Durante un par de segundos, el cuerpo de Karin sufrió un pequeño espasmo, quedándose con los ojos en blanco, para volverse a incorporar con otro aspecto ligeramente distinto. Sus ojos se habían oscurecido con unas enormes ojeras, iba con los hombros caídos y todo su cuerpo se movía como si estuviera muy cansada, todo lo contrario a la energía que desprendía antes la pequeña.
Se miró las manos un momento, abriéndolas y cerrándolas un poco, como comprobando algo con ese nuevo aire soñoliento. Solo pareció más "despierta" cuando las raíces atacaron a todos a su alrededor, momento en el que retrocedió asustada.
- ¡O-oye, esto parece demasiado peligroso para ser el tutorial...! - su voz era la de siempre pero sonaba más dejada y cansada. Se giró a al ver que ninguno las tenía todas consigo y al escuchar a Aina, Karin se encogió de hombros y empezó a retroceder junto con los demás, trotando - Pues si solo me toca hacer esto... Me parece buena idea, ¡huyamos!
Motivo: Esquivar
Tirada: 1d10
Dificultad: 13+
Resultado: 6(+6)=12 (Fracaso) [6]
Motivo: Esquivar (Suerte del Protag)
Tirada: 1d10
Dificultad: 13+
Resultado: 9(+6)=15 (Exito) [9]
Se me olvidaba la esquiva, sorry.
Me como 7 de daño y los otros 12 van a estrés (+60)
El ataque de la criatura ciertamente fue devastador, dejando claro a más de uno sus dudas sobre el verdadero poder de aquella criatura, y es que a excepción de Aina todos sufrieron a causa de sus raíces crecientes [1].
Seria ante tal peso sobre sus hombros que Karin empezaría a sentir su mente luchar por no hacerse pedazos, siendo invadida por las sensaciones de dolor y el horror de tener a una criatura como esa delante...
Y de manera casi milagrosa, su mente se mantuvo en una pieza, fría ante la adversidad y consciente de su entorno: ¡Karin estaba preparada para lo que se viniese! [2]
-¡Vamos, por allá! -señalaría Tobias hacia el camino al otro lado del claro, indicando lo que posiblemente fuese la salida, en jápones para agilizar las cosas para la mayoría, y hacer un gesto a Adele para que les siguiese.
El grupo no tuvo que pensárselo dos veces: tan pronto como tuvieron la oportunidades todos empezaron a correr hacia la salida como mejor podían con las heridas, y para su suerte la criatura no hizo el esfuerzo de seguirles por lo que rápidamente pudieron dejarle atrás, siendo perseguidos nada más por el eco de sus rugidos... [3]
Motivo: [Karin] Prueba de Estrés
Tirada: 1d100
Dificultad: 14-
Resultado: 12 (Exito) [12]
[1] Todos calcularon sus daños, paso de resumirlo de vuelta con el formato.
[2] Karin supera la Prueba de estrés y entra en estado de Virtud.
[3] El grupo huye sin otra opción: sufren 10 de estrés.
Fin del Combate
Iniciativa
Guardián del Bosque > Karin > Aina > Kailani/Adele > Generadores
Adele Latifi: 10/11 PV | 2/17 MP | Estrés 95/160
Kailani Fubukawa: 17/17 PV | 2/7 Estamina | Estrés 60/170
Nakahara Karin: 11/11 PV | 13/17 MP | Estrés: 50/170 | SENSATA (10t)
Okada Aina: 6/6 PV | 5/17 MP | Estrés: 65/160 | Flechas: 13/15
Tobias: 10/10 PV | Estrés 70/200
Kazuya: 22/30 PV | Estrés 55/180
Navy: 9/20 PV | Estrés 80/170
Taro: 8/15 PV | Estrés 95/160
Guardián del bosque: 72/80 PV | Protección II
Mapa
[O] --- [O] --- [X] --- [ ]
Tras un recorrido que a más de uno se le hizo un poco largo, finalmente pudieron sentirse seguros al llegar a una nueva zona donde detenerse. De camino, Adele aprovechó para tratar a su amigo Kailani, haciendo salir de su cuerpo una energía oscura que, como una especie de gusanos, volarían desde ella hasta el cuerpo del chico, y tras recorrerle un poco se introducirían en él sin ningún tipo de dolor, aunque la sensación era un tanto "extraña", siendo que tras unos instantes sus heridas empezarían a sanar notablemente de adentro hacia afuera, quedando básicamente como nuevo, al menos físicamente.
Por su parte, Aina también habría sido de ayuda al invocar aquellas luces mágicas que bañarían a los distintos miembros del grupo, dándoles un alivio que, si bien era menor del que dio Adele directamente a Kailani, era de agradecer teniendo en cuenta que pudo hacerlo con varios a la vez.
El lugar al que llegarían seria otro pequeño claro en el bosque, el cual a diferencia de los anteriores solo tenía un camino de acceso siendo por el que llegaron. En el centro de este se encontraban acomodadas unas rocas sobre unas plataformas de piedra, siendo que sobre los escalones estaban dibujados una serie de símbolos extraños que brillaban con una tenue luz celeste, misma que emitía una enorme grieta en la roca más grande y parte del suelo.
-¿Están todos bien? -preguntaría Kazuya.
-¿¡Como preguntas eso!? ¡Casi nos matan allá! -aseguraría Navy.
-Al menos salimos en una pieza, y... por lo menos los pequeños parecen estar bien -observaría Tobias, quién con ayuda de Aina y Adele habían logrado recuperarse de las heridas casi por completo, siendo la excepción está última.
No tardarían en inspeccionar aquel conjunto de rocas, ya fuese por curiosidad u otra cosa, y ustedes los más pequeños se quedarían absortos con los símbolos en los escalones. No era de ningún idioma o lengua que conociesen, y jurarían que no eran capaces de pronunciar en sus mentes lo que sea que estuviese escrito allí, pero nada más ver aquellos símbolos, en sus mentes se dibujó la imagen de cuatro siluetas pequeñas tocando la gran roca agrietada junto a cuatro siluetas adultas. Tal como antes aprendieron a usar sus poderes, ahora sabían que debían tocar todos la roca.
Motivo: [Adele] Curación Oscura a Kailani
Tirada: 1d13
Resultado: 2(-1)=1 [2]
Motivo: [Adele] Curación Oscura a Kailani
Tirada: 1d13
Resultado: 6(-1)=5 [6]
Motivo: [Adele] Curación Oscura a Kailani
Tirada: 1d13
Resultado: 5(-1)=4 [5]
Por agilizar las cosas, tomo las acciones de Adele y Aina y las aplico luego de la huida automáticamente, y les conservo sus tiradas (no se puede actuar si huyen).
Tu tirada de curación oscura estaba mal, Adele: no es "+1 por cada INT", es "+1 CARA por cada INT", por lo que en teoría siempre tirarías sin bono, pero con más caras, y un penalizador de -1 (es decir, puedes sacar 0). Allí hice unas tiradas para ahorrar tiempo, pero... me sentiría mal dejando algunas de ellas, y no voy a tirar infinitamente, porque joer que malas tiradas xd, y teniendo en cuenta que seguramente sea culpa mea por lo fatal que está explicado, lo tomaré como un 10, solo por esta vez.
Mapa
[O] --- [O] --- [O] --- [X]
No sentía nada, más bien era que estaba en un auténtico piloto automático por salvar su vida mientras corría por lo que cualquier dolor era secundario e incluso terciario. Al menos lo fue hasta que Adele comenzó a curarlo lo cual no fue si no hasta el final que empezó a recuperar consciencia ya en la nueva zona, donde estaban a salvo. Cayó de culo con una cara de puro terror mientras se tocaba el costado, recordando que lo habían perforado hasta la muerte pero estaba vivo y de una pieza. Lo único raído eran sus ropas. -Q-qué... Su respiración aún era entrecortada mientras miraba a los demás con una absoluta confusión.
Habló en japonés chapurreado-¿No he morido?... Al final asintió a los adultos y terminó por recomponerse tras todo aquel shock inicial. -¿Habéis look todos this? ¿Is normal? Se frotó la nuca, ya más calmado, indicando su cabeza y luego la roca.
La tocaría junto a los demás si eso era lo que decidían hacer todos.
No había podido hacer nada más, lamentablemente aquel árbol era demasiado maloso y cuando emprendí la huida, temí por todos los demás. Por suerte fuimos todos corriendo muy rápido, tanto que en el camino me aventuré a que mi deseo de curar a Kai se manifieste y a través de unos gusanos convertidos en sombra—que me horrorizaron en demasía—logré curarle la nana por suerte. Aunque era bastante perturbador lo que salía de mi, no como la niña rubia que hacía cosas bonitas, lo mío era todo sombrío. ¡Muy feo!
El asunto es que en medio de aquella maratón, el enemigo de madera me pilló y sentí en mi como me hacía daño, caí de bruces y me levanté con la carita sucia pero corriendo como podía. Era muy doloroso, nunca viví algo así, hasta que de repente la misma compañera que hacía cosas bonitas me dio un montón de alivio en el cuerpo, y eso ayudó a que pueda seguir corriendo.
Al llegar nos encontramos con unas piedras y suelto un soplido hacia mi flequillo, bastante cansada. Eso sí, le agradecía a Aina.
—Th-a-n- k you—dije un poco pausado, así entendía y me dirigí hacia el chico rubio que sé habla inglés—. ¿Qué es esto?
Durante un segundo antes de su huida, Karin emitió un pequeño gemido de dolor mientras se doblaba sobre sí misma, presa del dolor y algo más. Su cuerpo cambió varias veces, casi perdiendo el tono gris que había adquirido. Sin embargo, se mantuvo entera y salió corriendo con los demás. Una suave sonrisa asomó en su gesto cansado.
- ¡Eso, eso! Estamos aquí contigo, ¿sí? No te vamos a dejar sola, solo ten cuidado... - dijo sin dirigirse a nadie, aún medio sonriendo.
En cuanto llegaron al claro, mientras los adultos hacían las preguntas, Karin se secó el sudor de la frente y miró a su alrededor, comprobando si había alguna otra amenaza cerca. Ladeó un poco la cabeza, se encogió de hombros y finalmente cerró los ojos, cayendo de rodillas y sufriendo un pequeño temblor, como un escalofrío...
- ¡Haditas! - grito sonriente al volver a abrir los ojos y ver que hay tantas cositas brillantes alrededor que nos curan las pupas - ¿Las has hecho tú, Aina? - pregunto, mirando a mi amiga hada, dándome cuenta luego de algo - ¿Ah? ¿Por qué estoy en el suelo?
Me levanto poco a poco, notando todo el cuerpo cansado y viendo que tengo el vestido manchado de algo rojo. ¿Tomate? No, no sabe a tomate... Miro a los lados, sin entender qué ha pasado. Pero sí sé que debería tener cuidado... Y mirando la piedra y con los muñequitos enseñando qué hay que hacer, no sé si hay que hacerlo ya. Me levanto un poco y me sacudo el polvo y el barro del suelo, mirando a Kai que ya está tocando la piedra.
- Tenemos que tocarla todos a la vez. - explico a los adultos, señalando la piedra pero sin muchas ganas de hacerlo - Pero a lo mejor antes tendríamos que curarnos un poquito más. ¿Y si sale otro monstruo feo de ahí? - señalo, recordando algo - ¡Ah, aún tenemos la comida de la mochila! ¿Servirán para hacer cura-sana? ¿Necesitáis descansar? - pregunto en general. A mí me duele un poco aún... Pero si todos quieren seguir jugando, ¡yo también!
De todo el grupo, yo fui la única que no se llevó un golpe por parte de ese monstruo. Los demás estaban todos heridos, y por eso decidí llamar a mis amigas para que los ayudasen.
—¡Las he llamado yo! ¡Son mis amigas! —exclamé sonriente respondiendo a Karin—. ¡Ellas os curarán! —La chica extranjera de pelo verde se acercó y me dijo algo. «Thank you…». Eso me sonaba de clase. Significaba… ¡Gracias! —¡De nada! —dije sonriendo de oreja a oreja.
Estaba muy contenta de que alguien se diera cuenta de que yo había ayudado, y más aún porque me lo agradecieran. Aunque eso me hizo pensar… ¿Desde cuándo conocía a las haditas? No lo recordaba. Solo sabía que eran mis amigas y que tenían muchas formas de ayudar.
—Mis amigas os han curado. Ahora os sentís mejor, ¿a que sí? —comenté con ojitos inocentes, esperando mayores comentarios de aprobación.
Viendo que Karin estaba de rodillas en el suelo, le tomé la mano, ayudándola a levantarse.
—Karin… ¿Quiénes son esos con los que hablas? ¿Tienes amigos invisibles? ¿Me los presentas? —pregunté con curiosidad, ladeando la cabeza.
Una vez estábamos más tranquilos, miré esas piedras tan curiosas. Tenían cosas raras escritas que yo no entendía. Por alguna razón, tenía la sensación de que debíamos tocarlas, aunque no sabía por qué.
—¿Qué es esto? Sí, tenemos que tocarla… —comenté dubitativa—. Yo estoy bien —contesté a Karin. Aunque la verdad era que me dolía bastante la cabeza.
Una vez todos estuviesen de acuerdo, tocaría la roca junto a todos los demás.
En el caso de Adele, esta recibira una respuesta un tanto insegura por parte de Tobias, quien mas que todo no sabia exactamente que responder.
-Parece un tipo de altar, pero desconozco su uso -opinaria, siendo una de las pocas veces donde el hombre no tenia conocimientos de algo.
Por su parte, Navy acercaria a Aina para dejar caer una mano sobre su cabeza y despeinarla un poco, con una amplia sonrisa.
-Pues ha sido de mucha ayuda: honestamente pense que serias debil por tu aspecto, pero pareces tener guardados varios trucos -admitiria la mujer.
Ante la duda de que hacer ahora, algunos directamente fueron a tocar la roca, mientras otros pensaban si era mejor curarse antes o simplemente dialogar: el caso es que ninguno parecia querer estar alli mucho mas tiempo, y algo en vuestro interior os animaria a ir a poner la mano en lugar de hacer otras cosas, un llamado que les resulto tan tentador como un boton rojo con un cartel de "no presionar", siendo que segun fueron colocando las manos los adultos fueron haciendo lo mismo.
Un pacto de tiempo y sangre.
Una union mas alla de una unica vida.
Una oportunidad de venganza o perdon.
Maldice su nombre.
Bendice a los olvidados.
Reza para que desaparezcan.
Todo antes de que el vuelva...
En el instante en el que todos tocaron la roca, la luz de la grieta se empezo a intensificar, y tal como aquella vez en la oscura mesa sus cuerpos empezaron a volverse luz, llamas de energia que volarian hacia el interior de la roca mientras sus ojos se cerraban, y se abrian nuevamente en otro lugar...
Fin del Acto II (A): Entrada al Bosque.
Continua en Acto III: Una cena luego de hacer la tarea.