Partida Rol por web

Haciendo caso a lo que la mayoría había indicado, El Revisor decidió girar la palanca para atropellar a aquel Humano llamado como Antonio, el cual estaba tranquilamente disfrutando de estar en mitad de las vías sin hacer nada en particular, salvo sacarse fotos que subirse al Instagram. El tren pasó por encima de él, y se pudo escuchar como se rompían los huesos, el móvil y el ego de una persona.

Por desgracia, una risa maníatica se escuchó mientras el tren rugía y se alejaba del lugar, quizás aplastar al gemelo bueno no había sido la mejor de las ideas...

Por desgracia, los problemas no habían finalizado, sino que parecían haber acabado de comenzar, pues otra cuestión asomaba por el horizonte, por lo que raudo y veloz, el Revisor explicó a los presentes cuales eran las opciones a tomar ahora. Casi con un hilo de voz, tras el atroz acto que los presentes habían cometido, no él, evidentemente, él era un simple "mandao".

-Tenemos otro problema, hay otros más adelante...

- Vía Principal -

Grumetes de Piratas Marítimos

Un grupo de 4 adolescentes de Somalia que acaban de unirse a una banda pirata bastante sangrienta y sanguinaria, con fama de atacar cargueros que pasen cerca de las costas de su país. Pese a que podían dedicarse a ser pescadores como sus padres, el hecho de que las aguas estén tan contaminadas y el gran número de barcos ilegales impide que haya buena pesca en el lugar, además de poder ser víctimas de piratas y bandidos de poca monta.

Al parecer se han extraviado, porque por aquí no hay agua cerca...

- Vía Secundaria -

Empresario de Armas

Un alto magnate de las armas, conocido mundialmente por enriquecerse de la violencia y los conflictos bélicos entre países, entre particulares, y entre especies, en especial entre los humanos y los delfines geneticamente modificados para tener pulgares y poder agarrar cosas y disparar armas... Pese a que en sus manos no corre la sangre de nadie, sus bombas, minas anti-persona y rifles han sesgado millones de vidas a lo largo de las décadas y los conflictos.

¿Qué hacemos?

-Entonces señores capitalistas, empresarios y religiosos. Hombres comunes.... ¿Quien debe morir y quien vivir? Los pobres que para vivir y subsistir se dedican al crimen, o a quien se enriquece vendiendoles armas a ellos y a todo aquel que quiera tomar la vida de otros.

Cambio de postura.

-Si aceptan tomar la vida de una persona tan fácilmente para.... "cumplir" sus horarios y llegar a sus metas... ¿Porque no decir entre ellos? Es decir, ¿no son iguales que todos ustedes?

Cambio el peso de mi cuerpo hacia la otra pierna y hago un corte de mangas.

-¿No están todos ustedes artes de este? No deberíamos... pedir a todos los del tren, pero sobre todo a nosotros mis,o rebelarnos.

Avanzo un par de Zancadas e increpo a Debbie con el indice. Y recito como un poeta o un actor de teatro en lo más culmen  de su diatriba

Si viese usted a Atlas, el gigante que sostiene al mundo sobre sus hombros... Como cristo nuestros pecados. Si usted viese que él estuviese de pie, con la sangre latiendo en su pecho, con sus rodillas doblándose, con sus brazos temblando, intentando mantener al mundo en lo alto con lo ultimo de sus fuerzas.

Si viese usted que cuan mayor es su esfuerzo, mayor es su carga.- Digo casi pegando mi rostro a su rostro -¿qué le diría usted que hiciese?- Giro mi rostro clavando mi mirada en la de ella y con un giro de talones y de capa  me coloco en medio de todos y levanto el puño.

¡Que se rebele.!

dejando al señor Nocto de lado.

  No se... igual creo que los intentos de hombres de mar deberían irse a dormir con los peces... si hubiera algo de agua claro...

*Bark*

  Si, ¡ si ! - mientras discutía con su compañero - son inútiles....  míralos allí con esas sonrisas... como si supieran algo que nosotros no... tal vez encontraron algún tesoro y su ubicación estaba debajo de las vías del tren... 

* Bark~bark*

 Quisiera.. pero no creo que el Revisor nos deje detenernos para llevarnos un recuerdo...

Ambos son criminales, pero el otro no obligo al otro el comprar la arma... si se dejaran de fabricar armas, la gente se mataria con palos y rocas... como un buen mercado, si le negocio de las armas no fuera rentable, se dejarían vender armas...

Una las fabrica y el otro las dispara.....

Para mi el que usa una arma para apuntar al inocente, es simbolo de debilidad..... por eso voto por los piratas. 

Apunt con mi dedo como si de un arma se tratase y amartillo con el pulgar mientras apunto a Michael.

-Y si la guerra no te deja otro camino más que la piratería, porque grandes señores promueven las guerras para aumentar su riqueza. Dime, ¿eso es o uno una condicional?

Patrick pidió una nueva botella de Moët, manoseó a la pobre camarera (¿de que sirve pedir botellas caras si no es para eso?) y se dispuso a pontificar también en este caso.

Por primera vez tengo dudas. Al bueno de Tony lo conozco, en nuestro banco le ayudamos a montar un tingladito en las Caimán rie por lo bajo recordando como limpiaron unos cuantos millones soplandolos del fondo de pensiones de la corporación Es un tio excelente, le va bien en los negocios y además sus armas ayudan a que haya menos pobres mas o menos media docena por bombazo.

Pero por otro lado esos chavales se enjuagó una lagrima, la cogorza lo estaba poniendo sensibe son los capitalistas perfectos. Han sabido crear un negocio, aprovechar la oportunidad y forrarse, o intentarlo, por sus santos cojones.

¡Que dificil decisión!

- La violencia siempre genera violencia, pero si el magnate de armamento dejara de vivir por un tiempo, los jóvenes piratas no podrían actuar haciendo daño a nadie más... - razonó la monja teniendo muy clara su posición -... esos cuatro jóvenes son desdichados que no pueden optar a vivir de mejor manera, su medio ha sido dañado y por ello no pueden ser pescadores... No les justifico pero en comparativa sí merecen vivir..., por supuesto...

Algo más animado, Jacinto medita sobre el nuevo caso  y, en seguida, da su opinión:

El trajeao sólo vende, da igual el qué, ¿verdá? Pero los otros... ¡Ay los otros! Panda vagos y mangurrianes... ¡Que se vayan a arrobá a otro lao! Y hermana -dice mirando a Sor Gertrudis- nosotros nos hemos peleao, arañao, reventao y de tó en el poblo a base de piedras, palos y las manos. Da iguá si hay egcopetas o no...

¡EL HOMBRE DE ARMAS DEBE VIVIR! ¡VENDIENDO SUS PRODUCTOS LIBERA MUCHA GENTE DEL SUFRIMIENTO! ¡NO PODEMOS ATROPELLAR A TAN CARTITATIVA PERSONA! - gritaba sin cortarse un pelo, ignorando las opiniones de los demás.

-Siempre he sido más de Steve Rogers que de Tony Stark, así que esta vez votaré al fabricante de armas -reveló Sheby, bastante convencido de su elección-. Sin el fabricante de armas, esos piratillas tendrían que intentar asaltar los barcos a navajazos o con sus puños desnudos.

 Nuevamente el hombre de la máscara intentaba increpar a la senadora. Ella intentaba no darse por aludida (después de todo, hablar con anarquistas o el "Antifa" era rebajarse a un nivel de subsuelo), pero el acercamiento de aquel hombre no podía pasar dejarse pasar. Sin embargo, antes de responderle a sus argumentaciones de liberal promedio, el Sr. Bateman hizo una consideración sobre los piratas que le produjo más asco todavía. Puesto que en ese momento se dio cuenta de qué era lo que la separaba a ella de aquel caballero amante del libre emprendimiento.

- ¡SIN MORALIDAD NO HAY CAPITALISMO! Lo que usted ha insinuado, Sr. Bateman, es propio de un anarquista sin límites ni ética que cree en la ley de la selva. Aquel empresario de armas entiende las reglas del juego; es un hombre que se rige bajo las leyes. A diferencia de las ratas de altamar que no comprenden cómo funciona el mundo. Es aberrante que usted, un hombre de negocios, encuentre algo destacable de aquel grupo de negr-

 Debbie toce fuertemente antes de seguir con su declaración, cortando a la mitad su última frase. Rápidamente sigue con otra línea de pensamiento que la aleja de aquel comentario inoportuno que estaba a punto de hacer.

- Como sea... aquellos jóvenes piratas tendrían que haber seguido con el negocio de la pesca. Ser honrados y seguir la ley es lo único que salva al alma. Aquel caballero vendedor de armas puede tener objetivos con los cuales no estén de acuerdo, pero actúa bajo el brazo de la ley.

Tras el último escarceo me sumí en inquebrantable mutismo... se podía leer en mi rostro que la bienvenido gresca finalmente quedase en nada. Estaba decepcionado.

Ahora se nos presentó una nueva disyuntiva. Matar a un grupo de piratas, o matar a un traficante de armas. Dificil elección.

Señores, si me lo permite. Como ustedes pueden deducir, debido a mi profesión le tengo un especial odio a los piratas, por muy niños que sean. Por otro lado, dicen que si no tuvieran acceso a armas no ejercerían la piratería. Disculpen si me rio ante tal equivocación. Desde que los primeros homínidos tuvieron la posibilidad de usar herramientas, los pulgares oponibles y todas esa darwinadas, ¿el hombre las usó para construir mejores hogares? No, y un carajo... lo primero que pensaron fue... ¡¡¡caracoles!!! ¡¡PUEDO AGARRAR ESE PALO!! Le voy a reventar la cabeza a mi vecino y me voy a tirar a su mujer.

Moraleja: la violencia va implícita con la raza humana. El traficante solo ha sabido encauzarla para enriquecerse.

¡Revisor! Adelante... atropellemos a esos pequeños hijos de puta...

¿Me da fuego? - finalicé, dirigiéndome de nuevo al joven de la gorra, que a estas alturas debía de estar hasta los colgantes dorados de un servidor.

Me río de aquella mujer de una forma tan sonora y tan dramatica. La mirada al techo, mi indice apuntandola y la otra sujetandome el sombrero.

-Es increíble como la verdad se asoma. Usted quiere su muerte por que son Negros. Dejeme adivinar, ¿por ellos los comentarios y gestos de asco hacia Jacinto?

-Tranquila, y demos gracias a las tecnologías que permiten que sus verdades salgan a la luz.- De entre mis ropas saco el cable de un micrófono externo y señalo a la cubierta de cristal en las cuencas de los ojos de mi mascara.

-Dios bendiga América y a su pueblo, quien ahora puede ver las verdades de sus representantes. Dios bendiga a la moralidad de sus líderes.