Partida Rol por web

-¡Boldore, usa Roca Afilada!

Shun recogió a su Chansey antes de que éste se viera gravemente debilitado evitando así que su contrincante se apuntar un tanto en su marcador. Y después sacó a su Seadra. Aquel pokémon no era habitual verlo en esa clase de torneos, no era un pokémon muy común quizá porque solo los más familiarizados con la pesca lograban atrapar uno. Pero sin duda aquel pokémon era una excelente elección contra Boldore.

Pero el pokémon de Chrono no se amedrentó y sin dudarlo tomó una de las rocas que se habían levantado durante los primeros terremotos del combate, la pulió con su cuerpo afilando todos sus extremos y después la lanzó contra Seadra que quedó gravemente debilitado.

Aquel gesto por parte de Chrono había sorprendido a los espectadores, y aunque Shun parecía tener todas las de ganar, quizá sería mejor que no se confiara porque su rival no estaba por la labor de no lograr puntuar en aquel combate.

Con el cambio de Seadra había conseguido darle un cambio a la batalla, si no lo hubiese hecho, Chansey sería derrotada a no mucho tardar, ahora en cambio, si por algún casual Seadra llegaba a perder, aún podría contar con los turnos que aguantase Chansey antes de sucumbir de nuevo al veneno.

-Seadra ¡Adelante tu ataque Salmuera!

-¡Boldore, lo has hecho genial! ¡Intenta volver a golpearle con tu Roca Afilada!

Shun había escogido bien a su nuevo pokémon, y mucho antes de que Boldore volviera a reaccionar Seadra proyectó un fuerte chorro de agua salada que mandó por los aires al pesado pokémon Roca. El chorro era tan potente y la temperatura del agua era tan fría que el pokémon se vio gravemente debilitado.

El público aplaudía a Shun, no había hecho un gran combate a efectos de espectáculo, pero sin duda era el que mejor técnica había sacado. La combinación del tóxico de Chansey junto con sus movimientos de reducción y curación le habían garantizado prácticamente la victoria. Era cierto que la suerte también había estado de su lado. Pero lo único que importaba era que Shun había puntuado en aquella ronda.

Todos los espectadores gritaban de la emoción y aplaudían a ambos entrenadores. Sin duda había sido un fantástico espectáculo, a pesar de que había sido un poco largo y en algunos momentos habían llegado a perder el interés. Pero ahora todo el estadio vibraba y vitoreaba sus nombres.

Sin duda todo el mundo quería ver como iban a actuar los siguientes entrenadores en las siguientes rondas. Pronto se disputaría la segunda ronda, y nuevas oportunidades estarían al alcance de los entrenadores.