- Vaya, vieja. - La voz de Morla se escucha antes de que su cabeza asome por la puerta. - Es muy curioso lo que pasa. Sí. Ni nosotras en tantos años de vida hemos visto algo así. Los asistentes no se deciden. Cuatro son los votados en empate. Asgalot, Conscientia, Gwendi y Kairim. Se debe desempatar. Sí, se debe. Pero no ellos. Ellos no podrán votar. Deben ser sus amigos...
Bloop, Duwin, Hyrr, Malderín, Kshpir y Lothlorl deben volver a votar por uno de ellos, para intentar generar desempate.
Malderín, miró tímidamente a sus compañeros. No le gustaba haber votado a alguien sin estar seguro, y tener que volver a hacerlo no era agradable. Lo siento, les dijo a los que habían empatado.
“No hay de por qué disculparse”, contestó Kairim al fauno. “Es una decisión muy dura para todos nosotros. Creo que nadie ahora tenga muy claro quien es leal y quien es traidor. Al menos, yo no.”
Recayó en un silencio profundo mirando distraídamente por la ventana. Por mucho que cavilaba sobre el recién intercambio de palabras, sus pensamientos siempre terminaban en interrogantes.
El Golem no dijo nada, simplemente espero a la decisión de todos. Lo que debía decir ya lo dijo y mientras esperaba al resultado del aquel curioso empate. Esperaría callado a no ser que alguien le hablara directamente. Callado en lo referente al resto, pues la cabezas no paraban de murmurar entre si, pero eso es otra historia.
Cuando el Piel Verde vuelve a acercarse y a agitar la botella, ésta cambia de color como es de esperar, y las filigranas envuelven a Conscientia, haciéndole desaparecer... al menos durante un instante, pues el golem reaparece de nuevo, sólo que no en el mismo lugar, si no en el espacio que ocupaba Kairim.
Kshpir se quedó sorprendido al ver desaparecer primero a Conscientia y luego a Kairim, para ser sustituido por el gólem.
—Vaya... —se dirigió al ser con múltiples rostros—. ¿Es a esto a lo que te referías? ¿Tu poder te permitía quizá hacer un vínculo sobre tí mismo para evitar abandonar la Torre?
Aquel Golem estaba tan confundido como quien preguntaba por aquello.
-No... nuestro vinculo es con otra persona, que no diré para mantenerla protegida.
-No somos los artificies de esto.
-No entendemos que acaba de suceder...
-No podemos entender, pero lo agradecemos.
-Si, así podremos continuar ayudando. -Dijo la ultima de la voces, de manera afirmativa.
Gwendi se agobió al ver que había sido una de las candidatas a abandonar la Torre de Marfil. Mientras esperaba el veredicto, jugueteaba, nerviosa, con el gorro. Finalmente, Conscientia fue el elegido, y desapareció, pero reapareció inmediatamente en el asiento de Kairim. El golem afirmaba que no sabía qué había sucedido.
—Supongo que ha pasado lo mismo que con Kerasi, ¿no? Aunque Kerasi no ocupó el lugar de Fenrir, sino Kshpir cuando vino de vuelta. No sé si este pequeña diferencia tiene relevancia—comentó, compartiendo sus pensamientos en voz alta— Como dijo Kerasi, alguien tiene el don de impedir que algunos de nuestros compañeros marchen al exilio. ¿Y en qué se basa para protegerlos: en su propio criterio, o en información que conoce? Kerasi comentó que este individuo sabía la verdad, así que supongo que tiene acceso a información importante. Estoy dando por hecho que es el mismo ser quien os ha protegido a ambos. Como ya dije antes, cada vez estoy más perdida, y cada vez surgen nuevas incógnitas...