Partida Rol por web

No podia entender a donde habia caido Alex, pero luego de dar vueltas y vueltas por ese endemoniado terraplen mi corazon encontro algo de calma al encontrarme con Valy y posteriomente a los demas.

En el punto en el que estaban las cosas ya no me importaban las ruinas ni la mision de Jarcrow, solo queria encontrar a Alex ahora que sabia que mi amiga estaba bien y con vida.

De hecho, al verle corri a abrazarla pero luego habia visto a los demas y logre controlar mi efusividad para solo contarles como habiamos caido por ese terraplen y Alex habia desaparecido.

El enano pelirrojo parecia en buen estado, mucho mejor que yo al menos pero su actitud dejaba que desear. Al parecer todos los enanos eran asi, salvo aquellos de la taberna en donde habia bailado y ....

El recuerdo de aquella de rencuentro con Alex me hizo suspirar de tristreza. Tenia que encontrarle. Alex, solo podia estar en un sitio, y eso era mas abajo del terraplen, asi que tendria que ir bajar hasta donde fuese por encontrarle, pero no podiamos quedarnos alli y necesitabamos un sitio para descansar y curarnos, ademas aquella niña parecia realmente afectada por todo lo que habia pasado.

Y si Alex esta herido?

La incertidumbre me estaba comiendo los nervios.

- Valy, hagamos un campamento rapido para que pasemos la noche, yo tengo que buscar a Alex!! No puedo dejarlo solo en la intemperie.

Si estaba herido, el frio de la montaña podria empeorar su condicion y si lo encontraban los trasgos antes que yo?

Aenifer estaba perdida sin Alex. No sabía que lo que les unía era tan fuerte, pero en aquellos instantes, mis propios sentimientos no importaban. Lo único realmente importante era sobrevivir.

Al verla, ambas nos abrazamos, contentas de habernos encontrado, pero ella continuaba buscando y pensando en Alex. ¡Maldita sea! ¡Había sido una idea pésima traerlo desde el minuto cero!

-Escúchame, Aenifer. ¡ESCÚCHAME! -le dije, cogiéndola de los hombros -. Ahora lo importante es sobrevivir. Alex no querría que te sucediese nada malo. Hemos perdido a muchos esta noche, y él no es el único. Si está vivo, lo conseguirá. Es despierto y hábil. Pero ahora, piensa en ti.

Entonces me giré hacia Belbara.

-A mí esas ruinas nunca me importaron lo más mínimo y ahora menos que nunca, enana, así que deja ya de hablar de ellas como si de verdad fuese una cuestión de vida o muerte. Si debemos luchar tú y yo por ellas, o cualquier otro, lo haremos, pero no ahora. En estos momentos, debemos funcionar como un ejército disciplinado, movernos con rapidez y sigilo y encontrar un lugar en donde resguardarnos. ¿De acuerdo? Cuando llegue el nuevo día, podremos explorar un poco más la zona e intentar encontrar a los desaparecidos.

Y salir de allí. Eso era lo primordial. En batalla, importaba el ahora, no el antes, y cuando perdías a un compañero de armas, llorabas su pérdida y continuabas luchando. Así era la guerra. Así sucedía con Eli, Jacrow... y Alex.

Escuche como me regañaba Valy. En el fondo ella tenia razon y yo lo sabia pero mi mente no podia dejar de pensar en Alex. Antes pesaba en ambos, cuando no sabia nada de Valy, pero al menos ella habia aparecido.

Por lo pronto era mejor estar juntos y encontrar refugio para luego evaluar nuestras posicion.

Entristecida segui sus ideas y nos preparamos para salir hasta que me di cuenta de lo que habia hablado con el enano pelirrojo.

Me detuve frente a el unos instantes y comence a detallarlo.

Sera posible????

Mi mirada interrogativa paso a ser algo incomoda y tuve que desviar la mirada antes de que el mar humor de los enanos floreciera de nuevo.

¡¡¡¡Es una mujer con barba!!!!

Aquello realmente me habia sorprendido pero no dije nada. No sabia porque, pero aquello me daba risa y al menos habia sacado Alex de mi cabeza por unos minutos. Me aleje de ella sin decir nada agradecida de sentirme un poco mejor.

Como no me habia dado cuenta?

Finalmente hicieron lo que tenían que hacer. Dejaron de lado sus rencillas y se unieron por tratar de sobrevivir. Se alejaron de la zona del combate refugiándose en una pequeña zona arbolada que se encontraba a no mucho más de un kilómetro de distancia. Allí decidieron pasar la noche.

Todos había perdido mucho en aquel viaje. Tarkhan había perdido a Hithai. No esperaba verle morir cuando salieron ende Karak-Belgarosh. Si lograba regresar, no sabía cómo iba a explicárselo a su padre. Al menos había conseguido recuperar el pasador dorado de su pelo en forma de tigre que pertenecía a la familia Thai desde hacía muchas generaciones. Thaitsai querría tenerlo.

Belbara había perdido a todos sus compatriotas enanos. El fallecimiento de Thain había sido una de las más duras, pero cada una de las muertes de sus camaradas enanos le había afectado enormemente, pues les conocía personalmente a todos y a cada uno de ellos.

Por su parte, Aenifer había perdido a Alex. Todavía no lograba explicar que había sucedido. Habían pasado de estar juntos a caer por un terraplén y a no volver a ver a Alex. Simplemente había desaparecido. Era como si se lo hubiera tragado la tierra y ahora... Ahora podía estar muerto. O no... Lo peor era la incertidumbre..

Por su parte Valyëvan había perdido menos que el resto, pero también había perdido. Había perdido con quién discutir hasta casi rebanarse el cuello con la mirada, pues Jacrow había desaparecido.¿Capturado? No lo sabía. Pero a quién su echaría de menos sería a Eliferum. El Anjo, aunque fuera un tanto metepatas, se había convertido en alguien importante para ella.

Fuera como fuera,lograron pasas noche a salvo y sin más sobresaltos. El frío y sobre todo el insomnio producido por las dolorosas pérdidas no les dejaron dormir demasiado. La única que durmió a pierna suelta fue la agotada Yoon-shun, quién abrazada a su maestro pudo descansar calentita.

Y al llegar el alba regresaron con extrema precaución al lugar donde la noche anterior habían combatido. No encontraron rastro alguno de los cadáveres, era como si no hubiera tenido lugar el combate. Además, había nevado con intensidad y toda huella había quedado borrada para siempre. Podían intuir la dirección en la que hombres bestia perseguidos por trasgos habían partido, pero llegado cierto punto, seguir su rastro sería inútil. Más cuando Alex, el explorador del grupo había desaparecido también.

Y llegado ese punto del viaje, aquéllos cinco extraños compañeros, cuatro mujeres y un anzano, debían decidir que demonios debían hacer a partir de ese punto.

—Deberíamos descansar —sugirió Tarkhan—. Estamos demasiado tristes, cansados y doloridos para continuar. No podemos encender ni una antorcha, y viajar en la oscuridad es peligroso. Podríamos tropezar con una roca o una raíz y partirnos algo. 

Miró a Aenifer.

—Quizá así Alex pueda encontrarnos.

Lo que dije en el off. No sé muy bien qué esperas de nosotros aquí, pero es lo único que se me ocurre decir para avanzar la partida xD.
 

Belbara estaba de acuerdo. El desánimo, el peso emocional por las pérdidas y el cansancio físico habían minado notablemente sus fuerzas.

-Eso haremos- sentenció aunque su objetivo real no era decidir por el resto, si no mostrar que estaba de acuerdo con Tarkhan.

Se sentía más tranquila al saber que las dos semielfas no estaban realmente i interesadas en las ruinas. Que aquella misión era la de otro de sus compañeros, el jefe del grupo, suponía. Y perdido el guía ellas, cuya motivación por la misión no era fuerte, o quienes quizás no podían cobrar la recompensa o simplemente no respondían ante aquel rey humano... no pretendían seguir en ese empeño.

Belbara gesticula con sus manos mientras recitaba unas palabras*. Y el recipiente que había dispuesto se llenó de verduras y carne asada**.

Después solicitó que dispusiesen sus cantimploras o similares, y, realizando nuevos gestos y formulando nuevas palabras en una lengua antigua y arcana, agua*** apareció en el interior de ellos.

Todos estos bienes podían ser más o menos suficientes, y aunque no estaban de celebración, les servirían para reponer fuerzas y poder afrontar mejor el día que estaba por llegar.

Belbara, así mismo se preocupó por sanar dentro de sus posibilidades al grupo. Tanto mediante su varita como por sus hechizos de curación.

Al amanecer todo estaba cubierto por un muro blanco. Era tan hermoso como extraño a ojos de aquella enana cuyo hogar se encontraba en el interior de una montaña. Maldijo por el frío que hacía, y después por como se le hundían los pies en la nieve. Desde luego aquello era un engorro.

-No podía ser primavera no. Los enanos no estamos acostumbrados a estas torturas. y es que dada su estatura y peso, desde luego se hundía más que el resto de la comitiva.-Creo que tendremos más opciones de sobrevivis si permanecemos juntos. Pero, ¿Qué camino vamos a tomar ahora?- se sorprendió diciendo y preguntando a las dos semielfas.

En aquellos instantes, éramos por vez primera un grupo nada más. Las pérdidas nos habían convertido en compañía necesaria para poder defendernos con eficacia, si es que volvía a llegar el caso (que se daría, sin duda alguna). Belbara llenó nuestras cantimploras y se preocupó por darnos comida, y yo se lo agradecí sinceramente.

Era justo lo que necesitábamos.

-Muchas gracias, Belbara. La verdad es que... nos vendrá bien comer, beber y descansar -le reconocí. Tarkham apoyó mi idea de descansar, aunque yo no confiaba en que Alex nos encontrara. Para mí que había muerto, bien en combate o simplemente por accidente y que jamás volveríamos a verlo, aunque no quise arrebatarle a Aen las esperanzas, así que no dije nada.

Pero también había mucho que decidir, como por ejemplo, dónde ir a continuación. Belbara era una enana inquieta y no pudo quedarse callada y esperar a que estuviéramos más descansados.

-Yo seguiría hasta el Lago Negro. Aquí no podemos quedarnos y en cualquier caso, ya sea siguiendo nuestro camino o no, es un buen lugar para buscar cobijo y alejarnos de este lugar.

Personalmente, tampoco tenía ningunas ganas de seguir con aquella empresa, pero desandar el camino me parecía en aquellos momentos más peligroso que seguir adelante y sin duda, si alguno de nuestros camaradas había sobrevivido, miraría hacia delante, no hacia atrás.

El grupo habia seguido y yo con ellos. Era lo mas inteligente y tampoco tenia las fuerzas para oponerme o siquiera emitir comentario.

Despues de descansar y comer algo agradeci a la enana mujer quien no dejaba de sorprenderme.

HACEN MAGIA!!!!!

No tenia conocimientos de que los enanos tuviesen esas habilidades tambien y si de algo estaba segura es que ya nada me iba a sorprender. Faltaba el consenso de que ibamos a hacer.

- Yo creo que deberiamos continuar al Lago tambien. Si bien ahora somos un grupo mas pequeño, sera mas dificil que puedan seguirnos y podemos movernos con discrecion, ademas tenemos que saber si alguno de los nuestros amigos... Y aqui señale a ambos grupos. - Tal vez haya alguno de nuestros amigos con vida y este prisionero, tenemos que hacer algo.

Sabia que no podiamos pelear contra semejante ejercito, pero si tenia que infiltrarme yo sola tras las lineas enemigas, confiaba en mis habilidades para ello. Ademas, Alex no era estupido, si lograba escapar es muy probable que fuera sensato como nosotros y alcanzara el lago. Si no habia nada despues de eso y no encontraba pista de los trasgos supe que su destino estaria en manos de Sharess, aunque el no fuese devoto de mi ella.

Esa noche, despues de agradecer los gestos a la enana de intentar curarme, porque yo podia curarme sola, aun! y justo antes de dormir, eleve una plegaria a la diosa por la buena suerte de Alex. Si me escuchaba o no, lo sabria pronto.... aunque agradeci de que Valy estuviese con vida y conmigo. No podia imaginarme quedarme sola en esas montañas.

... maldito viaje....

- ¿Por qué queréis ir al lago? - Preguntó una intrigada Yoon-shun. - ¿Que se os ha perdido allí? - La niña no entendía que interés podían tener en seguir viajando hacia el sur. Tampoco entendía el razonamiento. Si esa mujer quería rescatar a sus amigos... ¿Por qué ir al sur? El grupo de hombres cabra se había desplazado hacia el oeste. - Nosotros estamos buscando la misma fortaleza enana que vuestro grupo pretendía saquear. Creemos que una valiente thogain enana se ha instalado allí con sus huestes. Podrían ayudarnos su encontramos la fortaleza. Es lo más sensato. - Miró a Tarkhan buscado su aprobación.

Me encogí de hombros al oír a la niña. Estaban buscando la misma fortaleza que nosotros y el lago negro era un lugar peligroso. Interesante. Sabían mucho más que nosotros.

-No sé cómo es posible que sepáis todo eso, pero si pensáis que el lago es una mala idea, por mí de acuerdo.

En el fondo, sabía que no íbamos a encontrar a los nuestros, pero, si ellos sabían hacia dónde ir, siempre existía esa posibilidad y me alegraba por ello... y lo temía al mismo tiempo. Quién sabe que encontraríamos.

-El lago era solo una referencia para mí. La fortaleza es el lugar que nos interesa, aunque sea por motivos diferentes. Una vez lleguemos... ya discutiremos lo que haremos -comenté, mirando de reojo a la barbuda.