Partida Rol por web

Morgan estaba esperando pacientemente a que dijeran su nombre cuando ocurrió toda la escena con los Mortífagos. Al principio no entendía nada y se quedó quieto en el sitio, pero cuando luego empezaron a mencionar a los "sangre sucia" y comenzaron a echarles, sintió cómo la rabia recorría poco a poco su cuerpo ¡Estúpidos! Pràcticamente todas los magos tienen algún antepasado muggle. Seguro que hasta los sagrados veintiocho tienen algo de sangre muggle aunque lo nieguen.

Todo el caos que se montó hizo que recordara las cartas de su prima y se preguntó si ella estaría metida en todo esto Me da igual lo que haga, no conseguirá asustarme. Le guste o no, yo soy un Black.

Al final todo se solucionó cuando llegó el Director y la ceremonia de selección fué volviendo a la normalidad. Después de unos cuantos alumnos, por fín dijeron su nombre.

¡MORGAN BLACK!

Aunque sintió bastantes nervios, fingió que estaba tranquilo y subió lentamente hasta sentarse en la silla. Cuando le pusieron el Sombrero Seleccionador en la cabeza, este comenzó a hablarle dentro de su cabeza

- ¡Un Black! mmmm Me pensaré bien dónde mandarte... Gryfindor no creo que sea el mejor lugar para ti, no, Gryfindor no. Y Hufflepuf menos aún, allí no creo que encajarías muy bien. Déjame pensar un segundo... Casi toda tu familia fué a Slytherin, y creo que allí podrían sacar provecho de tus habilidades, pero se que nunca estarías cómodo allí, ¡Tú te lo pierdes! No me queda más remedio que enviarte a Ravenclaw. Pero recuerda, podrías haber sido grande en Slytherin

-¡RAVENCLAW!

Al final, las ganas de distanciarse de la parte oscura de su familia convencieron al Sombre Seleccionador para que le enviara a otra casa que no fuera Slytherin, pero no pudo quitarse las últimas palabras que le había dicho ¿Me habré equivocado? Y si lo he hecho, ¿Podré cambiar de casa en mitad del curso?

Con esas dudas llegó hasta la mesa de Ravenclaw dónde apenas hizo caso a las palabras de sus nuevos compañeros y sólo les dirigió un escueto agradecimiento cuando le dieron la bienvendida - Gracias Apenas probó bocado, y cuando por fin terminó la cena, se dirigió a la Sala Común de Ravenclaw sin hablar con nadie y se metió en la cama.