La habitación solo tenía una puerta, la que daba al Gran Salón; por lo demás más que una sala de música parecía un pequeño almacén de diversos instrumentos musicales; algunos perfectamente ordenados y colocados mientras que otros parecían puestos en mitad de la habitación de forma descuidada.
De todos aquellos objetos los que más destacaban eran: un piano de madera, un atril con partitura, diversas arpas de distintos tamaños, un acordeón raído en el suelo, dos guitarras españolas, un violonchelo, un xilófono, un banjo, un trombón, una bandurria, una balalaika e incluso había un increíble "Hurdy Gurdy". Incluso había un didgeridoo colgado en la pared.
Por otro lado, dentro de diversas vitrinas y armarios, los cuales podían abrirse sin problemas, se encontraban más instrumentos musicales, aunque de un tamaño algo menor y por lo que parecía, un mayor valor; desde arpas de mano, hasta violines, flautas, flautines, flautas de caña, clarinetes, e incluso había una trompeta y un saxofón.
En un pequeño cofre, había diversos tipos de repuestos para todos aquellos instrumentos, desde boquillas, hasta teclas del piano, desde cuerdas de la guitarra, al arpa. Absolutamente cualquier recambio que pudiera necesitarse.
Ahsa Ahsa - Edgard Richstone - Fox A. Tsoukalos - Jack "Flaco" Grayson
Esto de los recambios. Significa que podemos encontrar cualquier tipo de recambio o es solo atrezo?¿
Sí, hay recambios de todo tipo de INSTRUMENTOS MUSICALES.
Pues pillo una boquilla para la saliva y me pongo a tocar el Saxomofon
- Y bien Doctor Egon, ¿ha encontrado algo de utilidad? O al menos visto algo sospechoso. Por allá en los calabozos está el ambiente aburrido, nadie confiesa nada y esto seguirá así por un tiempo, pero al menos sé que puedo confiar en usted.- El pecho del gordo se empieza a mover rápidamente y comienza a toser, algo no está bien con él.
- ¡Maldita sea! No debí haberme tomado aquella cosa, eso me pasa por beber cualquier cosa con tal de disfrutar aquel exquisito sabor, ¡viva el alcohol! - El gordo de pronto soltó un hipo, pronto se recostó de Egon y le dijo en voz "baja", aún así se pudo escuchar al menos dos habitaciones pues el estado de Grayson era evidente.
- Ssshhh, sshhh, no se lo digas a nadie mi querido amigo... Pero si, yo he hecho cosas raras, cosas que harían perder el control a cualquiera ¡Ja! ¡Jajajaja! - Otro hipo cortó con su risa
Por unos instantes, el gordo se le queda viendo fijamente al hombre que pensaba era Egon hasta darse cuenta que se trataba de Edgard Richstone, de pronto abrió los ojos de par en par sorprendido de no haber estado hablando en alguien en quien confiar, - ¿Peeerro qué? *hip* y--yyo no esztaba hablando con *hip* - Soltó un eructo, tragó algo que al parecer era líquido y continuó - Tu ereeesz una perswona sospechosa y no dudo que traes algo junto a Asha - Le dio un pequeño empujón a Edgard para separarse, no logrando mantener el equilibrio hasta topar con un mueble cercano.
Mientras Jack "El Flaco" Grayson se movía de un lado a otro por la habitación; este tropezó en un raído acordeón en el suelo, mostrando a todos que en el interior de su tela había, no otra cosa que la que parecía ser la penúltima esfera del puzzle de los planetas del Gran Salón.
Lo recojo de dentro del acordeón y lo pongo en el gran salón, esperando alguna recompensa que no fuera mi muerte.
-¿Cuantas esferas faltan? Tal vez esa caja fuerte guarde al ultima. ¿Que secretos imposibles creen que descubriremos al terminar la manualidad?
- ¡Ostias! Cassi me meto una de trompa *hip* por cierto, ¿alguien más ha visto el fantasma del cuervo? andaba por el mirador cubierto deambulando *hip* o sólo fue una alucinación, como la que tuve cuando vi a Ahsa besuqueándose con Edgard ¿o esa también era real? En cualquier caso, dónde demonios está la bebidaaa... - El gordo paseó la vista por la habitación buscando más para beber
Me acerco a "Flaco" Grayson, eso fue una ilusión totalmente.
Yo sólo me besuquearía con una persona de los presentes. Abrazo su brazo derecho mientras hago una especie de gemido extraño, algo parecido a un maullido.