Partida Rol por web

Jeremy todavía está en sus pensamientos cuando oye a Raf pedir ese cambio a los cubos. - Si!, claro!.. ellos si que estaban ahí... - Buena idea Raf - dice Jeremy casi en un susurro a la espera de que sea por fin el momento clave... Y entonces.. los cubos empezaron a relucir..

La mirada de Jeremy estaba puesta en la tríada cuado todo a empezado a cambiar, a fundirse y a mostrarse imagenes que nadie sabria decir si son del presente, del pasado y del futuro. Se empiezan a oir disparos y Jeremy puede ver o percibir esa escena en que un grupo de hombres abre fuego hacia la sala mientras son deborados por una oscuridad creciente..

-NO!, - grita, otra vez no,... esto parece repetir la secuencia nefasta que les ha llevado a realizar esta locura de historia. Como con la otra especie.. en el último momento de enviar los cubos.. esos seres.. o criaturas aparecieron para encontrar un método para seguir existíendo.

La oscuridad ha empezado a entrar en la sala. Jeremy no sabe si es la sala real o la de la imagen, .. todo parece tan confuso.. Pero no está dispuesto a que la historia se repita. No sabe que hacer y es conocedor que no tiene tiempo de nada.. Por eso decide jugarsela todo por el todo. Mientras los puntos rojos empiezan a entrar en la sala, el chico se saca su chaqueta rasgada y sucia e intenta tapar la tríada de la visión de esa criatura.

Bueno... alto tapados.. quizá pueda evitar que estas criaturas vean de nuevo su futuro o el camino a seguir - piensa Jeremy. Y ahora.. ahora llega el momento de la verdad. - dice mientras piensa en que desde hace bastante rato han estado buscando la manera de que el hombrecillo de las imagenes tuviera más tiempo para enviar la triada. eso es lo que iba a hacer. intentar dar tiempo a los cubos a que hicieran lo se les había pedido... Su mente ya no era simplemente la de un humano.. percivia la realidad y la no realidad como si de una pelicula se tratara. Su mente no se preocupo ni de su cuerpo, ni de su propia existencia. Fue como si desconectara todos los cables y solamente dejara el de los instintos primarios...

Jeremy sacó el artefacto alienígena y poniendolo en posición de "soldador" se interpuso entre las sobras y la tríada. -Vamos Criatura del Infierno.. Aquí estoy!!!... - le grito a los puntos naranjas con el desesperado intento de atraer a la criatura.

La realidad y la ficción se funden en una, la visión del cubo se transforma en el presente, y la conciencia de Clive viaja de los objetos a lo que le dictan sus sentidos. De las visiones a la cruel realidad. De imágenes y sonidos a.... "¿Es este el final? ¿NUESTRO final?"

A la cabeza le viene la escena presenciada anteriormente, donde las criaturas invadían aquella sala y devoraban en un abrir y cerrar de ojos a uno de los dos hombres que habían activado los cubos. "¿Es esto lo que nos espera?", piensa Clive, que ve transcurrir los acontecimientos frente a él como si de una película se tratara. Los disparos, las sombras, el destino que Futuro siempre mostraba. 

- Hemos fallado... - dice en un susurro, más para él que sus compañeros. No está seguro de que sea cierto, pero en este momento es incapaz de pensar con claridad.

Cuando escucha los disparos, inconscientemente se echa al suelo, tratando de cubrirse. No es un hombre de combate, esa labor quedaba en manos de Helen y Smith. Él es un escritor. Su habilidad es la de transformar en palabras los sucesos. "Sería una historia perfecta... Si no fuera porque no veo un final. Mejor dicho... Parece que solo hay un final, y no parece bueno..."

El viento crece más y más, lo que le recuerda a Clive el viaje reciente. Salvo en la residencia de Helen, el resto del tiempo este viento maldito les ha acompañado. El viento y la oscuridad han sido las dos únicas constantes desde que atacaron el laboratorio de Helen. Sin tener muy claro por qué, Clive se arrastra por el suelo, todavía cubierto contra una nueva andanada de disparos "¿Han muerto esos hombres? ¿O sólo son parte de la oscuridad?"; se aproxima hasta los cubos, y abraza al primero de ellos, como si tratara de protegerlo de ese viento tenaz. No sabe si servirá de algo, pero siente que los objetos están totalmente vendidos a lo que sea que está entrando en la sala.

Las sombras se extienden por el pasillo, y empiezan a invadir la sala. La magia de la caverna parece romperse, las luces y reflejos que les han acompañado desde que entraron con su compañero, Futuro, se atenúan y comienzan a ser engullidos por la oscuridad. Clive se une a los gritos de Jeremy, pero de su boca no salen palabras, tan solo desesperación. La imagen vuelve a su cabeza... Las criaturas entrando en la sala y viendo su futuro en los cubos, a la vez que exterminan a uno de los hombres.

Los pequeños ojos anaranjados aparecen en la sala. El mundo de Clive se reduce más y más a un pequeño resquicio de luz, emitido por la Tríada. El final está aquí. Han perdido. No hay salida, no hay futuro. La muerte y la oscuridad es lo único que Clive puede ver. "No... NO...... NOOO.........."

- ¡AAAAAAAAHHHHHHHHH!

Y se lanza hacia la entrada.

Oscuridad.

La luz se desvanece por completo. El ciento cesa por completo. Todo sonido queda apagado al instante.

Oscuridad.

Una respiración. ¿Qué ha pasado? Puedes oír los latidos de tu corazón, luego estás vivo. Tus ojos no captan nada. Tu cuerpo parece suspendido en el vacío, y a la vez contener toda la vida que queda.

Tu corazón late más fuerte. Oyes algo más dentro de ti. Algo se mueve. La sensación es insoportable, sea lo que sea, tratas de sacarlo, de arrancarlo de tu pecho.

Gritas sin producir sonido alguno. Gritas clamando ayuda, pero nadie viene.

Aquí están. Por fin.

Sea lo que sea que siente dentro, hace algo. Se mueve, se agita.

Tienen miedo. Bien. Pronto todo acabará.

Algo ocurre entonces. Algo dentro de ti se revuelve con fuerza. De repente tu cuerpo se agita y agrieta, y una explosión quiebra la oscuridad.

El corazón se detiene.

— - — - — - —

Todo ha ocurrido demasiado rápido. Como flashbacks, las imágenes de lo sucedido se repiten en vuestra cabeza, separadas unas de otras como si el recuerdo mismo de ellas se estuviera desvaneciendo, y tan solo momentos aislados permanecen en vuestra memoria. 

Los disparos irrumpen en la habitación, impactando en las paredes y algunos de vosotros. Un grito de dolor de uno de vuestros compañeros depara lo peor.

Los disparos cesan, pero el viento crece. Clive grita y se lanza hacia la entrada; Jeremy empuña el artefacto entre sus manos y lo muestra amenazante hacia la oscuridad.

Tres entran. Se lanzan directos hacia vosotros, obviando los cubos por el momento. Y la Tríada responde.

Las fauces de las criaturas se abren - representando una visión terrible, como si la oscuridad misma hubiera desarrollado unas fauces frías y letales -, a la vez que la Tríada se apaga. Las sombras de las criaturas se extienden por las paredes y lo invaden todo. La sala queda en tinieblas, y sentís como vuestros cuerpos son engullidos por la oscuridad más absoluta. El artefacto de Jeremy brilla una vez justo antes de ser atrapado entre unas fauces amarillentas, rodeadas de sombras.

Entonces solo sentís frío. Y después, nada. En la sala solo quedan silencio y sombras.