Partida Rol por web

La base de datos de Cassandra no era algo accesible tal y como lo conocía, aunque sí podía intentar acceder a ella de una forma que desconocía. La membrana no era para nada algo que hubiera visto ni conociera; ni siquiera sabía de qué material estaba hecha o en qué material estaba moviéndose ella. 

- PHRP... - repitió Medea, en un tono pausado - Y una base subterránea, dices... Me temo que no me suena ninguno de esos nombres, pero no le veo sentido a ese plan. ¿De qué sirve construir bajo un planeta si no se deja crecer nada en la superficie? A menos que se quiera ocultar de alguna forma... - murmuró la voz de nuevo. Tras el contacto, Medea tardó unos segundos en responder de nuevo - Me temo que ahora mismo no sé cómo ayudarte, Cassandra. Pero yo estoy en una especie de habitación blanca, vacía e infinita. Recuerdo haberme ido a dormir, así que sí, aún tendría que despertarme. Pero esto es un sueño, no creo que sirva de mucho darte direcciones aquí... Lo que sí te puedo decir es que he visto algo saliendo de la pared.

- Podría ser, ni idea. No puedo ver dónde estás, siento no poder ayudarte más. - la voz de Eduardo se pausó unos segundos tras escuchar el comentario de Ulises, empezando a sonar una especie de tos o risa poco después - ¡Jaja! Eso es... Eso es algo muy bonito de decirle a alguien que te importa. Un poco triste, también, pero es bonito. Aunque imagino que no lo dices con esa intención, pero... Bueno, procuraré que tengas algo de luz, ¿vale? ¡Y dale caña a la puerta!

Al acercarse más a la membrana, el cuerpo de Ulises formado por simples trazos se comenzó a dibujar de forma más consistente hasta que llegó a tener su aspecto habitual en el momento del toque. En ese instante, la membrana reverberó y todo el espacio fluido en el que estaba siguió su movimiento. Con un último empujón, la membrana cedió y permitió al robot atravesarla como si hubiera sido un líquido todo este tiempo. Ulises había acabado en un lugar opuesto al que estaba, en una gran habitación blanca, con su cuerpo totalmente formado y con un suelo bajo sus ruedas. Tras él, solo quedaba una pared y ningún signo de que allí hubiera una membrana. 

Y allí, al frente, alejada unos pasos de Ulises, había una figura que de forma automática reconoció como humana. Tomando de base un humano medio, ésta era ligeramente más baja y delgada, pero no había muchos más datos que se pudieran tomar de ella. La figura se encontraba tachada por varios garabatos negros en constante movimiento, temblaba y se deformaba a ratos, como si de alguna forma su forma estuviera corrupta. 

- Jo... der... ¿Ulises? Eres tú, ¿verdad? - la figura preguntó con la voz de Edu, sin llegar a moverse del sitio.

La voz de Lika respondió con una risa alegre y cantarina que resonó por todo el espacio. 

- ¡No es para tanto, solo es mimir! Es normal, ¿no? - Lika se quedó en silencio unos instantes, volviendo a hablar en voz baja - ¿Ningún humano? Entonces... ¿Tú tampoco tienes familia? - tras aquella pregunta y su consecuente respuesta, Lika volvió a responder - Ya, estos sueños son un poco raros... Creo que nunca ha pasado, pero en los sueños siempre pasan cosas increíbles.

Al acercarse mejor a la membrana, la robot se dio cuenta de que no parecía sujeta con nada, pero tampoco era capaz de dar la vuelta a su alrededor. Era como si fuera el fin de ese espacio. Al acercar la mano, una formada por simples trazos, ésta se comenzó a dibujar de forma más consistente hasta que llegó a tener su aspecto habitual en el momento del toque. En ese instante, la membrana reverberó y todo el espacio fluido en el que estaba siguió su movimiento. 

- ¡Hala! ¡¿Qué ha pasado?! - respondió la voz de Lika tras ese contacto, respondiendo después a las preguntas de Natur - Oh, tienes amigos de lejos. Eso está bien, aunque es un poco triste si no puedes hablar con ellos ahora. ¡Será mejor que salgas de ahí cuanto antes! - la voz de Lika se calló durante unos segundos tras la última pregunta de Natur. Sin embargo, a los pocos segundos estalló a la vez que la membrana se iluminaba en un fogonazo - ¡SÍ! ¡¡¡Podemos ser amigas nosotras también!!! ¡En cuanto puedas salir de allí, iré a buscarte! ¡Ya le preguntaré a mi tía cómo! 

Al parecer, EARU interaccionando con aquella membrana provocaba algún cambio donde fuera que Petro se encontraba. El humano parecía estar de acuerdo con que el robot siguiera experimentando para obtener más información, aunque realmente EARU no necesitaba su permiso para continuar. Aún así estaba bien tenerlo.

El gigante metálico examinó cómo aquella luz daba forma a su cuerpo mientras que volver atrás se la arrebataba. Después siguió avanzando, viendo hasta dónde se extendía la membrana que convertía los trazos en su cuerpo aparentemente normal, y siguió empujando hasta que la membrana cedió. Fue una sensación extraña, la resistencia que ofrecía aquella membrana era semejante a la de un líquido y no un objeto sólido propiamente dicho. Debía guardar aquel dato y recordarlo más adelante, comprobar si un material como aquel existía.

Se encontraba en un lugar extraño, y detrás de él tenía una pared. Aquello realmente no tenía ningún sentido, ¿de dónde acababa de surgir? De hecho, ¿el lugar en el que acababa de estar era realmente un "lugar"? Los datos se cruzaban en su procesador, pero no encontraba ninguna respuesta.

En cambio, desvió su atención hacia la otra figura en la habitación. Un ser humano, si sus datos no le fallaban. Aunque había algo extraño en él, no tenía constancia de que los humanos tuvieran un aspecto tan... glitcheado.

- Afirmativo. - respondió el gigante metálico con calma. - Soy EARU. - dijo, mirando fijamente la apariencia de aquella figura. - ¿Es usted Petro? - preguntó, y añadió algo más que estaba deseando saber. - ¿Es un ser humano?

- Negativo, esta unidad pertenece a la directiva PHRP. La cual se desenvuelve en Bion a la espera de la vuelta de la humanidad.- explicó GOOD DOGO con calma mientras seguía tanteando la membrana. El perruno robot siguió escuchando a su nuevo usuario mientras seguía con su principal función, tal y como se lo hizo ver a Nick.

- Mi principal función es exploración y reconocimiento. Por lo que estoy comprobando y analizando el material que se encuentra ante mí. Parece reaccionar a mi presencia pero no de forma agresiva y...- la unidad ΔΩΓΩ interrumpe su explicación cuando todo empieza a cambiar en su entorno.

Sus sensores al fin parecían funcionar perfectamente, pues recibía información de estar en una sala blanca y delante de él... un humano. Lo supo sin más y sin embargo había algo raro.- ¿Datos corruptos? ¿Era Nick simples datos que tenía guardados?

Sin embargo un registro no podía responder como acababa de hacer, parecía verlo y avanzar hacia él. Estaba en tensión y dispuesto a defenderse, pero seguía la duda si era humano y tenía directivas muy claras en ese respecto. No herir o dañarlos de ninguna manera.

- Afirmativo, soy la unidad ΔΩΓΩ. Sin embargo usuario, ¿se encuentra estropeado?- en cuanto dice eso se da cuenta de su error.- Disculpa, Nick. Esta unidad no está acostumbrada a tratar con sus usuarios aún. ¿Se encuentra sano? ¿Es normal que los humanos tengan letras negras parpadeantes en su piel?

Yo no entendí del todo porque empezó a reírse Edu... ¿había dicho alguna cosa graciosa o algo? -¿Eh...? Es que... es verdad, aquí todo esta muy negro menos cuando hablas que se hace la luz...- dije con cierta confusión. Comentarios así me costaban pillarlos... soy más de saber como acabar con los gérmenes para asegurar la paz y limpieza en la base -Gracias- le agradecería al final sobre lo de "dar caña" a la puerta... aunque supongo que se refiere a empujar la puerta.

Fue raro... fue como atravesar un muro de burbuja... o no se, algo así. O como meterse en un bloque de gelatina. Pero bueno... al final atravesé el sitio... y acabé en el lugar lleno de blanco. Y en medio... supongo que ese era... -¿Edu?- preguntaría cuando le mirase, escuchando sus palabras y acercándome algo a él... aunque sin duda me veía extrañado -Si, soy yo... eh... ¿estás bien...? Pareces... "glicheado"...- le preguntaría algo preocupado por si le dolía o algo... No se, no conozco muchos humanos... Pero creo que eso en concreto no era normal.

- ¿De qué estás hablando? -Cassandra miró en todas direcciones tratando de buscar a su interlocutora, quizás en un acto reflejo de comunicación básica humana- ¿Dónde estabas cuando te fuiste a dormir? Medea, necesito más información, lo que me planteas es un ilógico. No hay humanos en la Tierra desde hace mucho tiempo.

Cassandra accedió a sus primeros recuerdos en la base ¿vio marcharse a los humanos? ¿llegó a interactuar con alguno? ¿recordaba a algún humano quizás? ¿fueron activados remotamente? ¿había habido algún humano alguna vez en la base? ¿quién les mandó construirla? Las preguntas ejecutaron una orden de búsqueda en los datos guardados en su disco duro y en la nube.

- ¿Algo ha salido de la pared? ¿De qué pared? ¿Qué ha salido?

- ¿Familia? Mi familia seguramente algún día fue el que me creó, pero Natur-Bio desconoce quien es esa persona. Cuando desperté ya no había humanos, sólo estábamos nosotros.-Aclaró la robot a las preguntas de la vocecilla.- Comprendo. Ojalá algún día yo pueda soñar también. Aunque esto sea lo más cercano a eso que viviré seguramente.-Emitió un par de pitidos y sus ojitos se volvieron chistosos.

- No lo sé. Sólo toqué la membrana.-Cuando comentó lo de los amigos, esta se quedó pensativa ¿Ella tenía amigos? ¿Los que la acompañaban realmente se podían considerar amigos?.- Nosotros no tenemos una palabra cómo la de "Amigos", sólo somos compañeros, nos emparejamos para patrullas... Pero una vez volvemos, no solemos relacionarnos unos con otros.-Aseguró entre decepcionada y neutral. Volvió a tocar la membrana con suavidad y empujó con más fuerza que la primera vez, cómo queriendo salir de ese lugar.- ¡¡Espero volver a verte, Lika!! Aunque sólo sea en este extraño lugar.-Iba a presionar, pero recordó algo.- No sé dónde estás, pero... No salgas, la tierra carece de las condiciones óptimas para la supervivencia humana ¡¡Cuando todo mejore seré yo quien te busque, te lo prometo!! 

La figura siguió inmóvil pero en movimiento unos segundos más, antes de comenzar a acercarse a EARU con pasos lentos. Se quedó a un par de pasos del robot, pero por muy cerca que estuviera, su imagen parecía romperse, tacharse, borrarse, constantemente. 

- Sí, lo soy... Respondiendo a ambas preguntas. - confirmó con la voz de Petro - ¿A qué viene esa pregunta? ¿Tan distinto te parezco?

Antes de que EARU pudiera responder, percibió algo tras él. Una masa acuosa oscura se deslizó hasta él, ahogándolo, desde la pared que había a sus espaldas. A pesar de que intentó liberarse, vio cómo el caos que rodeaba a Petro comenzaba a hacerse más grande mientras éste retrocedía unos pasos. Las líneas que lo tachaban se hicieron más gruesas y su forma se despedazó en varios fragmentos, cubriendo de oscuridad la habitación blanca. 

La voz había sido apagada por aquella masa que tiraba y arrastraba a EARU violentamente hacia el vacío del que había salido, apagando la posibilidad de volver a traspasar ese lugar. Varios mensajes de alerta comenzaron a rodearle en ese espacio, cubriendo todo cuanto tenía a la vista y casi atravesándole sin que pudiera hacer nada. Sus alarmas comenzaron a sonar, lejanas, rotas... Y finalmente, todo se apagó de nuevo con un chispazo.

- ¿PHRP? Pero... la humanidad ya está aquí. Es decir, siempre hemos estado aquí. - respondió Nick, quedándose después en un largo silencio mientras el robot atravesaba la membrana. Una vez al otro lado, la misma voz de Nick provino de la figura caótica - ¿Estropeado? ¡Eh, eso debería decírtelo yo a ti! - la figura se inclinó hacia un lado, riéndose de nuevo - No pasa nada, pero ¿a qué te refieres...?

Antes de que GOOD DOGO pudiera responder, percibió algo tras él. Una masa acuosa oscura se deslizó hasta él, ahogándolo, desde la pared que había a sus espaldas. A pesar de que intentó liberarse, vio cómo el caos que rodeaba a Nick comenzaba a hacerse más grande mientras éste retrocedía unos pasos. Las líneas que lo tachaban se hicieron más gruesas y su forma se rompió en varios fragmentos, cubriendo de oscuridad la habitación blanca. 

La voz había sido apagada por aquella masa que tiraba y arrastraba a GOOD DOGO violentamente hacia el vacío del que había salido, apagando la posibilidad de volver a traspasar ese lugar. Varios mensajes de alerta comenzaron a rodearle en ese espacio, cubriendo todo cuanto tenía a la vista y casi atravesándole sin que pudiera hacer nada. Sus alarmas comenzaron a sonar, lejanas, rotas... Y finalmente, todo se apagó de nuevo con un chispazo.

- Sí, sí, ya imagino. Es solo que ha sido... Da igual, ya te lo explicaré otro día. - contestó Edu aún medio riéndose. 

Al llegar al otro lado, Ulises comprobó cómo la figura retrocedía un par de pasos más cuando éste se acercaba, deteniéndose al escucharle. La voz de Edu vino claramente de ese ser, que se dejó de inclinar hacia atrás en cierto momento. 

- Yo sí... Pero podría decir lo mismo de ti. ¿Qué... qué te ha pasado? 

Antes de que Ulises pudiera responder, percibió algo tras él. Una masa acuosa oscura se deslizó hasta él, ahogándolo, desde la pared que había a sus espaldas. A pesar de que intentó liberarse, vio cómo el caos que rodeaba a Edu comenzaba a hacerse más grande mientras éste retrocedía unos pasos. Las líneas que lo tachaban se hicieron más gruesas y su forma se rompió en varios fragmentos, cubriendo de oscuridad la habitación blanca. 

La voz había sido apagada por aquella masa que tiraba y arrastraba a Ulises violentamente hacia el vacío del que había salido, apagando la posibilidad de volver a traspasar ese lugar. Varios mensajes de alerta comenzaron a rodearle en ese espacio, cubriendo todo cuanto tenía a la vista y casi atravesándole sin que pudiera hacer nada. Sus alarmas comenzaron a sonar, lejanas, rotas... Y finalmente, todo se apagó de nuevo con un chispazo.

- ¿Cómo que dónde estaba? Obviamente, en mi cama... creo. Tal vez en mi mesa, pero no veo qué tiene eso que ver. - la voz de Medea se quedó en silencio unos segundos antes de responder - Sé que comparada con una I.A. puede sonar a que estoy equivocada o no recuerdo bien algún dato, pero te estoy diciendo la pura verdad. Esto es un sueño, concretamente uno mío ya que tú no deberías poder tenerlos. Y sí, la extinción humana es algo que nos preocupa a todos pero aún no se ha producido...

Intentando acceder a su memoria, Cassandra solo llegó a recordar lo que todos los droides recordaban: Haberse activado "solos" en uno de los núcleos preparados de Omega con la instrucción del PHRP, seguramente de forma programada o en remoto. No habían visto humanos más allá de los registros que les habían guardado de antemano y dadas las condiciones atmosféricas exteriores, era imposible que hubiera humanos viviendo de forma natural. Por no mencionar que el mismo protocolo explicaba que todos habían abandonado el planeta. 

- La pared de la habitación blanca en la que estoy. - explicó Medea - Y no... no lo sé exactamente. Ha sido un instante, como un borrón negro. 

- Oh... Qué pena. Pero la tía dice que debemos estar agradecidos por haber nacido, así que entonces está bien que te hayan hecho. - concluyó Lika - ¡Sí! Los sueños son divertidos, tienes que repetirlo. ¿Y qué membrana? - respecto a la explicación de los amigos, Lika respondió con otro murmullo, como confirmando que lo había entendido - ¡Ah, ¿ya te vas?! ¡Vale, pues espero verte pronto otra vez! ¡Y no te preocupes, no saldré! - exclamó notablemente emocionada. 

Al acercarse de nuevo a la membrana, Natur comprobó que ésta se extendía hacia delante, dando forma a todo su cuerpo hasta casi el punto de sentir que estaba físicamente en aquel lugar. Con un pequeño empujón, la membrana cedió y permitió a la robot atravesarla como si hubiera sido un líquido todo este tiempo. Natur había acabado en un lugar opuesto al que estaba, en una gran habitación blanca, con su cuerpo totalmente formado y con un suelo bajo sus piernas. Tras ella, solo quedaba una pared y ningún signo de que allí hubiera una membrana. 

Y allí, al frente, alejada unos pasos de Natur, había una figura que de forma automática reconoció como humana. Tomando de base un humano medio, ésta era mucho más pequeña, poco más alta que Natur sin su traje de exploración, pero no había muchos más datos que se pudieran tomar de ella. La figura se encontraba tachada por varios garabatos negros en constante movimiento, temblaba y se deformaba a ratos, como si de alguna forma su forma estuviera corrupta. 

- ¡¿N-Natur?! - la voz temblorosa que salió de la figura era la de Lika, al tiempo que ésta comenzaba a retroceder.

Nada de lo que Medea decía tenía sentido. Cassandra se sentía confundida y eso para un robot era una sensación poco común. Iba a decirle que podría estar equivocada, ya que el cerebro humano comete errores, cuando ella misma lo comentó.

- Pero si soy un sueño soy producto de tu subconsciente -comentó mientras accedía a su memoria en datos sobre los sueños- donde yo estoy no se ha producido la extinción humana, pero sí debieron huir del planeta, dejándonos a nosotros al cuidado hasta que volvieran. No estoy... estaba -corrigió al mirar de nuevo la membrana- sola, al menos hasta ahora.

Si algo había salido, quizás había atravesado la membrana. Cassandra rozó la membrana de nuevo, todo esto era un error de sistema que debía reportar a Laocoonte, pero lo primero era salir de ahí. Así que sin pensarlo mucho más sumergió su brazo en la membrana con la intención de atravesarla.

- Medea voy a salir. 

Había agotado todas las preguntas que podía hacer, solo le quedaba la experimentación para hallar respuestas.

Natur Bio se quedó observando aquel lugar durante largos minutos, aunque su mirada descendió hacia la forma de vida que estaba ante ella ¿Lika? Sus escáneres le indicaban que estaba asustada, por lo que no intentó acercarse, simplemente se quedó en su posición y alzó ligeramente su mano a modo de "Tranquila".- ¿Lika, verdad? Soy Natur-Bio, no te asustes, no quiero hacerte daño ¡Somos amigas! -Las unidades de su clase no se encargaban de la protección,  ni tampoco eran robots acompañantes. Pero a Natur Bio siempre le había gustado pensar que ella tendría una familia humana con la que pasaría tiempo e incluso haría descubrimientos científicos.- Este lugar... Donde estamos, nunca antes lo había visto.-La robot parecía confusa, si es que los robots podían sentirse así.

La voz de Medea suspiró tras escuchar a la unidad Troya. Lo hizo de una forma que la robot no supo distinguir del todo, pero cuando habló, lo hizo con un tono más apagado. Incluso la membrana parecía menos luminosa que antes. 

- Lo siento si de verdad... no existes. Pero eso de huir del planeta me temo que es imposible, ya se estudió en su momento y no era viable. ... ¿Estás b...? - Medea se interrumpió de nuevo cuando la membrana tembló nuevamente, produciendo más ondas en aquel espacio inconsistente - De acuerdo. - respondió. 

Con un último empujón, la membrana cedió y permitió a la droide atravesarla como si hubiera sido un líquido todo este tiempo. Cassandra había acabado en un lugar opuesto al que estaba, en una gran habitación blanca, con su cuerpo totalmente formado y con un suelo bajo ella. Tras ella, solo quedaba una pared y ningún signo de que allí hubiera una membrana. 

Y allí, al frente, alejada unos pasos de Cassandra, había una figura que de forma automática reconoció como humana. Tomando de base un humano medio, ésta era ligeramente más ancha, pero no había muchos más datos que se pudieran tomar de ella. La figura se encontraba tachada por varios garabatos negros en constante movimiento, temblaba y se deformaba a ratos, como si de alguna forma su forma estuviera corrupta. 

- Supongo que tú... Eres Cassandra. O eso espero. - habló la figura con la voz de Medea, acercándose un paso.

- ¿D-de verdad eres tú? - volvió a preguntar aquella figura, fragmentándose y volviéndose a recomponer con más frecuencia que antes - Pero me... ¡Me das miedo!

La figura de Lika retrocedió llorando sin llegar a responder las preguntas de Natur. Antes de que ésta pudiera hacer algo, percibió algo tras ella. Una masa acuosa oscura se deslizó hasta ella, ahogándola, desde la pared que había a sus espaldas. A pesar de que intentó liberarse, vio cómo el caos que rodeaba a Lika comenzaba a hacerse más grande a pesar de que se estaba alejando. Las líneas que la tachaban se hicieron más gruesas y su forma se rompió en varios fragmentos, cubriendo de oscuridad la habitación blanca. 

La voz había sido apagada por aquella masa que tiraba y arrastraba a Natur violentamente hacia el vacío del que había salido, apagando la posibilidad de volver a traspasar ese lugar. Varios mensajes de alerta comenzaron a rodearle en ese espacio, cubriendo todo cuanto tenía a la vista y casi atravesándola sin que pudiera hacer nada. Sus alarmas comenzaron a sonar, lejanas, rotas... Y finalmente, todo se apagó de nuevo con un chispazo.

Cassandra observó con atención la habitación blanca y su programación base, codificada para asegurar realidades, le hizo tocar de nuevo la pared, allí donde segundos antes había estado la membrana.

Aunque hubo algo que desvió su atención cuando estaba a punto de tocarla y eso fue la figura que se había formado frente a ella y estaba tachaba por miles de borrones, como si se tratara de un código erróneo. Asintió a la pregunta aunque no tardó en darle voz a su respuesta.

- Así es, soy Cassandra. ¿Medea dónde estoy? No puedes decir que no existo, mi creación existencia y registro está en la base de datos de las instalaciones. ¿Cómo puedes estar tan seguro de que esto es tu sueño y yo parte de él? Medea los seres humanos son imperfectos, no son para nada matemáticos.

Cassandra dio una vuelta sobre sí misma, tratando de hallar algo diferente en aquella habitación blanca. Algo que le diera una pista de su ubicación.

La figura avanzó un paso, corrompiéndose y soltando un largo suspiro con la voz de Medea. 

- No sé dónde estamos y no sé si existes porque tampoco sé si lo hace este lugar. Pero déjame decirte algo: ¿Qué te asegura que seas perfecta cuando fueron seres imperfectos los que te crearon?

Antes de que Cassandra pudiera responder, percibió algo tras ella. Una masa acuosa oscura se deslizó hasta ella, ahogándola, desde la pared que había a sus espaldas. A pesar de que intentó liberarse, vio cómo el caos que rodeaba a Medea comenzaba a hacerse más grande mientras ésta retrocedía unos pasos. Las líneas que la tachaban se hicieron más gruesas y su forma se rompió en varios fragmentos, cubriendo de oscuridad la habitación blanca. 

La voz había sido apagada por aquella masa que tiraba y arrastraba a Cassandra violentamente hacia el vacío del que había salido, apagando la posibilidad de volver a traspasar ese lugar. Varios mensajes de alerta comenzaron a rodearla en ese espacio, cubriendo todo cuanto tenía a la vista y casi atravesándola sin que pudiera hacer nada. Sus alarmas comenzaron a sonar, lejanas, rotas... Y finalmente, todo se apagó de nuevo con un chispazo.