Tras el duelo de Iaijutsu y beber un poco de sake, decidistes descansar del largo viaje e ir a tu habitación a descansar.
Estabas plenamente dormido, pero unos ruidos te desvelan. Ahora no puedes volver a coger el sueño, ya que estás algo nervioso por la reunión nada menos que con el Emperador en persona, esperas estar a la altura de la situación.
Te pones de pie en medio de la habitación, quizá un paseo nocturno por los jardínes te relaje un poco y puedas conciliar el sueño de nuevo...
Bajo con paso firme pero lento hasta los jardines, todo parece tranquilo y en calma es lo que necesitaba para despejarme. El sonido de una pequeña fuente relaja un poco su corazón, el aire fresco mueve su pelo ya que bajó sin casco, solo el kimono.
Un pequeño dolor de cabeza se hace latente debería haber bebido menos sake ayer miro algún sitio donde sentarme a observar el cielo, las estrellas.
Lo siento, es que estoy un poco liada xDD
Paseas a solas por los jardines, tan sólo el sonido de los grillos te acompaña. Entonces ves a Toku Michi, que viene de alguna otra parte del palacio y se dirige hacia las habitaciones; pensabas que sólo los guardias estarían despiertos, pero parece que no es así.
Él parece no haberse percatado de tu presencia, ya que camina inmerso en sus pensamientos...
Al mirarle y ver que estaba desvelado al igual que yo, pues no me preocupo demasiado, aunque me parece un poco extraño que esté despierto así que decido seguirle ¿Irá de nuevo a las habitaciones? Si es así podría aprovechar para volver a dormir, aunque ando algo escaso de sueño.
El hombre se da la vuelta al oir tus pasos y te saluda atentamente.
- Buenas noches emisario, ¿disfrutando de la noche?
Paro en seco y me inclino a su misma altura.
Ciertamente me despertaron ruidos y al no poder volver a dormir decidí bajar a tomar el aire, ¿y usted? - le pareció rara la situación.
Seguimos en la escena "Otosan Uchi"