John no podía ver nada a su alrededor. Acababa de volver en sí, o de despertarse... y lo único que le permitió saberlo fue notar el tacto del frío suelo debajo de él, y las lágrimas secas sobre su rostro, detrás de sus gafas rotas.
¿Qué había pasado?
Se esforzó por recordar, y recordó aquél rellano de escalera que se había roto. Los gritos de sus compañeros. El dolor de cabeza que había notado... Ahora se encontraba bien, pero estaba solo. A su alrededor no había más que oscuridad y silencio. Ló unico seguro era el suelo duro sobre el que se encontraba.