El príncipe dio un paso atrás para cerrar filas junto a Valgard. A su vez, dio una tremenda lanzada al enemigo que al que ha ia atacado su camarada con escudo hacia un segundo, acabando con su amenaza.
Motivo: Ataque VS FUE dredge I13
Tirada: 1d100
Dificultad: 81-
Resultado: 72 (Exito) [72]
Acción de movimiento: Mueve a J14.
Acción estandard: Ataque a la FUE del dredge con éxito: 11 FUE - 7 ARM = 4 pupas. Como tenía 4 pues moriría. Entiendo que no hace falta usar el punto de voluntad, de ser necesario lo haría.
Las heridas de Bersi le permitían seguir en pie a duras penas. El varl agachó la cabeza unos segundos, libre de peligro, para escupir sangre. Por fortuna, tan solo uno de esos enemigos quedaba en pie frente al príncipe y Valgard y no tardarían en dar buena cuenta de el. Aquello les daría el tiempo suficiente, esperaba, para recoger el cuerpo de Vognir antes de que los "refuerzos" enemigos se les echarán encima.
Acción de movimiento: Mueve a I19-J20 y dejo espacio a Ubin.
Acción estandard: Escupir sangre xD
Motivo: Fuerza vs Ludin
Tirada: 1d100
Dificultad: 35-
Resultado: 15 (Exito) [15]
Resumen del asalto 11
Ludin: Mueves y atacas a uno de los últimos Grunt. Impactas y le abates. Sumas una victoria.
Eirik: Usas rally para sumar 2 de voluntad a Valgard.
Bersi: Te retiras algo más de la batalla.
Ubin: Te acercas al último Grunt.
Grunts: El último Grunt, desesperado se abalanza contra Ludin y le ataca con su fuerza. Su tirada de impacto es de solo 35%. Aun así, impacta.
Ludin: Un Grunt te ataca con fuerza, a pesar de estar sumamente lastimado, logra impactarte. Pierdes 1 punto de fuerza.
Vognir: Ha muerto
Scourge Elite (Boss): El boss ha muerto.
Hakon:
Gunnulf:
Valgard: Recuperas 2 de voluntad
La batalla en la montaña había llegado a su fin, o al menos de momento. Cerca de Vognir y aquel gigantesco Dredge, se encontraban Ludin y Valgard, mientras algo más, hacia el este estaba Ubin con su armadura destrozada y Bersi, lleno de heridas. Eirik era el último en las cercanías y el único en todo el combate que había resultado ileso. Más al sur, descendiendo la montaña, se encontraban Gunnulf y Hakon, quienes ya habían dado cuenta de varios Dredge en sus inmediaciones.
La montaña había quedado en relativa calma, no obstante, aquellas figuras en el bosque seguían allí, y era poco probable que tardasen mucho en retomar su marcha hacia el sitio justo en el que se encontraban todos ellos. Tenían pues, que sacar a Vognir de allí cuanto antes y descender la montaña. Pero antes, había que dar cuenta del último de los Dredge.
Valgard, Ludin y Ubin: Entre ustedes elijan quien termina con el último Dredge. Recuerden que eso les dará una victoria más; por lo que, elijan según sus necesidades de subir de nivel.
Todos: Pueden actuar con normalidad pero consideren que seguimos en ritmo de combate, por lo que piensen en acciones de no más de 10 segundos de momento.
La batalla está decidida así que tan solo me coloco detrás de los humanos para darles fuerza y apoyo en lo que acaben con el otro dredge y luego sigo el camino para rescatar el cuerpo.
Soy de los que están libres quien más adelantado está, pero mi velocidad no es mucha debido a la edad, así que espero que cuando llegue a Vognir los demás hayan llegado hasta mí.
De momento me conformo con colaborar, aunque sea con consejos para acabar con el superviviente.
Ahora que la batalla está terminada en el sur me voy corriendo hacia el norte, buscando alcanzar a Ubin, pensando en luego extender el camino hasta el cuerpo de Vognir para poder recuperarlo.
Aun así mi vista se pasea por los dredge que no s observan en la distancia. Las cosas se van a poner muy complicadas y puede que con una alianza entre Varls y humanos no sea bastante. Pero eso no es algo que yo deba decidir.
Subiendo hacia el combate, que ya parece casi acabado, veo a Bersi retirado muy herido, sin duda ha cumplido con su misión como defensor del principe y en estos momentos no hago caso de mi aversión al mercenario.
-Ves al sur. Mogr viene con la tropa. Dile lo que ha pasado aquí-
No espero a ver si el mercenario obedece o no, sigo corriendo al norte en busca del cuerpo de Vognir
Eirik se movió en la misma dirección que el resto. El combate había acabado y habían vencido pero nadie festejaba. Todos los rostros expresaban angustia y preocupación, sin importar que algunos no fueran cercanos a Vognir.
Cuando llegó, esperó. No quería tocar el cuerpo, eso debería ser cosas de los varls. Por una cuestión de respeto se quedó en silencio esperando a ver qué hacían.
El último de los Dredge que quedaba había caído ya. Su armadura había sido destrozada por reiterados ataques de Ludin, mientras que el hacha de Valgard le arrancaba la vida. Así, aquella cruenta batalla en las colinas cercanas a Vedrfell alcanzaba un final hasta cierto punto glorioso. Los héroes de la última alianza de hombres y Varls había alcanzado la victoria, una duro victoria mancha de sangre.
A los pies de Valgard, Ludin y Hubin, quienes habían alcanzado primero el punto inicial de la batalla, se encontraba Vognir. Su cuerpo yacía boca abajo, destrozado por multiples heridas, varias de ellas propiciadas por el inmenso Scourge quien le había atacado cuando Vognir ya había sido derrotado. Aunque, sobre todas aquellas heridas, destacaba una en particular, un gran corte en su espalda, fino y profundo, producto probablemente de una hoja bien afilada y de gran tamaño, cosa poco común en las armas de los Dredge, que más bien solían parecerse a grandes cierras de metal y piedra afilada.
Antes de que alguno de los presentes pudiese comentar algo más que unas vagas palabras, y que sus demás compañeros alcanzarán su actual posición, el estruendo de un rugido se escuchó más arriba en las colinas. Un rugido que asemejaba al entrechocar de grandes piedras que colapsaban desde lo alto contra el duro suelo, pero que, a su vez, parecían emanar desde distintas zonas a la vez, como si de un grito de guerra se tratase.
Motivo: última Victoria
Tirada: 1d2
Resultado: 2 [2]
Todos: Fin de la batalla.
Todos: La última victoria es para Valgard.
Ganan los siguientes puntos de Renombre:
Por ganar la batalla ganan un total de 17.
Por Héroe más letal, Gunnulf gana 1 punto de renombre.
Por Héroe más determinante Valgard, Ludin y Bersi ganan 1 punto de renombre.
Por jefe Letal Valgard gana un punto de renombre.
Por Batalla épica ganan 3 puntos de renombre extra.
Por Bono táctico Ludin gana 1 punto, Ubin gana otro y Hakon otro.
Todos: En esta ocasión explicaré algunas de mis decisiones. Héroe letal es directo, Gunnulf fue el que más enemigos derrotó junto con Valgard, pero de Valgard es circunstancial y combatiendo en apoyo de otros. Igual solo un punto porque está apenas por arriba.
Héroe determinante a Valgard por taponar al boss en el momento en que de un plumazo se cargaba a cualquiera. A Ludin por estar toda la partida apoyando a otros y al final el mismo conseguir estratégicamente debilitar a los enemigos cuando ya estaban casi solos (salvando a Bersi). A Bersi por causar mucho daño a los enemigos en la batalla, incluyendo al Boss.
Jefe letal a Valgard por que el mató al Boss, pero solo un punto dado que solo le remató.
El bono táctico se otorga a Ludin por su destreza táctica hacia el final de la batalla, a Ubin por ir apoyando a todos tácticamente, y a Hakon por medir el combate e ir destrozando a un enemigo tras otro.
Todos: En conclusión, la repartición de puntos queda así. Los 17 de base más los 3 de extras por batalla épica suman 20, que se ha de dividir entre 7, tocando a 2 para cada uno y sobran 6 a repartirse según ustedes consideren o voten. Por tanto, la suma queda así…
Hakon: P = 2+1 = 3, Victorias = 1
Ludin: P = 2+1+1 = 4, Victorias = 1
Eirik: P = 2 = 2, Victorias = 2
Ubin: P = 2+1 = 3, Victorias = 2
Gunnulf: 2+1 = 3, Victorias = 3
Bersi: P = P = 2+1 = 3, Victorias = 1
Valgard: P = 2+1+1 = 4, Victorias = 3
Sobrantes = 6 Puntos de Renombre (P).
Todos: Con esos 6 pueden balancear todo a 4 puntos para cada uno. En caso contrario, voten ya mismo en el off topic por su personaje favorito XD.
Todos: Actualizaré estos datos en sus personajes una vez se hayan decidido.
Voto por equilibrar todo a 4 de renombre. ¿Qué os parece?
Todos estaban conmocionados por lo ocurrido, varls y humanos. Parecía que nadie reaccionaba, nadie tomaba la posta que Vognir había dejado.
Fue entonces cuando un rugido se escuchó que parecía el entrechocar de piedras. ¿Serían dredge marchando hacia la batalla? En el estado en que se encontraban no podían arriesgarse.
_Hakon, Ubin, debemos irnos...
Eirik ya estaría dando indicaciones tal era su personalidad, pero en ese caso consideraba que esos varls debían llevar la voz cantante al menos en cuanto a cómo encargarse de Vognir.
El combate había terminado con un doloroso desenlace. La perdida de Vognir son duda echaba al traste la moral de los varl, a todas luces. Tendrían que decidir el siguiente para liderar a los gigantes para continuar con el viaje.
El otro problema era la visión de aquellos enemigos a lo lejos,más dredges, esas criaturas acorazadas que volvían a aparecer tras tantos años sin verlos. Era la señal de que habían ganado una batalla pero no la guerra.
- Debemos recoger el cuerpo de Vognir cuanto antes. Reagruparnos y sopesar nuestro siguiente movimiento. No es el momento de continuar la lucha y sería un suicidio contra tantas de esas cosas. Hemos de honrar al heredero varl y continuar con la alianza entre humanos y varls. ¡Es así como ganamos allá dredges hace años, como hemos ganado hoy y como venceremos al enemigo mañana!- Comentó a los que tenía alrededor.
Después se dirigió a donde estaba su guardaespaldas, Bersi.
El enorme varl, malherido, estaba tratando de cortar la hemorragia de alguna de sus heridas. Estaba sentado, descansando y apoyado en su enorme hacha, mientras le costaba respirar.
El príncipe se acercó a el para decirle que había luchado bien, agradeciéndole su buen hacer en el transcurso de la batalla.
- Es mi deber, príncipe Ludin. Pero mucho me temo que no podré combatir hasta que sane mis heridas. Esos dredge son duros y no han caído sin enseñar sus dientes. - Comentó al príncipe.
Finalmente alcanzo el cadaver de Vognir, no hay ni un aliento de vida restante en el cuerpo
-hermano...-
Alzo la mano para detener a quien quiera ayudarme y luego levanto yo solo a Vognir. Con el corazón apesadumbrado ni siquiera miro a los Dredge que se acumulan en las colinas y emprendo el camino hacia el campamento.
En mi corazón hay un gran dolor, pero tambien una oscuridad, el futuro en el que no quiero pensar ahora, en los dredge y mi responsabilidad como Kendr. Ahora solo quiero lamentar la perdida.
A pesar de la mano levantada de Hakon, sigo adelante hasta llegar a su lado, poniendo una de mis manos en su hombro. Fue un gran hombre y un gran líder, no impidas a aquellos que le estimamos que nos despidamos de él.
Mientras Hakon camina de vuelta al campamento yo miro a los dredge apostados en la colina. Debo reconocer que mi sangre vuelve a hervir con ansias de destrozarlos a todos como cuando era más joven. Pero ahora mismo, incluso con los Varls y humanos del campamento, no estoy seguro de que pudiéramos pararlos. Necesitamos llegar a la capital y llamar a las armas a todos los hombres posibles, porque si no esta amenaza nos puede superar fácilmente.
Para cuando Hakon llegó hasta su viejo amigo Vognir, el estruendo de los Dredge que avanzaban a paso lento por la colina, ya era inconfundible. Allí arriba ya se alcanzaban a ver las sombras de algunos Scourge, aquellos imponentes Dredge como el que había acabado con la vida de Vognir. Ante aquello, no era difícil suponer que allí arriba había más de una centena de Dredge, lo cual era demasiado para ser una simple incursión casual en el medio de la nada.
Ya con el cuerpo de Vognir llevado a cuestas por Hakon, el grupo inició un descenso lo más rápido que les era posible, con los Dredge a poco más de 300 metros de ellos y con la carga de saber que, de tener que pelear, probablemente morirían todos allí.
Cuando un nuevo rugido de guerra surgió de entre las filas de los Dredge anunciando lo que probablemente era una carga desde las colinas, la esperanza cayó por los suelos, pero solo por unos breves segundos, pues desde el bosque cercano colina abajo se escuchó el retumbar de un cuerno de guerra Varl. Mogr, y el ejercito de la alianza habían llegado. Solo la vista de aquel ejercito de cerca de 500 experimentados guerreros mientras iban saliendo del bosque para iniciar el ascenso a la colina, levantó la moral y fuerzas de todos ellos. Atrás, los Dredge se habían detenido, tras apenas acercase unos metros en su carrera colina abajo. Al parecer, no querían pelear, probablemente por que no tenían los números para enfrentar a aquella fuerza tan formidable, o simplemente por que no estaban preparados para una batalla así, aún a pesar de la ventaja en el terreno.
Minutos después, lo peor ya había pasado, o al menos de momento. Fueron recibidos por Mogr el veterano Varl que comandaba a los ejércitos. Quien al ver el cuerpo inerte de Vognir se quedó sin palabras y estuvo apunto de ordenar la carga de no ser detenido por Hakon, quien era el nuevo kendr del rey de los Varls. No sabían cuantos enemigos había allá arriba, ni que les esperaba. Más allá de ello, tenían una misión por delante y no podían arriesgarlo todo entrando en lo desconocido. Y es que, lo único que sabían hasta ahora, era que los Dredge habían vuelto y que Vognir había muerto luchando contra ellos.
Con esto terminamos esté capítulo de la saga. Pasamos a un descanso de unas dos a tres semanas y de allí, retomamos justo donde nos hemos quedado.