Partida Rol por web

Hombres Lobo de Castronegro [Roma]

Día 1 - La caída de roma

Cargando editor
02/02/2011, 11:06
Mascius

Miré la escena sobrecogido, había grandes Roma ahí dentro. Menuda coincidencia para reunirlos a todos. Las dispustas iban a ser frecuentes, en cuanto alguno se cansase y quiese una mujer, esto se volvería un caos. Si las legiones tardaban mucho o nos matarían los bárbaros o alguno de nosotros mataría a un hermano de Roma.

 

Escuché las palabras de Tito Pullo y le acompañé. Yo te ayudaré, pongamos muebles, tablones de madera o lo que sea. Tengo miedo de que esas bestias nos cercenen los brazos y las piernas y nos dejen morir desangrados... comenté mientras caminaba a su lado.

Cargando editor
02/02/2011, 12:27
Quintus Pompeyo

Tras decir mis palabras Porcio Catón también interviene, consiguiendo finalmente que no haya un enfrentamiento. Por mucho que piense que deben cortarle la cabeza al miserable esclavo de espartaco por sus actos, no es el lugar ni el momento para ello.

Tras ver como se calman el ambiente hago un gesto en forma de agradecimiento hacia Porcio Catón ya que ha sido el único en intervenir también en la trifulca, acto seguido me pongo a revisar la mansión con la intención de ayudar a terminar de fortificar el lugar y de paso mantener mi mente distraída.

 

Cargando editor
02/02/2011, 13:07
Espartaco

Al ver que Tito Pullo se rinde ante su superioridad y se acojona, Espartaco vuelve a prestar atención en Levi, un esclavo igual que él, aunque más entrado en carnes.

-Bien, amigo mío, una forma para fortalecer tu carácter es dejar atrás tus miedos y sufrir el dolor por dentro. No dejes que los demás piensen que eres un cobarde. Si alguien te mira a los ojos, no apartes la mirada. Y gruñe, eso les asusta. También intenta no gritar cuando te azoten.

Espartaco repasó a Levi con la mirada. No es que fuera un macho alfa como él mismo, pero aún no estaba del todo perdido.

-Sí, ya sé, aún te queda algo de ponerte en forma y eso para aguantar el dolor, pero si no te amilanas nunca, te respetarán. Si hasta he visto como pretores se han apartado de mi camino si me acerco a ellos. Hay que ser fuerte y quien sabe, así hasta el César mismo te respetará.

No creía que Julio César se preocupara por un esclavo regordete, pero dar ánimos nunca está de más. Con suerte Levi se pondría delante de una flecha dirigida a Espartaco si lo trataba bien. 

Cargando editor
02/02/2011, 13:29
Lucio Voreno

Voreno caminaba desorientado con la cabeza ensangrentada aunque ya no corria sangre fresca por su frente, sin duda su herida no era reciente, y en su mano diestra no habia rasto alguno de su gladius, solo la argolla de una tinaja de barro.

Sintiendose atraido por las voces de los alli reunidos tras dos esquinas salio caminando totalmente desganado y al ver tanta gente concurrida se desplomo contra un pilar mirandolos con asombro.

-Parece que no soy el unico cobarde... Pullo donde estas... muerto con honor espero, Esposa siento no a ver estado a tu lado, a estas horas estaras muerta y ultrajada por algun bastardo invasor.-Furioso tiro la tinaja contra la pared y bajo la cabeza cerrando los ojos totalmente abatido.

Cargando editor
02/02/2011, 13:58
Niobe

 Cuando entro Voreno dando gritos, no podía creerse lo que veía, había bebido y posiblemente media Roma había caído por su garganta. Se acerco un momento a su marido arrodillándose a su lado.

-Estas bien amor mio? que te han hecho?- miro la herida de la cabeza aunque no fuese reciente, miro a Pullo, sus ojos suplicaban ayuda, pues no estaba segura del estado de Voreno. Borracho de eso estaba segura, pero de su salud mental no lo estaba tanto.

Cargando editor
02/02/2011, 14:09
Tito Pullo

Pullo se detiene al ver entrar a Voreno en ese estado y tras mirar Niobe se gira hacia Marcius. - Ve tu con Marco Antonio, yo debo ayudar a mi amigo. En cuanto pueda iré a ayudaros.

Se arrodilla junto a Lucio y examina la herida de la cabeza - ¿Dónde te habías metido? Nos habías preocupado a todos. Déjame ver esa herida que... ¡pero si no es más que un rasguño! En la Galia si que había bárbaros de verdad que te abrían la cabeza de un golpe, estos no les llegan ni a la sandalia. Eso o tienes la cabeza mucho más dura. - dice tratando de quitar tensión a la situación. - No es nada grave. - dice girándose hacia Niobe - Pero debe descansar. Que Eirene te ayude a limpiarle la herida y ponedle una venda, debo ir a examinar las defensas. - dice antes de salir tras Marco Antonio y Marcius.

Cargando editor
02/02/2011, 15:47
Gaia

-Yo tambien ayudare.-dijo Gaia siguiendo a Eirene. No tenia nada mejor que hacer, y asi estaria entretenida, ademas de que Eirene podria correr peligro.

Cargando editor
02/02/2011, 15:53
Egneo Pompeyo, el grande

El desfile de heridos y soldados solo dejaba en claro que aquello estaba lejos de ser una victoria para Roma. Egneo Pompeyo había sucumbido a la fatiga, sus años y su edad pasaron cuenta en medio de la batalla, donde fuese rescatado por otros soldados. Lucio Voreno y Bruto llegaban ambos heridos, ensangrentados. Y los soldados en Roma, los que no habían logrado escapar, dejaban sus cadáveres en las calles, mientras el fuego, los gritos y el caos parecía haberse desatado por la misma ira de los dioses.

-Es un día nefasto para Roma. Ni sus hijos predilectos hemos fintar a la derrota, y la muerte en batalla nos elude con tristeza, prolongando esta agonía... ah crueles moiras...- exclama Egneo Pompeyo.

-No restan los hombres para enfrentarnos a nuestros enemigos, y me temo que éste es nuestro último refugio. Estamos sitiados a menos que las legiones regresen a Roma antes de que sea demasiado tarde...- relata y observa a todos.

-Mientras tanto, se ha derramado suficiente sangre de Romanos esta tarde, ha sido voluntad de los dioses que nosotros sobrevivamos y será nuestro deber proteger a la última esperanza de nuestra ciudad. Hoy aquí no somos enemigos, más somos aliados en la desgracia.- Y camina con lentitud.

-Hoy todos somos Roma-

Cargando editor
02/02/2011, 16:28
Cleopatra

 !No puede ser el último refugio!, no señor!...  seguro mi gente vendra a rescatarme. Digo con firmeza. Esto me pasa por venir a conocer a la suegra

Cargando editor
02/02/2011, 17:31
Servilia

Servillia bufa exasperada y algo enfadada ya que aquellos estúpidos hombres de poco cerebro no le habían hecho ni caso, así que decide entretener su tiempo en cautiverio con cosas menos enojosas y que huelan mejor, ya que el hedor a sangre, sudor y cuero que emanan la mayoría de ellos le molesta a su delicado sentido del olfato.

 Se acerca a Cleoptra.

-Vaya, no sabía que se admitieran a rameras venidas a más en un templo romano. Ahora entiendo que estén tan enfadados con nosotros...- sonríe perversamente.

Cargando editor
02/02/2011, 17:52
Herodes

Ya empiezan a aparecer diferencias entre algunos, hay demasiadas personalidades fuertes aqui, tanto hombres como mujeres, y cuando aumente la tensión quien sabe quien estallara

-Sin duda el sabio Egneo Pompeyo tiene razón, hoy todos somos roma y hemos de mantenernos firmes y unidos para ver un nuevo amanecer-

Como no puedo hacer mucho por aquí me retiro a un rincón tranquilo a esperar

Cargando editor
02/02/2011, 18:03
Levi

Levi escuchó las palabras de Espartaco y su cabeza asintió levemente. Él nunca había sido un tipo decidido y valiente. Lo que le pedía Espartaco iba más allá de su fortaleza y, por el momento, de us ánimos.

Bien, no es que me vaya a volver como tú de la noche al día, pero viendo tu ejemplo, quizás con el tiempo me vuelva más fuerte y crea más en mí mismo.

Dicho esto, le ofreció la mano a Espartaco para estrechársela con una amplia sonriasa en la boca. Sin duda alguna, sería un modelo dentro del templo.

Cargando editor
02/02/2011, 18:36
Espartaco

Espartaco, crecido durante los últimos años un poquitín, extendió la mano con una larga sonrisa heroica.

-Amigo, si sigues mis consejos vivirás mucho y bien. Nadie se atreverá a hacerte nada malo o al menos morirás sin ninguna vergüenza en tu vida. Y Baco te recibirá con una jarra gigante de vino en la otra vida. Pero no será necesario si te portas bien.

Espartaco, que ya había recibido una pequeña dosis de ego, volvió a asegurarse de que los accesos al templo estuvieran bien cerrados. Sabía que ante los romanos él era una leyenda y que nadie se atrevería a toserle, no sin el temor de morir, al menos. Pero los bárbaros eran muchos y muy bestias, y ya había matado a unos cuantos de los suyos, acto que sin duda querrían recordarle arrancando sus tripas si lo ven.

Cargando editor
02/02/2011, 21:20
Cayo Julio Cesar

 Querida Servilia, entiendo que la situación halla alterado un poco tus nervios. Pero esa no es la manera de dirigirte a la reina de Egipto. Un insulto a ella, es casi un insulto a mi. Ademas, ¿que imagen das sobre los hijos de roma a los extranjeros?, ¿es que acaso nuestro espíritu y dignidad ha decaído?. Composra. Mantengamos la compostura servilia.

Cargando editor
03/02/2011, 01:57
Vorena

Algunos hombres aca tienen ego de dioses, ninguno es realista, estamos en una situación complicada, y   la hombria salpica las paredes. Mi señor. Murmuro a mi amo, ¿cree que podamos escapar?

Cargando editor
03/02/2011, 01:52
Eirene

Al escuchar su nombre, Eirene se giró para ver al hombre que andaba sembrando derrotismo, era Lucio Voreno, la joven nunca hubiera imaginado ver algo parecido.

Tres ases, Odín, Hénir y Lódur, encontraron dos troncos caídos en el Mídgard dotándolos de cualidades humanas: “les dio ánimo Odín, les dio Hónir el genio, les dio Lódur la palabra y la buena color” y esos dos troncos eran Tito Pullo y Lucio Voreno.

Levantó un instante la cabeza para sonreir a Gaia y se acercó al herido, dispuesta a hacer lo que pudiera. Esperó a que Niobe se apartara y la dejase trabajar, ajena a que unos pasos más alla, Gaius Mecenes estaba retratándola.

Cargando editor
03/02/2011, 03:06
Octavia

Octavia estaba shockeada. Tardó en comprender lo que le decía Tito Pullo y para cuando quiso reaccionar, el hombre ya estaba enzarzado en una batalla verbal con un esclavo. Sin decir nada, volvió junto a las mujeres que atendían a los heridos para sentirse un poco útil. 

Notas de juego

Cita Tito Pullo:

Octavia, ¿tu sabes algo de tu madre y tu hermano? 

No tengo ni idea de quienes son... no sigo la serie XDDDD

Cargando editor
03/02/2011, 03:23
Cleopatra

 Suspiro mientras me miro las uñas. Señores, calma. Les digo a todos, a veces los hombres no muestran cerebro... nada como las mujeres. ¿alguien puede asomarse al techo del templo para ver que tal esta la situación?, sí se han ido podemos salir por una puerta trasera. Y regresar a mi pais.

Cargando editor
03/02/2011, 03:32
Merula

Lo que faltaba, la vieja esa de otras tierras dando sus ideas. NO me subire al techo. Digo  molesta. Piensan que porque uno es esclavo debe cagar donde estos nobles digan!. añado amargada.

Este templo esta lleno de gente... idiota... y necesitamos que los jovenes sean ùtiles!

Cargando editor
03/02/2011, 03:48
Vorena

Calmate Vieja Merula, calma... le murmuro a la anciana, no deberias mortificarte así, no estas en edad de molestarte de ese modo... alguién más lo hará no te preocupes.