Perino se dirige hacia la palanca y al acercar la mano las runas de esta se iluminan con una luz tenue. Es entonces cuando del pozo aparece la cabeza de un hombre de armadura reluciente.
Cuando estaban a punto de activar la palanca que cerraran el cierre del pozo, Delenia tropieza con unos aperos de minería creando un estruendo considerable que hace que todos se giren hacia ella. Al caer al suelo varias herramientas caen sobre ella, arañando y ensuciando sus ropas.
La mirada de los enanos es una mezcla de sorpresa, indignación y diversión.
Efectivamente, has hecho lo que se denomina una pifia, es decir un falló garrafal.
Un dolor intenso recorre el cuerpo de Lord Devirius, está flotando en un pozo de agua, del color turquesa similar al de Karetia, sin embrago la visión era diferente. Cuatro enanos con cerradas barbas miraban al pozo cuando Devirius llegó. Uno de ellos parece querer activar un artilugio mágico que activaría algo en el pozo, pero justo cuando lo va a hacer y estruendo de metal cayendo al suelo resuena en la sala. Todos miran a una hobbit que ha entrado tirando todo. Si Devirius quiere salir, ese es el momento.
mmmmm... hola. Me he perdido...
digo mecánicamente y sin pensar la respuesta que tenía ideada por si me descubrían. Mientras estoy asomando la cabeza entre cubos y cacharros variados no puedo mirar a los enanos sino al hombre envuelto en metal que sale del pozo.
Oh... ¡¡¡wowwww!!! ¡¡¡¡Un guerrero de brillante armadura!!!! ¿qué hace ahí dentro? ¿por qué brillaba el pozo? ¡Y para colmo de males debo estar hecha un desastre!
Comienzo a sacudir mis ropas manchadas por los restos del hollín, antracita y polvo sin dejar de mirar boquiabierta la escena. No soy capaz siquiera de pensar el enfado monumental que causaré a mi tio como arruine sus tratos comerciales con los enanos por husmear donde no me llaman, pero ahora mismo me da igual.
¿Que es este sitio,donde están los demás que ha pasado? en la mente de Devirius se acumulaban las preguntas,pero las respuestas no las encontraría flotando enb el agua. El capitán sale del pozo tratando de mostrarse digno y respetuoso, no tenía claro donde estaba, pero no entraba en sus planes que ningún ser vivo pudiese pensar mal de su rey por su culpa. Una vez en pie y fuera del pozo comprueba que todo siga en su sitio, pertenencias, vestiduras, armas... y mira la escena que se crea ante sus ojos, una hobbit ha irrumpido con estruendo.
De momento no hace nada, simplemente permanece erguido observando, necesita analizar la situación...
Cuando el soldado con pinta de tener alto rango sale del pozo y mira a su alrededor. Los enanos mas apartados alzan las hachas que portaban.
¡Quieto, maldito espectro, no te muevas!
Un enorme enano que se disponía a accionar la palanca lo hace en ese momento un fogonazo de luz parte de unas runas en la palanca. Acto seguido la parte superior del pozo se cubre con una neblina azulada, como una membrana que lo mantendrá sellado. Al cabo de unos instantes la luz desaparece y la membrana se convierte en piedra rugosa.
Quiero acercarme a ver el pozo. No puedo creer lo que estoy viendo. Brilló y luego se convirtió en piedra. es... ¡Magia! Pero la presencia del espectro me atemoriza. Los enanos parecen estar en guardia ante el recién llegado y yo no debo fiarme tampoco. Pero son muchos bravos guerreros armados y él solo es uno, y podrán reducirlo fácilmente si fuera peligroso.
Wiiiiiii!!!!! no puedo evitar emitir una expresión de sorpresa mientras intento asimilar lo que ha sucedido a mi alrededor.
¿quién es este espectro? ¿cómo lo habéis sacado de la piedra? Seguramente haría bien en callarme, pero no puedo evitar seguir preguntando, muerta de curiosidad. Mis ojos, todavía abiertos como platos, chispean de emoción
¿Viene... del infierno? añado pero sin atreverme a acercarme desde mi posición.
Vete de aquí le dice Perino con la mano aún brillándole tras activar la palanca. No le hemos sacado queríamos evitar que entrase, pero al seguirnos nos has despistado. - La voz del enano sonó con verdadero enfado. - Lo enviarán los neths para eliminarnos, esperábamos que fuera Sevryl el que viniera, no él.
Conociste a Sevryl, era un mago enano que os acompañó en la lucha de la corona de difuntos. Pero un dragón lo mató en el desfiladero de Sparscret. Hace mucho.
La fuerte voz del enano me saca de mi ensimismamiento y muerta de vergüenza doy un par de pasos atrás. Perino está sacando nuevamente su verdadero carácter y pienso que cuando era tan amable conmigo era solo un espejismo transitorio, Aún boquiabierta me voy retitando, por donde he venido, pero no me voy del todo, no todavía. Me cuesta creer que ese hombre tan dócil, que no había hecho amago de usar sus armas fuera un peligro para unos enanos que le superaban en número,
Todavia sujetando la bolsa de azafrán en mis manos, me quedo entre las sombras intentando ver el desenlace de este emocionante episodio.
Lord Devirius se queda asombrado al ver lo que ocurre en el pozo y se aproxima para tocar lo que antes fue agua y comprobar si era realmente piuedra o un mero espejismo.Una vez comprobado esto se vuelve hacia los enanos que hace tan solo un instante estaban regañando a la mediana....¿podríais volver a hacer que esto fuese agua?Hay gente a mi cargo, compañeros, al otro lado que venían detrás de mi huyendo de esos neths de los que hablais... dicho esto da unos pasos hacia ellos,sintiendose tentado de contarles el final de Sevryl, ya que al parecer le esperaban, pero no le parecio que la situación fuese la más propicia y decidió esperar un poco más.
No trates de engañarnos espectro. - La voz del enano más grande parecía muy crispada. - Tus amigos ya no podrán pasar, no permitiremos que invadan nuestra comuna. Danos tus armas y contesta ¿A qué has venido a Österlaar?
Pero si no parece un espectro... parece un hombre, y además guapo y apuesto. pienso escondida, acurrucada en las sombras, con miedo hasta de respirar por miedo a que me escuchen y a hacer enfadar mas a los enanos.
Claro, que si me descubren tengo una buena excusa. Está claro que no sabía volver sola porque soy forastera y sino me guía Perino me podría perder.
Así que observo detenidamente la escena todo lo bien que me permite el ángulo de visión que me permite el recodo donde estoy acurrucada y rezo por que no sean demasiado duros con el soldado.
No soy ningún espectro,anunció tranquilo,soy un humano, mi nombre es Lord Devirius, y soy capitán del ejército.da un paso hacia los enanos,manteniéndose firme pero sin parecer amenazador,no se por que estoy aquí, huía de unos Nerth con algunos compañeros y gente a mi cargo.Nos metimos en el pozo para evitar que nos cogiesen,los otros vienen detrás de mi.
Los enanos parecieron dudar. Hablando en legua enana por un instante, pocas veces usaban ese lenguaje reservado a ceremonias antiguas.
Si te seguían tus amigos sin duda a perecido contra el sello de Sevryl.
- Los enanos parecieron relajar algo sus hachas pero permanecían en guardia. -
Que decida el señor Merin. Deberás darnos tus armas
Parece bastante claro que se ha acabado el espectáculo. Llevarán al forastero ante Merin, y cuando eso suceda, yo debería estar allí.
Me alegra ver que los ánimos se han calmado y parece que ese guerrero no corre peligro.
Así pues, caminando de puntillas para hacer el menor ruido posible me doy media vuelta y comienzo a caminar despacito, para no llamar la atención de nadie. Y cuando los enanos ya no están a la vista comienzo a acelerar el ritmo que se convierte casi en una carrera, y todavía sujetando la arrugada bolsita de azafrán todavía en mis manos.
Y nuevamente guiándome por los bajorelieves de los pasillos regreso hasta el comedor , impaciente por escuchar la historia que ese forastero tiene que contarnos.
Y unos pocos metros antes de entrar recompongo lo mejor que puedo mi vestido y mi peinado, algo accidentado tras mi torpeza con los utensilios de minería, tomo aliento y tratando de fingir que no he visto nada, entro buscando una excusa que justifique mi retraso.
dejo en el suelo con cautela la espada y el escudo, la daga va oculta entre las ropas...me levanto y sigo a los enanos,llevadme ante Meryl, mis compañeros me necesitarán si esos Nerths les encuentran...
Es Merin. A Sevryl le concías, era compañero de viaje en la primera campaña, pero un dragón en la Sparscret le mató. Ellos no parecen saberlo y le están esperando.
Pasad a la escena La Comuna Östelaar.