Partida Rol por web

Dos vigilantes y un camino por transitar. 

¿Será el destino quien ha obrado bajo su voluntad

o la perturbada situación que los hizo juntar?

Las respuestas en sus manos, con una canción del olvido

y un eterno presente. 

Nada visceral, nada figurativo, sólo espontaneidad y locura. 

La noche comenzaba a dar sus primeros halos de oscuridad, donde el silencio golpeaba el interior de sus caminantes mientras la luna los alumbraba en su pesar. Las calles atestadas por la putrefacción de la misma sociedad, obraban como un escenario perfecto, donde encontrarse y compartir unas palabras. Salvo que el destino, en este caso, ha juntado a dos personas gracias a un intermediario. 

Diferentes son los objetivos de cada uno, aunque es evidente que hallarán el camino en común. Por esa razón, allí estaba David portando su halo de policía correcto y preocupado. Por el otro, a su lado, un hombre de ojos claros y facciones tristes, que apesadumbrado por la situación se ahogaba en el silencio que la misma noche ofrecía en su cobijo. 

En cambio, la presencia de aquella mujer de cabellos rubios y mirada fatal, cerraba la triada del encuentro. Nada parecido tenía a los presentes y a través de una actitud desenfadada, contemplaba a David por una explicación. Él la había llamado y por lo tanto, es quien toma la palabra.  

- Hola Ezri, verás... perdona que te llamé así de golpe. - se rasca la cabeza visiblemente nervioso. - Él es un amigo, se llama John y pues... Hemos perdido una amiga en común, oficial también. Ha sido por envenenamiento masivo, dado que mi amigo y ella tomaban un café tranquilamente hasta que todo se desmadró. Pensé que podías ayudar en la investigación, se te da muy bien. - David rompe el silencio comentando lo sucedido, mientras le dedica una mirada a los dos. Claramente esperando sus reacciones. 

 Y aquí llegaba yo. Dentro música.  

 ¿Y por que eso merecía música? Joder por que era yo. La mejor y mas jodidamente atractiva Teniente de todo el cuerpo de policía. Y si eso no merecía una canción no se que infierno lo merecía.

Pelo al viento y ojazos azules. Un vaquero ceñido y una blusa con americana. Para ir un poco ``arreglada´´acorde a mi rango en la policía.

Sonreí nada mas ver a David. Joder su mujer Tracy era un encanto. Si hasta nos hacíamos las uñas de los pies el mismo en el mismo local. Vale que yo la primera vez fui por que había oído que trapicheaban. Pero ahi estaba ella. La mujer de mi macizo subordinado al que pensaba follármelo hasta partirlo la pelvis como en aquel episodio de futurama.

Pero claro el caso es nos habíamos hecho amigas.  Y para mi eso solo solía significar que era mas facil follarme a su marido por que nunca pensaría eso de mi. Pero mira tu por donde esta vez los había respetado. Era una pareja genial Muy sana como yo nunca había tenido o visto antes. Ahora solo aspiraba a ser amiga de ambos y a montarnos un trio a la mas mínima vez que lograra emborracharlos. Joder Tracy iba a mi mismo gimnasio y vaya cuerpo tenia. Por no hablar de David.

Creo que estoy divagando. 

El caso es que David no estaba solo. A su lado estaba John. La verdad es que le conocía. Demasiado integro. Por algo seria amigo de David. Integro como. Lo que no sabia era que pintaba yo aquí. Era una Teniente cojonuda con una gran historial de arrestos. Pero también pensaban que era demasiado dura, que me saltaba las normas y que metía las manos en alguna que otra cosa turbia.

La verdad es que viendo a estos dos hombres. Era la segunda vez que pensaba que había hecho algo demasiado bueno en mi vida. Pero como la vez anterior no sabia el que era.

Por un lado tenia a David. Que parecía una especia de Aquiles.

Y claro por otro lado estaba el capullo de John que eso no evitaba que me parecía una especia de Leonidas. 

Joder que imaginación tengo. Como siga así dejare un reguero por el suelo...

Hola David cielo. No importa.¿Que tenemos?. Di una largo sorbo al café que llevaba encima. Mire a John. Como si acabara de verlo y no como si le hubiera devorado con la mirada a el y a David al acercarme.​ Si lo he visto por comisaría en breves momentos.  Un placer como siempre. Aun espero que esta  vez que sea mas placer que breve.

¿Envenenada? Vaya al final tendrá razón mi medico con que el café es veneno. Bien veamos que tenemos. 

¿Tu amiga tenia enemigos que la quisieran muerta? El veneno no es la mejor manera para matar a alguien de manera discreta no al menos. Deja residuos. Y no parece un accidente. El veneno es mas para enviar un mensaje.

Al acercarte, David te rodea con su brazo y atrayéndote hacia él para besar tu mejilla con ternura. - Nada bueno, preciosa. - responde rápidamente al soltarte, dedicándole una mirada al callado de su amigo. - Tu presencia siempre es un placer, lástima que tengo esto sino... - te suelta aquel comentario sonriendo con picardía tras hacerte una revisión de pies a cabeza y alzar la mano señalando su alianza. 

- Al parecer a John se le fue la mano con la primera cita y las cosas salieron mal. Estaban en la cafetería que está a unos minutos de la Comisaría. En este momento, todos los que estaban allí fueron internados por envenenamiento y Jane... nuestra compañera, ha fallecido. - te va poniendo al día rápidamente, aprovechando que su amigo permanecía callado por el shock. - No tenemos mucha información, salvo lo que él pudo hablar con esta mujer y lo poco que pude sacar en limpio, es que una mujer vestida bastante rara trajo el pedido de muffins. Muy extraño. - se encoge de hombros mientras revisa su anotador por si algo faltaba decir. 

- Tenemos un caso, preciosa. Además John es mi amigo. - David te propone regalándote un guiño, claro está esperando tu respuesta. 

Sonreí ante el gesto cariñoso de David. Sabia que no era muy apropiado siendo yo Teniente y el uno de mis detectives. Pero la verdad para decirlo finamente.

Me suda el coño lo que digan.

Ya sabes que lo único que tienes que hacer es convencer a Tracy. Le comente siguiendo su broma o no.

¿Una cafetería para la primera cita? Si es todo un despilfarro. ¿Una cafetería? Vamos no jodas. Que un policía honrado no cobra tan poco. Llévala a un restaurante con categoría al menos. Yo por una cafetería no me planteo ni bajarme las bragas. Aquí al lado hay un Kebab riquísimo. King Doner Kebab Abdul Jabbar Kareem Bin Laden. El nombre es un poco largo pero están muy ricos. Y por ahora no a muerto nadie. No de los Kebabs al menos.

¿Nuestra compañera? Vaya eso lo cambia todo. Por cierto si toda la cafetería resulto envenenada ¿Por que John esta aquí tan tranquilo?. Llamame loca David. Pero es un poco raro o algo se te esta olvidando contarme mientras piensas en ponerme a cuatro patas y jugar a los polis brutales...

¿Una mujer bastante rara?¿Rara en el sentido de vestir de forma ruinosa y gatos?

¿O rara en plan pelo de colores y ropa extraña?

Bueno en cualquier caso rara. Que hable con nuestros dibujantes. 

Y con lo inutiles que son...

Tranquilo las cosas raras son mi especialidad. Esta bien tenemos caso y si es tu amigo. Los amigos de David… Mire a John. Son…son…son sus amigos.

Bien pues pongámonos con esto. Supongo que lo primero será averiguar que veneno era. Según lo raro que sea nos dará pistas. Y luego buscar a esa mujer rara para hablar con ella , tomar un café , meterla una magdalena rellena por el culo. ¿Por qué la gente dice Muffins? Si son Magdalenas rellenas. Estoy segura que si hubiera conocido a alguna de mis abuelas las hubiera llamado Magdalenas rellenas.Tranquilo las cosas raras son mi especialidad. Esta bien tenemos caso y si es tu amigo. Los amigos de David… Mire a John. Son…son…son sus amigos.

David intenta contener la risa al escuchar las palabras de Erzi, era inevitable pero de solo imaginar todo aquello, un mundo comenzaba a gestarse en la mente del Detective y no podía parar de reír. Es lo que tenía la rubia, ese humor capaz de eliminar todo registro de tristeza. Eso sí, había que captarle el sentido sino podía perderte como turco en la neblina. 

- ¿Hablar con Tracy? ¿Para que me deje o para hacer un trío? ¡Que tía! Ya sabes que no querrá, mira si le gusta demasiado el pescado y me quedo sin nada. No voy a arriesgarme, mira si se va contigo. - replica a través de un halo travieso y bastante cómplice, le gustaba hablar en doble sentido con su ahora "jefa". - Oye, como estás a mi cargo puedes pedirme lo que quieras y debo obedecer. Jajajaja. - suelta entre risas, no tomándose muy en serio lo que estaba él mismo diciendo. Hasta que cae en la cuenta de la desvirtuación del tema y aguarda silencio. 

Poco es lo que duró, cuando Erzi vuelve a la carga de nuevo. - Yo le dije, mala elección. Igual no seas dura con él cariño. - responde David adjudicando comprensión al tema, no quería pasarse mucho con las bromas ya que John se encontraba bastante mal por ello y ni siquiera hablaba. 

Luego de escuchar cada suposición de la rubia, David intenta bajo un esfuerzo enorme, no reír a carcajadas. - Aflójale mujer, te has comido a Krosty. -  por la acidez y el toque payasezco que tenía. No podía estar serio si dejaba caer esos comentarios, el Detective estaba muy afinado con el sentido del humor. - Todo eso es John el que sabe, habló con la Doctora. -  respondo al dedicarle una mirada. - Hey, abre la boca. Necesitamos información. - sugiere en un tono cómplice pero arraigado a la jerga de los policías. 

Del mismo modo que había salido con él del hospital, con el rostro casi inexpresivo y sin decir una sola palabra, seguí a David para encontrarnos con su amiga, esperando que, fuese quien fuese, realmente pudiese ayudarnos… ayudarme a encontrar a quien le había hecho eso a Jane. Y entonces la vi. Pelo rubio al viento, vaqueros, blusa con americana  y los andares de quien se cree que está por encima de todo.

Ella no…- pensé automáticamente al verla, reflejo de mí no tan lejana a pesar de lo que a mí me parecía, época en el cuerpo. Puede que no hubiese llegado a trabajar con ella, y mucho menos bajo su mando, pero la conocía de vista… y por lo que se decía de ella. Un cuerpo de escándalo, un desdén por las normas solo superado por su ego y una mente más propia de un manicomio que de una comisaría. Una combinación que nunca me había parecido adecuada para un policía, a pesar de lo cual, no solo cumplía su deber, sino que había logrado ascender en el cuerpo en un tiempo record, por poco ortodoxos, duros o directamente ilegales que fuesen sus métodos. Hace unos meses me habría negado a trabajar con ella, o incluso habría preferido actuar contra ella, pero claro, hace unos meses era otra una vida, casi me parecía que otra persona.

Ahora… ahora las cosas eran distintas, y hoy lo eran más que nunca. Claro que eso no hacía que los viejos hábitos y costumbres desapareciesen como por arte de magia, por lo que sin darme cuenta, mantuve el gesto de desagrado que había aparecido en mí hasta ese momento inexpresivo rostro tras verla, gesto que se acrecentó y marcó aún más al empezar a escucharles. Sus comentarios y bromas entre ellos. Sus erróneos comentarios de que había sucedido en una primera cita con Jane. El que una parte de mi pensase que ojala hubiese sido esa situación…

Estaba esperando a que acabaseis de decir estupideces... aunque parece que va para largo- le dije mirando a Ezri en un tono tal vez demasiado brusco a David, molesto por aquello.

La verdad es que ver su cara de decepción al ver que era yo quien había llegado para ayudarle no tenia precio. 

Bueno si lo había y eran un montón de caras de Franklin. 

Pero bueno si antes que era Teniente no podía decir nada. Ahora que el no era policía tampoco podía por que me necesitaba. Así que no le quedaba otra que...

Por muchas arcadas que le dieran.

Aunque David con sus bromas me distrajo del  orgasmo que estaba teniendo.

​No te preocupes sabes que nunca te robaría a Tracy. Cierto estas a mi cargo y tienes que obedecer. Comente mientras le daba mi vaso de café vacío. gracias .

Nada soy mas del payaso de It. Tiene mejor sonrisa.

Entonces por fin Miles dijo algo. Le mire como si nada.

​Eso me solía decir mi psiquiatra del cuerpo. Espero que no acabes como ella se suicido y me culpo en una nota. Me encogí de hombros. Que no me hubiera dicho que fuera sincera y que todo quedaba protegido por su juramento irrompible.

Esta bien Detective Jonathan Sanders. 

Perdona olvide que ya no eres poli. Bueno . Cuéntame lo que ocurrió para que podamos ayudarte. Venga que ahora lo digo en serio.  Claro lo decía en serio. Pero que me lo tomara en serio...​Si te sirve soy Teniente y puedo tener acceso a una gran cantidad de recursos que podemos encauzar para hacerte un favor. Por la cortesía o ex cortesía profesional. 

Joder Vesper que eso no haya sonado como el padrino. La familia...es lo mas importante.

Yo soy una Teniente algo corrupta y te hago un favor. Va da igual. Concéntrate Ezri concéntrate. 

Ante el comentario de John, el Detective abre los ojos. - Podrías empezar a contar si quieres nuestra ayuda, muy difícil será todo esto si te limitas a dar reprimendas como niños de Jardin Infantes. - sentencia David al dedicarle una mirada recriminatoria mientras lleva el vaso al cesto. - No te abuses chiquilla. - inquiere a Erzi tras regalarle un guiño. 

- Tal como dice mi compañera, ve soltando así tenemos información de la cual usa para investigar. Ya sabes como funciona esto. - esperaba que de esa forma, iniciara la conversación porque sino sería dejarle el libre albedrío a Erzi y luego tomar represalias por hacerle perder el tiempo.

¿No había nadie más?- me dije para mis adentros al tiempo que meneaba la cabeza mientras miraba al cielo al escuchar las palabras de la teniente, pues no terminaba de saber cómo tratar con alguien que se lo tomaba absolutamente todo como si fuese una broma -En fin, espero que sepa lo que hace- pensé mirando a David, esperando que realmente ella pudiese ayudarnos. Si podía, el resto no importaba, aunque tuviese que soportarla a ella y a sus bromas lo que me quedaba de vida… siempre y cuando me llevase hasta los responsables de la muerte de Jane.

Más te vale hablar en serio, esos malnacidos han matado a mi compañera y como alguno se me escape por tu culpa…- empecé a decir, dejando la frase en el aire para que la terminase a su gusto. Me mantuve unos segundos en silencio antes de volver a decir algo, como reordenando mis pensamientos -Por desgracia apenas tengo nada, si no ya estaría tras ellos, ni siquiera llegué a ver a la que trajo los muffins… aunque Jane sí. Mujer de pelo castaño y con un vestido negro ajustado, sin nada que destacase especialmente, por lo que parece iba a diario a la cafetería a llevarlos, o al menos eso es lo que me dijo Jane antes de…- les dije, deteniéndome como si no quisiese llegar a decir lo siguiente -Yo ni siquiera estaba con ella en ese momento- dije de pronto, cambiando de tema casi sin pensarlo -Estaba al teléfono por culpa de una llamada demasiado rara como para que fuese una coincidencia- añadí, tras lo cual me quedé en silencio.

Mire a David cuando animo a su amigo para hablar. Lo que estaba claro es que si no nos ayudaba no le podíamos ayudar eso era algo claro la verdad.

Sabes que me encanta el abuso de autoridad.

Lo cual era bastante cierto. Pues era de los motivos por los cuales me habían puesto mas quejas.

Sonaba tan bien. ABUSO DE PODER.

Entonces cuando hablo John le mire.

Siempre hablo en serio cuando hablo de dar con unos hijos de puta. Bueno vale solo en esencia. Pero te garantizo que los buscaremos. Los encontraremos. Y si quieres practicar una explosión anal son todo tuyos.

Yo como si no he visto nada.

Escuche su historia.

Bien tengo algo. Lo primero tengo hambre. Tanto hablar de Muffins me a abierto el apetito. Lo segundo vamos a ir a ese restaurante. A la fuerza si iba a menudo alguien puede conocerla y darnos alguna pista. O puede que el local tenga cámaras o incluso puede haber alguna cámara en las inmediaciones. Podemos comprobarlo. Igual tenemos suerte.

¿Una llamada? ¿Tienes el numero? Supongo que rastrearlo sirva de poco. Pero se puede intentar. Hay que hablar con el forense también. David encárgate. Quiero saber que veneno la mato. Quiero saber si es común o no. Y si no lo es. Podría ser fácil saber quien puede tener acceso. Y también llama a un dibujante y que vaya a esa cafetería. Por si hiciera falta un retrato robot.

¿Nos ponemos en marcha?

De repente, el móvil de Erzi suena y la joven Teniente no tarda mucho en recibir la llamada. Se aparta un poco del resto e inicia la conversación, que de por si, ha sido muy corta. 

- El trabajo obliga querida... Tienes que ir a una fiesta que se organiza en el Edificio Grayson de Keheller Enterprise. Lleva acompañante y un vestido que te marque bien el culo preciosa. Ah... Es una orden directa de arriba, necesitan profesionales allí y pensé en ti. Se te da bien estar borracha y trabajar a la vez. - termina la llamada el Capitán con una sonora carcajada que de odiosa tenia mucho. 

David acaricia su perilla mientras va analizando la información que John ofrece, cierto era que al ser escasa y un poco ambivalente no tenían mucho de donde agarrarse para iniciar la investigación. 

- Vale, ya mismo regreso al hospital. Los dejo solos, hay un motel a la vuelta por si la tensión aumenta. - suelta burlándose por lo cortante que fue el encuentro, se notaba a simple vista que no se llevaban bien. 

- En cuanto tenga algo, te llamo Erzi. Nos vemos. - se despide dándole una palmada en el trasero a la rubia, como en los viejos tiempos cuando eran compañeros. 

Y con esa actitud tranquila, finalmente los deja solos. 

Me aleje un poco para contestar cuando vi que era el Capitán. Sospechaba que había tragado mas pollas que todas las putas de la ciudad juntas.

Claro Capitán el deber es el deber.  

Perfecto que me marque bien el culo por si tengo que hacer Twerking entendido señor.

Si trabajar borracha perfecto.

¿Lo dira por la fiesta universitaria en la que me infiltre?

La cosa fue bien. Logre entrar en una hermandad , pasar desapercibida.

O casi. Pero atrape al camello.

A sus ordenes oh capitán mi capitán.

Sera gilipollas el tio. Me volvi a hacercar.

Vale David nos iras contando. Ocúpate de todo.  Cuando dijo lo del Hotel sonreí. No tranquilo. Era el Capitan. Tengo que ir a una fiesta aburrida para pasear mi hermoso y borracho culo por ahí.. ¿Pero sabes que es lo mas curioso? Que nuestro amigo John esta invitado. El Capitán me lo acaba de decir. ¿Te lo puedes creer? Como era poli y estas pasando por un mal momento a tenido un gesto bonito.

Mire a John.

Te preguntaría como estas en traje. Pero es bobada estarás genial. 

¿Un motel con ella? Y yo que pensaba que éramos amigos…- le dije a David en respuesta a su broma, como sugiriendo que aquello sería una tortura para mí… como mínimo. Y tal vez hubiese añadido algo más, pero en ese momento Ezri termino de hablar por teléfono.

¿Una fiesta? Serán imbéciles- me dije, maldiciendo a quienes hubiesen tenido la brillante idea de montar una fiesta e invitarme. Como si no tuviese mejores cosas que hacer. Volver al restaurante, hacer preguntas, y obtener algunas respuestas… claro que sin placa poco me iban a decir en el restaurante, y sin más información, preguntar por la calle sería una pérdida de tiempo. Claro que aun así al menos haría algo -Algo que no fuese ir a una fiesta con ella- pensé mirando a Ezri… claro que por mucho que lo detestase necesitaba su ayuda, y dejarla mal ante el capitán no era una buena forma de conseguirla.

Maldita sea- mascullé en voz baja -Si quieren tener un gesto, que se dejen de gilipolleces y encuentren a quien le ha hecho eso a Jane. Que monten entonces una fiesta, no ahora-  le espeté a pesar de ser consciente de que no era ella quien había organizado la maldita fiesta.

Finalmente la conversación llegó a su fin con un montón de asuntos pendientes, lo bueno es que organizaron encontrarse en aquella fiesta que mencionó Erzi. Era en el Edificio Grayson, a las 21hs. Y sin mayores preámbulos, cada uno se retiró del lugar, a sabiendas que dentro de unas horas volverían a encontrarse.