Partida Rol por web

El final de la historia.

Toku cabalgó sin descanso hasta las tierras de la Grulla. Solo se detuvo un par de veces para cambiar de montura, pero no pasó la noche en ninguna posada. No porque el mensaje que llevaba tuviera alguna urgencia. De hecho, pronto todo el mundo se enteraría. Lo que impulsaba al Grulla a moverse a través de la noche, era un dolor amargo y profundo. Un peso que le oprimía el corazón, y que solo se disipaba con el viento frío en el rostro y la soledad del camino. Toku no hubiera podido pegar un ojo aunque hubiera querido.

Cuando llegó a Kyuden Kakita, solicitó una audiencia con Kakita Yoshi. Aprovechó el tiempo de espera para tomar un baño que relajara su cuerpo y que serenara su espíritu. Exaltado como estaba, bien podría haber incurrido en alguna actitud altamente reprobable.

Cuando finalmente fue atendido, sus palabras salieron a borbotones, casi sin coherencia. Necesitaba darle forma a sus pensamientos. Necesitaba liberarse de ellos.

- Kakita-sama, me temo que no he estado a la altura de lo que se esperaba de mí. Debo pedir perdón a su hermano y a usted, por haberlos defraudado. Sin embargo, debo decir en mi favor, que nunca pensé que nuestro amado emperador se hubiera alejado tanto de las Tradiciones. Incluso llegó a manifestar su deseo de terminar con uno de los Grandes Clanes. Yo le manifesté que nuestro Clan lo apoyaría en todas sus decisiones, y procuré no contradecirlo jamás. Pero mis propias convicciones me impulsaron a que intentara disuadirlo de semejante acción. La mayoría de los emisarios apoyaron mi punto, y puede que hayamos hecho recapacitar a Hantei-sama. Sin embargo, tratándose de alguien como él, no podría asegurarlo.

- En ningún momento dejé de recordarle lo útil que había sido nuestro Clan a sus antecesores, e incluso tuve oportunidad de mencionar lo acertado que sería proclamar un matrimonio real en las actuales circunstancias. Pero, tal cual me habían prevenido, parece poco afecto a escuchar a los Clanes.

- Para colmo de males, un desgraciado hecho trastocó toda la negociación. Al parecer, la propia sobrina del Emperador fue secuestrada de la propia ciudad imperial. Un sujeto de nombre Ishimi fue el autor de semejante crimen, y le dimos muerte, aunque toda la situación me sigue pareciendo muy oscura y confusa. En ese desgraciado hecho, también perdió la vida el propio Campeón Esmeralda.

- Así, vuelvo a estos muros portando la palabra de nuestro Augusto Emperador, aunque con muchas dudas sobre el futuro del Imperio. Hantei-sama otorgará su favor a aquellos que lo ayuden en su cruzada contra las Tierras Sombrías. Y también espera que todos los clanes envíen a sus mejores hombres para participar en la elección del nuevo Campeón Esmeralda. Son oportunidades inmejorables para posicionar a nuestro Clan.

- Pero yo también atendería a otros asuntos, tal vez menos gloriosos, pues creo que pueden reputarnos tanto o más beneficio. Creo que hay algo oscuro en la historia de Ishimi, y puede esa oscuridad haya salpicado a la propia familia real. Por otro lado, deberíamos encontrar las causas ocultas que enfrentan a Hantei-sama con el Escorpión. No seré yo quien salga en su defensa, pero estoy seguro que todos nos veríamos afectados si se alterara el Orden Celestial.

- En fin, Kakita-sama, no deseo importunarlo más con mi presencia, pues ya he utilizado demasiado de su valioso tiempo. Tan solo soy un emisario, y mi labor ha concluido. Ahora, dejo esta información en aquellas mentes más sabias que la mía, para que ellas decidan cual será nuestro curso de acción. Yo, como humilde servidor de mi Clan, estaré orgulloso de seguir sus órdenes.