Partida Rol por web

7º Mar: año 1668

Castilla Ocupada: Barcino (Torres)

Cargando editor
19/01/2010, 20:08
Remy DelAubergne
Sólo para el director

- Pues no, la verdad es que no me puedo quejar. Pero basta de hablar de mi, soy un maleducado, ¿Que tal por aquí? Supongo que habrán sido tiempos muy duros hasta la tan ansiada victoria. ¿Habreis estado muy ocupados, verdad?

Cargando editor
20/01/2010, 15:04
Gerárd Chevalier

- Oh fue terrible, terrible. Esos castellanos son todos unos barbaros, atacaban sin miramientos durante la noche como las ratas. No tenian ni un poco de honor. ¡Incluso una vez quemaron un pueblo entero para evitar que tuvieramos refugio en el! Tremendo... - escandalizado

Cargando editor
20/01/2010, 15:06
Roseline Fortescue

- Creo que lo más acertado seria retirarme ahora, tienen cosas de las que hablar... - os hace una ligera reverencia de despedida - espero que volvamos a tener oportunidad de vernos - te dice agradable

Cargando editor
20/01/2010, 20:43
Remy DelAubergne
Sólo para el director

- Yo también espero que nos volvamos aver, Madame Fortescue. Ha sido un placer.

Y la despido con una reverencia. Una vez que se ha alejado la viuda me dirigo a Gérard:

- Ya veo que continuais escogiendo las mejores compañias. Salta a la vista la belleza de esta damisela.

Cargando editor
21/01/2010, 00:19
Gerárd Chevalier

- Me temo por desgracia que es más allegada a Lefevre que a mi, de las pocas mujeres que se han atrevido con la politica. Ya la conocerá....

Mira ya molesto a tu "guardaespaldas"

- ¿Vais con el a todos lados?

Cargando editor
21/01/2010, 18:15
Remy DelAubergne
Sólo para el director

- Ah, claro que no. Es que acabo de contratarle y todabía no estoy muy habituado a tenerelo a la espalda. Pierre, si nos disculpas, nos veremos a la salida más tarde.

Ya en solitario con Chevalier, continuo conversando.

- Es mi guardaespaldas. Me ha enterado de que aun no es del todo segura la ciudad, con tanto castellano sediento de venganza, y me ha parecido apropiado contar con una protección... añadida.

Cargando editor
23/01/2010, 14:22
Pierre Bessette

Se retira tras una leve reverencia.

- Estaré fuera si se me requiere.

Cargando editor
23/01/2010, 14:22
Gerárd Chevalier

Gerárd sigue con la mirada a Pierre cuando se retira

- Tened cuidado con ese hombre, su lengua es más peligrosa que la espada de cualquier castellano que pueda llegar a esta ciudad. Hace tiempo que busca un lugar que le otorgue influencia en estas tierras y si se ofrecio a trabajar para vos quizá fue porque al intuir vuestra grandeza sospechó que podriais acercarle aqui... - casi en susurros, asegurandose de que Pierre no le escuche

 

Cargando editor
24/01/2010, 16:46
Remy DelAubergne
Sólo para el director

- Muchas gracias por vuestra recomendación, lo tendré bien vigilado os lo aseguro. Ya sospechaba yo algo extraño de este veterano pero aun siendo un arma de doble filo puede que me sea útil- miro con recelo hacia la puerta pensando que debo tener mucho cuidado con lo que oye y ve mi escolta.

- Por cierto os debo otro agradecimiento por el detalle frente a Monsieur Lefevre. Ya temía tener que recorrerme todos las pensiones de Barcino para encontrar un sitio medianamente higiénico. Puede que pueda devolverle el favor ayudandole a dirimir cualquier enredo que se deba de resolver discretamente.

Cargando editor
24/01/2010, 23:36
Gerárd Chevalier

- Creo que por ahora me guardaré el favor, ya tendrá tiempo de devolvermelo - te sonrie

Cargando editor
25/01/2010, 22:37
Remy DelAubergne
Sólo para el director

- Estoy seguro que elegireis el momento conveniente. Cambiando de tema, me temo que llego tarde para los festejos de la victoria pero supongo que habrá algún festejo, celebración, banquete o baile donde a conocer a la gente interesante de la ciudad. Espero que me inviteis a alguno. - Digo con tono amable.

Cargando editor
25/01/2010, 23:49
Gerárd Chevalier

- Ah, claro, contad con ello - sonrie

Cargando editor
26/01/2010, 18:25
Remy DelAubergne
Sólo para el director

- Me alegro mucho. - digo sonriendo.

Observo a mi alrededor la estancia donde me encuentro y me fijo en el resto de personas que hay en ella. Contemplo con disimulo las actitudes de las personas, si prestan atención a nuestra conversación y que tipo de gente pulula por esta corte.

Notas de juego

¿como podría hacer para enterarme de como acceder a la vivienda que me proporciona Lefevre?

Cargando editor
26/01/2010, 19:51
Director

Estais solos en la habitación, los demás estan reunidos.

Notas de juego

Se supone que el se encarga de que alguien te haga llegar la información

Cargando editor
26/01/2010, 20:06
Remy DelAubergne
Sólo para el director

- Bueno, ahora que estamos solos ya os puedo contar la otra parte de historia de mis andanzas hasta llegar aquí, pues bien sabéis que, a pesar de ser muy noble, mi ralea no conlleva riqueza y he tenido que andar haciendo encargillos a unos y otros para mantener mi status. - Tomo unos segundos aire antes de comenzar mi relato.

Cargando editor
26/01/2010, 21:05
Remy DelAubergne
Sólo para el director

- Cuando coincidíamos en el Petit Chateau yo conseguía mantener la dignidad de mi clase a duras penas ya que no tenía asignación familiar ni posesiones. Ya conocéis mi fama de poder conseguir todos los caprichos que se puedan imaginar, siempre que se pague un precio adecuado al artículo, pero comencé a dedicarme a otro producto, más valioso que ningún otro, la información. Aprendiendo lo útil de tener mil ojos a tu servicio obtenía rumores o cotilleos y algunos de ellos, bien explotados, pueden allanar un poco las dificultades de la vida. Sin ir más lejos conseguí que alguno de mis profesores me aprobara para no difundir algún secretillo. Vos por supuesto, podéis estar tranquilo de mi discreción, jamás me atrevería a utilizar este tipo de argucias contra vuestra excelencia. - Digo inocentemente.
- Estos trabajillos me permitían seguir adelante y mantener mis vestiduras concordes a la moda del momento pero algún que otro asunto se torcía y me era obligado desenvainar mi acero. Una noche el Arzobispo me pilló descendiendo por la fachada de su casa y tuve que hacer frente a su guardia para salvar la vida. El muy bobo pensó que le espiaba y por eso solo mandó media docena de soldados, si llega a saber que volvía de hacer una visita intima a su sobrina habría salido el personalmente en ropa interior a buscarme. - Río sinceramente recordando la historia.
- Como el ambiente estaba revuelto y no quería que me encontraran, viajé a Vodacce mientras se calmaban las cosas. Bonitas semanas las que pasé allí, un tiempo en la ciudad conociendo las gentes, observando las tendencias de la moda y un tiempo en la campiña disfrutando de la tranquilidad de esas tierras. Es un lugar de oportunidades pero hay que andar muy precavido ya que más de una vez me intentaron sajar el pecho, ya sea para hurtarme o por vengar algún malentendido.
- Luego me mude a una buhardilla y comencé a frecuentar de vez en cuando, a parte de la visitas de costumbre a la corte, los ambientes bohemios de la ciudad. Muchas pasiones se encuentran entre el humo y alcohol en locales cargados de gente. A pesar de la falta de higiene, el ambiente era fantástico para ver las nuevas olas de la pintura y el arte. Conseguí que algún noble apadrinara a alguno de estos artistas muertos de hambre con lo que pude decorar mi buhardilla con algunas de sus mejores pinturas en agradecimiento.
- Desgraciadamente algún tipo envidioso y sin escrúpulos no pudo soportar este éxito y hace poco alguien quemó mi alojamiento y todas mis obras de arte. Cuando llegué a ver el edificio en llamas, vi a unos hombres muy sospechosos con espadas abajo esperando. No lo dudé y me dispuse a partir de secreto para que piensen que estoy muerto. Tengo la sensación de que esto tiene algo que ver con mi hermano pero aún no puedo demostrarlo. De momento me quedaré por aquí un tiempo pasando desapercibido y más adelante volveré a investigar más de cerca ese asunto.

Cargando editor
26/01/2010, 22:50
Gerárd Chevalier

Se indigna

- Alguien deberia esclarecer lo ocurrido de inmediato... ¿que despreciable podria tener algo contra vos?

Cargando editor
28/01/2010, 21:22
Remy DelAubergne
Sólo para el director

- La verdad es que no tuve oportunidad de investigarlo. Cuando les vi observando el fuego con alegría y alguno de ellos mirando alrededor para comprobar que no hubiese escapado me dije que lo mejor era desaparecer rapidamente. La verdad que a lo largo de mi vida me habré topado con más de un personaje al que no le importaría verme muerto, pero muy pocos les veo con el valor o el odio suficiente como para atreverse a algo tan llamativo. Por eso sospecho de mi hermano, el es el único con el valor y la cobardía, el odio y el miedo, todo junto, en una extaña mezcla de pasiones y bajezas, que le llevaran a violar todas las buenas formas y menesteres que se requieren para resolver una disputa.

Cargando editor
28/01/2010, 21:58
Gerárd Chevalier

- ¿Su hermano? - se extrañó - ¿Que llevaria a su hermano a algo así?

Cargando editor
29/01/2010, 16:43
Remy DelAubergne
Sólo para el director

- Me sorprende que usted que está siempre tan bien informado desconozca esa historia aunque en realidad no se trata más que una minucia de provincias.

- Pues a la edad de quince años, hacía uno o dos veranos que había comenzado mis lecciones de esgrima, y yo sentía todo el ímpetu y la imprudencia propio de esa edad, cuando en una cacería con mis hermanos, el mediano, Jacques, disparo a la vez que yo a un jabalí que calló abatido del disparo. El comenzó a celebrar su puntería insultando mi orgullo ya que era yo al que le correspondía la pieza y yo le plante cara diciendo que se equivocaba. La discusión estaba servida y continuamos argumentando y justificando durante todo el camino de vuelta. Ya en el palacio la riña había pasado a los insultos y Jacques consiguió sacarme de mis casillas y terminé chillando y retándole en duelo. El sonrió complacido, parecía que había esperado todo el tiempo ese momento.

- Jacques ha sido y es un experto espadachín y la diferencia de complexión, ya que me saca 4 años, le daba una ventaja apabullante pero a esa edad no era consciente del riesgo, ni de las terribles consecuencias que puede acarrear. El duelo se mantuvo solo unos pocos minutos Jacques no paraba de esquivarme y fintarme pero sin hacer sangre para que continuase su juego. Mi hermano mayor, Paul, no contuvo la tensión, había asistido conciliante a toda la discusión por la pieza pero había perdido la paciencia cuando comenzó el duelo. Sabía que yo no tenía ninguna oportunidad y que Jacques podía matarme en cualquier momento si fuese su voluntad. Lamentable su objetivo era otro. Continuó riéndose de mí, provocándome y abriendo mi guardia para mostrar mi vulnerabilidad. Paul no lo soportó. Con las manos desnudas se interpuso entre nosotros. Jacques sonrió. De un fuerte movimiento de su espada dirigió mi sable hacia el corazón de Paul y entre la fuerza del acero y la inercia de mi hermano mayor la punta de mi propia arma se clavó mortalmente en el corazón del primogénito y asomó por la espalda.

- Mi hermano se había interpuesto en un duelo y por eso no podía ser juzgado. Mis progenitores estaban destrozados por la tragedia. Habían perdido al hijo en el que habían puesto todas sus esperanzas. La herencia le correspondía a mi hermano mediano por lo que ha mi solo me quedaba el papel de culpable. Las únicas palabras que me dirigió después del accidente fueron: “Ahora solo tengo un hijo”. Mi madre, aunque en secreto, si me comprendió y me consoló por la muerte de mi hermano pero nunca se atrevería a llevar la contraria a mi padre. Y ese es el motivo porque el que me mudé a la capital del reino. Vivo exiliado de mi propia casa y no se si podré volver algún día al lugar donde crecí. Por las noticias que me llegan de mi madre de vez en cuando Jacques cada vez es más paranoico. Hace poco que mi padre quedó incapacitado para administrar su condado y el a tomado el relevo. Desde que alcanzó el poder su paranoia ha ido en aumento. Acosa a impuestos a los aldeanos para fortificar completamente sus castillos y tiene una “guardia” que controla cualquier tipo de actividad en la comarca. Tenía que haber visto venir ese atentado. Soy una de las pocas personas que puede disputarle esas tierras y me quiere eliminar porque pensará que yo quiero quitárselas. La verdad es que a nadie le amarga un dulce pero yo no tengo mayor interés en esas tierras. Lo que si que me gustaría sería que ese cerdo confesase ante mi padre lo que hizo. Aunque quizás ya lo sepa.

- En fin esa otra parte de mi historia. La más trágica y la que reconcome mis noches en vela, espero no haberle aburrido con mi relato.