El portal del templo, dijo Tobías. El palacio debe estar en otro lugar. Un nivel más profundo que este, o incluso en tierras lejanas.
Y las celdas, a tan solo unos pasos, casi al alcance de la mano, pero custodiados por otro pelotón de gnolls. Y quienquiera que esperara noticias del grupo al que acababan de derrotar, al otro lado del portal, estaba alerta.
Si pretendemos salir, démonos prisa, antes de que envíen a otro grupo a por nosotros.
- Yo iría a por ellos ahora que están tocados, pero... - Inspiró profundamente. - No deseo que Mayra sufra en vano. Supongo que podemos volver en cuanto nos recuperemos. - Bajó la mirada. Estaba triste por tener que regresar sin un solo colono rescatado. - Vamosnos ya, antes de que sea demasiado tarde o el arrepientas...