Partida Rol por web

El tren se llevó al Papa por delante. Parecía que ambos representantes sus religiones habían entrado en una competición de qué religión lleva por el mejor camino. De lo que no eran conscientes es que esos “caminos” eran vías de tren. Poco sabía el Papa que Dios tenía planes para él, conociendo como planes ser atropellado por un tren a toda velocidad. Puede que por estar en trance o por fe ciega en su religión, el Dalai Lama ni se molestó en mirar en la dirección del espatarrado Papa cuya sangre le salpicó en toda la cara.

Por desgracia, los problemas no habían finalizado, sino que parecían haber acabado de comenzar, pues otra cuestión asomaba por el horizonte, por lo que raudo y veloz, el Revisor explicó a los presentes cuales eran las opciones a tomar ahora. Casi con un hilo de voz, tras el atroz acto que los presentes habían cometido, no él, evidentemente, él era un simple "mandao".

-Tenemos otro problema, hay otros más adelante...

- Vía Principal -

Profesor de Universidad de Física II

El enseña cosas, nadie las entiende, pero el hace lo suyo. ¿Qué hace en las vías del tren?. Eso ni él lo sabe.

- Vía Secundaria -

3 Profesoras de Sexología

Enseñan a encontrar el Clítoris, y al parecer las vías del tren.

¿Qué hacemos?

Salvar a las tres damas, claro está...

 A Debbie le repugnaba pensar que había gente que tenía trabajos que giraban alrededor del sexo. El mismo sentimiento de asco que le provocaban las prostitutas y los farmacéuticos que ofrecían condones.

- ¿Sexología? ¿Qué es eso? Ahora resulta que quieren enseñar a la gente a tener actos sexuales más gozosos. Como si las cosas se viniesen haciendo mal durante todos estos años... ¡Bah! Mi marido apenas sabe cuantos agujeros tengo allí abajo y aún así tenemos sexo satisfactorio. Dudo siquiera que algún hombre de mi familia sepa lo que es un clítoris... ¿pero realmente importa?

-Normalmente elegiría salvar al físico -comenzó a decir Tommy Shelby, que se encendía un nuevo cigarrillo, empezando ya una nueva cajetilla y lanzando la otra, ya acabada, por una de las ventanillas del tren-. Pero mírenlo: está mayor, canoso y en sus ojos se refleja una mirada que parece decir "Venga, mátame. Cuando salga de estas vías tendré que seguir enseñando a mis alumnos cosas que se olvidarán en cuanto pase el día del exámen". En cambio, la de las gafas tiene un buen empujón...

¿ Wuuuf ?

 Si...  tal vez si fueran dos podría entender... ¿ Pero tres ?

 Bark~Bark

  Hay que pasar por encima de las señoras... vamos que aún a su edad el señor es totalmente capaz de dar una clase como individuo... mientras - apuntando la ventana donde se veía la vía que pasaba por dónde las profesoras - son tres señoras que necesitan ir en grupo para enseñar... te creo dos... ¿ Pero tres ? que lo más seguro una se dedica simplemente a responder con "si..." " En efecto.." o cambiar la diapositiva cuando las otras dos ya hablaron.

- Hay que salvar al físico..., podría descubrir alguna teoría sobre el universo, y eso sin olvidar que forma todos los años a sus alumnos, aunque algunos no comprendan aún sus conocimientos... Las sexólogas..., bueno ellas no hacen nada extraordinario... La naturaleza que siga su curso..., yo vivo feliz y no necesito buscar mi clítoris para ello... - comenta la monja mientras la usuaria que hay detrás de ella piensa en lo que se pierde la buena y santa mujer....

TRES ALMAS PARA LIBERAR NYEHEHEHEHE. - rió de forma macabra. Al menos a él le pareció macabra. En realidad fue ridículo.

Ese hombre yastá viejo. Las mozas son 3 y paecen en buena edad pa tener descendencia. Hay que salvarlas a ellas.