Partida Rol por web

Ya sabes, si tienes cualquier duda sobre como hacer tu personaje, dispara!!

Vamos al lio.

¿Por donde empiezo? ^^

La historia de tu PJ en la ficha y junto con la misma los idiomas que habla tu PJ... te abro el Offtopic por si quieres ir diciendo cosas... Con la info de la partida y la información de la escena "Antecedentes" debería haber suficiente ;)
Y si te referías a otra cosa con tu pregunta, sorry xD

4 bloques: 1 por el ritmo de posteo, otro por ser tan activo en el offtopic y animar el cotarro, otros 2 por adecuación del avatar.

Ves como Steve y Giorgio se marchan corriendo de aquel comedor. En el mismo momento en que desaparecen por la puerta notas como si la temperatura de aquel lugar bajase y aquel lugar se hiciese más grande.
Te levantas y te diriges hacia una de las máquinas de snacks, contento y feliz con algo que echarte a la boca te sientas y pones los pies encima de la mesa. En ese momento escuchas un "click".
Casi te caes de espaldas cuando la tele se enciende "sola", o más bien por haber pulsado el mando a distancia con tus pies.
El canal de noticias parece internacional, hablan en inglés. Es un especial sobre la H.Energía en el que van mostrando imágenes de diversas partes del mundo. Trenes de mercancías ardiendo en llamas blancas y lanzando al cielo un humo plateado, denso como el mercurio. Almacenes de estacionamiento arden de la misma forma. En las noticias dicen ser grupos islamitas pero más que defender su religión, defienden su petróleo contra aquella nueva amenaza energética. Hay más imágenes, un bar de Berlín convertido en cenizas, un hotel en Francia... Cualquier alto cargo de L-Bloque se ha vuelto un objetivo de los grupos radicales. Y eso solo parece el comienzo. Rusia exige a Estados Unidos el cese de la extracción de la H. Energía de sus tierras. Exigen su potestad de explotar esta energía pues si se extrae de sus tierras, la proclama como suya. Desde la ONU se exige calma por ambas partes, ya que Yutai, el joven y pequeño pais ruso en el que se cultiva aquella energía, está en negociaciones para entrar en la Unión Europea. Los especialistas dicen que no solo es posible una tercera guerra mundial, sino que se esta ya debe haber empezado en los despachos de los mandamases mundiales.

Los dos portazos simultáneos de los servicios te hacen saltar de la silla... ¿Estabas dando una cabezadita?
Miras alrededor pero no parece haber nadie, aunque alguien debe haber entrado en los servicios.
Vuelves a mirar el televisor y te ves a ti mismo.
Tu rostro ocupa toda la pantalla y empieza a gritar de dolor, sus (tus) ojos casi se desorbitan cuando luego, cuando creías que ya no podía gritar más, escuchas un gorgeteo moribundo de tu otro yo. Abre tanto la boca que crees que va a desgarrársele la piel. Tus dientes en la pantalla empiezan a temblar, como si una fuerza invisible tirara de ellos. Uno de tus molares salta cuando, desde dentro de tus encías, aparece una ensangrentada varilla de algo parecido a plata ocupando su lugar. Tus caninos, tus molares, tus premolares, empiezan a saltar, arrancaos por aquellas varillas que, una vez acabada la sustitución, convierten tu rostro en algo grotesco.
Tu yo de la televisión cierra su boca, y las varillas que surgen de las encias superiores se hunden en las encías inferiores. También sucede a la inversa. Aquel rostro aprieta aquellos dientes barras y estos empiezan a sobresalir por los labíos, barbilla...
Un nuevo portazo de ambos baños devuelve la televisión a la normalidad, pero tienes un horrible presentimiento de que algo horrible va a suceder.

Las noticias siempre me han dado sueño, mi ex-mujer las ponía a todas horas, el canal de 24h, de modo que encima se repetían una y otra vez. Al principio hablan de la energía L y me interesaba, pero después pasaron a cosas más aburridas. Así que voy cerrando los ojos poco a poco, hasta que...

Tengo los ojos tan abiertos que creo que estoy soñando. Mi cara está descompuesta de asco y sorpresa, y un nada despreciable terror que me está surgiendo por la garganta. Grito a la vez que mi imagen, hasta que vuelve la señal normal. A mi alrededor están los chocobollos que me he ido comiendo. Estoy de pie, la imagen que he visto está grabada en mi memoria y me toco la mandíbula arqueando las cejas.

-¡ME CAGO EN LA PUTAAAAAAAAAAAAAAAAAAAaaaaaaaaaaaaa- vocifero-.

Un segundo más tarde estoy saliendo al trote del comedor, dos segundos más tarde mis zancadas se convierten en carrera. No pararé hasta ver una puerta abierta.

Corres como un demente, golpeándote con alguna que otra bombilla y medio callendo de lado por lo inestable de aquellos pasillos-tubería. Casi sin respiración llegas a tu dormitorio, para ver que allí no hay nadie.
Hay algunas literas abiertas: todas vacías menos una, con el joven tímido que apenas había hablado dentro.
Algo te huele mal y te acercas al chico: Está muerto.
Parece que te han dejado solo con el cadaver ¿donde estarán los demás?

Miro hacia ambos lados despistado una vez salgo de nuevo fuera de la habitación, ¿que ha pasado?, ¿donde están los demás? ¿habrán más muertos o más heridos quizás? Sin pensarlo más corro hacia la enfermería, la cabeza gacha modo trinchera y asustado como un pollo. No me gusta nada esto. No me gusta nada de nada.

-¡¡¿HOLAAAAAAAA?!!- uso mis manos a modo de amplificador mientras estoy corriendo.

Empiezas a correr, medio tropezando medio volando, por los pasillos y las tuberías de aquel lugar. Viendo el plano del dossier parece bastante fácil. Te dirijes al centro de aquella estructura, donde están las escalerillas de mano por las que descendiste y que unen las distintas plantas. Empiezas a descender por aquella especie de pozo hiperestrecho. Tu cuerpo al momento siente un frío intenso, debe ser la entrada a la Planta Menos dos. Estás mirando a la escalerilla y por lo tanto dando la espalda a dicha entrada.
En ese momento te sientes indefenso, vendido, como si el hombre del saco o el monstruo de debajo de la cama estuviese allí, respirando frío, a tus espaldas. Desde alguna parte de aquellos pasillos a los que se accedía por el agujero que se abre tras tu espalda, en algún lugar de aquella Planta -2, escuchas a alguien pedir ayuda. La voz es muy débil...pero está claro que le pasa algo horrible.

Ver a alguien más es lo que buscaba, por un momento pensé que me quedaría aquí sólo para siempre, en parte por ayudar y en parte por ver a alguien más me dirijo hacia la llamada de socorro. Pero desconfío, por lo que no voy corriendo, de hecho cuanto más cerca, más lento voy...

Te acercas con la cautela de un ratón en territorio de gatos. Como si el claustrofóbico pasillo que vas pisando pudiese estar plagado de minas, como si llevases una mochila llena de nitroglicerina.
Y allí, en un recodo, ves la silueta que te pide ayuda.
Es Anette, está desnuda salvo una cruz que le cuelga de una sencilla cadenita. Ella te mira con cara de horror...
¿...mis dedos...que les pasa a mis dedos?
Está tan horrorizada que nisiquiera se tapa su desnudez, de hecho ni tan siquiera crees que sea conciente. Eso sí, cuando miras hacia su mano izquierda, tampoco puedes dejar de mirar hacia allí.
Lo que en un principio te había parecido que era una especie de mutiliación de las puntas de sus dedos, luego ves que no es tal: tras dos falanges su mano parece fundida con el suelo, "nace" de aquel pasillo metálico. Ella tira con la otra mano, pero sus dedos no salen de allí, porque no están dentro de ningún agujero. Sus dedos "son" parte del suelo.
A...ayúdame..ayúdame...no se como he llegado hasta aquí... yo...ayúdame..

Me acerco entre horrorizado y preocupado, mientras me acerco me voy agachando poco a poco mientras tuerzo el gesto ¿como coño...? hago un amago de tocar los dedos pero retiro la mano a medio camino.

- ¿Que te ha pasado?- le pregunto preocupado- ¿como se te han quedo los dedos pegados?.

Miro alrededor si el suelo está compuesto por planchas y pudiera arrancar un trozo completo para que se pueda mover. Tal como está construido todo, dudo que se pueda hacer nada pero no pierdo nada por intentarlo.

-Cálmate, te voy a sacar de aquí, no te muevas- le pido, mientras busco la manera de sacarle los dedos.

Yo... desperte aquí te dice horrorizada, no se como...si mi litera...por Dios ayúdame!!

No hay manera de sacarla, tal como pensaba. Me temo que hay que buscar una manera más drástica de solucionar el problema. Pero no veo capaz, que coño, llevamos aquí cinco horas y todo se está yendo para el carajo. Antes que nada me voy corriendo al cuarto trastabillando, y traigo una manta o dos y se las echo por encima. Estoy empezando a sudar, me parece que desde hace un rato, mi ritmo ha pasado de caminado a trote.

Se la coloco por encima.

-Ahora nos vamos a calmar, Anette, voy a por ayuda, te prometo que vendré en seguida- la calmo lo máximo- voy a la enfermería, seguro que allí el médico encargado puede hacer algo ¿te parece?

Le pregunto para saber que me está escuchando, para que tome alguna decisión y vea que no todo está acabado.

Estás en la Planta-2, pero como la distribución es exacta a la de la planta que vienes encuentras los dormitorios, coges de una de las literas abiertas una manta y se la llevas a Anette. No tardas más de cinco minutos pero sus gritos te acompañan. Está horrorizada, pero cuando ve que vuelves y la tapas con la manta te mira con desesperación. Incluso te coge del brazo con su mano derecha libre. No me dejes otra vez.. por favor, no me dejes... Te escucha sin entenderte, el terror más absoluto habla por su boca.
Si me dejas aquí... me llevarán... moriré. Porfavorporfavor no me dejes aquí...moriré, lo se..
Su rostro está deformado, desencajado, por el horror más absoluto.

No me decido así que me quedo unos momentos más para ver si se tranquiliza, pero lo que ha dicho no me ha tranquilizado nada a mí. Mi desasosiego está alcanzando cotas que pensaba inexistentes. Estoy en medio de un pasillo horrible con una chica que tiene los dedos "soldados" al suelo. Y su cara, más que todo es su cara, que me está contagiando el miedo.

-Puedes confiar en mí, me quedaré contigo, nadie te va a llevar, yo te defenderé- saco músculos- ves, soy fuerte, todo saldrá bien- le apoyo su cabeza en mi pecho. Ya está... Michael está aquí... shhh...

...O eso hubiera hecho si me hubiera quedado, es lo que pienso mientras sigo corriendo a la carrera en el ya denominado "correr trincherero mientras te caen bombas sobre la cabeza" El terror me ha escalado hasta el cerebro tan rápido, que ha activado mis piernas, antes que mi boca, que cosas...

Te diriges raudo y veloz hacia la escalinata, ignorando impunemente las peticiones de ayuda de la pobre Anette, aunque a la vez lo haces por ella. Porque volverás...o algun otro volverá.
Desciendes hasta la planta menos tres y corres como un ratón al que le han prendido fuego a la cola. Con esa sensación de tener algo horrible y visceral a tus espaldas. Cuando estás apunto de llegar a la misma te encuentras de sopetón con Steve y Alex.