo había hecho, pero en dirección a mi mas grande temor y a la vez lo que mas odiaba, pues por el había sido bastante miedoso toda mi vida. Movi mis pies tan rápido como pude y me alce en vuelo luego de un salto, para dirigirme directo a la cabeza del esqueleto; pasaría de mi valor como si nunca hubiese estado ahí en primer lugar.

-Suelta a mis amigos kupooooo!!!- Gritaría al tiempo de buscar asestar una estocada entre los huecos de los ojos de esa calavera gigante, si iba a proteger a mis amigos como jure esa tarde, lo haría sin temor, sin vacilación.

Con un simple manotazo, el esqueleto te aparta del camino lanzandote al suelo - Un valor cobarde como te he dicho, de que sirve tener valor por tus amigos si a la hora de la verdad -Chasque los dedos y uno a uno desaparecen tus compañeros -, no eres capaz de serlo por ti mismo - poco a poco cada uno de tus miedos se acercan mas y mas a ti, y poco a poco te van pareciendo cada vez peores temores -Dime Kosmog, ¿DONDE QUEDA TU VALOR?

Un único manotazo de parte de ese esqueleto gigante basto para devolverme a la tierra y al mismo tiempo derrumbar lo que pensaba que era mi valor emergiendo finalmente, el que sabía que tenía dentro de mi ser, en alguna parte oculto.

Sentía el cuerpo pesado, sobre todo el espíritu. Trate de levantarme, de incorporarme de inmediato para ir al encuentro y pelear una vez mas, de imponerme a mis miedos; pero mi sangre se enfrió de golpe cuando los tuve tan cerca, cuando uno de mis mayores temores se cumplió al ver como mis compañeros desaparecían frente a mis ojos.

Lagrimas, no pudieron ser contenidas por mas que me forzara a no llorar, pero el ver como estaba rodeado y solo, me hacía recordar lo sucedido con Fumei. Ya no sentía a Pathfinder en mi mano, no estaba cerca ni a la vista, tenía miedo de levantar siquiera el rostro pues podía ver de reojo como una parca y un mogurí anciano parecían extender sus brazos huesudos hacía donde estaba; se juntaban junto con otros seres que parecían formar poco a poco una jaula a mi manera de ver la situación, me estaban encerrando, nada me provocaba mas miedo que ser encerrado.

Sollozaba mientras mis manos abrazaban mi cuerpo y mis orejas caían por la depresión que me causaba estar así, solo, rodeado de tantas cosas horribles. -Zayna...Noctis...kupo- Susurraba sus nombres con pesadez en mi voz. -Lilith, Jackal kupooo- y seguía nombrando personas importantes. -Maestra Aqua, Red Tide...Fumei-, pero un trio de nombres resonaron al final en mi mente sin poder evitar pronunciarlos, aquellos que por un momento me odie por no recordarlos. -Fran, Baltier.....Montblanc-.

Recordé cuando conocí a cada uno, apenas era un niño aun cuando conocí a ese par de piratas, ellos me enseñaron la verdadera libertad, me contaron sus historias de sus aventuras e incluso me inspiraron a ser como ellos, pero quien mas estuvo cerca mio fue Montblanc.

Trataba de recordar los momentos que pase con cada uno y como las palabras de Eraqus sobre lo que paso con nuestros mundos me daba a indicar que era muy probable que jamas los volviese a ver, pero en lugar de sumirme mas en tristeza, me dio una revelación. Me levante como pude, una vez mas sintiendo el peso de Pathfinder en mi diestra y de Eolo en la surda, mi vieja espada, aquella que me regalo Baltier antes de irse de Rabanastra. Mis temores ahora se veían incluso mas grandes que antes, pero no quería retroceder.

-Todos se van algún día kupo- Era una realidad que detestaba aceptar. -No puedo depender de ellos eternamente kupo- Me limpiaba las lagrimas con la manga de mi camisa y trataba de sonarme la nariz soplando fuerte, pero no lograba mucho mas que hacer ruido. -Pero ellos nunca me abandonan kupopo....Ni tu ni nadie puede quitarmelos de mi corazon kupo-

Adoptaría postura de batalla con Eolo al frente estirada, señalando al que tuviese frente a mi y con Pathfinder en mi diestra, dispuesta a ayudarme a defender mi retaguardía al postrarme de lado. -Si crees que puedes hacerlo intentalo kupo, no me los quitaras kupopo- Quizas no podía ver a mi valor a los ojos por mis miedos que tenía en frente, pero si le haría llegar mis palabras con determinación.

A medida que avanzas poco a poco enfrentandote a tu "valor" escuchas los sonidos de la caida de los monstruos y voces que reconoces - Al temor se enfrenta, es hora de que te enfrentes a tu temor, kupo - Esa era la voz de Montblanc - Adelante fiera, estamos contigo - Esa era la voz de Balthier - Vence, y se mas fuerte - Esa era la voz de Fran.

Cuando abres los ojos para comprobarlo, solo tu alterego ante ti sacando un estoque muy similar al tuyo para cubrirse de tu golpe. En guardia y cubriendo aun tu golpe, te mira y sonrie con una sonrisa picarona. - Ahora estas demostrando quien eres, en realidad - tu alter ego se desvanece entre las sombras soltando tu ataque y la oscuridad se va retirando poco a poco, descubriendo un lugar que viene a tu mente, como el ultimo lugar en el que estuvistes antes de todo.

Fin de la escena